El adelanto electoral en Castilla y León se resolvió con el ascenso de la ultraderecha de Vox, del que ahora el PP de Mañueco necesita para formar Gobierno, pese a que, en campaña, se negara incluso a contemplar la posibilidad. Si Mañueco no acepta sus exigencias que, de momento, son la vicepresidencia, el PP tendría que lograr un acuerdo con el PSOE o convocar unas nuevas elecciones. En cualquier caso, el resultado del domingo provocó una gran preocupación por el ascenso de la ultraderecha, que, de un procurador, pasó a contar con 13, y por la posibilidad de que pase a formar parte del Gobierno de Castilla y León, algo que no sucede en otros países europeos. Tres días después, el PP, que lleva meses en una lucha interna entre su presidente nacional y su presidenta de la comunidad madrileña, explotaba con una lucha a muerte. Otros ponían el punto de mira en los medios de comunicación. El pasado miércoles Juanlu Sánchez nos recordaba en “Al día” este Triangular: “PP, Vox y PSOE están jugando un torneo triangular de táctica política para salir lo mejor posible del trance (desagradable para todos salvo para Vox) de los resultados de Castilla y León. Por un lado, el PP juega con Vox a amenazar con otra repetición electoral si sus exigencias son demasiado altas. A la vez, pide al PSOE que se abstenga si tanto desea evitar un Gobierno con Vox. En el PSOE, mientras tanto, el martes estuvieron más lúcidos que el lunes. En lugar de rechazar de plano la idea del cordón sanitario, Pedro Sánchez dijo que estaba dispuesto a permitir que gobernase Mañueco, si el PP vetaba a Vox, pero no en Castilla y León sino en toda España, claro. Que un veto es un veto, no un truco a conveniencia…. Otro efecto secundario para el PP de este adelanto electoral es que da nueva munición a la izquierda para las campañas de Andalucía, de Comunidad Valenciana y en las que estén por venir. Si se confirma el pacto del PP y de Vox, esa alianza servirá para movilizar el voto progresista para evitar que se repita. En Andalucía, el PSOE ya diseña su precampaña por ahí”. Abreviando, una semana después de las elecciones, la situación en Castilla y León sigue sin estar muy clara, aunque las únicas opciones posibles son el pacto entre PP y PSOE o PP y Vox; pero ninguno está dispuesto a ceder. Los de Santiago Abascal tienen claro que quieren entrar en el Gobierno de Castilla y León y el dirigente del partido insinuó la “cara de vicepresidente” que se le estaba poniendo a su candidato, Juan García-Gallardo, en una petición nada disimulada. Pero ¿hasta dónde está cada uno dispuesto a ceder?
La guerra entre la dirección nacional del PP y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, estalló la noche del miércoles con toda su virulencia a cuenta de un supuesto espionaje a la dirigente autonómica encargado por colaboradores de Pablo Casado en el Ayuntamiento de Madrid el pasado mes de diciembre. Díaz Ayuso, confirmaba que Génova la estaba investigando por un supuesto contrato irregular que beneficiaba a su hermano. Y, en una comparecencia ante los medios de comunicación sin preguntas, arremetía duramente el jueves contra el Partido Popular, su propio partido, y el presidente nacional Pablo Casado. “Nunca pensé –afirmó– que la dirección nacional de mi partido iba a actuar de forma tan cruel contra mí”. En las informaciones se revelaba una guerra total que incluía espionaje, corrupción y la familia de la presidenta. “No puede haber nada más grave que acusar a alguien de la propia casa, con responsabilidades de gobierno, de corrupción. Y hacerlo sin pruebas metiendo por medio a mi familia, que nada tiene que ver con política. La familia es lo más importante que tenemos”, señalaba la presidenta autonómica. “Como saben, desde hace unos meses, distintos