Nadia Otmani, una mujer en silla de ruedas, se enfrentó a Vox.

Anteayer, el Ayuntamiento de Madrid celebró un acto contra la violencia de género con motivo del Día contra la Violencia Machista. En el mismo, intervino el portavoz de Vox en el Consistorio, Javier Ortega Smith, y, frente a sus duras palabras, numerosas mujeres abandonaron el salón de actos de Cibeles después de que volviera a negar la existencia de la violencia de género.  Ortega Smith calificó de “chiringuitos” a las asociaciones que se encargan de acompañar, ayudar, apoyar y asesorar a las víctimas de la violencia machista. Además, llamó a “romper el silencio negacionista” y fue abucheado durante su intervención en la que arremetió contra las Mujeres e instó a los demás partidos a “romper de una vez por todas el consenso del silencio negacionista”. Tanto desde los grupos políticos como entre los asistentes al acto se criticó su postura.

Al terminar su violento discurso, Nadia Otmani, quien, en 1998, auxilió a su hermana, recibiendo varios disparos de su cuñado que la dejaron en silla de ruedas y, en 2002, fundara la asociación de mujeres, Al Amal después de salir del hospital de parapléjicos, se enfrentó a Smith. Y, ante su discurso de odio, no pudo reprimir su dolor y rabia tras las palabras del portavoz de Vox y le increpó, gritando entre lágrimas “No se hace política con eso. Respeto para las muertas”. Ortega Smith no miró ni un segundo a la cara de su increpante, ignorándola. No quiso saber que Nadia había recibido tres disparos por parte de su cuñado cuando trató de defender a su hermana. Ni que, tras el ataque, que afectó a la médula, había quedado en una silla de ruedas de por vida. El alcalde Martínez-Almeida le recriminó: “Me gustaría que hubieras tenido una sola palabra de recuerdo a las 52 mujeres asesinadas… Tu no has hecho política. Has hecho politiquería”.

Nadie lleva años trabajando en cualquier rincón de España. Un día después de lo ocurrido en el Ayuntamiento de Madrid, lamentaba lo ocurrido y afeaba a Ortega Smith que acusara a los colectivos de mujeres de recibir ayudas que no merecen. “Yo llevo años trabajando y no cobro un duro. Y él, ¿qué hace? ¿Cobrar de nuestros impuestos?”, se preguntaba. Otmani explicó a Europa Press que su asociación, junto con el Movimiento contra la Intolerancia y otros colectivos de mujeres, está estudiando tomar acciones legales contra el secretario general de Vox, aunque no ha detallado ante qué instancias. “Lo estamos mirando”, remachó.

David Bollero, en su artículo “Miserable Almeida”, retrata perfectamente al alcalde gracias a Vox: “Smith quiso reventar el día… y Nadia Otmani le reventó en su cara acobardada su mezquindad. El portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Madrid cumplió con las expectativas; el alcalde José Luis Martínez Almeida (PP) también, por mucho que quisiera maquillarlo abroncando al edil de extrema-derecha. Martínez Almeida no engaña a nadie. Es miserable. Sus reproches impostados a Ortega Smith por haber negado la violencia machista son humo. ¿Acaso le sorprende? ¿De veras le coge por sorpresa que quienes han venido pisoteando los Derechos Humanos más esenciales ahora quieran hacerse publicidad reventando actos contra el terrorismo machista? No, alcalde, no”. 

 Tensión tras el discurso de Ortega Smith en un acto contra la violencia de género