Amenzing.com se lo
preguntaba a la joven sueca cuando llegaba a Lisboa en barco, tras más de dos
semanas de travesía por el Océano Atlántico, y los medios de comunicación ya
están frotándose las manos porque Greta es una mina de tráfico digital por
ambos lados del espectro ideológico.
“Lo más chocante -comentaba
la
web gay española - está siendo la insistencia en que están teniendo en criticar
abiertamente a la joven sueca algunos comunicadores como Carlos Herrera que
incluso ha llegado a llamarla “perturbada”. Frank de la Jungla ha hecho un
vídeo en el que ridiculiza la figura de Greta Thunberg y la llama ‘Gretus
Amargatus’. Ana Rosa Quintana, por su parte, comenta en tono jocoso que el
barco en el que estaba llegando a Lisboa usaba combustible para luego ponerse
seria y decir que está a favor de la cumbre, pero en contra de “la utilización
de esta niña”. Y este es el argumento más usado por este grupo de comunicadores
que incluye también a Federico Jiménez Losantos que directamente dijo “está
loca”.
“Parece que se les olvida
que se trata de una menor de edad, una niña de tan solo 16 años. Es entendible
que les pueda caer mejor o peor, pero ¿por qué este lenguaje dirigido a una
niña que lo único que hace es explicar sus argumentos e ideología sobre el
cambio climático? En el caso de que esté siendo utilizada por poderes
económicos, como ellos dicen, ¿sería culpa de la niña? ¿Se merece este tipo de
trato? Y, por otro lado, el cambio climático ¿es el nuevo nazismo o qué pasa?
Porque se está hablando de reducir emisiones y tratar de conseguir un
ecosistema sostenible, no de quemar iglesias ni de matar a bebés.
“¿Por qué no critican a
la Infanta Leonor? Los mismos que llaman a Greta “perturbada”, “loca”, “utilizada”
o “amargada” no parecen tener ningún problema con que la Infanta Leonor de 14
años desempeñe sus labores como Infanta y hasta donde sabemos, la finalidad de
los trabajos de la Infanta es perpetuar la institución de la Monarquía (que no
vamos a entrar en el debate de Monarquía sí o no) por lo que se podría
interpretar que técnicamente cumple las mismas características que Greta. Y,
por ejemplo, han criticado que Greta se siente en un sillón de 6.000 euros,
pero no critican que Leonor viva en un palacio y forme parte de una institución
que tiene un coste de mantenimiento de varios millones de euros al año”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario