Pedro
Sánchez, junto a sus rivales, tras ganar las primarias.
Pedro Sánchez ha ganado las elecciones
primarias del PSOE y ya es su nuevo secretario general. Los números son
rotundos: Sánchez venció con el 50,21% de los votos, frente al 39,94% de Díaz y
el 9,85 de Patxi López, en unas primarias con la participación “histórica” y
“altísima” del 80,3%. De los casi 150.000 afiliados que votaron, 74.223 lo
hicieron a Pedro Sánchez, 59.041 a Susana Díaz y 14.571 a Patxi López, que se
ha impuesto en su Euskadi natal, con un 52% de respaldo. Sánchez se impuso a
Díaz en dieciséis de las diecisiete comunidades y ha arrasado en once de ellas:
Cataluña, Comunidad Valenciana, Baleares, Cantabria, Navarra, Galicia, La
Rioja, Asturias, Castilla y León y Canarias, además de en Ceuta y Melilla. La
derrota de Susana Díaz en las primarias abre paso al avance del sanchismo en
todas las federaciones, incluso en Andalucía, la única región donde la
presidenta de la Junta ganara a Pedro Sánchez. La presidenta de la Junta obtuvo
un porcentaje de apoyos superior al 63% en su territorio y ganó con un holgado
margen al madrileño en las ocho provincias andaluzas. Sin embargo, en cinco de
ellas, el reelegido secretario general del PSOE aumentó considerablemente sus
votos superando la barrera psicológica del 30%. Díaz asume que por encima de
ese margen, se confirma un despertar del sector crítico dentro del PSOE
andaluz, rivales internos de la secretaria general que estaban dormidos y
diseminados, y que han logrado organizarse y movilizarse bajo el paraguas del
sanchismo. “La líder del PSOE andaluz –escribe Daniel Cela– está devastada
psicológicamente por el fracaso de las primarias, según personas próximas, pero
no ha tardado ni 24 horas en ponerse en guardia: el lunes habló con los ocho
secretarios provinciales para comunicarles su decisión de acelerar la
convocatoria del congreso del PSOE andaluz, que tendrá lugar el último fin de
semana de julio (los días 29 y 30). Díaz tenía previsto retrasar el cónclave
hasta septiembre en caso de ganar las primarias, para contar con tiempo
suficiente para allanar su relevo al frente de la secretaría general andaluza.
Pero su derrota ha dado alas al sector crítico andaluz, que ya prepara una candidatura
alternativa a la de la presidenta de la Junta, por eso Díaz ha precipitado el
calendario orgánico: para no dar tiempo a sus adversarios de montar una lista
potente de cara a las primarias andaluzas, que se celebrarán poco después del
congreso federal del PSOE”.
El ex ministro del Interior, José Luis
Corcuera, abandona el PSOE.
Algunos barones ‘susanistas’ no
tardaron mucho a ‘rendirse’, como el valenciano Ximo Puig, quien declaró: “Debemos
aprender de nuestros errores”, y pidió “lealtad recíproca, de ida y vuelta”, a
Sánchez. Javier Lambán, secretario general del PSOE Aragón, reconoció la
“victoria rotunda” de Pedro Sánchez, a quien le ha ofrecido su “lealtad” y le
ha reclamado que esta sea “mutua” para “que la unidad se construya sobre
cimientos seguros”. José Bono dio un paso atrás tras la oleada sanchista: “Lo
que me pide el cuerpo –dijo– es poner punto en boca”. Otros, como José Luis
Corcuera se apresuraron a darse de baja en el partido, aunque, de momento. El
exministro del Interior fue uno de los primeros en formalizar su baja como
militante del PSOE poniendo fin a 40 años de militancia. Durante su mandato,
Corcuera presentó, en febrero de 1992, la Ley de Seguridad Ciudadana, conocida
como 'Ley Corcuera'. Muy crítico con Pedro Sánchez, formó parte del grupo de
alrededor de cuarenta excargos socialista que, en enero del pasado año,
