miércoles, 10 de octubre de 2012

Despedida una tercera parte de El País y rebajas de sueldo para el resto.


Juan Luis Cebrián, presidente de Prisa.


Juan Luis Cebrián e Ignacio Polanco, presidente de honor (a la derecha)
El grupo Prisa confirmaba hace cinco días que preparaba un Expediente de Regulación de Empleo “que incluirá despidos, prejubilaciones y reducción salarial”. La empresa dio a conocer ayer la cifra total de bajas –150 trabajadores de los 440 empleados del periódico– y una rebaja general de un 15 por ciento de todos los sueldos, excepto el de Juan Luis Cebrián que está recibiendo uno de los más elevados de todos los directivos europeos. El proceso es “ineludible”, según el fundador de El País, primer director del mismo y presidente ejecutivo, porque “no podemos seguir viviendo tan bien”. La única manera de sobrevivir, según él, es “tener estructuras de costes que permitan sostener El País”. Cebrián, “que percibió 13 millones de euros en 2011”, según la nota difundida por el comité de empresa del periódico, ha explicado a los trabajadores que la actual plantilla tiene una edad media muy elevada, carece de profesionales con “perfiles digitales” y además resulta cara, con “un salario medio de 88.000 euros”.

La comunicación del ERE a los trabajadores del periódico más vendido de España llega dos días después de que su empresa editora, el grupo Prisa, haya cerrado otro proceso de regulación de empleo que finalizó con otros 90 despidos en Cinco Días, Prisa Revistas y Prisa Brand Solutions. El grupo Prisa ha rechazado la petición del comité de empresa que pedía “abrir un periodo en el que se explore la posibilidad de bajas voluntarias y otros procedimientos de ahorro en la masa salarial”. Prisa ha adelantado que el ERE incluirá un plan de prejubilaciones para los trabajadores a partir de los 55 años y que las delegaciones territoriales sufrirán despidos. Hace doce días, Prisa ya anunciaba el recorte en la paginación de los suplementos regionales. Andalucía y Galicia pasan de ocho a cuatro páginas y Euskadi y Galicia, de ocho a dos. Y, posteriormente, cerraba los suplementos regionales de Galicia, Euskadi, País Valencià y Andalucía. Según señalan fuentes de los trabajadores, Cebrián ha explicado que El País nunca había tenido vocación de montar una estructura territorial por España y sí de tener presencia sólo en Madrid y Barcelona. De hecho, afirmó que si decidieron montar delegaciones territoriales fue porque había “presiones de lobbies locales más o menos progresistas”.

El País ha difundido una nota en su versión digital en la que explica la reunión mantenida con los trabajadores y calificado las medidas tomadas por Prisa como “dolorosas”, aunque “inevitables”. Asimismo, recoge que la dirección ha explicado las cifras económicas que han llevado a la compañía a tomar esta decisión. Muestra “la caída de la difusión de la prensa en España en los últimos cinco años” y explica que, por cada dólar que se genera en Internet, se destruyen diez en el papel. Inmediatamente después de dar a conocer la propuesta, el presidente de Prisa, se ha “bunkerizado” en la cuarta planta del periódico –la planta noble– con los mandos del periódico: de redactores-jefe para arriba a los que les habría pedido lealtad absoluta ante los difíciles días de lucha que se avecinan. El exdirector de 'El País' Joaquín Estefanía protagonizó un enfrentamiento con Cebríán al que recriminó que, con la salida de 149 trabajadores, “el deterioro de la calidad del periódico puede ser irreversible”.Y le recriminó “el despido de 150 personas puede suponer un desgarro moral que puede afectar al deterioro de la calidad del periódico de manera irreversible".

Por su parte, los trabajadores han decidido en asamblea iniciar las medidas de presión: exigir que se retire el expediente de regulación de empleo (ERE) y un periodo de negociaciones para buscar soluciones alternativas a los despidos, en cumplimiento de lo establecido en la disposición adicional segunda del Convenio. Los trabajadores están dispuestos a llevar a cabo las medidas aprobadas en las asambleas celebradas el lunes pasado: un calendario de 18 días de huelgas, no firmar la presentación del ERE y la realización de una serie de acciones para difundir su punto de vista frente al expediente de regulación de empleo. Asimismo reprueban a Juan Luis Cebrián por “su falta de lealtad a la plantilla y su nefasta gestión como presidente”. Y le exigen que devuelva “buena parte de los millones de euros que ha cobrado en los últimos años”.

1 comentario:

Anónimo dijo...

EL PAIS era/és el órgano propagandista del PSOE. Su tufo panfletario convirtíó a este diario en un manual de complementos, de estilo ético y lecciones de urbanidad verdaderamente repelente. El paseante progre y neo-burgués, envuelta la barra de pan con EL PAIS y su suplemento dominical, caminaba por las calles del centro con la misma expresión beatifica y autocomplaciente de la feligresía catolicista. Orgulloso de su antifranquismo, de su coletita de Kandinski y la móvida. De la modernidad y de la postmodernidad. De su capacidad maniquea para convertir en objeto de culto lo que ya existía. De su retroprogresismo y de la antiglobalidad, y demás zarandajas. Hoy van quedando menos tipos de estos tan listillos y moralizantes y se van pasando al vino peleón. De la casa. Sin periodico y sin pan, a alimentarse de los aperitivos y tapitas que le pongan con su chato. Alguno probablemente descubra que la vida era real, no sólo inteligible mediante la lectura de EL PAIS, ni atisbada desde las plateas de los cines, teatros y salas de conciertos. Buena suerte, en todo caso.