En un artículo en “Última
Hora”, Pep Roig, haciendo alusión a la canción de Quintín Cabera, se preguntaba la semana pasada de qué se reía Pablo Casado en
estas elecciones cuya campaña acaba de empezar. “No es una sonrisa —comentaba—,
ni causa de accidente. Es una mueca del rostro que seguramente precisa de
sesión de masaje al término de la jornada para encajar en su sitio músculos y
huesos de la cara y descanso del cerebro. Hay que estar a la par con Casado,
del que ya son más reconocidos sus dientes que su rostro, de tanto enseñar los
colmillos”. En cambio, de Rivera, del que hoy nos ocupamos, no sé si se puede
decir lo mismo, porque nunca se sabe si ríe o simplemente saca a relucir sus
dotes de sarcasmo. Aunque se pone muy serio y preocupado cuando habla de los
malos, los independentistas catalanes.
Albert Rivera, desnudo en un cartel de Ciudadanos.
En su primera
intervención de Albert Rivera, en noviembre del 2006, el candidato salía
desnudo. “Hoy -escribe Javier Caraballo en El Confidencial-, Rivera se desnuda
de nuevo… Otra vez, como en aquel cartel con el que se lanzó a la política,
Albert Rivera se ha quedado desnudo, como si volviera a la casilla de salida
para, ideológicamente, empezar de nuevo. La desnudez de entonces, cuando se dio
a conocer, era virginal en el mejor sentido de la palabra, un partido nuevo,
sin ataduras ideológicas, dispuesto a mirar solo el interés de los españoles,
sin los vicios adquiridos por los partidos políticos tradicionales de España. Y
para eso, Ciudadanos se colocaba en el centro político, en la mejor tradición del
centro político que en España siempre ha sido un imposible por el sectarismo
que existe en este país. O conmigo o contra mí, pero jamás juntos, por eso la
sola mención de una gran coalición, que aúne a izquierdas y a derechas en un
Gobierno, es motivo de escándalo en España; no existe interés nacional, ni
emergencia nacional, que justifique la unión de los distintos. Ciudadanos se
presentó ante los españoles desnudo de prejuicios, dispuesto a pactar con unos
y con otros, y eso es lo que se ha acabado: la prohibición expresa de pactar
con el PSOE tras las próximas elecciones aleja a Ciudadanos de sus principios y
de su origen. Probablemente, un grave error estratégico porque ellos mismos se
limitan. ¿Cuántos votantes tiene Ciudadanos procedentes del PSOE? Sin embargo,
ahora ni siquiera son capaces de decir de Vox lo mismo que dicen del PSOE,
porque su único objetivo es repetir en la Moncloa la coalición de gobierno que
han suscrito en Andalucía con el Partido Popular y con la nueva extrema
derecha. El probable error estratégico del que se hablaba antes se deriva,
precisamente, de esa autolimitación cuando concede a Vox más simpatías
políticas que al Partido Socialista. Debe ser difícil de entender para los
votantes progresistas de Ciudadanos que sus líderes consideren más conveniente
llegar a acuerdos con un partido “ultraconservador”, como lo define Rivera, que
con el PSOE, que ha pasado a ser el único partido con ‘cuernos y rabo’. Si para
el acuerdo del pacto andaluz los líderes de Vox elaboraron un documento
radical, que incluía medidas como la derogación de la Ley de Violencia de
Género y la deportación de inmigrantes, que se vaya preparando el líder de
Ciudadanos para lo que va a exigirles cuando se sienten a negociar el Gobierno
de la nación…El inexplicable veto a pactar con el PSOE rompe esa trayectoria y
coloca a Ciudadanos junto a todos los demás en España, en ese sectarismo de
bloques que solo tiene como premisa el rechazo del distinto. Pensándolo bien,
igual es ahora cuando Ciudadanos se ha quedado desnudo”.
No nos importa la ropa
que vistes...
Fernando López Agudín
titula en Público “El desnudo de Rivera”: “Desnudo total. Radical. Ni siquiera
ha optado por taparse sus partes, como ya hiciera en aquel famoso poster
electoral, cuando Ciudadanos se estrenó, hoy en plan transgresor. De la noche a
la mañana se ha desnudado políticamente, tal y como llegó al mundo de la
política. Está en su misma naturaleza, como en la del escorpión de la fábula,
clavar el aguijón político en las espaldas de todos los centristas despistados
que le dieron su voto en estos tiempos de confusiones y tribulaciones. Como el
otro Rivera, su admirado don José Antonio, que elogiaba a un Indalecio Prieto
antes de sumarse al general Franco, Albert Rivera ensalzaba a González, antes
de declarar sin tapujos, con toda la solemnidad pública en la Junta de Mandos
de Ciudadanos, su disposición a gobernar con el apoyo de Santiago Abascal… Con
mucha más ambición que inteligencia, no ha podido captar el estrepitoso fracaso
de la manifestación de Colón. Al igual que no comprende que la derecha
económica no está por el gobierno de las tres derechas, tampoco capta que la
derecha social rechaza la brutal dialéctica de los insultos de Pablo Casado.