medios de comunicación han venido denunciando que dirigentes del Partido Popular estaban creando un dosier contra mí, vinculándome a algún asunto de corrupción, especialmente, referido a mi familia”. En este sentido, insistía en que, si los dirigentes del PP querían aclarar algún contrato, “solo tenían que pedirlo”, porque todos estaban, según ella, en el Portal de Transparencia. Para ella intención de Génova era desprestigiarla personal y políticamente. La presidenta animaba a demostrar con pruebas este supuesto beneficio para su familiar. Ayuso destacaba que “no tendrá nadie una sola prueba de corrupción por mi parte, ni una sola prueba” y que siempre había sido leal a su “casa”, al PP y a la dirección nacional. “Si hubiera querido atacar a mi partido, habría contado todo lo que sabía hace meses. Pero no lo hice”. Y pidió que se depurasen responsabilidades tanto en Génova como en el PP de Madrid. “Espero que la dirección nacional del PP pruebe que ha habido tráfico de influencias o un solo contrato irregular. Y que se demuestre que yo no soy honrada”. Por último, ponía en valor sus resultados electorales, con ataques a Casado y el secretario general Teo García Ega. “He devuelto mi compromiso con Pablo Casado pasando de los 22 escaños que nos daban las encuestas en enero de 2019 a la mayoría absoluta que, estoy convencida, tenemos hoy. No cabe mayor ejemplo de lealtad a mi casa. Quisiera saber cuántos votos han conseguido para el Partido Popular todos aquellos que llevan meses dedicados a atacarme a mí. Es muy doloroso que dirigentes de tu partido, en lugar de respaldarte, sean quienes te quieren destruir”.
Dos horas más tarde, Teodoro García Egea escenificaba la ruptura total entre Génova y Díaz Ayuso. Acusó a la presidenta de la Comunidad de Madrid de emprender “una campaña masiva de ataques, infundios y calumnias” contra la cúpula nacional del partido y anunciaba que se abriría un expediente informativo “para culminar las investigaciones que se han llevado a cabo”. Según su versión, en septiembre del año pasado la Dirección General del PP recibió información sobre “un presunto cobro de comisiones relativas a un contrato sanitario de la Comunidad de Madrid en beneficio del entorno de Isabel Díaz Ayuso”. Se trataba del hermano de la presidenta madrileña, aunque García Egea evitó mencionar este lazo familiar. A finales de verano “Casado convocó a Ayuso a su despacho a una reunión para ponerle en conocimiento de los hechos”. Un encuentro en el que, según Génova, la líder del PP se comprometió con el dirigente de su partido a hacer sus propias averiguaciones y mantenerle al tanto. Un mes más tarde del encuentro entre Casado y Ayuso, el 20 de octubre, es García Egea quien se reúne con la presidenta para informarla personalmente de que el partido investigaba este cobro de comisiones y pedirle explicaciones. “Mi obligación estatutaria era cerciorarme de la verdad, como he hecho siempre”, defendió Teodoro García Egea, asegurando que “en todo momento” hice partícipe a Ayuso de estas investigaciones. Y desmentía “de forma tajante” que el PP contactase con un detective para investigar al entorno de Ayuso, negando también la elaboración de ningún dossier sobre la presidenta de la Comunidad. Confirmó que los servicios jurídicos estudian acciones legales contra la líder madrileña por las acusaciones vertidas este jueves contra Pablo Casado, que Egea tachó de “gravísimas y casi delictivas”. Y avanzó que se abriría un expediente informativo “para culminar las investigaciones que se han llevado a cabo” en torno al cobro de comisiones por parte del hermano de Díaz Ayuso. Finalmente, señaló que el PP se reservaba “las acciones oportunas” contra la presidenta de la Comunidad de Madrid hasta conocer el resultado del expediente.
