En realidad, no se trata de mi madre, sino de la de Mariano Momentos, a quien conocí hace unos años en un taller literario. Un amigo de los que quedan pocos, cuya madre, de 87 años, acaba de vivir, en una experiencia televisiva, el sueño de su vida. Porque María Antonia Almunia, una viuda con dos hijos ya mayores, ha triunfado apoteósicamente en Telecinco, en donde acudió a un riguroso casting, cantando zarzuela en el programa “Tú sí que vales”. Un suceso que a Mariano le ha parecido objetivamente especial, “con independencia de que, personalmente –reconoce– se haya tratado de la vivencia más emocionante de mi vida”.
“Bueno… pues resultó que mi madre ha tenido un éxito que yo calificaría de apoteósico –me cuenta Mariano– .Y fue sobre la base a todos estos méritos: cantó muy bien y con mucha potencia. Lo sintió, es decir, lo interpretó de manera insuperable. Exhibió una naturalidad y simpatía arrolladora. Si a esto se une que el público ya sabía (porque se lo había preguntado el jurado) que se trataba de una persona de 87 años, queda explicado por qué a la segunda estrofa de ‘La salida de Juan de los Gavilanes’, los 300 espectadores se pusieron en pie y aplaudieron atronadoramente gritando al unísono ‘Tú sí que vales’.
“Cuando esta noche, a las 22,45, en Telecinco –me advierte Mariano–, veas las caras de admiración de todos los miembros del jurado, mientras ella canta algo inenarrable, confirmarás que no te miento”. Mi amigo me recuerda que, al terminar la grabación, efectuada hace unas semanas en un estudio de la cadena en Barcelona, se levantaron los cinco miembros como por un resorte, aplaudiendo y gritando lo del TSQV. “El Moranco pequeño saltó al escenario y se arrodilló delante de ella; el Moranco alto la cogió por detrás, abrazándola, y no la soltaba. La jurada más seria, Noemi Galera (la de Operación Triunfo), estaba tan emocionada que no podía hablar y pidió a sus compañeros que hablaran por ella. El gafitas, o sea Ángel Llacer, hizo una oda muy emotiva sobre la ejemplaridad de mi madre. Y el público se lió a gritar: ‘¡¡Otra!! ¡¡Otra ¡!’. Mi madre les atendió y empezó a cantar la canción de ‘Escuela de Sirenas’ y, cuando entonó lo de ‘Muñequita linda de cabellos de oro’, el público no aguantó más y se volvió a levantar enfervorecido, a gritar otra vez TSQV. Mi madre les calmaba con la mano para poder acabar su canción y, cuando terminó, aquello era una olla a presión increíble.
“Loles León le preguntó donde había estudiado música y ella respondió que en ningún lado. Le preguntó si la próxima vez se atrevería a cantar con un pianista al lado, a lo que mi madre, que en ese momento desconozco en qué parte del Universo se hallaba flotando, respondió que ‘desde luego’. Al finalizar, bajó la rampa, cogida del brazo del Moranco bajo y del chico guapo del backstage y se dirigieron hacia mí, dándome la enhorabuena y preguntándome no me acuerdo muy bien qué, mientras a mi izquierda una cámara recogía la escena.
“Mientras mi madre actuaba, me habían colocado mirando a un monitor de TV, con una cámara a mi derecha filmando mis reacciones. Y, al finalizar todo, saqué la conclusión de que la televisión acababa de descubrir, al mismo tiempo, a la mejor cantante de edad y al tío más llorón de España. A partir de ahora, puede que mi madre acabe anunciando la jalea real y a mí me llamen para asistir a todos los entierros”.
María Antonia Almunia, había cumplido la ilusión de su vida, subirse a los escenarios para cantar lo que más le gusta: zarzuelas y boleros Mariano me contó cómo, a la mañana siguiente, a la salida del hotel, cantidad de concursantes quisieron hacer fotos con ella. “Nos grabaron, (creo que a nosotros exclusivamente) al bajarnos del AVE, al salir de la estación. Y pude apreciar cómo sus respuestas eran todas increíblemente comedidas y simpáticas, no diciendo ni una sola palabra fuera de lugar o tono”. Mariano se guarda otros detalles en la descripción de ese personaje en que se convirtió su madre. E intenta que, cuando califica de apoteósico su éxito, no le pierda la pasión de hijo.
Mariano me advierte que le acaban de llamar de Barcelona para comunicarle que, de los 30 concursantes que participan en cada programa, la mitad pasan a una final el 2 de diciembre, entre ellos “mi madre”. Esta noche, en Telecinco –es la tercera concursante del TSQV–, España entera podrá observar la actuación de esta mujer que siempre quiso ser artista y dedicarse al mundo de la escena. Porque hoy, a los 87 años, está dispuesta a demostrar lo que ella vale.
La mia con 73 dejó de cantar, asi que pondré Telecinco para ver y oir a esta señora.
ResponderEliminarchiflos
La "abuela zarzuela" como ya la llaman, es mi tia Maruja, y esa noche nos tuvo en vilo a toda la familia. Aunque ya sabíamos de su éxito (el programa se graba)me emocioné viéndola. En apenas unos minutos me recordó todo por lo que es tan querida y me dió ánimos para no darme por vencida nunca.No puedo ser objetiva pero creo que supo transmitir algo más que una buena voz...transmitió sentimientos, de esperanza, de cariño, de humildad...y eso sí que no se estudia en ningún sitio..
ResponderEliminarÁnimo tía, sigue así, que estamos todos contigo!!
Buscando la actuación de esta señora mayor he encontrado este blog.
ResponderEliminar¿Seria tan amable de decirme si existe una grabación de dicha actuación?
Si es posible y la incluye en su blog le estaré muy agradecida.
Existe, y mañana, domingo, la publicamos en este blog.
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