España, el país europeo con más Policías y Guardia Civiles.

Nuestro país es, según datos de Eurostat, la nación europea con mayor número de policías por habitante, 505 agentes por cada 100.000 habitantes. Según esa misma fuente, en Francia hay 390 policías; en el Reino Unido, 260; en Alemania, 299. Los países mediterráneos son los que más proporción de agentes de policía presentan: 462, en Portugal; 411, en Italia; 453, en Grecia, todos ellos muy por debajo de la cifra española. Nuestra proporción se acerca más a la de Turquía y Macedonia (484 agentes en ambos casos) y queda muy lejos de los países nórdicos, que oscilan entre los 156 agentes de Finlandia y los 206 de Suecia; Noruega tiene 159 y Dinamarca, 196. La cifra española sólo la superan países sacudidos por la guerra como Chipre y Kosovo (671 y 566 agentes, respectivamente) o con una larga tradición de omnipresencia estatal como Rusia, donde hay 546 policías por cada 100.000 ciudadanos. Por unidades, la más numerosa es la Guardia Civil: 84.000 números, desplegados por todo el territorio nacional. Le sigue el Cuerpo Nacional de Policía: 83.000 agentes.

En nuestro país hay, además, otras unidades con fuerte presencia. La policía autonómica catalana, los Mossos de Escuadra, supera  un total de 21.000 funcionarios. Lo que  representa una proporción de 280 mossos por cada 100.000 habitantes. En el País Vasco, la Ertzaintza acumula 8.000 efectivos (363 ertzainas por cada 100.000 habitantes), más las correspondientes unidades de Guardia Civil y policías diversas (nacional y municipal). Las policías autonómicas y municipales constituyen el 30%, aproximadamente del total de agentes de policía. En compensación, los sucesivos gobiernos españoles indican que España es el país de Europa con menor número de delitos. Concretamente, sólo 49 delitos por cada 1.000 habitantes. Pero España posee una de las mayores tasas de población reclusa en la Eurozona. Según datos de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, 70 centros penitenciarios albergan a 60.025 reclusos. Más los 10.500 presos de las cárceles de Cataluña, donde la comunidad autónoma tiene transferidas las competencias penitenciarias.

¿Quiere esto decir que España es uno de los países más seguros de Europa, con tanta policía y tan pocos delitos? Aparentemente, sí, pero los datos tienen una zona de sombra: la “cifra oscura”, los delitos que quedan sin denunciar, y, por tanto, es imposible evaluarlos con precisión. Desde hace años, hay instrumentos que intentan acercarse a esa realidad. Se trata de la Encuesta Internacional de Criminalidad y Victimización, un estudio estadístico que bucea tanto en la percepción de los ciudadanos como en los delitos no denunciados. Hay estudios parciales, pero no una Encuesta de rango nacional. Sin embargo, el Ministerio del Interior evalúa en un 14% la proporción de delitos que nadie denuncia. Por otra parte, la mucha presencia policial y el bajo (relativamente) número de delitos no van acompañados de una percepción general de seguridad. Es una polémica que reaparece episódicamente en los medios de comunicación y que generalmente va vinculada a la revisión de las plantillas policiales. A medida que la crisis va haciendo estragos en las finanzas públicas, las plantillas previstas para los cuerpos policiales se van reduciendo, particularmente en la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía. No hay dinero para pagar una renovación completa de las plantillas. Ahora mismo estamos en el 10%: por cada 100 funcionarios de seguridad que causan baja, sólo están entrando 10 nuevos. De seguir este ritmo, en el plazo de cinco años, España empezará a acercarse a la media europea en proporción de policías por cada cien mil habitantes. La pregunta es cómo afectará eso al número de delitos registrados en nuestro país.