“Esto es la guerra”, titulaba el mismo jueves Juanlu Sánchez. “Puede que estemos ante una noticia de no retorno para el Partido Popular. Hoy sabemos que altos cargos del partido, de la confianza de Pablo Casado, contactaron con detectives privados para encargar una investigación secreta contra Isabel Díaz Ayuso. El hilo del que estos investigadores debían tirar era el de una noticia publicada en noviembre por elDiario.es: la adjudicación a dedo de un contrato por 1,5 millones a una empresa de mascarillas de un empresario amigo de Ayuso. Según ‘El Mundo’ y ‘El Confidencial’, en el punto de mira estaría el hermano de la presidenta, en el intento por parte de Génova de encontrar munición que aplacase las aspiraciones nacionales de la líder madrileña. El Mundo dice que el encargo no llegó a formalizarse. El PP asegura que es todo falso. Lo que traerá consecuencias. Mientras tanto, Vox y PP siguen bailando. Pablo Casado ha decidido dar su perfil más elevado y moderado en el arranque del baile con Vox que ahora comienza para formar Gobierno en Castilla y León. Fue crítico con la formación de ultraderecha, marcó diferencias y casi que le cerró la puerta a los de Abascal para entrar en el Gobierno de Mañueco con una vicepresidencia. Pero Casado también dijo ‘nuestros límites son nuestros principios’. ¿Es un mensaje sincero? ¿O es solo un postureo para hacerse valer en la negociación y de camino ir preparando el relato de que pactaron con Vox porque no tuvieron más remedio? Pues a lo mejor nos sirve la pista que nos ha dado el portavoz nacional de su partido, Martínez Almeida, que ha dicho que el problema no es pactar con Vox sino la izquierda y Bildu y todo lo demás. Ayuso dice lo mismo y Mañueco no se quiere arriesgar a una repetición electoral. Es todo, esto y lo del cordón sanitario, como explica Ugarte, una gran ficción”.
El equipo de Isabel Díaz Ayuso esperó a que pasaran las elecciones autonómicas para sacar a la luz, a través de filtraciones a “El Mundo” y “El Confidencial”, que sus compañeros de Génova encargaron a detectives privados investigar su entorno más próximo, el círculo de la propia presidenta madrileña. Según estas informaciones, la dirección del PP, comandada por Casado, operó a través de Ángel Carromero, director general de Coordinación del alcalde José Luis Martínez-Almeida y portavoz nacional del PP. Carromero mantendría, de este modo, línea directa con el propio Casado y con el secretario general popular, Teodoro García Egea. “Los resultados de Castilla y León –‘según cuenta Sato Díaz en Público– han abierto un cisma en el PP que profundiza en la crónica pelea entre Casado y Ayuso, entre la dirección nacional y la madrileña. Alfonso Fernández Mañueco necesita de Vox para gobernar. Casado, sin embargo, evita pronunciarse a favor de compartir sus gobiernos con los de Santiago Abascal. La Unión Europea mira con preocupación a Valladolid: el partido de la oposición podría cogobernar con la ultraderecha nacionalista (antieuropea en algunas latitudes orientales)”. “Guerra en el PP por la presunta investigación de Génova para perjudicar a Isabel Díaz Ayuso” titula Eva Cifuentes en Diariocrítico. “La calma tensa entre Ayuso y Casado ha llegó a su fin después de una presunta investigación de Génova a la presidenta madrileña con la intención de perjudicarla. Según publican ambos diarios, varios altos cargos de la dirección nacional del PP realizaron una investigación a Ayuso y a su hermano para obtener información sobre los contratos sanitarios adjudicados desde la Comunidad de Madrid. La investigación, indican, se ha encargado desde la Empresa Municipal de Vivienda. En concreto, los dirigentes implicados querían corroborar si la CAM adjudicó a dedo un contrato de 1,5 millones de euros para la compra de material sanitario a un empresario que es amigo de la presidenta y de su hermano, algo que publicaba 'eldiario.es', en noviembre de 2021, y si el hermano de Ayuso cobró comisiones en su intermediación. Ángel Carromero sería uno de los implicados en esta trama, el actual director de Coordinación del alcalde madrileño y muy próximo a Teodoro García Egea y de gran confianza de Pablo Casado. ‘Finalmente, el PP no llegó a llevar a cabo el plan, aunque sí contactaron con varias agencias de detectives, pero costaba dinero y era difícil garantizar el anonimato, precisó el jefe de investigación del citado medio en RTVE’. Génova niega el intento de espionaje y acusa al jefe de gabinete de Ayuso, Miguel Ángel Rodríguez. Tras conocerse estas informaciones, el partido emitió un comunicado en el negó ‘tajantemente’ los hechos y advirtió ‘tomar las medidas judiciales oportunas ante estas falsedades’. Detrás de las acusaciones a la dirección nacional del partido se encontraba el jefe de gabinete de la presidenta, Miguel Ángel Rodríguez. La noticia generó todo un terremoto interno y el partido canceló varios actos previstos para este jueves”.
