Andalucía. Tras la tempestad ¿llegó la calma?
Una vecina de Corrala Utopía, tras el desalojo.
La presidenta de Andalucía,
Susana Díaz (PSOE), no descartaba el
pasado lunes convocar elecciones anticipadas por la crisis producida con IU,
sus socios de Gobierno, tras el realojo de las familias de la corrala Utopía. Díaz
señala que no hubiera descartado las elecciones anticipadas “si no se llega a
restablecer la legalidad y las decisiones justas”. Y que no convocó elecciones
anticipadas porque Andalucia cuenta con “un millón de parados” y su
objetivo principal era que su Gobierno “recuperase la velocidad de crucero
cuanto antes”. Para ella, IU y PSOE son partidos con trayectorias y
concepciones “distintas” y “todos debemos tomar nota” para que esta crisis “no
se vuelva a repetir”. Una crisis que se cerraba sobre la una y media de la
madrugada del sábado sin vencedores ni vencidos. Pero las tensiones de estos
dos días dejaron heridas difíciles de diagnosticar por el momento. La
desconfianza o, la precaución entre socialistas e IU han saltado al primer
plano cuando aún quedan dos años para el fin de la legislatura. Susana Díaz
desveló que, en pleno conflicto con los okupas de La corrala sevillana,
pensó en romper su acuerdo con IU y convocar elecciones anticipadas. La presidenta andaluza quedó en
evidencia al retirar el decreto que había firmado, 24 horas antes. Susana Díaz,
cuyo crédito consiste en transmitir la idea de que es una mujer de palabra y de
firmeza en sus decisiones, tuvo que 'recular' en su primer escarceo con los
comunistas. Y se achantó ante las iniciativas
populistas y casi 'chavistas' de IU. Su autoridad y su imagen quedaron, según
algunos, dañadas y seriamente perjudicadas. El ala más radical de IU en el
gobierno andaluz, encarnado por la consejera de Fomento, Elena Cortés,
junto a la secretaria de Vivienda, Amanda Meyer (hija del eurodiputado
Willy Meyer), conseguía un triunfo celebrado por las bases de la formación.
Alguien comentó que “le doblegaron la muñeca a Susana. Y que esto no quedará así”.
Juan Manuel
Moreno Bonilla, el
nuevo presidente del PP andaluz, comenta que avecina un adelanto electoral,
bien para otoño, caso de que Susana Díaz no logre aprobar los presupuestos, o
en febrero, con motivo del Día de Andalucía, “una jornada simbólica en nuestra
comunidad”. Habló ya de que el PP está en condiciones de disputarle el
liderazgo a los socialistas y no sólo para vencer en las elecciones, como ya
hizo su predecesor, Javier Arenas, sino incluso para conseguir los escaños
suficientes que le abran las puertas a formar gobierno. Aunque el mensaje que
se transmite desde Ferraz es el de que las aguas han vuelto a su cauce, tampoco
a Pérez Rubalcaba le vendrían mal unas autonómicas en octubre. Incluso le
evitaría convocar unas primarias en el PSOE que nada le seducen. La cuestión
está en si Susana Díaz, a estas alturas de su mandato, con sólo unos meses en
el puente de mando, será capaz de conseguir una mayoría absoluta para no
tener que recurrir a los escaños comunistas a la hora de formar gobierno.
El realojo de ocho de las 17
familias expulsadas por la policía el pasado día 6 de los corrientes de La Corrala La Utopía, en Sevilla, que ocupaban de manera
ilegal el edificio desde hacía dos años, ha sido la causa de que el Gobierno de
izquierdas haya estado a punto de saltar por los aires. “No es una cuestión de
ocho familias –sostienen desde el PSOE–, sino de concepto, de valores.
