Castor, un proyecto paralizado y compensado. Despedidas, premios y toros Jubilo.
Maqueta del Castor.
El pasado 28 de septiembre de año pasado publicábamos un amplio reportaje en estas páginas bajo el título: "Florentino provoca terremotos por las inyecciones de gas en El Castor". En él, advertíamos: "Ubicado frente a la costa de la localidad castellonense de Vinaròs, a 22 kilómetros de la costa y a unos 1.700 metros de profundidad, el almacén subterráneo de Gas Natural Castor, del proyecto del mismo nombre, iniciaba el 14 de junio de este año su actividad con los trabajos para el llenado de ‘gas colchón’ de la infraestructura, con casi un año de retraso sobre los plazos previstos inicialmente. El ‘gas colchón’ es el volumen mínimo de gas natural que debe haber en un almacén subterráneo para que se pueda extraer gas útil a la presión adecuada e introducirlo en la red… El acondicionamiento bajo el mar convirtió esta infraestructura en la más cara de los depósitos construidos hasta el momento –unos 1.300 millones de euros– y tan compleja que el promotor del proyecto, Escal UGS –participada por el grupo español ACS (66%) y la sociedad canadiense CPL (33%)–, contrató la segunda grúa flotante más grande del mundo para ensamblar la plataforma de perforación. Un gigante de casi cien metros de altura que, a las seis de la mañana del 26 de agosto de 2010, quedaba acoplado al suelo marino, a 92 metros de profundidad, y dispuesto sobre el antiguo yacimiento, preparado para horadar. Desde el 11 de septiembre de 2013, en que ACS comenzó a inyectar gas en el almacén subterráneo de El Castor, se produjeron, según datos del Servicio de Información Sísmica del Instituto Geográfico Nacional (IGN), 140 terremotos en el Golfo de Valencia, frente a la costa de Peñíscola, Benicarló y Vinaroz. Grupos ecologistas y partidos como Coalició Compromís criticaron duramente el excesivo número de terremotos y la falta de transparencia y de información de Escal. Compromís consiguió que Bruselas vigilase de cerca la sucesión de seísmos y sus consecuencias en la zona". Sin embargo, lejos de amainar, la avalancha de pequeños terremotos siguió creciendo. "El presidente de ACS, Florentino Pérez, dueño del almacén subterráneo, permitió inyectar gas colchón hasta que se terminaron las existencias que había destinado el Ministerio de Industria y Energía para poner a punto el reservorio. En sólo seis días, desde que el 11 de septiembre, la empresa del presidente del Real Madrid comenzara a inyectar gas, se produjo un centenar de terremotos, la mayoría de ellos de muy baja intensidad, aunque algunos llegaron a 3 grados en la escala Richter. Y, en los siguientes días, el numero de pequeños seísmos se dispararon hasta 140, la mayoría de baja intensidad, imperceptibles para el ser humano. El número alarmante en tan pocos días puso en guardia a los ayuntamientos de Vinaroz, Benicarló y Peñíscola, que exigieron a ACS más transparencia e inofrmación detallada sobre los mismos.
Una honda preocupación se
extendió por la zona afectada. Recaredo del Potro, presidente de Escal UGS,
la compañía controlada en un 70% por ACS, explicaba que “todo estaba previsto y
dentro de los parámetros esperados. Habíamos avisado de que se producirían
estos microseísmos, aunque no hicimos una estimación de cuántos podrían
producirse, dado que cada zona tiene sus propias condiciones y mecanismos
sísmicos. Por eso, decidimos comprar dos sismógrafos para que, desde el
Observatorio del Ebro, se siguiese con exactitud el proceso e informamos a los
ayuntamientos de que no había riesgo alguno para los ciudadanos”. Los tres
ayuntamientos de la costa afectados por los seísmos reconocieron que su
encuentro con Escal UGS había sido tranquilizador, pero que querían que la compañía
de Florentino Pérez fuese más transparente y facilitase toda la información
disponible, en línea con la que también ofrecía el IGN. Les preocupaba que los
microseísmos se siguieran produciendo, aunque Escal UGS hubiera dejado ya de
inyectar gas. Según su presidente, el 16 de septiembre fue el último día que se inyectó
pero, al día siguiente, hubo nueve seísmos que continuaron
produciéndose día tras día, aunque ya no se estuviera inyectando gas. Los terremotos, pese a
ser de baja intensidad, provocaron la alarma en la zona y duras críticas de los
alcaldes y grupos ecologistas. Los pequeños terremotos era casi imperceptibles
tanto en mar como en tierra, pero su gran número en tan poco tiempo dispararon
las alarmas en los municipios de la zona. En Escal UGS, afirmaron
que estos pequeños seísmos eran normales en este tipo de procesos de inyección
de gas en almacenamientos subterráneos y estaban previstos. Grupos ecologistas y
partidos como Compromís criticaron duramente si excesivo número y la falta de
transparencia y de información de Escal, que no había avisado de que habría
tantos seísmos durante tantos días seguidos. Y sólo entonces, José Manuel Soria,
ministro del ramo, ante un problema que podía írsele de las
manos, reconsideró su actitud e hizo que Industria dictara el cierre temporal
del almacén de Florentino.
