Más de tres siglos de cárcel para imputados del PP: Bárcenas, Sepúlveda, López Viejo, Crespo, Lapuerta y Sanchis.
Carlos Floriano, vicesecretario de Organización del
PP, se hace el sueco.
La Fiscalía pide más de tres
siglos de cárcel para sus cargos imputados en la Gürtel. El Ministerio Público pide cerca de 330 años de condena para una
quincena de imputados del PP, una formación a la que también acusa de
beneficiarse de las actividades de la red en 328.440 euros. La Fiscalía Anticorrupción presentaba el pasado viernes su escrito de conclusiones sobre la
'primera época' de actividades del mayor caso de la corrupción española con elevadas
peticiones de pena para 41 imputados: cerca de 800 años de cárcel. De ellos,
algo menos de la mitad, cerca de 330 años, corresponden a una quincena de
encausados que ocuparon cargos dentro del PP. La Fiscalía pide penas de 110
años de cárcel para Francisco Correa, cabecilla de la red de corrupción, y 89
años y seis meses para su mano derecha, Pablo
Crespo, exsecretario
de organización del PP gallego. Para
Luis Bárcenas, 42 años y seis meses. Y son igualmente procesados exalcaldes
como Guillermo
Ortega y Jesús Sepúlvera,
o el ex consejero de la Comunidad de Madrid, Alberto López Viejo, quien fuera
'delfín' de Esperanza
Aguirre.
Además, otros dos responsables de
las finanzas de PP son igualmente acusados: Álvaro Lapuerta, octogenario
extesorero, y Ángel
Sanchis, al frente de las cuentas, cuando el partido aún se llamaba Alianza
Popular. Para el primero, la Fiscalía pide 3 años por apropiación
indebida. Para Sanchis, 8 años por blanqueo, fraude fiscal y
falsedad documental. Más elevadas son las penas que la Fiscalía plantea para
los dos exalcaldes del PP imputados. Guillemo
Ortega, antiguo primer edil de Majadahonda, se enfrenta a 50 años y 10 meses de cárcel por varios delitos. Su compañero, Jesús
Sepúlveda, que fuera regidor
de Pozuelo de Alarcón y marido de Ana Mato,
tendrá que responder de otras acusaciones por los que le piden 15 años y cuatro meses. Algo similar
ocurre con la exministra de Sanidad,
quien deberá responder por los 28.468 euros en viajes y otros obsequios que disfrutó y que, en
realidad, fueron pagados por la trama de Correa.
Alberto López Viejo se enfrentará a una acusación fiscal de 46 años de
prisión por
los delitos de asociación ilícita, fraude fiscal, malversación, falsedad,
cohecho, tráfico de influencias y blanqueo de capitales. Anticorrupción
solicita para Pedro Rodríguez Pendas, su asesor, 4 años y medio. Para Carlos Clemente,
quien fuera viceconsejero de Inmigración y Cooperación, 10 años y medio.
El exdiputado Jesús Merino, acusado de
ayudar a Bárcenas a conseguir ‘mordidas’ en Castilla y León, se
sentará en el banquillo de los acusados con la petición de 3 años y 9 meses de cárcel. Otros cinco antiguos
concejales del PP en
diferentes localidades han sido igualmente procesados.
Pese
a este torpedo que toca de lleno al PP, éste disimula y mira para otro lado e insiste
en que no tiene la “condición de acusado” en el proceso Gürtel. Reivindica que es “absolutamente ajeno” a los
hechos que se imputan a personas “concretas” y que los gastos electorales del
partido han sido “debidamente” auditados por el Tribunal de Cuentas.
Rosa Díez, portavoz de Unión Progreso y
Democracia, pide la dimisión del presidente del Gobierno,
Mariano Rajoy, por “mentir” en el Congreso de los Diputados, en donde dijo que
el Partido Popular no contaba con una 'caja B'. “Ese informe –dijo– deja claro que el PP creó una contabilidad 'B' opaca
al Ministerio de Hacienda y al Tribunal de Cuentas”. Y Gaspar Llamazares,
diputado nacional de IU, insta al Gobierno del PP a que convoque elecciones generales de forma inmediata ante una
situación de “ilegitimidad clara” derivada de su relación en el caso Gürtel y
le exige a que “asuma responsabilidades al máximo nivel”.
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