Andalucía no es Venezuela y no se puede permitir que, pegando un leñazo en una
puerta, se tenga derecho a una vivienda”. El día 9, y en contra de la opinión
de la presidenta de la Junta ,
la Consejería
de Fomento, dirigida por Elena Cortés, del IU, entregaba las llaves a ocho
familias en riesgo de exclusión social. Y, mientras el coordinador de IU en
Andalucía, Antonio Maíllo, se sumaba a la alegría de La Corrala , en el PSOE
saltaban las alarmas, porque esa imagen “transmite el mensaje de que la patada
en la puerta es la vía rápida para acceder a una vivienda social”. Díaz anunciaba
que retiraba por decreto la competencia de adjudicación de viviendas del parque
público a IU, comprometiéndose a dar
marcha atrás una vez que se comprobara que el realojo tenía todos los ropajes
legales. Al día siguiente, la coalición convocó al comité de enlace para
resolver la crisis de Gobierno. La versión de los socialistas apuntaba a que
Fomento “ocultó información” y “no facilitó con claridad los expedientes”. A
las dos de la madrugada, Díaz dio un golpe sobre la mesa y quitó las
competencias a IU. Maíllo creía que la presidenta Díaz, siete años mayor que
él, pretendía ningunearle y ella pensaba
que la subestima. Díaz estaba mucho más cómoda con otros interlocutores de IU,
como con el vicepresidente de la Junta, Diego
Valderas, y con el secretario general del PCE, José Luis
Centella,
con el que negoció el acuerdo de Gobierno para Andalucía. Con ellos sí habló, y
mucho, durante esta crisis. El viernes, la socialista María Jesús
Montero, Consejera de Hacienda y Administración Pública, pedía la
colaboración de la Unidad
adscrita del Cuerpo Nacional de Policía (la llamada policía autonómica) para
comprobar que los ocho realojados estaban en las casas asignadas. La socialista
desconfiaba acerca de si las personas realojadas por Fomento reunían los
requisitos legales para ello. Hacienda, además, reclamó a Fomento los
expedientes administrativos sobre las familias, una documentación aportada por
IU en la reunión del viernes. Dirigentes de PSOE e IU celebraron el acuerdo y
la continuidad del pacto. “Un pacto que ha salido fortalecido”, opinó el
secretario de Organización del PSOE, Juan Cornejo. Pero los socialistas
admitieron que la crisis “creó un clima de precaución” y suponía una
advertencia a IU de que “no puede monopolizar” determinadas competencias, como
las de vivienda. En cambio, IU dirigió ciertos reproches hacia la presidenta de
la Junta , a la
que acusó de actuar con “soberbia”, “buscando los titulares más favorables”
para ella, como “mujer de Estado”.
La presidenta andaluza, Susana Díaz…
Desde el inicio de esta crisis
en Andalucía, se han producido cuatrocientos mil “lanzamientos”, la mayoría de
ellos instalados por la banca, bendecidos por los jueces correspondientes y
ejecutados, con todo el rigor necesario, por las fuerzas policiales. Corresponden
a 400.000 desahuciados, personas desempleadas cuya mancha crece como el
chapapote. Los gobernantes piensan que lo que deben hacer los desempleados es
tener paciencia y esperar. Y todo aquel que salta la legalidad es calificado de
“antisistema”, de “ocupa” o de “radical” que pone en peligro la recuperación de
España y de Andalucía. Pero la crisis crea sus propias reglas y, después de
malvivir dos años en una vivienda sin agua y sin luz, las personas alojadas en La Utopía , propiedad de
Ibercaja, ya atisban una solución inminente, fruto de las reuniones habidas
entre estos, el defensor del Pueblo, la Junta , la propia Ibercaja y el Ayuntamiento de
Sevilla. Y pusieron de patitas en la calle a todas las personas allí alojadas
sin que el Ayuntamiento, con el alcalde Juan Ignacio Zoido, del PP, a la cabeza,
estuviera allí para darles cobijo. Los desalojados se presentaron a la puerta
del Consistorio y decidieron quedarse y montar una acampada. Hasta que, en la
tarde del 9 de abril, se presentó el personal de la Consejería de Fomento y
Vivienda y entregó 8 llaves de senadas viviendas públicas a ocho familias, comprometiéndose
con otras nueves a buscarles viviendas privadas en alquiler. “La presidenta de la Junta –escribe al respecto
Jesús Páez Narváez, licenciado en Ciencias del Trabajo en la web ‘La lamentable’,
bajo el título ‘Houston, tenemos un problema con La Utopía ’– cogió un
respetable rebote cuando llegó la noticia. Y ahí empezó la tragicomedia de
antesemana de Pasión. Se tocó a arrebato y empezó la función. Susana Díaz se
puso la mantilla de la legalidad y como las repuestas de sus “compañeros” de
Gobierno no le parecieron convincentes, ni ajustadas a la legalidad, redactó el
Decreto de la Presidenta
por el que retiraba las competencias de Vivienda a la Consejería y se la pasó
a Consejería de Hacienda. Decreto que apareció
el viernes por la mañana. En esas, llegó Elena Cortes, la consejera de Fomento
y Vivienda y parece que no había tanta ilegalidad. Con lo que las ocho familias
siguieron realojadas y se volvió a hablar entre los socios para recomponer el
roto, el sainete o la tragedia. Con lo que, el 11 de abril la señora Susana
redactó otro decreto por el que derogaba el del día anterior… Mientras tanto,
la derecha y muchos de los medios de difusión se regodearon y muchos dieron por
terminado el Gobierno de coalición. Despachándose algunos con munición de
grueso calibre, como por ejemplo el nuevo presidente del PP andaluz, Juan
Manuel Moreno quien sentenció: ‘Susana Díaz ha legitimado a los antisistema’”…
El coordinador general de IULV-CA,
Antonio Maíllo
“En la madrugada
de ayer –escribía Concha Caballero en El País del 13 de abril, bajo el título
‘Ensayo de ruptura’– se puso fin a la primera gran crisis del Gobierno andaluz.