hicieron un llamamiento para que rechazara una alianza con Podemos, por
considerar que sería un “suicidio” para el partido. Corcuera fue muy crítico
con la gestión de Pedro Sánchez en su primera etapa como secretario general. También
Antonio Hernando, portavoz del grupo socialista en el Congreso, fue de los
primeros en presentar su dimisión ante los inminentes cambios que se ciernen sobre
el grupo Otros, como Beatriz Talegón, se reconciliaron con Pedro Sánchez y
expresaron su ilusión a través de su cuenta de Twitter con su proyecto para el
PSOE, del que se dio de baja hace unos meses. Ahora anuncia su vuelta. “Corcuera
se marcha y otros volveremos –escribe en su blog–. Veo nerviosismo y mucho
troll nervioso, noticias envenenadas. ¿Por qué será?”. Mariano Rajoy comparecía
el lunes ante los periodistas elevando la importancia de la victoria de Pedro
Sánchez en las primarias del PSOE. Rajoy ha sido contundente en su objetivo
para terminar la legislatura independientemente del interlocutor que tenga al
frente de los socialistas. El presidente ironizó cuando se le preguntó si había
llamado a Pedro Sánchez para felicitarle. “Es un tema muy importante. Lo
llamaré. Si no lo hice ayer era para no molestarle”.
Pedro Sánchez está plenamente
convencido de que Mariano Rajoy no adelantará las elecciones, como mínimo,
hasta que se despeje el panorama judicial de los casos de corrupción que
afectan al PP. Ese es uno de los motivos por los que no empiece hasta el
siguiente periodo de sesiones (septiembre) una nueva estrategia de oposición de
claro hostigamiento y desgaste al Ejecutivo de Mariano Rajoy, desmarcándose
claramente de sus políticas y proponiendo alternativas. Lo que si quiere tener
ultimado Pedro Sánchez, una vez terminado el verano, es una clara estrategia de
oposición para el otoño, liderada nítidamente el PSOE y lo saque del
amodorramiento de la Gestora que se hizo cargo del partido. Sánchez considera
que Podemos ha protagonizado más que el PSOE la labor de oposición al
Ejecutivo, que ha culminado ahora con la presentación de una moción de censura
que, al menos por un día, le dará todo el protagonismo a Pablo Iglesias. El jueves,
Sánchez fue designado oficialmente secretario general del PSOE, pero no tendrá
Ejecutiva hasta el Congreso de mediados de junio. Sánchez se ha mostrado firme
partidario de que Mariano Rajoy comparezca de forma inmediata en el pleno para
abordar la corrupción en el PP, medida que la Gestora había rechazado expresamente,
al considerar suficiente que acudiera a la comisión de investigación creada a
tal efecto. Otros muchos temas en los que el PSOE debería tomar posición, desde
la última oferta de Podemos para retirar su moción de censura, si los socialistas
presenten una nueva, hasta el orden de presentación y el contenido de las iniciativas
parlamentarias, pueden llevarse a efecto próximamente. Es probable que se unan
fuentes de Ferraz y del equipo de Sánchez, para buscar propuestas provisionales
y de consenso durante este periodo, aunque limiten la acción del partido. Todo
ello, con una moción de censura en el horizonte. Razón por la cual el equipo de
Pedro evitará nuevas confrontaciones y medirá los tiempos con prudencia. Y, según
transcurran los acontecimientos, el nuevo líder del PSOE siempre tendrá en la
recámara la presentación de la moción de censura, que no descarta en modo
alguno y que puede ser prevista como la antesala a unas nuevas elecciones.
“El PSOE llegó al 15M” titula Gerardo Tecé en
ctxt, de Público: “Susana Díaz tenía razón: el PSOE actual no gana elecciones.
Ni siquiera primarias del PSOE. Ni aunque sean primarias dirigidas, con todo el
aparato y la armada mediática empujando en la misma dirección. Ni por esas. Son
muchos años de traición y decepción acumulados. Se hizo lo que se pudo, le
diría un médico a los familiares, barones y amigos nostálgicos del paciente. El
PSOE ha muerto, que viva el PSOE. La imagen de ayer no es la del mal perder de
Susana Díaz, felicitando a Pedro Sánchez sin nombrarlo. Tampoco lo es la
alegría del vencedor de la noche, empujado a jugar un papel revolucionario
imposible de imaginar en alguien de su perfil hace un año. La imagen de la
jornada de ayer es la de los militantes en la calle pidiendo entrar a una sede
de Ferraz que hasta anoche no era suya, mientras en los despachos cerrados el
oficialismo gritaba ‘socialdemocracia, trágame’. Antonio Hernando, la
personificación de esa forma de entender la política sin valores, no sabía si
medirse el cuello para la guillotina o disimular gritando ‘no hay pan pa tanto
chorizo’, porque aquello tenía tanto de Toma de la Bastilla como de 15M
socialista. Han tardado seis años pero, al parecer, han llegado.
Pedro Sánchez, entre Susana Díaz y Patxi López,
tras conocerse los resultados.
El diario El País ya no es el
referente. No lo es desde hace años, pero se enteraron definitivamente esa anoche.
Al día siguiente aparecía su editorial “El ‘Brexit’ del PSOE”, en el que se
decían cosas como estas: “La victoria de Pedro Sánchez en las primarias del
partido socialista sitúa al PSOE en una de las coyunturas más difíciles de su
larga historia. El retorno a la secretaría general de un líder con un legado
tan marcado por las derrotas electorales, las divisiones internas y los
vaivenes ideológicos no puede sino provocar una profunda preocupación. La
propuesta programática y organizativa de Sánchez ha recogido con suma eficacia
otras experiencias de nuestro entorno, desde el Brexit hasta el referéndum
colombiano o la victoria de Trump, donde la emoción y la indignación ciega se
han contrapuesto exitosamente a la razón, los argumentos y el contraste de los
hechos. En este sentido, la victoria de Sánchez no es ajena al contexto
político de crisis de la democracia representativa, en el que se imponen con
suma facilidad la demagogia, las medias o falsas verdades y las promesas de
imposible cumplimiento”. Ctxt, de Publico, publicaba ese mismo día: “El
editorial, catastrofista y lleno de bilis, retrata bien un modelo de prensa,
superada por la realidad, que ya ni construye relato ni sirve para entender qué
sucede. Todos populistas, menos quienes sostienen a Rajoy y abrazan venezolanos
ante las cámaras. Si alguien se ha informado de lo que ocurría en el PSOE
durante los últimos años exclusivamente leyendo este periódico, no entenderá
nada de lo que ayer sucedió: ¿Los militantes devuelven mayoritariamente al
poder al loco culpable de destruir el PSOE? Esperemos que a El País algún día
también le llegue su 15M, es decir, que vuelva a hacer su trabajo: vigilar al
poder”.
Sánchez
e Iglesias, con la experiencia fallida, ¿volverán a entenderse ?
¿Y ahora qué? Las maniobras
subterráneas de la gestora sirvieron para apuntalar un edificio en ruinas. Pero
la militancia del PSOE ha votado arreglar la casa, no apuntalarla. El
instrumento para sacar del Gobierno a quien lo ocupa de manera ilegítima está
ahí. En Podemos, maestros del marketing, se adelantaron a registrar la marca
moción de censura, pero ahora tendrán que compartirla con el PSOE que llega.
¿Viviremos una segunda parte de aquella escena en la que Iglesias y Sánchez
simularon querer ponerse de acuerdo o intentarán ponerse de acuerdo? ¿Qué Pedro
Sánchez tendremos ahora? ¿El que le lanzaba a Iglesias la URSS a la cara, el
que canta La Internacional o un tercer Pedro Sánchez? Hay demasiados Pedros
Sánchez, pero también demasiados partidos estatales a la izquierda del tablero.