Mucho más importante que la división de las tres derechas políticas es la misma
división de las tres derechas sociológicas: la económica, la social y la
política que divergen ahora en sus estrategias respectivas. Quien, como Albert
Rivera, está llamado a articularlas en una línea común, yerra y lo hace en
torno a Vox. En su descargo, hay que señalar que el error consistió en su
cooptación, en traerle a Madrid con el amplio curriculum radical que tenía en
Barcelona. Aquel Podemos de derechas es un bumerán que estalla estrepitosamente
en el rostro de la Caixa…No es el PSOE quien ocupa el centro, es Ciudadanos
quien lo abandona. Así Sánchez, organizando la moderación, practicando el
diálogo y apelando a la negociación, podrá encauzar la sociedad española más
allá de la crispación de las tres derechas. Porque los gritos histéricos del
PP, Ciudadanos y Vox, sin una sola mínima realidad social que los justifique,
benefician siempre a quien como Pedro Sánchez y la mayoría parlamentaria que le
ha sostenido se revisten de sensatez”
Rivera se mofa de la oferta de Casado.
La batalla entre el líder
de Ciudadanos y el del PP, que pelean papeleta a papeleta, por sacar un voto
más, se recrudeció el miércoles. Por mucho que Casado y Rivera admitan que se
necesitan para sacar a Sánchez de La Moncloa y formar gobierno, la competición
y hostilidades entre ambos llegó al límite, después de que Rivera pidiera a los
populares que se comprometiesen a conformar un Gobierno de coalición con
Ciudadanos si, tras los comicios, ambas fuerzas sumaban. La propuesta era un
dardo envenenado porque en el partido de Rivera dieron por hecho que el pacto
debía liderarlo “un partido moderno”, es decir, el suyo. Y ambos partidos se
enzarzaron en una escalada de reproches sobre el supuesto compromiso de cada
uno de ellos con el centro derecha. El líder del PP elogió al de C’s,
ofreciéndole como posible candidato al ministerio de Exteriores en un gobierno
comandado por él, una oferta muy cuestionada desde la formación naranja. Casado
le recordó: “Creo que Albert Rivera sería un excelente ministro de Exteriores
que llevaría mucho mejor la política contra las mentiras de México y contra la
actuación de senadores franceses”. Y Albert Rivera, en el programa de Antena 3
“El Hormiguero”, entró al trapo en un tono no menos jocoso: “Hombre, siguiendo
la broma, yo le podría ofrecer a Pablo Casado el ministerio de Universidades,
pero no lo voy a hacer, no lo voy a decir”. Al día siguiente, Casado matizó: el
'naranja' sería mejor ministro que Josep Borrell y mejor ministro de cualquier
otra cartera, pero también “mejor vicepresidente que Carmen Calvo”. Con esta
nueva propuesta, ascendía a Rivera en el Ejecutivo, a pesar de que éste ya
había rechazado su oferta y le había dejado un 'recadito' relacionado con el
'caso máster'.
Javier Maroto rechaza a Rivera.
José Alejandro Vara
resume, desde Vozpópuli, lo acontecido entre PP y C’s. El PP siembra de dudas
el territorio del posible acuerdo de Gobierno con Ciudadanos, en respuesta a la
proposición de Rivera. “Votar a Ciudadanos es votar a un intermediario, como ya
demostró Rivera al pactar con Sánchez”, asegura Javier Maroto, jefe de campaña
del PP. “Cs no es un valor seguro, está lleno de contradicciones, como el hecho
de presentar esta idea de coalición un día después de que se hayan publicado
las coaliciones en el BOE y ya no se puedan concretar”, añade el vicesecretario
de los populares. Maroto asegura que “la verdadera coalición la haremos con
humildad con los votantes de Ciudadanos, porque el PP es el único valor seguro
para echar a Sánchez. Si agrupamos el voto, el cambio será posible”. Desde
Génova se descarta cualquier posibilidad de acuerdo con Ciudadanos. Se piensa
que es una trampa, una maniobra por parte de Rivera porque le va mal en los
sondeos. “La única forma de echar a Sánchez es aunar el voto”, afirma Maroto.
