Daniel Barredo, autor de ‘El tabú real’: “La Corona española desaparecerá antes de que pasen diez años”.
Daniel Barredo, doctor en Periodismo, licenciado
en filología Hispánica, novelista y poeta, acaba de publicar “El tabú Real”
(Ed. Berenice), un ensayo en el que analiza la forma en que los medios de
comunicación han ido postergando hasta lo inevitable toda crítica contra Juan Carlos I
y su descendencia. Se trata de un libro sobre comunicación con ciertos toques
de humor no achacables al autor, sino a la propia Casa Real. Por ejemplo,
cuando glosa una juancarlista campaña nacional de publicidad encubierta de la
asociación de ‘Cerveceros de España’. “La monarquía retorna a España por
un capricho de Franco –declara en una entrevista en Cuartopoder, realizada por Aníbal
Malvar–, que era monárquico por encima de todo. Don Juan Carlos
hereda de Franco, como comento en mi libro, las atribuciones reales y
simbólicas del dictador; luego, en la Transición , se legitimó la monarquía
constitucionalmente. Fue un triunfo de la monarquía sobre la democracia, porque
don Juan Carlos se aseguró la inviolabilidad jurídica, la protección penal, la
opacidad sobre su gestión y sus cuentas, etcétera. Lo que estamos viviendo hoy
en día, más que un desmoronamiento de la monarquía, es un desmoronamiento de la Transición , hacia una
interpretación de la democracia, que es lo que no hemos tenido todavía en
España. La cuestión es si España ha dejado de ser alguna vez franquista. No es
solo la monarquía: es la presidencia del Gobierno o el funcionamiento de los
partidos políticos o del Congreso de los Diputados, por ejemplo. No ha habido
ruptura con el franquismo, sino que el franquismo se adaptó y se prolongó con
la llamada Transición. Eso es lo que yo llamo el ‘franquismo integrado’ ”
“En tu libro –advierte A. Malvar– hablas de la
genuflexión periodística general. Pero también aludes a la Universidad. ‘La Corona ha dado la espalda a
la Universidad ’.
Pero también da la impresión de que la Universidad ha dado la espalda a la Corona desde su advenimiento
para, cobardemente, evitar el análisis de su papel ambiguo en nuestra historia
reciente. Más que dar la espalda, yo diría que nuestra universidad se ha
puesto, cómodamente, en sombra”. Barredo asegura que la Universidad está tan
corrupta como el resto de las estructuras de poder. “Está todo podrido, desde la base. Hay muy
poca innovación. En parte, es culpa de los catedráticos, porque muchos siguen
siendo todavía los caciquillos franquistas, ante los cuales hay que rendirse o
sufrir, como fue mi caso. Cuando empecé a investigar la comunicación de la Corona , me llamaban
“inculto”, decían que mi trabajo estaba mal planteado, calificaban mi tesis
como “una tesis de autor”, y, por supuesto, me rechazaron todas las becas de
investigación. Luego John Balmer, una autoridad mundial en Marketing
Corporativo, va y dice que este libro es “una obra importante en su ámbito”. Al
poco de doctorarme ya tenía ofertas de trabajo en tres países. Y sin enchufes.
“¿Cómo es posible –pregunta Malvar– que los dos
grandes medios en papel de la última España, El País y El Mundo,
se declaren republicanos hasta en sus libros de estilo y después nos adoctrinen
en las grandezas y hermosuras de la institución regia? ¿Es hipocresía o solo es
miedo?”. Barredo contesta que es muy difícil situarse a la contra de una
institución que cuenta con el apoyo de todo el aparato de Estado. “Incluso el
Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha criticado la ‘sobreprotección’ de la
monarquía. ¿El País republicano? En un estudio pionero, Pini lo
calificó como ‘portavoz de la monarquía’. No por casualidad el actual director
de Comunicación de la Casa
del Rey tiene una dilatada experiencia como periodista del Grupo Prisa”. Dice que las monarquías son “marcas corporativas patrimoniales”, como las
definen algunos de los últimos estudios en marketing. Y que la Corona ofrece un producto,
del mismo modo que la
Coca-Cola , Microsoft o el Banco Santander. “Pero los gestores
de la Casa del
Rey no han sabido organizar las rutinas de lo que debería ser el primer departamento
de marketing corporativo del país. Fíjate en la corona británica: apolillada
pero altamente valorada. Un ejemplo de buena gestión”.
Barredo advierte que la monarquía, en el contexto
del franquismo integrado, “se creía omnipotente. Sus gestores se pensaban que
podían vivir al margen, instalados en la fotonoticia del Hola. Aún
siguen empleando estrategias arcaicas, como el programa Audiencia Abierta.
El rey ha pasado de ser el héroe nacional a tener que pedir perdón a los
ciudadanos. Y esto solo es el principio, porque la sociedad de los ideantes es
un momento de inteligencia colectiva: nos estamos acostumbrando, globalmente, a
elegir, a participar, a interactuar. Es un momento ilusionante para la
humanidad”. Malvar le recuerda, parafraseando a Zugasti, el consenso
periodístico por el que los periodistas se comprometieron a silenciar las informaciones que
pudieran dañar la reputación de don Juan Carlos. Barredo acepta que es
“un problema de las
organizaciones, más que de los periodistas. Hay periodistas muy valientes. Pero
las organizaciones periodísticas españolas, en general, son conservadoras,
ventajistas y partidistas; yo creo que ni siquiera les interesa la información.
Se parecen al PP-PSOE. Solo piensan en hacer caja”. Finalmente, le pregunta qué
resultado cree que arrojaría hoy un referéndum sobre la monarquía. Barredo
contesta: “Quedaría ligeramente inclinado a favor de la Corona. Hay todavía
unas bases sociológicas, muy conservadoras, que son fervientemente monárquicas.
Pero, tal y como organiza actualmente su comunicación, la Casa Real española
desaparecerá antes de que pasen diez años. En ese tiempo se quedará sin
cobertura política (la
Unión Europea anula el arbitraje simbólico de la Corona ), sin cobertura
sociológica (porque hay más de un 80% de los jóvenes que consideran la
monarquía como una institución arcaica), y sin cobertura mediática (con el
impulso de las nuevas organizaciones periodísticas y la consolidación del
periodismo participante). Solo un buen plan de gestión comunicacional puede
salvarles: tienen que conseguir convencerte, Malvar, de que son necesarios”.
1 comentario:
"Oye Pilar (Urbano) por que no te llevas una tarde a ese muchacho a merendar en embassy y que te cuente un poco más eso que dice.. "Solo un buen plan de gestión comunicacional puede salvarles" Quizá tenga razón. Si coopera le fichamos, mira a ver...
Saludos. Sofia.
chiflos.
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