viernes, 7 de febrero de 2025

Bidafarma, la farmacéutica beneficiada en la que trabaja la mujer de Moreno Bonilla.

 

Juan Manuel Moreno Bonilla junto a Manuela Villena López, su esposa.

Desde que Juan Manuel Moreno Bonilla preside la Junta de Andalucía, la Sanidad pública está bajo la lupa de la Justicia. En los últimos meses, los tres últimos gerentes del Servicio Andaluz de Salud (SAS), fueron investigados por presunta corrupción en adjudicaciones que pudieron beneficiar a hospitales privados con más de 300 millones de euros. Y el mes pasado, reflotó un nombre que estuvo en el centro de la polémica durante lo peor de la pandemia: Bidafarma, una cooperativa farmacéutica en la que trabaja con un alto cargo Manuela Villena López, esposa de Juan Manuel Moreno Bonilla. Los contratos firmados con esta corporación por la vía urgente durante el año 2020 estuvieron incluidos en la comisión de investigación de mascarillas del Congreso de los Diputados, para despejar las sospechas sobre el “procedimiento de contratación y adjudicación”.

A pesar de esto, y en medio del presunto caso de corrupción del SAS, el Ejecutivo regional firmó un nuevo convenio en el ámbito educativo. Se trata de un acuerdo de prácticas con los centros de FP de Granada, Málaga y Sevilla, en los que unos 8.000 estudiantes realizan cursos de Sanidad, Comercio y Marketing y Electricidad y Electrónica. Todos ellos podrán optar a realizar sus prácticas en Bidafarma, lo cual ha reavivado las sospechas sobre el “lugar privilegiado” que tiene la cooperativa con respecto a la Junta de Andalucía.

Pese a que desde la corporación en la que trabaja la mujer del líder del Ejecutivo regional defendieron a este medio que desempañarían esta labor “sin contraprestación económica alguna”, el posible trato de favor a Bidafarma puso a Moreno Bonilla bajo la lupa. En diciembre de 2020, la Junta de Andalucía firmó un nuevo convenio sin concurso. La empresa de Villena López sería la encargada de gestionar el almacenamiento, la custodia y el transporte de las primeras dosis de la vacuna en Andalucía. Desde Bidafarma aseguraron, una vez más, que la tarea se realizaría de “forma gratuita y desinteresada”, lo cual no evitó que la manera en la que se adjudicó este convenio a la empresa en la que trabaja la mujer del presidente autonómico levantara sospechas. Lo que vino a confirmar la anomalía de todas las adjudicaciones del Ejecutivo regional con la farmacéutica, ¡así como la “relativa a todas las comunicaciones realizadas, por cualquier vía, entre el Grupo Bidafarma, (trabajadores o persona relacionada con la misma), con la Junta de Andalucía (representantes, empleados o cualquier persona que mantenga una vinculación), empresas, entes u organismos públicos dependientes de la Junta de Andalucía, en relación a las contrataciones efectuadas con Bidafarma”.

Por último, la Cámara Baja requirió a la Junta de Andalucía toda la información sobre “las subvenciones o ayudas económicas concedidas al Grupo Bidafarma por parte de cualquier administración, empresa, ente u organismo público dependiente de la Junta de Andalucía”, con al menos información sobre el “tipo de subvención o ayuda; fecha de concesión; importe de la concesión; consejería o departamento otorgante y cualquier otro dato de información relacionada con dicha ayuda”.

No hay comentarios: