Vínculos de la Monarquía con la corrupción.

El líder de Podemos, Pablo Iglesias, abogó hace dos días en el Congreso por suprimir el aforamiento del Rey Juan Carlos y otros privilegios de la familia real, que cree que se han visto demostrados con el caso Nóos al haber quedado claros los “vínculos” de la Monarquía con “la corrupción”. Iglesias se pronunció así sobre la condena a cinco años de prisión dictada por el Tribunal Supremo para Iñaki Urdangarin, quien en su opinión “no hubiera podido cometer esos delitos si no hubiera sido el yerno del Rey”.

Asimismo, abogó por replantearse “si tiene sentido en la España democrática que sigan existiendo los privilegios de los que goza la Monarquía” después de que fiscales y jueces coincidan en que el rey Juan Carlos I hubiera sido llamado a declarar al menos como testigo, si no hubiera tenido la condición de aforado. Por eso, cree que el aforamiento del Rey no tiene sentido, y que si tiene que declarar “como imputado o testigo” su condición de monarca “no le debe permitir disfrutar de privilegios” de los que no gozan el resto de los ciudadanos.

Iglesias no quiso adelantar si Unidos Podemos presentará alguna iniciativa parlamentaria en ese sentido, pero dijo que lo valorarán “en su momento” y criticó que la Monarquía haya servido como pantalla a “comportamientos corruptos”. “Quizá la Monarquía sea una rémora del pasado de una institución asociada a la corrupción que la España democrática y del futuro no se puede permitir”, enfatizó. Iglesias cree que “hacen falta valores republicanos que den también dignidad al sistema de Justicia”