Sin embargo, en Génova están muy satisfechos con esta operación naranja porque
consideran que “nos ha centrado al menos tres puntos porque Rivera viene a
decir que el centro es el PP, ya que no quiere pactar ni con socialistas ni con
Vox”. Y la idea que difunden los dirigentes del PP es que “hay muchos votantes
de Ciudadanos que se estarán preguntando si Rivera, que ya pactó con Sánchez,
podrá hacerlo una segunda vez”. Tampoco Vox es un valor seguro, dice Maroto,
porque anima a llevar armas por la calle y otros disparates. “Si, el 28-A,
aunamos nuestro voto en torno a Casado se lograría el cambio y se hará frente a
la nube negra de la economía que se avecina”. El jefe de campaña del PP afirma
que ya se han hecho propuestas de ir juntos en Álava, por ejemplo, donde
Ciudadanos y Vox se han negado, pese a que saben que no tienen posibilidad de
sacar escaños y que favorecen a Bildu. La postura de Génova ante la proposición
de Rivera se basa en que, en primer lugar, llega tarde, porque ya no hay posibilidad
de concretar coaliciones y, en segundo lugar, que no cumple los objetivos que
se propone, que es el de conseguir la concentración del voto, única vía para
que se produzca un relevo en la Moncloa. No considera Maroto que la iniciativa
de Ciudadanos sea muy seria. “Estas cosas no se hacen así, ha de concretarse en
una reunión, en una negociación formal”, señala. “Y todo eso lo tendríamos que
haber hecho antes de las elecciones”. Pero Rivera no ha intentado conversar
sobre este asunto con Casado. “Las cosas no se hacen así, es una contradicción
más de Cs, que dice una cosa y luego hace otra”.
La Nueva Política de
Ciudadanos consiste en colocar a dedo a gente por ser mediática o tránsfugas
del PPSOE.
Más allá de lo que
reflejan los sondeos, C’s se reafirma en el mandato que emitió la ejecutiva el
pasado 18 de febrero, aprobando por unanimidad el “no” al PSOE. “A poco más de un mes de las elecciones
generales -escribe Paloma Esteban en El Confidencial- las posibles sumas que
arrojen los resultados en las urnas están eclipsando ya el debate político. Las
encuestas más recientes señalan una probable mayoría entre el PSOE, que ganaría
las elecciones, y Ciudadanos. Se trataría de la única opción que no necesitaría
un tercer actor. Los socialistas no suman con Unidos Podemos (necesitarían,
como mínimo, una abstención de los independentistas), ni tampoco las tres
fuerzas de la derecha (PP, Cs y Vox) podrían reeditar un pacto a la andaluza.
No con los números que hay en estos momentos encima de la mesa, según los
estudios demoscópicos. Pero todo indica que el acuerdo entre Pedro Sánchez y
Albert Rivera no llegará. Así lo señalan dirigentes de la cúpula naranja, que
se reafirman tajantemente en el mandato que emitió la ejecutiva nacional el
pasado 18 de febrero, aprobando por unanimidad el veto al PSOE tras el 28 de
abril. Las mismas fuentes aseguran que ‘no existen dudas’ pese a los resultados
que empiezan a reflejar las encuestas. El entorno de Rivera insiste en que la
posibilidad de apoyar a Sánchez no existe y reiteran que ‘en ningún caso’
respaldarán un Gobierno encabezado por el presidente socialista. La decisión de
la dirección naranja el pasado febrero no fue algo espontáneo. A pesar de las
críticas y los análisis derivados de aquella reunión, el partido tenía clara su
intención de lanzar un mensaje claro, desmarcándose del PSOE y tratando de
frenar la ofensiva del PP, que comenzaba a apelar una vez más al voto útil y
ponía en duda un posible entendimiento entre Ciudadanos y socialistas. El
núcleo duro de Rivera analizó los riesgos y era consciente de que los había. El
principal, una fuga de votos por el centro y el centro-izquierda, que le
reprochan no cerrar la puerta a un acuerdo del que participe Vox, aunque sea
vía abstención como ocurrió en Andalucía. Pero el líder naranja y su equipo de
confianza concluyen que la situación (del momento y actual) requiere asumir
riesgos y que es necesaria una elección. Así nació la propuesta ante su
ejecutiva, que después ha sido respaldada.
Según José Luis Ábalos, ministro de Fomento, los socialistas estarían
más cómodos con Ciudadanos.
