Hasta ahora, quien
calumniaba o injuriaba “al Rey, a la Reina o a cualquiera de sus ascendientes o
descendientes, era castigado con la pena de prisión de 6 meses a 2 años “si la
calumnia o injuria eran graves”, y todo ello, a pesar de la condena de Estrasburgo
a España por imponer pena de cárcel por quemar una fotografía de los reyes en
2007. Finalmente, el pasado jueves, el PSOE, junto con Bildu, ERC y otros
partidos, aprobaron en el Congreso tramitar la reforma del Código Penal para
despenalizar las injurias al Rey, el ultraje a la bandera y los símbolos
nacionales. PP, Vox y Ciudadanos, presentaron textos alternativos para intentar
frenar esa iniciativa. Todos ellos fueron tumbados con los votos del PSOE,
Unidas Podemos, Más País y los partidos nacionalistas e independentistas, que facilitaron
que la reforma impulsada en el Senado por ERC y Bildu iniciase su tramitación
en el Congreso.
Los partidarios de la
reforma subrayaron que el Consejo de Europa y Naciones Unidas recomendaron
poner fin a estos delitos. Así, la socialista Andrea Fernández indicó que “modificar
estos tipos penales no tiene por qué generar indefensión”. La dirigente
socialista garantizó que su grupo “no va a permitir que el subtexto de esta
reforma se convierta en una afrenta al orden constitucional”. Enrique Santiago,
de Unidas Podemos, señaló que la tipificación de estos delitos en España causa “estupor”
en Europa”. Jon Iñarritu, de Bildu, hizo hincapié en que estos delitos están “obsoletos”
y sirven para proteger a “una institución que ya está superprotegida porque es
inviolable e irresponsable en todos sus actos”, un aspecto en el que incidió la
portavoz adjunta de ERC, Carolina Telechea. Y, desde la CUP, Albert Botran
denunció que es “una vergüenza democrática” que haya “cantantes encarcelados”
por canciones contra el Rey y recordó las causas contra Pablo Hasél o
'Valtonyc' y otros portavoces como Néstor Rego, del BNG.
Por su parte, el PP, Vox
y Ciudadanos echaron en cara al PSOE que, en ocasiones anteriores, rechazara
revisar estos delitos y le acusaron, junto con Foro Asturias y Navarra Suma, de
aceptar hacerlo ahora para contentar a sus socios independentistas que facilitan
la permanencia de Pedro Sánchez en La Moncloa. El PP defendió su texto
alternativo y su apuesta recabó el apoyo de Vox y Cs. El texto alternativo de
Ciudadanos, presentado por su portavoz adjunto, Edmundo Bal, planteó modificar
únicamente el artículo 490 de manera que las calumnias o injurias al Rey o a su
familia dejen de ser castigadas con cárcel y se penalice sólo con multas de 12
a 24 meses si la calumnia es grave o de seis a doce meses si no lo es. El PP
optó por abstenerse, mientras que Vox lo hizo en contra.
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