Vista de la plataforma ubicada en el Delta del Ebro del
proyecto Castor.
Trece meses después de estos
sucesos, el sindicato de bancos que instrumenta la operación de indemnización a
la sociedad Escal UGS por el almacenamiento subterráneo de gas de Castor
ejecutaba el pago de los 1.350 millones de compensación fijados por el Consejo de
Ministros. El importe de la indemnización será financiado por los consumidores
de gas a
través de la tarifa a lo largo de 30 años a un tipo de interés del 4,2%.
Pagos que comenzarán a realizarse en 2016 a razón de unos 100 millones de euros al
año. Con él, acabaremos pagando un total de 3.000 millones de euros
por una indemnización que costaba 1.350 millones. Castor queda ahora en una
situación de hibernación en la que estará prohibido realizar cualquier
extracción o inyección de gas natural. La empresa de Florentino Pérez entiende,
señala el informe financiero anual, que la concesionaria del proyecto Escal UGS
tiene derecho a devolver la concesión en cualquier momento, durante los 25
años, a contar desde su otorgamiento, “con derecho al cobro del valor neto
contable de la misma salvo en caso de que se acreditara dolo o negligencia, en
cuyo caso el derecho será al cobro del valor residual. Inicialmente, el almacén
estaba presupuestado en cerca de 700 millones. Sin embargo, el ministro Soria,
señaló que el coste total se situaba
alrededor de los 1.700 millones, lo que supone 2,5 veces más. El
ministerio de Industria intentó, con un recurso al Tribunal Supremo, evitar el
pago de una indemnización en caso de extinción del contrato, pero el alto
tribunal lo desestimó, estableciendo que si no hay negligencia o “dolo”
atribuible a la empresa, y la instalación está en funcionamiento, el Estado
tendría que asumir el activo e indemnizar a los dueños de Escal por el valor
neto contable.
Imagen de la ampliación del proyecto Castor.
El pasado 3 de octubre, Consejo de Ministros aprobaba
un real
decreto que permitía el cierre de Castor después de que varios
informes certificaran que la planta de gas era la responsable de los centenares de
temblores registrados en las costas de Castellón y Tarragona. La
norma establecía
una compensación de 1.350 euros para la concesionaria de la instalación ESCAL, participada por el grupo ACS.
Aunque este importe es pagado en
principio por Enagás transporte, la OCU ha advertido de que serán
“realmente” los consumidores los que acaben pagando en su factura durante los
próximos 30 años esa cantidad, más un interés del 4,27% anual, lo que elevará
el importe final pagado por los consumidores de gas a 4.731 millones. “Una vez
más serán los consumidores los que finalmente tengan que hacer frente a la mala
gestión de nuestros gobernantes”, denuncia la organización de consumidores,
para quien se “socializan” las pérdidas de un proyecto “claramente perjudicial” para el interés público, y
que, en el caso de haber tenido éxito, habría favorecido fundamentalmente al
interés privado”. La OCU resalta que los consumidores españoles ya se
encuentran entre los que más pagan por el gas, y seguirán escalando posiciones
entre los más caros como consecuencia
del encarecimiento en la factura que supondrá esta medida, que se une al
déficit de tarifa del sector eléctrico que ya pagan los usuarios. La
organización anima a los consumidores a que se incorporen a www.quieropagarmenosluz.org,
la segunda compra colectiva de energía que buscará ofrecer a los consumidores
la mejor tarifa posible mediante una subasta de energía, entre las que se
incluye el gas y la electricidad.
Alberto Fabra, José Manuel Soria y
José Manuel García-Margallo, en una visita al Castor.