Cinco. Dos PSOE, dos Podemos y una Izquierda Unida. Mientras que Partido
Popular sólo hay uno, grande y podrido. Pero la solución al problema no pasa
por los partidos y sus escenificaciones, sino por una decencia ciudadana
radical, que desborde a base de ética, no permitiendo ni por activa ni por
pasiva que con su voto se siga alimentando a quien destruye el país a base de
mangoneo y pelotazos. Lo de ayer fue un buen paso.
Guillermo
Fernández Vara se aproxima a Pedro Sánchez.
Pedro Sánchez busca evitar la que
podría ser la primera batalla tras las primarias: la elección de delegados para
el congreso federal que se celebrará en junio y en el que se configurará el
nuevo modelo de partido y los órganos de dirección. El equipo del secretario
general electo busca pactar con los de Susana Díaz y Patxi López listas
unitarias, consensuadas y proporcionales en
los territorios para evitar una nueva confrontación. Irene Castro, desde
Eldiario.es, señala que “la oferta de llegar a un pacto ha sido generalizada en
todas las federaciones. El PSOE celebrará entre los próximos días 24 y 28 de
mayo los 'congresillos' provinciales o autonómicos de los que saldrán los
nombres de los cerca de 1.000 delegados que acudirán al congreso de junio en el
Palacio de Congresos de Madrid. Los de
Sánchez buscan acuerdos con las otras dos candidaturas para evitar que en esos
cónclaves provinciales o regionales se produzca un choque. En los
'congresillos' puede haber listas unitarias o presentarse más de una propuesta.
En ese caso, se vota y la representación para el congreso federal es proporcional
al resultado para aquellas listas que obtengan más de un 20% de respaldo. La
idea de Sánchez es que se llegue con una única lista a esos procesos y que se
configure de forma más o menos proporcional a los resultados del domingo, 21 de
mayo, en cada federación. En Asturias,
el número dos de Javier Fernández, Jesús Gutiérrez, envió el pasado lunes un
comunicado en el que informaba a los líderes locales de que las tres
candidaturas habían alcanzado un acuerdo por el que la representación asturiana
en Madrid será proporcional: 24 delegados para Sánchez, que obtuvo un 53% de
los votos; 18 para Díaz, con un 40%; y tres para López, con un 7%. En la
mayoría de provincias se enegoció en este mismo sentido. En Castilla y León,
por ejemplo, los 'sanchistas' mantienen la mano tendida a los derrotados, en
muchos casos secretarios generales provinciales que se pusieron del lado de
Díaz. ‘Los delegados del federal deben ser de la sensibilidad de Pedro
Sánchez’, admitió el secretario provincial de Ávila, el 'susanista' Pedro
Muñoz. El líder provincial en León, Tino Rodríguez, ya ha renunciado a ir al
congreso federal del junio. El presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara,
se pronunció a favor de que las listas fueran ‘integradas y consensuadas’ con
un reparto ‘proporcional’ al resultado.
En Extremadura sería un 49% de delegados 'sanchistas' frente al 43% de
'susanistas'. Los de Sánchez creen que se logrará consensuar en la mayor parte
de los territorios, donde encuentran, en general, ‘bandera blanca’. Así, creen
que será ‘excepcional’ la batalla en los 'congresillos' de los próximos días. Y
consideran que tienen más posibilidades de que los 'sanchistas' no planten
batalla a los presidentes autonómicos –que han perdido en las primarias– si no
dan guerra en el congreso de junio. No obstante, los 'sanchistas' admiten que
hay territorios donde habrá más dificultades, como Andalucía o Madrid, donde
los 'susanistas' están divididos en varios bloques y la secretaria general,
Sara Hernández, apoyó a López, quedándose con un pírrico 18% de respaldo”.
Adriana Lastra, diputada socialista que se
abstuvo por “imperativo”, candidata a ser la nueva portavoz del PSOE.