La presidenta de la Junta
derogó el decreto de adjudicación de viviendas y se redujeron a ocho los
realojos autorizados de la
Corrala La Utopía. A quien haya elegido este terreno de juego
para la confrontación del Gobierno andaluz, la derecha debería hacerle un
monumento. Si algo ha quedado claro con la crisis es la radical injusticia de
la política de vivienda. Los datos son apabullantes: tres millones y medio de
casas vacías y varios millones de personas sin hogar; más de 400.000 desahucios
desde el inicio de la crisis, la mayor parte promovidos por la banca, mientras
recibían 108.000 millones de euros de dinero público para compensar las
pérdidas de su aventura especulativa salvaje. Por otra parte, el realojo de los
vecinos de La Utopía
correspondía al Ayuntamiento de Sevilla, que mantuvo una actitud hostil a pesar
de disponer de 528 viviendas municipales vacías. Pues nada, Ibercaja (la
entidad bancaria que ha instado el desalojo) y el Ayuntamiento de Sevilla han
salido de rositas en este conflicto, mientras contemplaban con fruición el
radical enfrentamiento entre los miembros del Gobierno andaluz. Hemos asistido
a un tristísimo debate entre los que tienen poco y los que no tienen nada. El
que está pagando con mucho esfuerzo y sacrificio su hipoteca o alquiler, se
siente ofendido porque se repartan llaves a los vecinos de La Corrala ; el que está en la
lista de espera-desespera se lamenta de que hayan sido postergados y la derecha
aprovecha para convertir la lucha por una vivienda digna en una causa indigna,
egoísta e ilegal… Si el PSOE cree que ha ganado
prestigio y autoridad e IU apoyo social, están muy equivocados. Lo único que se
ha fortalecido es la idea de que la izquierda, o llámese como se quiera, no
puede entenderse; que el experimento andaluz tiene los días contados y que no
será punto de referencia para conformar mayorías amplias en el Estado… Los
únicos que pueden frotarse las manos son los sectores de IU opuestos a
cualquier acuerdo con el PSOE desde el inicio y la vieja guardia del PSOE
empeñada en defender una gran coalición con el PP. Ahora son Susana Díaz y
Antonio Maíllo —que apenas si se hablan o entienden—, quienes deben escribir el
final de esta historia y decidir si revitalizan el pacto de Gobierno o van a
acumular argumentos para certificar el fracaso de la experiencia andaluza”.
Elena Cortes, Consejera de Fomento de la Junta de Andalucía.