En Ciudadanos ha calado
la creencia de “la traición de Sánchez” y entienden que ningún voto de su
partido debe ir a parar a respaldar al PSOE. Ante las críticas del bautizado 'pacto
del abrazo' —en referencia al acuerdo firmado entre Sánchez y Rivera en marzo
de 2016 que condujo a una investidura fallida (Podemos no la respaldó y el
bloqueo político se perpetuó hasta la repetición electoral de junio)—, el
partido naranja tiene claro que aquel PSOE no es el de ahora. En realidad,
aseguran, basta con ver una imagen de los equipos negociadores para ver que las
coincidencias son ya casi inexistentes. Está claro que los socialistas estarían
más cómodos con Ciudadanos. Lo dijo el pasado domingo el propio secretario de
Organización y ministro de Fomento, José Luis Ábalos, al asegurar que “es
preferible siempre alguien que no cuestione la unidad de España”. La número dos
del PSOE, Adriana Lastra, que asimismo se pronunció sobre el asunto pese a no
suscribir las palabras de Ábalos como tal, tampoco descartó un pacto con
Ciudadanos, dejando claro, eso sí, que las líneas rojas para su partido son el
programa y el evidente veto a Vox. En la formación de Rivera reconocen que no
sería fácil de explicar un no rotundo si existiera una suma suficiente entre
ambos partidos y hubiera coincidencias programáticas con Sánchez (y obviamente
una negativa taxativa de entendimiento con los grupos independentistas). En
Ciudadanos son muchos los que siguen pensando que la línea roja siempre será
permitir que Podemos llegue al Gobierno.
Marcos de Quinto,
exvicepresidente de Coca-Cola, un pirata que aborda la política.
De pronto, Marcos de
Quinto, exvicepresidente de Coca-Cola, con 61 años, acompaña al presidente de
Ciudadanos, Albert Rivera, como 'número dos' de la lista de la formación
naranja al Congreso de los Diputados por Madrid. Lo anuncia en un acto público
en Toledo, donde participan Rivera, el cabeza de lista, Juan Carlos Girauta, y
la candidata de Cs a la Presidencia de Castilla-La Mancha, Carmen Picazo. De
Quinto asegura que dar el paso de entrar en política le da “un poco de vértigo”
pero que lo hace “para arrimar el hombro y ayudar al país”. Sus razones para ir
de la mano de Ciudadanos son que cree que es el partido “que de verdad lucha
por la libertad”, el que defiende realmente “una España unida de ciudadanos
libres e iguales”, y porque es una formación que aspira a “un país que no sea
sectario, sino abierto y sin complejos”. Albert Rivera admite que “admira” a De
Quinto, del que destaca su “capacidad intelectual, su valentía”, y asegura que
“es innovador y ha roto todos los esquemas”, después de 36 años trabajando en
Coca-Cola. Comenta que “España se merece ministros como él en el Gobierno”. Un nuevo
Gobierno y un cambio que, a juicio de Rivera, necesita España sin Pedro
Sánchez, que “está premiando a aquellos que han intentado dar un golpe de
Estado” y que “se ha dedicado a ostentar el poder y no a ejercerlo”.
Rivera
presenta a Marcos de Quinto, exvicepresidente de Coca-Cola, como número dos por
Madrid.
Seis meses antes, el
exvicepresidente mundial de Coca Cola rechazaba la idea de que le fichara
Ciudadanos porque “enrolarse en un partido supone renunciar a la
independencia”. Marcos de Quinto declaraba abiertamente: “A mí me interesa la
política, pero enrolarse en un partido supone renunciar a la independencia, y
yo la valoro demasiado como para perderla. Más que los partidos me interesan
las personas. Lo único que le puedo decir es que no soy del PP, aunque tengo
amigos que lo son o han sido dirigentes importantes del PP y les respeto”. Hoy,
el presidente de la formación naranja anuncia el fichaje del exvicepresidente
mundial de Coca Cola como número dos en la lista por Madrid a las elecciones generales.