En esta guerra del PP ya
solo puede quedar uno, o ninguno de los dos, porque nadie va a renunciar a sus
cuchillos. “Es un truco de manual –apunta Ignacio
Escolare director de Eldiario.es–. La única manera de tapar una noticia es con
otra aún mayor. Es eso lo que este jueves ocurrió, en una maniobra a tumba
abierta por parte de la presidenta madrileña y su equipo de comunicación.
Isabel Díaz Ayuso y Miguel Ángel Rodríguez (MAR) incendiaron con gasolina el
Partido Popular para así esconder, en esa gigantesca humareda, la verdadera
noticia, la que temían y querían ocultar. Del caso Cifuentes y de ese máster
fraudulento que destapó elDiario.es muchos políticos aprendieron una lección:
cuando estalla una crisis realmente grave, refúgiate en la trinchera que mejor
puedas defender, aunque cedas mucho terreno. Mejor eso que cambiar ocho veces
de refugio y de versión. Y es lo que hizo este jueves Díaz Ayuso. En una jugada
sin duda diseñada con anterioridad. Fue una voladura controlada de un escándalo
de presunta corrupción que, más tarde o más temprano, la presidenta de Madrid
sabía que iba a explotar. El de los negocios de su hermanísimo, Tomás Díaz
Ayuso. Y, en concreto, la pasta que supuestamente se llevó por ese contrato a
dedo para comprar mascarillas por valor de 1,5 millones de euros, que la
Comunidad de Madrid adjudicó a un empresario amigo, del mismo pueblo”. Después
de la corrupción vine el fascismo. Escondida en el discurso de Ayuso –sin
preguntas de la prensa– está la clave de esta operación. Que tiene poco que ver
con sus acusaciones contra Pablo Casado, sus críticas a Teodoro García Egea o
ese disfraz de víctima de una conspiración. No todos los días un partido
estalla así y se parte en dos. Pero lo importante no fue solo esa guerra, de
consecuencias profundas, aunque hoy difíciles de pronosticar. Eso fue el
incendio necesario para esconder la noticia que realmente podría acabar con
Díaz Ayuso, la noticia que quería blanquear”.
“En principio –comenta Antonio Avendaño en Elplural.com, bajo el titular ‘Duelo al sol en el PP: solo puede quedar uno (o una)–, se diría que, en esta partida mortal, Pablo Casado cuenta con mejores cartas, pues no en vano controla el aparato y la maquinaria del partido. Ahora bien, el mayor peligro que hoy ronda sobre Pablo Casado se llama Pablo Casado: su empeño en impedir que Ayuso ocupe el cargo de presidenta del partido en Madrid habiendo obtenido los espectaculares resultados electorales que obtuvo en mayo pasado evidencia que el presidente del PP es un líder alarmantemente inmaduro, inseguro y débil. Y con no muy buenas dotes de estratega: forzar la convocatoria de elecciones en Castilla y León ha sido un error de principiante deslumbrado por el traicionero fulgor de un puñado de encuestas cargadas por el diablo. Si el 13-F lo ha debilitado, el 17-F lo ha dejado al borde del coma. Aunque formalmente Casado gane su guerra contra Ayuso, que no está nada claro que lo consiga, materialmente ya la ha perdido. Ciertamente, solo puede quedar uno (o una), pero el que quede tendrá muchas dificultades para explicar a los perplejos militantes y votantes del Partido Popular a cuenta de qué venía esta maldita guerra que ha abierto a la organización en canal, ha multiplicado las expectativas electorales de Vox y ha regalado a los socialistas madrileños unas horas de felicidad como no habían disfrutado desde hace años”.
