Cuando es más importante matar ratas en Marivent que seguir con la ayuda a la cooperación.

Palacio de Marivent

Nel Matí

Como en los cuentos de hadas, en los que es más importante la limpieza de palacio que el malestar y suciedad del populacho, a veces también ocurre en la vida real en la que idéntica dicotomía se puede dar. Es lo que ocurrió hace unas semanas en el Pleno de la Asamblea autonómica de Baleares, durante el debate de las cuentas públicas, en el que se aprobaron los Presupuestos para este año. En ellos, se incluyó una curiosa partida de 41.301 euros destinada al “control de plagas del Palacio de Marivent”, residencia de verano del rey Juan Carlos y su familia, en Palma de Mallorca. Los grupos parlamentarios de la oposición criticaron la “enorme” reducción presupuestaria en materia de cooperación y ONGs, que, según el PSIB, representaba un descenso del 70%, mientras se destinaba la citada partida al control de plagas del Palacio de Marivent. El diputado del PSM-IV-ExM, Nel Martí censuró que “mientras el PP dice, una y otra vez, que hay que ser sensibles con la situación económica, se destinen 41.301 euros al control de plagas de Marivent”. No había dinero para cooperación, pero sí para matar ratas. “Ese es el contenido y el criterio vergonzoso de esta sección”. Y criticó que, “mientras piden contención y sacrificios a los ciudadanos, a la Casa Real no se le reclama que haga lo mismo”.

Por su parte, el conseller de Presidencia, Antonio Gómez, recordó a la oposición que cuando ellos gobernaron durante dos legislaturas, siguieron manteniendo el gasto de mantenimiento de Marivent. “Estamos orgullosos de mantener este Palacio y de que sus Majestades los Reyes vengan a pasar las vacaciones en las islas, porque nos supone un prestigio en la promoción de las mismas”, argumentó el conseller, quien añadió que no entiende “por qué, si están en contra del gasto de mantenimiento de Marivent, ustedes no lo retiraron”. Miquel Jerez, diputado del grupo parlamentario popular preguntó a la oposición qué es lo que les molestaba “si es la instalación en sí o lo que representa y simboliza”. Y apuntó que, para su formación, era “motivo de orgullo y satisfacción” la repercusión que la presencia de la Familia Real tenía en Baleares. E insistió: “Ustedes, en su momento, lo mantuvieron en todas las mismas condiciones que hoy se mantienen”.

De esta manera, la Consellería de Presidencia sufria el mayor recorte presupuestario del Govern, al contar con una partida económica de 61,1 millones de euros en 2013, un 24,63 por ciento menos respecto al pasado ejercicio.