Desde que abandonó su carrera como directivo, a principios de septiembre de
2018, Marcos de Quinto se muestra muy activo en la red social de Twitter,
defendiendo postulados cercanos a Ciudadanos y atacando con especial virulencia
a Unidos Podemos, a los partidos independentistas catalanes y al presidente
Pedro Sánchez. Rodrigo Ponce de León, escribe sobre el mismo en Eldiario.es:
“Alabado por su talento directivo, atacado por su verborrea, De Quinto es capaz,
en una misma mañana en Twitter, de alabar a Margaret Thatcher y atacar posturas
sectarias, de renegar de las banderas (‘menos colores y más razones, menos
banderas y más maneras...’) de lanzar un ardid patriótico por ‘sentirse
orgulloso de nuestra historia y de las gestas de nuestros antepasados’ o de señalar
como una ‘reivindicación social justa’ al feminismo para luego matizar con que
está en contra del ‘feminismo excluyente’ o que el machismo es un ‘problema
doméstico’. A los sindicatos les sigue teniendo la misma beligerancia que hace años:
‘La sociedad cada día les da más la espalda por sectarios, parasitarios e
inútiles’. Inconformista, ingenioso y seguro de sí mismo, para unos, arrogante,
lenguaraz y prepotente, para otros, está por ver cómo el ex directivo de la
multinacional, que asegura ‘sentir poco respeto por la jerarquía como expresión
simple de que hay otro por encima’ o que ‘sin desobediencia no hay desarrollo’,
se las arregla en las aquilatadas estrecheces de los argumentarios de un
partido político”.
Una manifestación de los
trabajadores de Coca-Cola en lucha.
De Quinto estuvo 36 años
al frente de Coca-Cola, donde llegó a ser presidente de Coca-Cola Iberia, y
vicepresidente de la división europea de The Coca-Cola Company. En la
multinacional terminó los dos últimos años de su periplo profesional como
vicepresidente mundial de marketing, con un sueldo que superaba los 7 millones
de euros anuales. En mayo de 2108, abandona un puesto en el consejo de
administración de Telepizza, al no estar de acuerdo con la alianza con Pizzahut.
Ponce de León nos recuerda su carácter transgresor que, en marketing, le ha
dado tantas alegrías. Su gestión en España se vio enturbiada con unas
declaraciones polémicas ante el ERE de más de 1.900 personas que se anunció
para la compañía embotelladora de Coca Cola. En enero de 2014, no le tembló la
mano al plantear un ERE, que afectaría a 1253 familias, habiendo tenido unos
beneficios de 920 millones. Y declaraba sin ningún pudor: “El problema de este
país es que todo el mundo quiere tener el trabajo a la puerta de su casa” o “el
ERE está quitando privilegios a liberados que cobran 110.000 euros y solo
trabajan 13 días al año: lamento descubrírtelo”. Su compañía se enfrentó por
primera vez a la petición de un boicot de sus productos y a una pugna sindical,
especialmente, con los trabajadores del centro logístico de Fuenlabrada que
terminó perdiendo en los tribunales. La guerra afectó a su esfera personal, al
ver cómo un grupo de sindicalistas protestaba a las inmediaciones del lugar
donde celebraba la boda con su segunda mujer. En los últimos años del conflicto
sindical en la planta madrileña, De Quinto ya no estaba en España. Había sido
nombrado vicepresidente mundial de marketing de la compañía, lo que se
interpretó por algunos como una patada hacia arriba en una compañía poco amiga
de que sus conflictos laborales se hagan públicos. De Quinto solo estuvo dos
años como número tres de la multinacional en Atlanta. Según él, volvió “para
vivir”. Será padre en 2019 de su cuarto hijo, el primero con su segunda mujer,
la soprano Angélica de la Riva, y este mismo año aparece su libro “Notas desde
la trinchera”, toda una declaración de intenciones de su visión del mundo
empresarial.
Albert
Rivera, al frente del Comité Permanente de Ciudadanos.
Pero volvamos al tema de
Ciudadanos. Tras las “irregularidades cometidas” en las primarias de Castilla y
León, los dirigentes de Cs solicitaron a la Comisión de Garantías y Valores del
partido una auditoría externa que contribuyera a “demostrar la transparencia y
garantía del sistema telemático empleado por el partido en las votaciones”. La
Comisión de Garantías y Valores les responden con “evasivas” y “acreditaciones
parciales de poco interés” para ellos, lo que confirmaría que “efectivamente no
se han adoptado todos los mecanismos viables internamente dentro de un partido
que se presume leal y transparente en el cumplimiento de sus obligaciones”,
presumiendo una alteración de “la fiabilidad” con la que se emitieron los votos
y perturbando así “el real recuento de las votaciones”. Tras un “análisis
pormenorizado” de “las actuaciones reseñadas” y de “las evidencias que nos
constatan”, el informe jurídico determina que “es clara la conducta delictiva”,
al haberse “obstaculizado el leal funcionamiento del sistema telemático como
objeto del delito, todo ello reconocido no solo en nuestra legislación sino
recogido igualmente en la propia Convención sobre Ciberdelincuencia y en la
Directiva 2013/40/UE de 12 de agosto”. “Estos determinados comportamientos han
supuesto una amenaza por los riesgos que generan, haciéndose acreedoras de todo
reproche penal…, estableciendo “las sanciones correspondientes en atención a la
importancia de los daños causados, muy superiores a los posiblemente evaluables
económicamente”, advierte el informe de Legal Orbis Abogados.