Adriana Lastra, la numero 2 de
Sánchez, arremete contra los dirigentes que no votaron a Sánchez y dice que los
barones tienen que “pedir perdón”. Adriana asegura que el resultado de las
primarias ha sido una lección para los barones del partido y afirma que se
equivocaron porque “no entendieron lo que le pasaba al partido”. La asturiana
contra la gestora del PSOE, presidida por otro asturiano, podría convertirse en
la nueva portavoz del grupo parlamentario socialista en el Congreso de los
Diputados, tras la dimisión instantánea de Antonio Hernando. Lastra ha formado
parte de la candidatura de Sánchez y su posición en el “no es no” a la
investidura de Mariano Rajoy fue clara. A la hora de emitir su voto, manifestó
en la Cámara que lo hacía “por imperativo”. Y mostró su rechazo a la
abstención, aunque no entró en el grupo de los 15 diputados, como otra de las
candidatas a ocupar la Portavocía, Susana Sumelzo, que votaron “no” y acabaron
multados por la gestora. En 2007, resulta elegida como diputada en Asturias,
escaño que revalidaría en la siguiente legislatura, en 2011, y en las
elecciones anticipadas de 2012. En julio de 2014 da el salto a la política
nacional y, en las elecciones generales de finales de 2015, es designada por el
comité autonómico de Asturias como cabeza de lista para el Congreso de los
Diputados. En la repetición de las elecciones en 2016, Lastra vuelve a liderar
la lista y es reelegida como diputada. Justo después del Comité Federal del 1
de octubre, en el que Pedro Sánchez pierde la votación para adelantar el
Congreso Nacional, Lastra deja su cargo orgánico de secretaria de Política
Municipal provocando su dimisión. Pero se mantiene en su escaño, donde vota a
favor de la abstención “por imperativo” de una gestora a la que no duda en
enfrentarse, pese a que está presidida por Javier Fernández, el presidente de
Asturias, su región de origen. Este mismo lunes, tras la victoria de Sánchez,
Lastra mantiene su postura y reclama a
los barones socialistas que les “pidan disculpas a la militancia” después de la
“lección” de ayer. Lastra rechaza la posibilidad de liderar al PSOE asturiano
en sustitución de Javier Fernández: “No, no, seguro. Soy una mujer de palabra.
Hay mucha gente buena en mi tierra para dirigir el partido”. Otra cosa es ser
portavoz en el Congreso de los Diputados.
Isaac Rosa trata de revelar, en
Eldiario.es, la verdadera historia oculta tras la victoria de Pedro Sánchez.
“El plan maléfico y brillante con que los poderes fácticos han rehabilitado un
partido moribundo y recobrado la conexión con los votantes. Verano de 2016.
Reunión secreta a bordo de un lujoso velero en alta mar. Los participantes
acuden en helicópteros y yates particulares, y aunque no me atrevo a dar
nombres, había dos expresidentes de gobierno, una docena de barones y
exbarones, la vieja guardia socialista al completo, varios invitados del PP,
empresarios, banqueros, un par de obispos, un rey emérito, y Rubalcaba y
Cebrián… Una historia que vender. Emocionante. Dramática. Épica. Ilusionante. Y
como tenemos poco tiempo, les propongo un relato fácil: el rey destronado. El
viejo cuento del rey bueno que es traicionado y desterrado hasta que, con el
apoyo del pueblo, regresa y recupera el poder expulsando a los usurpadores. Paso
a paso, el experto detalla el plan: ‘Primero, echar al secretario general. De
malas maneras, las peores posibles, para garantizarle simpatías como víctima.
Segundo, entregar el gobierno al PP. ¿Se les ocurre algo que pueda enfadar más
a sus militantes y votantes? Tercero, necesitamos un villano, o mejor una
villana, que aparezca como representante del aparato y del sistema. Cuarto,
unas primarias a las que el rey destronado concurrirá como outsider, apoyado en
la gente. Ya tenemos el relato: el aparato contra la militancia, la élite
contra el pueblo. Y por supuesto, gana el pueblo… Pues ya ven. El plan ha
salido perfecto. El PSOE ha vuelto.