Dirigentes del PSOE e IU insistieron en que la crisis se había solventado y en que había vuelto la normalidad a la Junta, mientras el PP acusaba a Susana Díaz de hacer el "ridículo" y de estar "secuestrada por un partido de radicales". Juan Cornejo, secretario de Organización del PSOE-A, fue incluso más allá y aseguró que el pacto con IU había salido "fortalecido" y que se había demostrado que en la comunidad existe igualdad de oportunidades para acceder a una vivienda social. "No ha habido ninguna ilegalidad, sino esclarecimiento y cumplimiento de la legalidad", aseguraba el número dos del PSOE andaluz. En Málaga, Antonio Maíllo, coordinador general de IULV-CA, afirmó que "la normalidad ha vuelto" al Gobierno andaluz y que al PP "le ha salido muy mal la jugada" para "derribar" el Ejecutivo. Y repitió que Susana Díaz había restituido las competencias "que nunca tenían que haberse quitado" a la Consejería de Fomento, cuya actuación había sido "legal como pocas" e "impecable", por lo que defendía la continuidad de la consejera de Fomento y Vivienda de la Junta, Elena Cortés. "La normalidad –dijo Antonio Maíllo– ha vuelto al Gobierno. Siempre hemos estado al lado de la gente que necesita vivienda. Estamos muy satisfechos y se ha vuelto a atender a los vecinos como indicaba la orden judicial. La gente no puede dormir en la calle y hemos hecho las cosas impecablemente legales". Maíllo confirmó a Elena Cortés como una de las mejores consejeras de la Junta quien, días antes, se encontraba en un viaje a Colombia y Canadá con motivo de las precampaña de las elecciones europeas. El líder regional de IU culpó al PP de ser el "causante de todo esto" al haber ordenado a la Subdelegación del Gobierno en Sevilla el desalojo de la Corrala Utopía cuando el conflicto entre el Ayuntamiento de Sevilla, la Junta e Ibercaja estaba "a punto de resolverse". Pero María Dolores López Gabarro, secretaria general del PP andaluz, insistió en que Susana Díaz había hecho el "ridículo" al retirar el decreto que devolvía a IU las competencias en viviendas sociales y le acusó del "descontrol y desgobierno". En una rueda de prensa, Gabarro lamentó que la autonomía andaluza estuviera "secuestrada por un partido de radicales", en referencia a IU, con el "beneplácito" de Díaz, a la que reprochó haber cambiado de opinión con sus socios de Gobierno sólo para "mantenerse en el sillón". A nivel nacional, Óscar López, secretario de Organización del PSOE, dijo, en Segovia, que la presidenta de la Junta "demostró firmeza en defensa de la legalidad, sensibilidad social y solidez en el Gobierno andaluz". Y Cayo Lara, coordinador federal de IU, manifestaba, en Málaga, que la restitución de las competencias a la Consejería de Vivienda había determinado que la actuación fuera "legal, justa y verdadera". Durante su intervención, ante unos 400 asistentes, llamó la atención sobre la reacción generada por los realojos de la Corrala Utopía de Sevilla: "La que han liado porque hemos dado una vivienda temporalmente a ocho familias. Imaginad si se las damos a las 12.000 familias sin vivienda que hay en Andalucía. Nos hubieran tirado misiles". Lara responsabilizó de lo sucedido al PP, que "nos la quería colar por la puerta de atrás para aprovechar la situación. Pero, ante los especuladores y los títeres que amparan desde los gobiernos a los poderosos, nosotros no vamos a doblegarnos".
Paco Lara, coordianador general de IU.
El 12 de abril, dos días antes de la celebración
de la II ª
República española, Cayo Lara y Antonio Maíllo acudieron a
un mitin-fiesta en Málaga, en donde varios centenares de personas aclamaron la
victoria de IU con los gritos de “¡Viva la Revolución !, ¡Viva la República ! y ¡Sí se
puede!”. Los asistentes aprovecharon para celebrar el rescate de las
competencias de vivienda para IU en Andalucía tras la
publicación en el BOJA (Boletín Oficial Junta de Andalucía) del decreto que
derogaba el que firmara la propia presidenta, Susana Díaz contra IU. Maíllo no
quiso valorar la actuación
del PSOE y de la Junta en esta grave crisis de Gobierno. Su
argumento fue que se trataba de un “realojo transitorio que atiende a razones de
excepcionalidad”. Esta orden, según el político de izquierdas,
establecía la posibilidad de realojos con carácter transitorio en situaciones
excepcionales. Y acusó al PP, y, en concreto, a la Delegación del Gobierno
en Andalucía, de “instar al desalojo”. “Les ha salido muy mal la jugada y se
han quedado con la miel en los labios”. El PP es el causante de todo esto,
hacen una operación cuando está a punto de resolverse el conflicto entre
Ayuntamiento y Junta de Andalucía e Ibercaja para una situación transitoria y,
cuando estaba a punto de solucionarse, obligaron a ese desalojo”. Por su parte,
Cayo Lara, líder de IU, insistió en que los
beneficiarios del realojo transitorio, que venía dictaminado por una resolución
de un juez, se incorporaban a la listas para el proceso de adjudicación de viviendas con
los puntos de baremación. “El juez que desahucia dice en el
auto que se proceda al desalojo y, al mismo tiempo, se insta a las
administraciones públicas a que provean lo necesario en aquellas familias con
menores o en riesgo o exclusión social y eso es lo que ha hecho la consejería:
atender a la juez”. Lara pidió a Mariano Rajoy que retirara los recursos de
inconstitucionalidad ante el decreto y la ley de vivienda
andaluza que, a su juicio,“sí garantizaría el derecho a la gente a tener una
vivienda digna, como dice la
Constitución ”. Y reclamó que las viviendas del Sareb se
colocaran en un banco público de viviendas, “para que de esa forma las personas
carecen de vivienda o que están en listas de espera o las miles de personas
puedan tener una vivienda digna”.
