Parte de la izquierda y
las fuerzas independentistas coincidieron el pasado martes en el juego de
pleitesía a la princesa Leonor en el Congreso, al negar la “legitimidad” de la
monarquía, dejando clara su postura. Ninguna de las dos ministras de Podemos, Irene
Montero o Ione Belarra, ni el de Izquierda Unida, Alberto Garzón, asistieron al
acto solemne de jura de la Constitución de Leonor en señal de protesta. Montero
declara que “el feminismo es el motor de la democracia, lo contrario de la
monarquía. El feminismo se basa en la idea de la igualdad radical entre las
personas y la monarquía en un privilegio de sangre. Monarquía y democracia,
monarquía y feminismo, son incompatibles. De hecho, la monarquía basa su
legitimidad en normas no democráticas y también machistas: ocupan la Jefatura
del Estado sin someterse a votación y según la Constitución debe heredar la
corona antes el hombre que la mujer. Si Leonor tuviera un hermano, no sería la
heredera”.
En esa misma línea, se
expresa la líder de Podemos, Belarra, según la cual la jura de la Constitución
por parte de la princesa Leonor busca perpetuar la monarquía mandando el
mensaje de que será reina: “Vamos a trabajar para que eso nunca pase”. La
secretaria general de la formación 'morada' critica también que se quiera hacer
un “lavado de cara feminista” de la monarquía argumentando que con la llegada
de una mujer la institución es más amable, un “error que hay que desmontar”. La
monarquía, recalca, “es la institución más antidemocrática” ya que se ostenta
el poder y la representación del país “por un hecho genético. No hay nada más
antagónico a la monarquía que el feminismo o la democracia”.
Igualmente, el ex
portavoz de Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, alaba el gesto de ambas
ministras. Y enumerado en 7 puntos la distancia entre Podemos y Sumar respecto
a temas tan importantes como este.
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