El viernes tuvo lugar un indicio de incendio en la sede de la Comunidad de Madrid, la Real Sede de Correos, ubicada en la Puerta del Sol. Por suerte, el incidente no pasó a mayores y los bomberos aclararon a los periodistas que se trata de un problema de condensación de vapor derivado de las calderas (de ahí que solo se viera humo blanco). Sin embargo, las redes, como suele ser habitual, no perdieron la oportunidad de hacer algún chascarrillo relacionado con la situación que en las últimas horas atraviesa el PP. Así, por ejemplo, la revista CTXT informó de ello a través de Twitter haciendo la siguiente pregunta, repetida asimismo entre los usuarios: “¿Quema de documentos o fumata blanca?”. El suceso fue absolutamente accidental y nada tuvo que ver con la guerra civil declarada dentro de la formación de Casado, pero los memes no dejaron de proliferar en pocos minutos con imágenes e, incluso, hubo quienes tiraron de latín.
Pero volvamos al terreno que habíamos apuntado al principio. Eva Cifuentes, redactora de Diariocrítico, advertía el martes que la situación post electoral en Castilla y León sigue sin estar muy clara, “pues, aunque las únicas opciones posibles (matemáticamente hablando) son el pacto entre PP y PSOE o PP y Vox, ninguno está dispuesto a ceder. Alfonso Fernández Mañueco se muestra abierto a todas las opciones, incluso a una gran coalición con el PSOE, pero los socialistas rechazaron esta idea para poner a los populares contra las cuerdas y obligarles a desenmascarar su postura ante Vox. Los de Santiago Abascal tienen claro que quieren entrar en el Gobierno de Castilla y León y el dirigente del partido insinuó la ‘cara de vicepresidente’ que se le estaba poniendo Juan García-Gallardo, en una petición nada disimulada. Una declaración de intenciones de Vox sobre el papel, matizada por Abascal en una entrevista en 'EsRadio' quien, en los micrófonos, advertía al PP de que, si siguen con el ‘chantaje’ a su formación, van directos hacia la repetición electoral. Recordó que durante toda la campaña había insistido en que no iban a dar ‘gratis’ los votos de Vox al PP y que su partido no apoyará la investidura de Mañueco sin un papel relevante en la Junta. Defendió que su formación tenía ‘el deber y el derecho’ de formar Gobierno gracias a sus 14 procuradores y resaltó que sus procuradores ‘no son más que los de Ciudadanos, ni tampoco menos’, en referencia al Ejecutivo anterior de la comunidad en la que el partido naranja entró a formar parte de él junto con el PP”. El líder del PP de Castilla y León abogó ante los medios por gobernar en solitario sin necesidad de una coalición, una opción que consideró ‘débil’. Y recordó que su objetivo era liderar la región en solitario con apoyos puntuales para dar paso a un gobierno ‘fuerte’, con ‘las ideas claras’ y ‘sin medias tintas’.
Y mientras el PP se desangra cada vez más, Vox califica al PP de “jaula de grillos” por las denuncias de espionaje y asegura que le pasará factura en la negociación en Castilla y León. Aitor Riveiro informa en Eldiario.es sobre el estallido de la guerra interna en el PP, con acusaciones de espionaje desde la dirección nacional a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y de adjudicaciones irregulares de contratos públicos a un amigo de la propia Ayuso. “Así lo aseguran fuentes de Vox en el Congreso de los Diputados. Las mismas fuentes señalan que ya ha habido contactos en Castilla y León y que sus líneas rojas son dos: entrar en el Gobierno autonómico y tener en él un peso similar al que tuvo Ciudadanos en la anterior legislatura. Vox exigirá, de entrada, la Presidencia de las Cortes, de la misma forma que Ciudadanos la logró en 2019. En el partido ultra aseguran que tienen miedo a repetición electoral, e ironizan con que José María Aznar pida no pactar con ellos, mientras Rajoy dice que sí hay que hacerlo”.
¿Pero quién es Juan García-Gallardo que ha obtenido un histórico resultado para la formación ultraderechista? Un abogado de formación, con varios másteres, un gran aficionado a la hípica, un personaje con continuas salidas de tono en Twitter. “Me parece una gran idea recuperar a Raúl para la Eurocopa. Hay que heterosexualizar ese deporte repleto de maricones”, esgrime García-Gallardo en su cuenta de Twitter, una auténtica mina de exabruptos ultras que tuvo a bien borrar al poco de conocer su candidatura para los comicios. Pero vayamos por partes. Entendamos quién se esconde tras ese reguero de regüeldos ideológicos vertidos en Twitter a lo largo de los últimos años. “Público” nos muestra sus descubrimientos: “De origen burgalés, García-Gallardo es hijo de un prestigioso penalista del que heredó, por cierto, tanto su nombre como su oficio. Se formó en la ya mencionada Universidad Pontificia de Comillas, donde se graduó en Derecho con diploma en International Legal Studies, y donde cursó, además, el doble máster de Acceso a la Abogacía y Derecho de Empresa (Icade-Deusto). Gran aficionado a la hípica, disciplina de la que ha sido campeón de Castilla y León en numerosas ocasiones, en su currículum destaca su papel como defensor del que fuera presidente de las Cortes de Castilla y León, José Manuel Fernández Santiago, cuando fue llamado a declarar por el Tribunal Superior por delitos de prevaricación y cohecho en la trama Gürtel. En paralelo a su exigua trayectoria profesional, Juan García-Gallardo tuvo a bien convertir su timeline de Twitter en una oda a las ideas ultra que propaga Abascal y los suyos desde sus respectivas tribunas. Con cierta fijación por la homosexualidad, los tuits de este joven abogado que podría acabar como vicepresidente de Castilla y León, no han pasado desapercibidos para muchos tuiteros que no han dudado en preservar la huella filofascista del joven García-Gallardo antes de ser lo que ahora es; el mirlo blanco de Vox en Castilla y León. En noviembre de 2020, contestaba a un tuit de la Comisión Europea y repetía uno de los mantras ideológicos de Vox, vinculando agresiones sexuales y violencias machistas con migración. Hola Comisión Europea, ¿decir que en España la mitad de los delitos de violencia de género los cometen inmigrantes, que son el 10% de la población, es un estereotipo racista? ¿O es una realidad que debemos solucionar?”. Otra perla de la hemeroteca es ver un vídeo recuperado recientemente por “El Informal” en el que un bisoño Juan García-Gallardo reivindica la figura de Mario Conde en octubre de 2011 y pone en duda los delitos por los que fue condenado en su día... En cierto modo, todos estos tuits conforman una suerte de biografía no autorizada del rostro de Vox en Castilla y León, un rostro que, si nos atenemos a sus comentarios en redes, está muy lejos de ser taimado y democrático.
El problema de Pablo
Casado con la ultraderecha no es moral, ni político. Es táctico, según Ignacio
Escolar en “El PP quiere evitar otra foto de Colón”. No quiere que Vox entre en el Gobierno de
Castilla y León porque sabe que eso sería otra foto de Colón, que podría
movilizar al votante progresista. “¿Hace falta un cordón sanitario para aislar
a Vox, al modo en que los partidos democráticos lo hacen en otros países de
Europa? Sí, sin duda. Y el debate que ha abierto el alcalde de Valladolid,
Óscar Puente, es pertinente y maneja argumentos interesantes. En algún momento
alguien tiene que poner pie en pared para frenar la espiral de polarización y
odio que vive España, para evitar este enorme deterioro democrático. Solo le
pongo un pero a sus argumentos: que esto no puede ser solo para Castilla y
León. Ni solo cuando le interese al PP, que dudo que le interese, en cualquier
caso. Los cordones sanitarios, tal y como funcionan en Europa, no son
puntuales, coyunturales o según convenga. Se aplican siempre o no se aplican
nunca. Por eso, la única manera para que el PSOE pueda abstenerse a la
investidura de Mañueco excluyendo a Vox es que este mismo criterio se aplique
para todos los demás gobiernos presentes y futuros: que el PP rompa sus pactos
con Vox y se comprometa a excluirlos a partir de No va a pasar. El PP jamás
aceptará un acuerdo así, porque saben que su única opción para recuperar La
Moncloa pasa por pactar con la ultraderecha. Ya lo confesó el propio Casado, en
una entrevista con Losantos, antes de las primeras elecciones de 2019: estaría
dispuesto a nombrar ministros de Vox si fuera necesario. Si el PP de Génova hoy
se resiste como puede a meter a Vox en el Gobierno de la Junta de Castilla y
León no es porque les repugne esa alianza por escrúpulos democráticos. O porque
crean que esa ultraderecha machista, racista, homófoba y contraria a las
libertades que consagra la Constitución española no debería entrar en las
instituciones. (…) El PP no va a cerrar la puerta a Vox, ni a comportarse como
lo hace la derecha francesa o alemana. Y ese cordón sanitario está condenado al
fracaso porque el PP no lo va a aceptar en ningún caso. No va a pasar, por
muchos aspavientos que haga Casado cuando tacha a Vox de “populistas”. Unos
populistas que son y serán sus principales aliados. Porque si Casado llega a
alcanzar La Moncloa, será con Abascal de vicepresidente”.
