Decepción por el paseo de
Bruselas en la cumbre de la OTAN entre los presidentes español y norteamericano.
El paseo de los presidentes de Estados Unidos y España, Joe Biden y Pedro
Sánchez, no fue lo que éste esperaba. La administración norteamericana cambió a
última hora el guion del encuentro que tenía pactado con el Gobierno español.
El acuerdo al que llegaron los equipos de ambos mandatarios era “una reunión de
diez minutos”, en la que Sánchez y Biden harían públicos tres o cuatro mensajes
sobre el buen estado de las relaciones entre ambos países, un análisis de los
retos pendientes y el deseo compartido de una fructífera cooperación.
Así lo habían pactado el
secretario de Estado, Anthony Blinken, y la ministra de Asuntos Exteriores
Arancha González Laya, en su conversación telefónica de la semana pasada. Pero
la reunión ni siquiera figuró en la agenda de Biden distribuida por la Casa
Blanca. Y los diez minutos de cara a cara se convirtieron en unos segundos de
conversación en el pasillo. Algunas fuentes sostienen que los motivos del
cambio pueden deberse a la agenda excesivamente cargada del presidente norteamericano
en Bruselas. “Ambos querían saludarse, conocerse personalmente y establecer un
primer contacto”, dijo la Secretaría de Estado de Comunicación. “Entre otras
cosas, se había acordado su saludo, captado por las cámaras como prueba de la
excelente relación entre ambos países”.
El encuentro apenas duró
unos segundos, según las imágenes de televisión. Sánchez explicó que había
hablado con Biden del acuerdo militar entre los dos países y éste le felicitó
por su “agenda progresista”. Sin embargo, la decepción por lo ocurrido fue
evidente y los más veteranos no dudaron en calificar de “feo el gesto del
presidente norteamericano. Fueron apenas 20 segundos que Moncloa vendió como
una “breve conversación” tras la foto de familia, pero que fue bochorno por la “torpeza
diplomática” de aceptar este formato para el primer contacto entre ambos
mandatarios desde las elecciones de EEUU. “El problema es que se había vendido
otra cosa muy diferente a lo del pasillo y que no hay margen para explicarlo”,
dicen algunas fuentes.
El portavoz nacional del
PP y alcalde de Madrid calificó de “drama de verdad” el encuentro el presidente
del Gobierno de España y el de Estados Unidos, un encuentro de “29 segundos”
entre el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, y el presidente de
los Estados Unidos, Joe Biden. Almeida puso en valor que España fuera “la
cuarta economía del euro, quien tiene el protagonismo de Iberoamérica”, y que “al
margen de risas y chanzas, puede hacer perderlo todo”. No obstante, la Agencia
Efe dice que Pedro Sánchez y su homólogo estadounidense, Joe Biden, tuvieron, “una
conversación por separado” antes del inicio de la cumbre de la OTAN. Un
funcionario de la residencia oficial, principal centro de trabajo de Joe Biden,
habría confirmado que tanto Sánchez como el presidente de Estados Unidos habían
hablado minutos antes de acudir a la cumbre de la OTAN. Y ministra de
Exteriores, Arancha González Laya, explicó a la Cadena SER, que hubo un
acercamiento de unos 30 minutos que se produjo “fuera de cámaras y antes de
hacerse la foto de familia”. “Hablaron y, luego, fueron en un pasillo mientras
se acercaban a la sala donde iba a tener lugar la cumbre”.
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