Renovado. Más a la izquierda. Reconectado con militantes y votantes. Barriendo
el pasado y mirando al futuro. Gente que ayer decía eso de "rompí mi
carné, pero esto me ha devuelto la ilusión". Y todo con el mismo líder. El
rey destronado al que adora el mismo pueblo que hace meses lo despreciaba. Hasta
aquí la teoría de la conspiración. Suena a cachondeo, pero les juro que he oído
unas cuantas así desde el domingo. Gente que ve sospechoso que el mismo Pedro
Sánchez que hace nada era aparatero y social-liberal, hoy sea rebelde y cante
La Internacional. No puede ser. Tiene que haber una mano negra. Pero no. Como
dice el principio clásico, no atribuyas a la maldad lo que pueda ser explicado
por la estupidez. Y una vez más, la conspiración más retorcida es más verosímil
que tanta estupidez: cuesta creer que el PSOE oficial haya sido tan
rematadamente estúpido en los últimos tiempos. Que hayan estado tan ciegos y
sordos, tan desconectados de la calle, tan ignorantes de los cambios de fondo
en la sociedad. Que no vieran venir lo que ha acabado ocurriendo. Que de verdad
confiasen en Susana Díaz como solución. Pero así ha sido. La buena noticia para
el PSOE es que la estupidez a veces propicia carambolas, golpes de suerte. La
victoria de Sánchez puede ser una de esas carambolas, un giro imprevisto que de
pronto pone algo de viento de cola a un partido que llevaba años manoteando
contra el vendaval. Es muy poco viento a favor, el vendaval sigue ahí, y además
Sánchez ya ha demostrado ser una veleta. Pero habrá que ver si hay suficiente
inteligencia colectiva ahí dentro para aprovechar la oportunidad del nuevo
relato, o si insisten en la estupidez”.
“Lidere quien lidere –advierte
Paco Bello en InicitivaDebate–, no espero demasiado del PSOE, y tampoco creo en
los milagros. Pero sí en la ambición sin medida de ciertos políticos y en su
capacidad de adaptación. Por eso mismo mantengo viva la expectativa sobre lo
que sea o no capaz de hacer su restaurado secretario general. Quiero entender,
en base a la estrategia que Pedro Sánchez ha seguido para volver a hacerse con
el cetro de Ferraz, que ha sabido leer muy bien –aunque tampoco era demasiado
difícil– cuáles son las aspiraciones de sus militantes… Y es que si alguien
puede dar la estocada definitiva al PSOE, ese es sin duda su nuevo secretario
general. El que ha sido tan contundente (para lo acostumbrado) en los últimos
meses, solo tiene que volver mínimamente a la ambigüedad para que esa
militancia harta de tanta estafa, pase del amor al odio en un instante. Y si
eso llega a ocurrir, a ver quién va a volver a confiar en un candidato de su
partido. Pero luego me encuentro con las primeras palabras en público de
alguien del círculo cercano a la nueva secretaría general; concretamente con
las de Adriana Lastra, la que dicen que va a ser su nueva portavoz
parlamentaria. Y es entonces cuando ya no entiendo nada. ‘Pedro no es
presidente porque Podemos no quiso’; ‘hablaremos con los partidos ‘del cambio’
(incluyendo como partido ‘del cambio’ a C’s)’; ‘solo presentaríamos una moción
de censura si es para ganarla’, etcétera. Como si viviera un déjà vu. Espero y
deseo que solo se trate de que no han tenido tiempo para afinar el discurso, y
que solo sea un desliz fruto de la precipitación. De lo contrario el PSOE
desaparecerá, que es algo que me tiene sin cuidado, pero significa también que
nos tendremos que tragar al actual Gobierno durante, como mínimo, tres años más
y lo que colee. Y eso sí me importa, y mucho. Tiene muy mala pinta. Pero
insisto, si solo se trataba de prolongar la agonía del PSOE con una operación
de gatopardismo, no lo podrían haber hecho peor, y no me cabe entender tanta
torpeza. Veremos, porque los hechos mandan, y si muy pronto no hay movimientos
contundentes para echar al PP, lo demás será visto como lo que es: humo. Humo
sucio y tóxico”.
