7 de noviembre. Más lunes al sol.
Imagen de "Lunes al sol"
La falta de trabajo y la alarmante situación de los parados no se contuvo con los años, sino que ha ido creciendo, hasta el punto de ser uno de los problemas que, actualmente, más preocupa a los españoles. Así lo atestigua el CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas), cuyo barómetro señala permanentemente cuáles son los problemas que más preocupan a los españoles: el paro, la economía, la inseguridad ciudadana o la inmigración, según se formule la pregunta. Pero hay algunas diferencias con respecto a los resultados de julio del año pasado.
En efecto, mientras que, en julio del año pasado, un 1,1% calificaba la situación de muy buena; el 26%, de buena; el 46,5%, de regular; el 17,7%, de mala y sólo el 7,3% de muy mala, ahora, en el mes de octubre las respuestas son mucho más pesimistas. Sólo un 0,4% califican la “salud” de la economía de muy buena; un 4,6%, de buena; un 30,8, de regular; un 40,5%, de mala y un 22,9% de muy mala. Además, una abrumadora mayoría considera que la situación ha empeorado en el último año y mantiene que lo peor está por llegar.
Y el Instituto Nacional de Estadística, en la encuesta de estructura salarial de 2006 confirmaba el estancamiento del salario medio en los últimos años y el aumento de las desigualdades. El puesto de directivo es el mejor remunerado. Su salario bruto creció un 10% entre 2002 y 2006 mientras que para el del trabajador medio ha caído un 0,6%. Lo que ganaba un directivo en 1995 era el equivalente al 142% de la remuneración media de los asalariados. En 2006, llegó al 207%. Por supuesto, lo que más abunda entre los asalariados es el contrato de los “mileuristas”. En este contexto es normal que los sindicatos pongan pegas a las medidas urgentes que el Gobierno ha puesto sobre la mesa social para aprobar mañana, sábado en el Consejo de Ministros. Y el paro se ha convertido en una lacra social que veja e insulta al mejor de los Gobiernos.
Hace unos años, cuando sufría los acicates de un paro que se alargó hasta mi jubilación, alguien que me apreciaba me regaló una entrada de cine para ver la película “Los lunes al sol”. Ya había leído algo sobre el film y me metí en una sala en la que no habría más de una decena de espectadores. Salí emocionado de la proyección de la cinta de Fernando León de Aranoa. Porque la principal novedad de “Los lunes al sol” no era el que hablara del paro y de sus consecuencias, una ocupación archiconocida por mí, en la que pasé largos años abocado, sino su calidad artística. La película, en efecto, partía de un material temático que de, puro realista, supuraba dolor y vergüenza nacional.
La falta de trabajo y la alarmante situación de los parados no se contuvo con los años, sino que ha ido creciendo, hasta el punto de ser uno de los problemas que, actualmente, más preocupa a los españoles. Así lo atestigua el CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas), cuyo barómetro señala permanentemente cuáles son los problemas que más preocupan a los españoles: el paro, la economía, la inseguridad ciudadana o la inmigración, según se formule la pregunta. Pero hay algunas diferencias con respecto a los resultados de julio del año pasado.
En efecto, mientras que, en julio del año pasado, un 1,1% calificaba la situación de muy buena; el 26%, de buena; el 46,5%, de regular; el 17,7%, de mala y sólo el 7,3% de muy mala, ahora, en el mes de octubre las respuestas son mucho más pesimistas. Sólo un 0,4% califican la “salud” de la economía de muy buena; un 4,6%, de buena; un 30,8, de regular; un 40,5%, de mala y un 22,9% de muy mala. Además, una abrumadora mayoría considera que la situación ha empeorado en el último año y mantiene que lo peor está por llegar.
Y el Instituto Nacional de Estadística, en la encuesta de estructura salarial de 2006 confirmaba el estancamiento del salario medio en los últimos años y el aumento de las desigualdades. El puesto de directivo es el mejor remunerado. Su salario bruto creció un 10% entre 2002 y 2006 mientras que para el del trabajador medio ha caído un 0,6%. Lo que ganaba un directivo en 1995 era el equivalente al 142% de la remuneración media de los asalariados. En 2006, llegó al 207%. Por supuesto, lo que más abunda entre los asalariados es el contrato de los “mileuristas”. En este contexto es normal que los sindicatos pongan pegas a las medidas urgentes que el Gobierno ha puesto sobre la mesa social para aprobar mañana, sábado en el Consejo de Ministros. Y el paro se ha convertido en una lacra social que veja e insulta al mejor de los Gobiernos.
1 comentario:
Asi es, Santiago. La estadistica sociológica ofrece una interpretación inequívoca del estado de cosas. Se trata de la supervivencia alimentaria, de temperatura, de ropa, de la dignidad del ser. Estos tipos no pueden ser socialistas. ¿Quien es ese Zapatero? Sin duda un impostor de las siglas del partido que representa.
chiflos.
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