Susana Díaz, presidenta de la Junta Andaluza.
La coalición de izquierdas gana
el pulso al convencer al PSOE, en una dura negociación entre los dos partidos
de Gobierno en la que se entregan las llaves a ocho familias alojadas en la Corrala Utopía. Diego
Valderas, vicepresidente, opina que es mejor retener el poder que perderlo por
el asunto de la
Corrala Utopía. El “califa” Julio Anguita insta a la
coalición de izquierdas a “irse con dignidad”. “Lo valiente –resalta– es no aceptar la
humillación”. Antonio Maíllo no lo tiene tan
claro. Tampoco José Antonio Castro, portavoz en el Parlamento. Maíllo y Castro
son los cabecillas de la rebelión contenida, tras la tras la suspensión “momentánea” del acuerdo, y abandonan el
Comité de Enlace para dejar paso a subordinados del líder regional. El PSOE mantiene
a los mismos miembros: el consejero de Presidencia, Manuel Jiménez Barrios;
el número 2 del partido, Juan Cornejo, y el portavoz
parlamentario, Mario Jiménez. Los tres en perfecta coordinación con la
presidenta Díaz, en el mitin político en Huelva, con Elena Valenciano.
Pero, no todos los socialistas confían a ciegas en el criterio de la
presidenta. El exjefe del Ejecutivo andaluz, padre político de Susana Díaz,
tiene sus dudas. El senador José Antonio Griñán estima que el bipartito de la Junta , que él mismo impulsó
en su día, “ha funcionado bien”, aunque especifica: “Hay que pensar que
ninguno tiene la razón del todo”. La presidenta de la Junta y secretaria general
del PSOE-A defiende que reciba una vivienda pública quien más lo necesite y no
quien la ocupa “ilegalmente” o que levante más la voz. La presidenta hace estas manifestaciones mientras se celebra un
nuevo encuentro de PSOE-A e IULV-CA, en el Parlamento, para
tratar de buscar una solución a la
situación creada y después de una reunión de la dirección delegada de la
federación de izquierdas en la que se da por suspendido “momentáneamente” el
pacto de gobierno entre ambas fuerzas. Durante su intervención, Susana Días
recalca que tiene la obligación de ser la presidenta de todos los andaluces, de
los que votan al PSOE-A y de los que votan a otros partidos, y de garantizar la igualdad de los ciudadanos de esta tierra, con
fortaleza y firmeza para defender a quien más lo necesita y a quien tiene la
esperanza de contar con un Gobierno fuerte y sensible que defienda sus
derechos.
Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía, firma,
con toda España pendiente de su decisión, un decreto para retirarle las
competencias de vivienda a Izquierda Unida y, un día después, firma otro
decreto para derogar el anterior. “¿Alguien le encuentra algún
sentido a todo esto? –se pregunta Javier
Caraballo en El Confidencial–. Es difícil de entender, porque nada de lo
ocurrido se guía por la literalidad de lo que se narra; nada es lo que parece
porque el mar de fondo es otro. Ni la ocupación de la llamada Corrala Utopía,
durante dos años, ni el alojamiento provisional de varias familias tras el
desalojo, ni las dudas de legalidad que pudieran existir explican la tormenta de 48 horas que
se vive en el seno del Gobierno andaluz. Para entender lo ocurrido hay que interpretar a Susana Díaz. Sus
filias, sus fobias, su personalidad, sus estrategias de comunicación, sus
previsiones de futuro, sus objetivos a medio y largo plazo. El error de cálculo de Susana Díaz –dicen– es que no ha
valorado que ni Izquierda Unida es como el PSOE ni Antonio Maíllo es como Diego
Valderas. Hay que interpretar a Susana y conocer, en primer lugar, el
carácter impetuoso de la presidenta de la Junta de Andalucía. Porque todo se origina
cuando, el miércoles, 9 de abril, tras el inesperado desalojo de la Corrala Utopía ,
ordenado por la Delegación
del Gobierno (en manos, obviamente, del Partido Popular), Susana Díaz monta en
cólera contra su socios de gobierno, la federación IU. Para su sorpresa, los
dirigentes de IU acuden a la acampada de los desalojados de la Corrala y les anuncian que
van a reubicarlos
provisionalmente en diversas viviendas propiedad de la Administración
andaluza. En IU, dicen que, si Susana Díaz se rebela contra ese
acto, es porque ella misma, de acuerdo con el alcalde de la ciudad, Juan Ignacio Zoido (PP),
había planeado darle solución a los desalojados, repartiéndose entre ambos el
protagonismo. Sea como fuere, la realidad es que IU se anticipa y se anota la
resolución final de un conflicto que salió en las páginas de The New York
Times, en las pantallas de Al Jazeera y su decisión mereció una
resolución del Parlamento Europeo.