Silvia
Clemente con José Manuel Villegas, en la sede del Ciudadanos.
Tras las primarias,
Ciudadanos recibió una decena de reclamaciones además de la de Francisco Igea,
en Castilla y León, donde la denuncia del diputado acabó provocando que se
invalidara la victoria de la exdirigente del PP, Silvia Clemente, para
reconocerle a él como ganador. Esta es precisamente la única excepción que
reconoce el partido como denuncia “formal” admitiendo también que llegó dentro
del plazo reglamentario. Pero se sigue sin investigar y aclarar quién o quiénes
fueron los responsables de que aparecieran esos votos de más. Una vez destapado
este “error”, hubo otros afiliados presentados a otras primarias que reclaman a
la Comisión de Garantías detalles de las votaciones al considerar que podría
haber fraude o anomalías. Es el caso de Juan Carlos Bermejo, en la candidatura
autonómica en Madrid, pero también en la de Castilla La Mancha, en la de Murcia
y en la de Cantabria. Además, otros candidatos se unieron a esta solicitud de
datos y aclaraciones, como en Aragón, en la alcaldía de Valencia, en las
primarias de las generales de Cádiz, en las del cabildo insular de Gran
Canaria, o por las candidaturas en Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas. El
partido dictamina en todos estos casos prácticamente lo mismo. Nada raro. Todo
en orden, dando por válidos los resultados. Al final del informe, se advierte a
los que han puesto en cuestión la limpieza de los procesos “que han podido
crear una situación anómala y perjudicial para el partido” por lo que se les
podría abrir un expediente disciplinario. Fuentes de la dirección del partido
aseguran que, dado que a la Comisión de Garantías no llegó ninguna denuncia
formal excepto la reclamación de Igea, no ha lugar a que los demás afiliados
“recurran nada”. “Los demás solo solicitaron información y se les ha facilitado.
Por lo tanto, no hay recurso posible”, afirman. Algunos de los candidatos que
se han visto afectados por estos casos afirman que estudiarán los pasos a
seguir ahora, sin cerrar ninguna puerta. Aunque lamentan que “por otros
antecedentes, aquí el que discrepa, ya se sabe cómo acaba”.
El
presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, flanqueado por los dirigentes del
partido Melis Rodríguez, José Manuel Villegas, Inés Arrimadas, Toni Roldán y
Fernando de Páramo.
El informe de valoración
del despacho madrileño Legal Orbis Abogados –encargado por varios dirigentes de
Ciudadanos– constata la vulneración de “todos los trámites legales” en las
primarias de Cs, lo que podría suponer la “disolución” del partido naranja. “Es
viable el pleito que se pretende iniciar” por parte de esos dirigentes de Cs
“mediante la interposición de una querella con bastantes garantías de éxito”,
concluye el informe. Dicho informe especifica que, en las primarias celebradas
por Cs en diversas comunidades autónomas españolas, “se han vulnerado todos los
trámites legales establecidos para el voto telemático, simulando y manipulando
con engaño y temeridad el recuento y votación de los afiliados del partido”. Se
insiste en que “la actuación llevada a cabo por las personas implicadas” en el
caso supondría supuestos delitos de “falsedad documental, corrupción entre
particulares, revelación de secretos” o “daños informáticos”, al haber
perseguido supuestamente “conseguir un resultado a través de un sistema
informático, obstaculizando de forma grave el real proceder de un sistema de
votos en un partido político, simulando y falsificando el verdadero resultado
electoral”. Supuestos delitos por los que, “conforme a la reforma del Código
Penal operada en 2015 y en base a los artículos 31 bis y 33” de dicha norma,
“un partido político, como persona jurídica con capacidad de responsabilidad
penal, podrá ser condenado a su disolución”. Y se insiste en que se habría
incurrido en una “responsabilidad penal”, tipificada por el artículo 31 bis del
Código Penal, al haberse actuado “en nombre o por cuenta del partido político
para intereses ajenos y de terceros”.
Albert Rivera, saludando a Serafín Marín, en la última corrida en la
Monumental, en septiembre de 2010.