Otras imágenes, fotomontajes y fotos sorprendentes:
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Ayuso ve "preocupante" el resultado y pide
adelantar ya el congreso de Madrid
Sale a la LUZ una investigación interna del PP sobre
la adjudicación a dedo de 1,5 millones a un amigo de Ayuso.
El PP de Madrid acusa a Génova 13 de espionaje...
Lo más fuerte de todo esto es que, en las guerras
internas del PP, se sacan a la luz casos de corrupción para desgastar al rival
porque saben que los medios le quitan importancia y que su votante fiel les va
a seguir votando por mucho que delincan. Es que es un escándalo Y NO PASA NADA.
“Esta victoria de Vox en Castilla y León solo sirve para polarizar más la situación política española, que es lo que realmente me preocupa como ciudadano. Quizás sea el momento de recuperar el espíritu de la Transición, quizás todas las fuerzas democráticas deberían volver a hablar sin insultarse, empezando por el PSOE y el PP” (Jorge Bezares)
“Hay que adaptarse a la nueva cara, nueva piel, la aparición de nuevos surcos… Hay que dejar ir la juventud sin mortificarla con una edad que no te pertenece. Es necesario hacer la paz con el aliento más corto, con la lentitud después de los excesos, con las arrugas, con las arterias, con los cabellos blancos que de repente toman el lugar de los grillos en la cabeza... Hay que hacerse nuevos y amarse en una nueva era, reinventarse, seguir siendo curiosos, reír y cepillándose los dientes para hacerlos brillar como minúsculas cargas de pólvora. Hay que cultivar la ironía, acordarse de equivocar el camino, elegir con cuidado a otros humanos, alejarse del sí mismo, volver, cantar, estar desnudos con orgullo. Envejecer como si fuese vino perfumado y hacer disfrutar el paladar, sin que se uno se acostumbre a los bostezos. Hay que caminar recto, saber llevar las cadenas, hablar en otras lenguas, detestarse con moderación. No es fácil envejecer, pero la alternativa sería morir, y yo todavía tengo muchas cosas que aprender y vivir… (Palabras y silencios, de Susan Sarandon).
El humor, en la prensa de esta semana: Forges, El Roto, Peridis, Eneko, Enrique, Manel F. Vergara, El humor, en la prensa de esta semana: El Roto, Peridis, Eneko, Enrique, Malagón, Manel F., Vergara, J. R. Mora, Riky Blanco…
El humor mallorquín de Pep Roig:
Los vídeos de esta semana
GUERRA CASADO-AYUSO: FEIJÓO pide resolver con
"INTELIGENCIA" la situación sin "INCENDIOS" I RTVE
Guerra total en el PP: los dardos entre Ayuso y García
Egea en sus comparecencias
AYUSO vs CASADO | La Guerra del PP | Olvídame y pega
la vuelta (Pimpinela) | Teodoro García Egea
Casado acusa a Ayuso de "montaje" y asegura
tener la "conciencia tranquila"
¿Cómo ha obtenido Pablo Casado información personal y
privada del hermano de Díaz Ayuso?
Ayuso y Casado DECLARAN UNA GUERRA ABIERTA EN EL PP con espías, mordidas y Carromero.
Podría ser peor – Polònia.
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