La presidenta andaluza confía en
recortar el avance de los sanchistas en su tierra y se desmarca del resto de
barones, que sí han pactado listas con el líder del PSOE. “Susana Díaz quiere
morir matando –señala David Bollero en el artículo ‘Susana, la antidemócrata’,
en Público– Tras ser derrotada por goleada en las elecciones primarias del
PSOE, tras ser humillada con menos votos que avales, ha terminado por revelar
su verdadera cara, incluso, a quienes no había sido capaces de verla. La hija
del fontanero nunca ha sido una demócrata o, por ser más precisos, lo es tanto
como la derecha, es decir, instrumentaliza la democracia, la defiende mientras
le resulta útil para sus propósitos personales. Lo demostró la misma noche que
Pedro Sánchez le pasó por encima con más de diez puntos de diferencia. Su
‘tranquila, tranquila’ barruntaba lo que ya se ha confirmado: Díaz hará más mal
que bien al PSOE, como de hecho ya se lo está haciendo a Andalucía en general,
que ve como se esfuman los planes de empleo, cómo las políticas de igualdad se
recortan, cómo la Sanidad se privatiza por la puerta de atrás, cómo la
Educación no es una prioridad… El domingo pasado, Díaz esbozó lo antidemócrata
que es, cuando ni siquiera nombró a su nuevo secretario general, cuando
abandonó la sede de Ferraz antes de escuchar el discurso de Sánchez. Ahora,
adelantar cuanto antes el congresillo andaluz para evitar que los sanchistas se
consoliden aún más y, muy especialmente, negarse a que el reparto de
compromisarios sea proporcional y refleje el resultado de las primarias vuelve
a delatar a Díaz como lo que es: una mala perdedora, una dirigente que no
encaja que ni siquiera los que creía suyos la han votado (de ahí la diferencia
entre votos y avales), una antidemócrata, en definitiva… Que Susana Díaz no
acepte un resultado democrático y esté dando un espectáculo tan bochornoso como
el del golpe de estado interno que orquestó en el PSOE es una cosa, que el
resto de la militancia, el resto de susanistas no estén a la altura, es otra.
Ahora más que nunca el PSOE está en tela de juicio, ahora más que nunca,
especialmente en Andalucía, ha de demostrar que no se pliega al clientelismo,
que es digno de sus siglas. Susana Díaz, sencillamente, no lo es; como tampoco
lo son otros incondicionales que vendieron su alma al diablo, como en los casos
malagueños Miguel Ángel Heredia o Francisco Conejo”. La presidenta andaluza
confía en recortar el avance de los sanchistas en su tierra y se desmarca del
resto de barones, que sí han pactado listas con el nuevo líder del PSOE.
Susana Díaz, en la presentación de la
candidatura de Madrid.
¿Quién mató a Pedro Sánchez,
pregunta Gabriel Sanz en Vozpópuli. “Es fácil decir ahora que esa foto es
sinónimo de fracaso, pero el mérito de quien así se expresa, alguien que les
conoce muy bien, porque trabajó en Ferraz y en La Moncloa desde los años 80, es
que ya lo pensaba hace dos meses: Son ‘los referentes de mi vida política’,
admite, pero Felipe González, José Luis Rodríguez Zapatero, Alfonso Guerra y
Alfredo Pérez Rubalcaba ‘se equivocaron profundamente’ participando en el mitin
con Susana Díaz el 26 de marzo, y ella ‘aceptándolo’. Fue una foto de régimen,
‘un disparate’ que pretendía, en palabras del emocionado Eduardo Madina en
aquel escenario de Ifema, lanzar la idea de que ‘esto es el PSOE’ y quien no
estaba allí un podemita disfrazado de socialista; se trataba de arrollar por
segunda vez -tras el traumático Comité Federal del uno de octubre- al Pedro
Sánchez que Díaz había interpuesto en su camino para impedirle ganar las
primarias de 2014. ‘Esto’ fueron aquel día los 6.000 militantes que acudieron a
Madrid, en vehículos privados y en más de 40 autobuses fletados por Andalucía y
las federaciones susanistas; y, sobre todo, presidentes autonómicos, decenas de
exministros, alcaldes, y secretarios provinciales; los mismos que luego
moverían Roma con Santiago para sacar avales debajo de las piedras a favor de
la candidatura de la presidenta andaluza… ¿Quién va a creerse lo que digan
ahora González o cualquiera de los otros en un mitin en favor del
triunfador?... Es lo que tiene forzar la máquina en una dirección y sin
anestesia. Ya le pasó al aparato en 1998, cuando apostó todo a la carta de
Joaquín Almunia en contra de José Borrell, que finalmente triunfó como Sánchez;
o, en circunstancias bien diferentes, en 2000 con aquel ‘todos con Bono’...