Santiago Abascal y los
suyos han designado al torero, Serafín Marín, como número tres por Barcelona al
Congreso. Vox le ha elegido como cabeza visible de la oposición a la
prohibición de las corridas de toros en Barcelona. El partido confirmaba el pasado
martes el 'fichaje' de Marín, adelantado por El Independiente, y recuerda que
se trata del último maestro en torear en La Monumental de Barcelona antes de la
prohibición de las corridas. La prohibición de los toros en Cataluña fue
aprobada en el Parlament, en el año 2010, para que fuera efectiva a partir del
1 de enero de 2012. Esta medida fue, sin embargo, anulada más tarde por el
Tribunal Constitucional, al considerar que la norma invadía las competencias
del Estado en materia de Cultura. Serafín Marín defendió la continuidad de los
toros en su tierra natal e incluso intervino en el Parlament para apelar al
“seny” de los diputados, decidiendo sobre la continuidad del “modo de vida” de
miles de catalanes. La lista de Vox por Barcelona está liderada por Ignacio
Garriga, portavoz del Comité Ejecutivo Nacional del partido y odontólogo, al
que siguen el abogado Juan José Aizcorbe como 'número dos' y Serafín Marín en
el tercer puesto. Este fichaje llama poderosamente la atención puesto que se
trata del torero que se hizo fotos y vídeos junto a Albert Rivera, tal y como
consta en el propio canal de Youtube de los naranjas.
Vox ficha al torero Serafín Martín para sus
listas.
Enric Sopena recuerda el
pasado 23 en ElPlural.com: “En donde en estos momentos más se masca la competición
es entre el PP y VOX. En el ánimo de empatar al rival, Pablo Casado no ha
dudado en fichar, además de a personajes conocidos por su participación en
tertulias televisivas, a dos toreros; Miguel Abellán, que va en las listas por
Madrid y Salvador Vega, por las de Málaga. Aún más, la número 2 por Segovia es
Raquel Sanz, viuda del torero Víctor Barrio. Por no mencionar a Adolfo Suárez
Illana, que no se sabe si estará en las listas de Madrid por hijo de
expresidente o por torero. La intención clara del partido es pegarse con VOX
por el voto de los aficionados a la tauromaquia. Su presidente, Santiago
Abascal, ha fichado como número 3 para el Congreso por Barcelona al diestro
Serafín Marín, que toreó la última corrida de la Monumental el 25 de septiembre
de 2011, tras la prohibición del Parlament de celebrar corridas, que luego
corregiría el Tribunal Constitucional. Y pesa mucho que VOX cuente, además, con
el apoyo incondicional del sevillano Morante de la Puebla, una figura de
relieve para los taurinos. En la semana del aniversario del gran referente del
periodismo español, Mariano José de Larra, sus palabras recobran vigencia como
si no hubieran pasado dos siglos: ‘... van a ver a un animal tan bueno como
hostigado, que lidia con dos docenas de fieras disfrazadas de hombres...’. Si
estos representantes son los que queremos para nuestro Congreso, apaga y
vámonos. En este punto, Abascal y Casado protagonizan una especie de duelo al
estilo de la letra con la que García Lorca inmortalizó el café de Chinitas, ya
saben: ‘Soy más valiente que tú, más gitano y más torero’. Lamentable, sin duda”.
“Alberto Carlos, el de
los ministros largos” titula en Público David Torres. Y sigue: “Albert Rivera
empezó en esto de la política hace más de una década, en un cartel donde
aparecía en pelota picada, una metáfora que indicaba varias direcciones a la
vez, pero que daba demasiadas pistas. Quería decir que no tenía nada que
ocultar y tampoco nada que ofrecer, salvo a sí mismo. Las manos que le tapaban las
vergüenzas avisaban que Albert no era de derechas ni de izquierdas sino todo lo
contrario, lo mismo que esos señores que, sentados en un bar de carretera,
beben coñac Fundador mientras se declaran apolíticos con un palillo entre los
dientes y debajo de una cabeza de toro. En principio Albert y Ciudadanos
representaban un proyecto que no traía muchas ideas encima, excepto la de
oponerse con todas sus fuerzas al nacionalismo catalán, principalmente mediante
una botella de coñac Fundador, un palillo entre los dientes y una cabeza de
toro. Después, poco a poco, esa desnudez adánica se fue cubriendo con diversas
prendas, pantalones, corbatas, sombreros, corbatas y camisas, muchas camisas
azules. La chaqueta de manga ancha es un clásico de su vestuario hasta el punto
de que dentro de ella le cabe prácticamente cualquier cosa: pactos con la gente
con la que nunca iba a pactar (de Vox al PSOE pasando por el PP y la
ultraderecha irlandesa); un feminismo neoliberal desde el que explica a las
mujeres pobres cómo vender sus hijos a las parejas de millonarios que no pueden
tenerlos; una candidata a la alcaldía de Madrid multada por Hacienda y
especialista en eludir el pago de impuestos; y unas primarias del partido con
más irregularidades que los cimientos de la sede de Génova. Repasando otra vez
la foto, se veía claramente que Albert no había engañado a nadie, que no tenía
nada que esconder salvo el manubrio con la que nos la iba a meter doblada.
