María Branyans, la mujer más longeva del mundo.
María Branyas vive
actualmente en la residencia de Olot, Santa María del Tura, donde en días
pasados se produjeron dos muertes confirmadas por la Covid-19. Desde hace tiempo,
se mantiene alejada del foco mediático, pero, de común acuerdo con su familia y
con los responsables del centro en que reside, utilizó una cuenta en Twitter en
la que dijo: “Soy vieja, muy vieja, pero no idiota”. De esta forma, cuando
tenía 112 año, ya se definió en el perfil llamado “Super Àvia Catalana” (Super Abuela
Catalana), creado en diciembre de 2019.
El pasado 4 de los
corrientes, con la ayuda de las personas de su entorno más próximo, María dio
rienda suelta en la red social a pensamientos sobre su realidad desde la
perspectiva que le dan sus años. Y citó al poeta y periodista checo, Jaroslav
Seifert, al conmemorar la efeméride. “He tenido que llegar a edad avanzada para
aprender a apreciar el silencio”, tuiteó junto a una foto de un diario con un
artículo sobre ella con motivo de su cumpleaños. En el mismo, aparecen señales
emocionadas y en los cruces de la memoria se detectan nombres que el tiempo
pretendía ahogar.
María explica detalles de
su biografía y detalla cuáles son los hábitos y estilo de vida que la han
acompañado desde la infancia. “Siempre he comido poco, pero de todo, nunca me
he puesto a régimen”, asegura. Quizás sea por este motivo que ha gozado a lo
largo de su vida de buena salud, hasta el punto de que asevera que nunca ha
sufrido “ninguna enfermedad” ni ha pasado por quirófano. Curiosamente, denomina
su “maná celestial”: el yogur. Un alimento cuyo rescate reivindica “en un
momento en el que surgen dietas y alimentos milagro”. Y admite que en el tema
de la “longevidad” también influyen factores como “la suerte” y “tener una
buena genética”. No obstante, los científicos, que han estudiado lo que tienen
en común los más longevos, coinciden en que son personas alejadas del
tabaquismo, la obesidad y el estrés, lo que rebaja las posibilidades de
desarrollar enfermedades crónicas relacionadas con los malos hábitos y la edad.
María Branyas fue madre
de tres hijos y tuvo biznietos. Uno de ellos manifestó su alegría por el récord
de Branyas. “Solo vengo a decir que mi bisabuela es ahora mismo la persona más
mayor del mundo… heavy”, tuiteó Albert Raventós. Además, copó titulares antes
de convertirse en la persona más longeva del mundo. En mayo de 2020, la anciana
ya era, con sus 113 años, la mujer más longeva de España. Además, en ese mismo
año, se convirtió en la persona de mayor edad en superar al coronavirus en
nuestro país.
Hija de un periodista
natural de Pamplona que fue responsable de la revista estadounidense “Mercurio”
y de una barcelonesa, María nació en San Francisco (Estados Unidos), donde su
padre había ido por trabajo después de pasar una temporada en México. Regresó a
España, junto a su familia, mientras tenía lugar la Primera Guerra Mundial. Ha
vivido en Barcelona, en Girona y en los municipios gerundenses de Banyoles,
Calonge i Sant Antoni y Palol de Revardit. Más allá de detallar en qué ha
consistido su estilo de vida, la supercentenaria reconoce en una entrevista
publicada en La Vanguardia: “No he hecho nada más que vivir”.
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