Silvio Berlusconi rechaza dimitir.
Hace diez días, el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, descartó presentar su dimisión y no estar preocupado de su procesamiento por prostitución de menores y abuso de poder. “Por amor a la patria –dijo entonces– de eso no hablo. Sólo puedo decir una cosa: no estoy en absoluto preocupado”. Y añadió que no pensaba en dimitir sino en “terminar la legislatura”. Pero la delicada situación del jefe del Gobierno, que debe afrontar en las próximas semanas cuatro procesos distintos, se vio agravada por la filtración de los interrogatorios de los fiscales milaneses a Karima El Mahroug, Ruby “Robacorazones”, la prostituta marroquí de 18 años que visitó una quincena de veces la mansión de Arcore, siendo todavía menor de edad.
Karima declaró a la fiscalía que Berlusconi le entregó “un sobre con 50.000 euros” la primera noche que acudió a Villa San Martino, el 14 de febrero de 2010. “Me cogió aparte y me llevó a una habitación donde nos quedamos solos. Me dijo que mi vida cambiaría y, aunque no me habló explícitamente de relaciones sexuales, no era difícil entender que me estaba proponiendo hacer sexo con él”. En ese momento, según Ruby, Berlusconi pensaba que tenía 24 años y que era egipcia, porque eso fue lo que le había contado “falsamente”. Pero, unas semanas después, cuando volvió a Arcore “me enteré de que las que estaban con él, podían acceder a una casa gratis. Y, cuando me propuso ponerla a mi nombre, debía decirle la verdad. Entonces le confesé que era menor y que no tenía documentos. A lo que Berlusconi me contestó: “Dirás a todos que eres la sobrina de Mubarak y así podrás justificar los recursos que pondré a tu disposición”.
Los fiscales descubren que Ruby no ha estado en Villa San Martino solo tres veces, como afirma, sino muchas más, y también después de marzo, es decir cuando Berlsuconi ya sabía que era menor de edad. El seguimiento de su móvil demuestra que la joven estuvo en Arcore 15 noches distintas, y que habló con Berlusconi 67 veces en 77 días. En esas ocasiones, la joven pasó en villa San Martino un fin de semana largo, entre el 24 y el 26 de abril, en el que hubo un invitado ilustre: Vladimir Putin, el primer ministro ruso. Las visitas acabaron el 2 de mayo, tres semanas antes de que Ruby fuera detenida en Milán acusada de robo.
Más de un millón de mujeres se han manifestado en Italia y otras muchas en 60 ciudades europeas, pidiendo la dimisión del primer ministro italiano por sus escándalos sexuales con esa menor de edad. Pero Il Cavaliere no se ha dado por aludido. “Las mujeres saben que les tengo mucho aprecio – dijo en una entrevista en el programa Mattine 5, de uno de sus canales de televisión–. Siempre les he demostrado gran atención y respeto. Estoy convencido de que tienen una marcha más que los hombres. Siempre fueron mejores, más inteligentes, están más preparadas, son más responsables y consiguen solucionar problemas sin dar tantos rodeos. Por mi parte, siempre intento que todas las mujeres se sientan especiales”. Para él, las mujeres que se manifestaron por su dignidad después del escándalo Ruby, están manejadas por la oposición y los jueces. “Me ha parecido un pretexto para sostener la teoría judiciaria. Y esto es una vergüenza. Es una movilización partidista por parte de la izquierda que no consigue ganar unas elecciones”.
Pero, en las manifestaciones, no hubo símbolos ni banderas de ningún partido y en todas ellas contaron con el apoyo, no sólo de los partidos políticos de la oposición, sino de los sindicatos, de artistas, escritores, prensa y hasta de la Iglesia. El domingo, en su editorial, el director de Avvenire, el diario de la Conferencia Episcopal italiana, escribía: “Si fuese mujer, yo también participaría hoy en la manifestación”. Y el diario L'Unità, uno de los patrocinadores de las protestas, titulaba en su portada: “Es sólo el inicio”, eslogan utilizado en el mayo del 68 francés (ce n’est qu'un début).
Zapatero piensa lo mismo. "Acabaré la legislatura, como sea..." pero no lo dice. Tampoco si se presenta a la reelección o no. Otro caballero...
ResponderEliminarAunque a este le gustan más los aviones que las señoras.
chiflos.