para que al final ganara Zapatero… Porque, todos los infinitos mapas que se han
hecho desde el domingo revelan que el PSOE de Susana es Andalucía y el de
Sánchez el resto –salvo el País Vasco–. Diríase que el poderío con el que iba a
‘templar y mandar’ (Javier Lambán dixit) se antojó excesivo al resto del
partido, que corrió a refugiarse en brazos del renacido secretario general que
ella y el resto de barones habían conseguido tumbar en el dramático Comité
Federal del uno de octubre. Han sido nueve meses en los que los seguidores del
culebrón, es decir, España entera, no solo los 188.000 militantes con derecho a
voto, terminaron preguntándose al final de cada capítulo ‘¿Quién mató a Pedro
Sánchez?’, como los seguidores de Twin Peaks, la serie de David Lynch, se
preguntaban hace 25 años: ¿Quién mató a Laura Palmer?. Y la respuesta,
indefectiblemente conducía a una única sospechosa: Susana Díaz era la autora
del crimen del apuesto galán que ocupaba despacho en Ferraz”.
Consejo Editorial de El País, preparando su editorial sobre la victoria de Pedro Sánchez
Se
filtra la portada que El País tenía preparada en caso de victoria de Susana
Díaz.
Adiós
a los dinosaurios. Corcuera, el ministro de la polémica Ley de la patada en la
puerta, se da de baja en el PSOE tras el triunfo de Pedro.
Nuestros presos políticos a
Suiza.
El artista urbano Sam3 pinta el
Guernica en un toro Osborne en Santa Pola como denuncia antitaurina. No es la
primera vez que Sam3 se atreve a intervenir un toro de Osborne. En 2009, el
artista urbano pintó sobre ese mismo toro de Santa Pola una vaquilla, símbolo
de la crisis económica. También pintó un esqueleto sobre el toro de la A-30 de
Madrid con este mismo propósito de denuncia. El Ayuntamiento de Santa Pola se
ha mostrado a favor de que la obra permanezca sobre el toro de Osborne del
parque natural y así se lo ha hecho saber al grupo empresarial. Pero Casa
Osborne sólo admite retrasar el momento de pintar la valla “en atención a la
petición de su Ayuntamiento y a la reputación del artista urbano”. “En todo caso,
mantenemos abierta la puerta a explorar vías de colaboración tanto con el
Ayuntamiento de Santa Pola como con este artista urbano”, añadieron desde la
empresa. Al unir ambas iconografías, Sam3 denuncia la violencia contra los
toros que se ejerce en la tauromaquia, al tiempo que hace un homenaje a esta
obra del pintor malagueño.
El humor de esta semana en la
prensa: Forges, El Roto, Peridis, Vergara, Manel F., Eneko, Ferrán, Pat…
Pep Roig, desde Mallorca: Pastel
de la derecha, pastel de la izquierda, Firmes, Un minuto de silencio, Insuficiente, Acomodo, Garantía laboral,
Solidaridaridaridu…
LATE MOTIV - Monólogo de Andreu Buenafuente. "Cuestión de liderazgo" | #LateMotiv240 Late
El Toro y La Luna (Taburete Edit) Taburete
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