“Ahora -continúa David
Torres-, gracias a un despiste del BOE, se ha descubierto que ni el nombre era
de verdad, que Albert Rivera en realidad se llama Alberto Carlos Rivera, una
revelación que ha llenado de intriga e inquietud a sus partidarios y de risas y
palomitas a sus detractores. No se sabe todavía si lo de ‘Albert’ era un guiño
al electorado de derechas catalán ni si lo de ‘Alberto Carlos’ no será un guiño
al electorado de derechas venezolano. Se trata de un nombre compuesto de
telenovela que remite inmediatamente a Roberto Carlos, un cantante brasileño de
capa caída que quería ser civilizado como los animales y que ahora prefiere ser
civilizado como Bolsonaro. Esto de cambiarse de nombre a dos días de la plena
promoción puede ser algo muy peligroso: le ocurrió a Prince cuando modificó su
apodo por un símbolo bisexual y no le permitieron entrar a un especial de Los
Teleñecos que le habían dedicado porque el guardia de la puerta no encontraba
el ideograma en un manual de tráfico. Pablo Casado, siempre atento a la jugada,
ha aprovechado para proponerle como futuro ministro de Asuntos Exteriores
recordando la facilidad con que Alberto Carlos, el artista anteriormente
conocido como Albert Rivera, viajaba a Caracas a repartir abrazos. Si al menos
se hubiera llamado Carlos Alberto, no habría dado lugar a estas confusiones. En
breve corregirá su nombre otra vez para que sus votantes sepan a qué atenerse,
pobrecillos”.
Fotomontajes e imágenes
sorprendentes de esta última semana:
El
análisis más técnico y riguroso encontrado hasta el momento de la derecha en
España.
Pablo Casado se lía, al situar Getxo en Guipúzcoa en lugar de Vizcaya...
Vaya Nivel el del 'Licenciado'.
Los twitteros se cachondean del “masaje” de Pablo Motos a Albert Rivera, tras la
tensión con Pablo Iglesias.
Ogni uomo è un'isola. (Cada hombre es una isla). Las aguas del
Mediterráneo están llenas de ahogados pobres y vulnerables que Europa condena a
morir sin piedad. Que no se vean, no significa que no existen. Sin testigos, no
hay culpables. By Urka #FreeOpenArms Ayúdanos a seguir. Openarms.es
PP Fichajes. Con tanto fichaje frikazo y populista, algunos pretenden un Congreso variopinto.
El humor en la prensa de esta
semana: El Roto, Peridis, B. Vergara, J. R. Mora, Pat, Manel F., Pat, Puigbert,
Ferrán Martín, Pedripol…
Blanqueo.
Un retraso.
Un no parar.
Tortura contra animales.
Tiro en el pie, en Madrid
Era cuestión de tiempo.
Ciudadanos, la política útil.
Pasar cuentas.
Amarillo, y hablando catalán.
La izquierda, en pedazos.
Pep Roig, desde Mallorca:
Con cerebro basta, En busca del candidato perdido, Estrategia en contra,
Segundas partes nunca fueron buenas, Hacia atrás, más valientes…
Ciutadans con los aficionados en La Monumental de Barcelona: por la Libertad (26/09/2010)
laSexta Noticias publicaba el 10 de abril de 2015 este vídeo. Publicado el 10 abr. 2015 Las claves del éxito de Albert Rivera en su ascenso por el todo
Catorce meses más tarde, se publicaba El sueño frustrado de Albert Rivera [HUMOR].
Josep Borrell (Queco Novell) pierde los papeles durante la entrevista y pie al entrevistador que pare la grabación. Crèdits: Borell Unchained
Polònia TV3. Publicado el 28 mar. 2019
Felipe VI habla de Jorge Luis Borges, pero dice: "Vuestro JOSÉ LUIS Borges... nuestro también...". Horror, pavor y momento para correr un tupido velo. Ahí está, si quieren oírlo, a partir del 00:05:30. Atención.
Inauguración del VIII Congreso Internacional de la Lengua Española en Córdoba (Argentina)
En este episodio, descubrimos quién está detrás de cada gran medio de comunicación, qué grupos
son sus accionistas, quién mueve los hilos. ¿Están financiados por bancos, por
políticos, por particulares?
Todo lo que tienes que
saber sobre quién controla los medios de comunicación.