Munilla, el obispo bien hecho.

 

David Torres escribe en el artículo “Munilla, el obispo bien hecho” que Munilla y otros audaces exégetas no paran de elucubrar sermones alternativos con el fin de rellenar los huecos de la doctrina y vender a la parroquia un Jesucristo de plástico, tan verosímil como un barbudo rubio de ojos azules nacido en mitad de Palestina. “Nadie nace en un cuerpo equivocado” dice Munilla en referencia a los hombres que se encuentran encerrados en una anatomía femenina y viceversa. “Dios nos ha creado bien, Dios no se equivoca” añade Munilla,en un colofón teológico en el que no queda más remedio que admitir, en calidad de bendición divina, las minusvalías físicas, las enfermedades crónicas, la ceguera, la sordera, la parálisis cerebral y los tumores malignos en los niños de tres años

Y termina recordando que entre tantos mensajes de amor y de perdón sobresalen los inspirados eructos del obispo de Orihuela-Alicante, José Ignacio Munilla. “El hombre impartió una catequesis sobre ecología integral en la que pedía por favor que dejaran a los perros ser perros, que no los transportaran en cochecitos para bebés, un tema sobre el que Jesucristo no opinaba gran cosa, al menos según los Evangelios. Jesucristo prefería predicar sobre la pobreza, la caridad y la obligación de ayudar al prójimo. Tampoco parecía importarle mucho el sexo, aparte de ese comentario contundente sobre la pederastia del que la Iglesia católica lleva toda la vida pasando página: ‘Quien escandalice a uno de estos pequeños, más le valdría que le colgasen al cuello una piedra de molino y lo echasen al mar’.

Son las palabras de uno de los miembros más ultras de la jerarquía católica, que ya se ha lucido en otras ocasiones con sus opiniones intolerantes. Munilla hizo estas declaraciones durante una catequesis con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en Portugal que supuestamente versaba sobre la ecología pero en la que aprovechó para meter con calzador su perorata intolerante. Según han explicado varios medios de comunicación, el prelado afirmó: “La ecología tiene que comenzar por el respeto hacia nosotros mismos. Dios nos ha creado bien, Dios no se equivoca, nadie nace en un cuerpo equivocado”.

Pero, “a veces sí que se equivoca”, responde Joan Baldoví al mensaje intolerante de Munilla sobre las personas trans porque permite que haya “personas” con una mente tan sucia y cruel como la de este obispo de Orihuela que cargó en la JMJ contra las personas trans. Y es que “la intolerancia  -como comenta Tremendig- sigue cabalgando en nuestro país, siempre a lomos de los mismos. Esta semana hemos visto como el nuevo gobierno municipal del PP en la localidad ciudadrealeña de La Solana ha suprimido el minuto de silencio en memoria de las víctimas de violencia de género”.