Con estas palabras quiso Orestes
Barbero zanjar las habladurías sobre su estado anímico tras mantenerse 360 días
en Pasapalabra y ser derrotado el pasado 16 de marzo en 'El Rosco' frente a
Rafa Castaño, que se hizo con el histórico bote de 2.727.000 euros en Antena 3.
El burgalés se despidió del programa con un mensaje positivo y pidiendo a la
audiencia que no sintiese pena por él. Sin embargo, días
después una entrevista en Espejo Público de su excompañero y amigo, Luis
de Lama, afirmó verle “muy desanimado”, tras sufrir el varapalo.
Tras unos días sin apenas
actividad pública, Orestes reapareció en sus redes sociales para responder a
los mensajes recibidos de preocupación, y explicar que está tomándose un tiempo
para recolocar todas las piezas de su vida cotidiana y pasar página tras un año
y medio “de vorágine”. En un largo hilo publicado en su perfil oficial de
Twitter, comienza diciendo. “Me han llegado estos días bastantes mensajes de
preocupación y, aunque había decidido no manifestarme, he visto que lo más
adecuado es que precise esto para evitar confusiones. Me encuentro
perfectamente. Con mucha más alegría por la tranquilidad que progresivamente
iré recobrando y el trasfondo tan positivo que deja en conjunto haber vivido
una experiencia así de excepcional”. A continuación, añade: “Tras este año y
medio de vorágine, tomé la decisión perfectamente comprensible, de replegarme
de lleno en los trajines y alegrías de mi vida cotidiana, la real, con mis
planes, obligaciones y seres queridos irrepetibles. Entrando en esa decisión,
además, el pasar página completamente por una temporada después de esta etapa
hasta nueva orden o especiales, como es lo más sano. Por eso deseché toda
entrevista y declaración”, explica el burgalés.
Orestes Barbero critica
los titulares que han surgido a raíz de la entrevista de Luis de Lama y
desmiente encontrarse “derrumbado y devastado”, como se ha llegado a leer. “Es
absolutamente lamentable que, en lugar de respetar el silencio al que creo
tener derecho estas semanas, a falta de conceder declaraciones personales, me
encuentre con que haya tenido que caer en la bajeza de tergiversar unas frases
sueltas de una entrevista mucho más larga al gran Luis, colándolas como información
de primera mano y de esos mismos días indiscutiblemente fiable, satisfaciendo
la carencia de noticias por mi parte y creando para más inri una noticia
sensacionalista que asegurase la expansión de clickbait”.
“Es de todo menos cierto -zanja
el exconcursante- que me halle tan sumamente derrumbado y devastado, sino que
estoy con la resaca emocional consecuente, pero ante todo contento y
agradecido. Por ello, resulta tremendamente injusto que, encima, se acarree por
extensión a mi persona este halo de victimismo sin comerlo ni beberlo”.
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