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La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, junto al vicepresidente, Diego
Valderas.
“Tan
bronco era el
enfado de Susana Díaz contra IU –prosigue Caraballo–
que llegó, incluso, a 'cortarle' el teléfono corporativo al
viceconsejero de vivienda, José Antonio García Cebrián. Se enojó con él y ordenó al
servicio telemático de la Junta
andaluza que le anulara el móvil, según afirman en esta federación. En IU, no
dan crédito a lo que está sucediendo pero optan por mantener la calma y
trasladar el asunto al Comité de Enlace de ambos partidos para resolver el
conflicto. Y advierten: “Si se hace efectiva la retirada de las competencias, habrá crisis de
Gobierno”. Ni Susana Díaz, ni Antonio Maíllo, el
coordinador andaluz de IU, se soportan desde el primer día en que se ven. Las
diferencias personales y políticas entre ambos son tan dispares que el
entendimiento se hace, a menudo, imposible. La seducción de la que hace gala
Susana Díaz, que le abre todas las puertas, se estrella siempre con la frialdad
de Maíllo quien, desde esa perspectiva, no ha querido integrarse en el Gobierno andaluz
y, por lo tanto, no le tiene ningún apego al sillón, como sí ocurre con el
anterior coordinador andaluz de IU, Diego Valderas, que ocupa una
vicepresidencia en el Ejecutivo andaluz. Valderas, de hecho, según cuentan en
el seno de IU, llegó a decirle Maíllo en pleno fragor de la crisis que “IU no
está en el Gobierno andaluz para defender el sillón del vicepresidente”, ante
la insistencia de este de rectificar y aceptar las exigencias de Susana Díaz (…).
El argumento principal de Maíllo coincide con el mismo auto judicial que ordenó
el desalojo de la
Corrala Utopía , en el que se ordena a las Administraciones
que se busquen vivienda a aquellas familias okupas con menores y en
situación de exclusión social. Por eso, el coordinador de IU insiste en que en
la actuación de IU se ha respetado la legalidad ‘como nunca antes en la
historia de los gobiernos de la autonomía andaluza’. Susana Díaz, sin embargo,
sostiene lo contrario y, por eso, finalmente, firma el decreto (…) Dicen que el
error de cálculo de Susana Díaz es que no ha valorado que ni IU es como el PSOE,
ni Antonio Maíllo es como Diego Valderas. Hasta ahora, esa táctica de presión
absoluta, del todo o nada, le ha funcionado en toda su
trayectoria política. Susana está acostumbrada a demoler obstáculos
con amenazas y presiones sobre el miedo del personal a perder
su cargo o su puesto en el partido. Y esta vez, se trataba sólo de recordarle
que quien más perdía era ella, presidenta con el apoyo de IU (…) De momento, es
evidente que la presidenta sale mal parada de su órdago a IU, quizá el
primer gran tropiezo desde que asumió el cargo, y que, por el contrario, IU, y,
en especial, su coordinador, han conseguido volver a primer plano de la
actualidad y retomar públicamente el protagonismo en el Gobierno de coalición.
Susana Díaz, con su inicio fulgurante, había conseguido que IU desapareciera de
la escena; ahora, ella misma, con su error de cálculo político, se lo
ha devuelto. A su lado, feliz, Antonio Maíllo parecía sacudirse el polvo de la
chaqueta tras la pelea: ‘Aceitunilla comida, hueso fuera’ ”.
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El coordinador general de IU,
Diego Valderas y el diputado y alcalde de Marinaleda, Juan Manuel Sánchez
Gordillo.
Juan Manuel Sánchez Gordillo está
harto. “Alguien
ha tenido que ceder –se lamenta– y siempre cedemos nosotros, IU; me parece injusto que no se
realoje a todos los vecinos de Corrala Utopía de Sevilla”. Dirigente del colectivo
de Unidad de los Trabajadores-Bloque Andaluz e impulsor de este movimiento
okupa sevillano, Sánchez Gordillo, defiende la ruptura del pacto de IU con el
PSOE, rubricado en
la primavera de 2012 tras las elecciones autonómicas. “Hay motivos –explica– más
que suficientes para romper el Gobierno andaluz. No se puede seguir una línea política
que lleva al recorte de los derechos de los trabajadores. La Junta de Andalucía practica
una política neoliberal que no está en consonancia con lo que IU tiene que
representar”. El alcalde de Marinaleda califica de “arrebato” de la presidenta
de la Junta de
Andalucía el decreto del pasado 11 de abril que suprimía las
competencias de Viviendas a la
Consejería de Fomento que dirige Elena Cortés
más el redecreto de “la parte
contratante”. “Eso no sirvió. IU ha perdido un buen momento para
poner los puntos sobre las íes”, indica, tras abundar en lo “caprichoso del
decreto” firmado por Susana Díaz y en la legalidad del realojo de las
familias. Sánchez Gordillo, que mantiene su línea antisistema mucho más
agudizada desde agosto de 2012, cuando protagonizó los asaltos a los supermercados en
Sevilla y Cádiz, no quiere entrar en el debate interno
dentro de la coalición de izquierdas con un Diego Valderas desvinculado
del conflicto de Corrala Utopía y con Antonio Maíllo, coordinador general
de IU en Andalucía. “Yo no entro en esa cuestión, pero hace falta más
contundencia en nuestros mensajes”. El parlamentario andaluz se siente
especialmente contrariado por el tratamiento que se les ha dado a los miembros
de Corrala Utopía. “Hace falta respeto para los que más
lo necesitan. La dignidad tiene un precio y nadie la
puede cuestionar; espero que todos aprendamos de esto y seamos capaces de
elaborar una política más de izquierdas”.
El Miércoles Santo, Luciano Alonso, consejero de
Educación, Cultura y Deporte, exigía una “rectificación inmediata” al
Ministerio del Interior en sus informaciones y “acusaciones” sobre un posible
fraude en ayudas para cursos de formación con las que, a su juicio, se
perseguía presentar una “causa general contra Andalucía”. Alonso se
pronunciaba, de este modo, en rueda de prensa en Sevilla en relación con la
investigación de la Unidad
de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional
sobre supuestas irregularidades detectadas. “Colaboraremos con la Justicia , con la UE y con todo aquello que
signifique transparencia y legalidad; no tendremos problemas en asumir lo que
tengamos que asumir”, dijo el consejero, quien agregó que la Junta “sólo sabe lo que dice
la prensa, no tenemos notificación de nada. El Ministro no se me ha puesto al
teléfono; eso es una vergüenza y un atropello a los andaluces, una falta de
respeto que no es tolerable en un Estado de derecho”. Alonso explicó que, en
los juzgados, “sólo se solicitó información sobre 17 expedientes de dicha
convocatoria, cuyo presupuesto es de 1,5 millones de euros”. De esos 17
expedientes solicitados, 11 son empresas sociedad limitada, dos sociedades
civiles, dos empresarios individuales y dos asociaciones empresariales. Explicó
que uno de los expedientes se encuentra terminado, y se le solicita reintegro
parcial, una resolución que se publicará en BOJA y de la que no quiso decir
cantidad ni a qué entidad se refiere. El resto “o bien se está requiriendo de
documentación, se está iniciando el proceso de reintegro o tiene la resolución
de reintegro pendiente de publicar”. Alonso lamenta que el Ministerio “sea
juez, ejecutor y parte” y reconoce que tiene “gran preocupación sobre si el Ministerio
sabe de lo que habla”, toda vez que “se pone en duda la legalidad de las
cantidades, que representan el presupuesto total de la formación profesional
para el empleo en Andalucía en los últimos siete años”. El consejero lamenta
que el Gobierno “se alía con el PP-A en la causa general frente a la formación
profesional de Andalucía, y le da igual el coste que puedan tener sus acciones
para cientos de entidades honradas y eficientes; no sé si ha medido lo que
supone acusar a todo el tejido asociativo e institucional de participar en un
entramado de corrupción”. Asimismo, muestra “serias dudas” sobre “por qué el
Gobierno lo ha hecho ahora, en Semana Santa, con el juez Ruz. Es sorprendente
esa filtración, por lo que exigimos una explicación por parte del Ministerio,
que dé la cara, y le exigimos una rectificación. Que pida disculpas y retire
sus acusaciones”.
Gabo, seudónimo de Gabriel García Márquez,
se fue definitivamente el jueves, a los 87 años, aquejado de una neumonía y
dejándonos solos con su “Cien años de soledad”. También la suya fue “la crónica de una muerte
anunciada”. Desde hace años, el escritor novelista, cuentista, guionista y
periodistas colombiano que lograra el Premio Nobel de Literatura de 1982, vivía
en México…“Mil años de solidad y tristeza –se lamenta Juan Manuel Santos,
presidente colombiano– por la muerte del más grande colombiano de todos los
tiempos! Solidaridad y condolencias a la familia”. El cuerpo del escritor será
incinerado “en privado” y el
lunes tendrá lugar un homenaje en el Palacio de Bellas Artes de la capital
mexicana. El pasado 31 de marzo, fue ingresado de urgencia en el Instituto
Nacional de Ciencias Médicas Salvador Zubirán, en México DF, “por un cuadro de
deshidratación y un proceso infeccioso pulmonar y de vías urinarias”.
Permaneció hospitalizado una semana en la que aprovechó para dar muestras de su
buena evolución. Incluso llegó a pedir a los periodistas que estaban a las
puertas de dicho centro sanitario que “fueran a hacer su trabajo”, restando
importancia a su estado de salud. El diario mexicano El Universal publicaba
el pasado lunes, que García Márquez, que en 1999 superó un cáncer linfático, “sufre
esta vez un proceso canceroso que le afecta al pulmón, los ganglios y el hígado”.
Sin embargo, su esposa e hijos emitieron un comunicado en el que desmintieron
esa información, pero afirmaron que su salud “era muy frágil” y que “existían
riesgos de complicaciones de acuerdo a su edad”. Hace dos años se rumoreó con
la posibilidad de que Gabo sufriera demencia senil, pero la familia
también lo desmintió. Vivía en México desde comienzos
de la década de los sesenta. Contó que había llegado allí para una semana y a visitar
a su compatriota y escritor, Álvaro
Mutis, pero allí se quedó para siempre. Sus cenizas se repartirán entre su Colombia natal y México, el país que
lo acogió, lo que reafirma el sentimiento de doble nacionalidad de un autor
que, con su escritura, llegó a ser universal.
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Tras la pertinente tunda de horas procesionales
de la Semana Santa
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Siguiendo con el humor, he aquí el que Erlich nos
formula esta semana:
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Otros humoristas de la prensa: Forges, Malagón,
El Roto, Peridis, Forges, J. R. Mora,
Raúl Salazar, Pat y Winkal…
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Y Pep Roig, desde Mallorca:
Terminamos con varios vídeos. En primero de ellos, el consejero de Educación, Cultura y Deporte de Andalucía exigía este miércoles una 'rectificación inmediata' al Ministerio del Interior. Alonso considera que, con las informaciones dadas sobre el supuesto fraude en ayudas para cursos de formación de la Junta, se persigue presentar una “causa general contra Andalucía”.
Salut Salon es el nombre de un cuarteto de música de cámara formado por mujeres de Hamburgo, con piano, violonchelo y dos violines fundada por Angelika Bachmann e Iris Siegfried. A los dos fundadores del Cuarteto, se les unió la pianista Ameli Winkler y Simonne Bachmann, en el cello. Desde 2005, Salut Salon actúan en el extranjero, invitadas en los EEUU, China, Canadá, Chile, Rusia, Suiza, Italia, Luxemburgo y España. Las cuatro son embajadoras musicales.
Muchas veces dejamos de valorar a quienes nos aman verdaderamente. Nuestra familia son aquellos seres que siempre nos acompañan y nos aman, pase lo que pase. Parte de esa familia son nuestros animales. Este vídeo nos enseña a respetar sus vidas, cuidándolos, denunciando el maltrato y, si es posible, adoptando un animalito de la calle con responsabilidad. El amor que tienen es único y nadie debería perder la oportunidad de sentirlo y vivirlo.
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