José Antonio Ruiz, gerente de Librería Luces, Málaga.
La editorial Anagrama se
ha propuesto visibilizar la labor de las librerías independientes durante el
confinamiento con una serie de entrevistas hechas para la ocasión. Y comienza
con José Antonio, de la librería Luces, en Málaga, quien manda el siguiente mensaje
a los lectores: “La lectura es como un remedio contra la desesperanza, un
antídoto contra la hipnosis de las pantallas, un superalimento para tiempos
modernos. Sinceramente, creo que nunca se ha leído tanto como en este periodo. El
libro ha salido reforzado y las librerías tenemos que estar ahí. El estado de
alarma nos permite atender a nuestros clientes por teléfono y a través de
nuestro sitio en internetwww.librerialuces. com. Y hacerlo de la misma manera
que lo hacen el resto de tenderos, repartiendo nosotros mismos los pedidos más
cercanos y enviando por agencia aquellos que no podemos atender siempre con
ilusión, amabilidad y agradecimiento de que llamen a nuestra puerta. Creo que
nos tenemos que plantear de forma muy seria que este tipo de 'estado' en el que
vivimos se va a volver a producir de forma intermitente y se acabará la excusa
de 'no estábamos preparados'. Esto no acabará cuando se levante la cuarentena. Los
libreros tenemos que tener claro qué hacer la próxima vez. Habrá que preparar a
nuestro personal, cambiar nuestra manera de comunicar, la logística de envíos,
nuestras alianzas con editores y distribuidores, incluso con otras librerías
para que no haya repercusión en las ventas”.
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