Una quincena de organizaciones de
la sociedad civil exigieron el pasado jueves a los grupos parlamentarios que impugnen la deuda ilegítima del
proyecto Castor. Escal UGS renunció al proyecto después de que el
Gobierno paralizara la inyección de gas. Varios informes técnicos constataron
que los más de 500 terremotos que registrados en la zona estaban directamente
relacionados con la inyección de gas en el depósito submarino, al haber
provocado la rotura de una falla. Entidades de la sociedad civil rechazaron la
indemnización a la empresa Escal UGS
y urgieron a los partidos a impugnarla ante el Constitucional. Entre ellas,
figuran la Alianza contra la pobreza energética, la Plataforma Ciudadana en
Defensa de las Tierras del Sénia y la Plataforma por un Nuevo Modelo
Energético. Estas organizaciones no sólo se pronunciaron contra el pago, sino
que interpelaron a los distintos grupos parlamentarios para que, a través de 50
diputados o 50 senadores, interpongan un
recurso de inconstitucionalidad contra este real decreto-ley ante el Tribunal
Constitucional antes de que finalice el plazo para hacerlo, el 3
de enero de 2015.
Mónica Guiteras: “Pedimos el no pago, pero
también exigimos responsabilidades”.
Mónica Guiteras, analista del
Observatorio de la Deuda en la Globalización y miembro de la Alianza contra la
Pobreza Energética, explica: “Creemos que hay responsables en las
Administraciones que han tomado parte en los diferentes momentos de desarrollo
del Castor, y también responsabilidad del actor privado, UGS. Otro actor
público es el Banco Europeo de Inversiones. Pedimos el no pago, pero también exigimos
responsabilidades”. Las organizaciones anteriormente
mencionadas urgen a los representantes de los diferentes grupos políticos para
que un mínimo de 50 diputados o
senadores impugnen el real decreto ante el Tribunal Constitucional antes
de que termine el plazo para presentarlo, el 3 de enero de 2015. Participada en
el 66,6% por ACS, Escal UGS presentó su renuncia el pasado verano a la
concesión del almacén y hace poco más de un mes se aprobó el real decreto que
le garantizaba una indemnización de 1.350 millones de euros, a cargo del
sistema gasista, permitiendo también la hibernación de las instalaciones
indefinidamente. Las organizaciones firmantes apoyan la hipótesis de que, en la
práctica, la cantidad total que asumiría la ciudadanía podría ascender a más de
4.700 millones de euros, a pagar durante
30 años. A esta cantidad hay que añadir los 100 millones de euros anuales para el mantenimiento de las instalaciones,
más otros costes de operación y administración en que incurrirá Enagás, el nuevo
gestor de las instalaciones. Denuncian que, en un momento de especial
fragilidad económica por el aumento del desempleo y los recortes sociales, “donde
la pobreza energética ya afecta
al 17% de la población, la ciudadanía verá como sus facturas se incrementan aún
más”. Las organizaciones firmantes también proponen la participación de la
ciudadanía en una recogida de
firmas a través de la plataforma Avaaz para dar su apoyo a la
impugnación y presionar en el cumplimiento de estas demandas. El almacén de
gas, situado en el subsuelo del Mediterráneo cerca de la costa de Vinaròs (Castellón), será hibernado,
lo que significa que no habrá ninguna inyección o extracción de gas en el
subsuelo, aunque esta situación se podrá revertir en el futuro si los estudios
técnicos lo aconsejan.
Santamaría anunció que el Gobierno
indemnizaría a Escal UGS, sociedad controlada por ACS, grupo
presidido por Florentino Pérez, el hombre del Castor.
El Gobierno no ha hecho esperar
mucho a su deudor, Florentino Pérez, por la indemnización por el cierre del
Castor. El pasado verano, Escal había presentado su renuncia a la concesión del
almacén y hace poco más de un mes se aprobó el real decreto ley 13/2014 que le garantiza una indemnización de 1.350
millones de euros, a cargo del sistema gasista. Este importe
debía ser abonado en un solo pago, en el plazo de 35 días hábiles desde la
publicación del real decreto. El plazo vencía el 14 de noviembre. El importe de
la indemnización será
financiado ahora por los consumidores de gas a través de la tarifa a lo largo
de 30 años a un tipo de interés del 4,2%. Los pagos comenzarán a
realizarse en 2016, a
razón de unos 100 millones de euros al año. El Consejo de Ministros aprobaba el
viernes, 3 de octubre, un real decreto ley en el que se establece la hibernación del almacenamiento subterráneo
de gas de Castor y se reconoce una compensación de 1.350 millones de euros para la empresa promotora,
Escal UGS, cuyo importe asumirá en un primer momento Enagás y se irá repercutiendo durante 30 años en la
tarifa de gas. La compensación será abonada por Enagás, a través de su
filial Enagás Transporte, en una operación “muy ligada a la financiación del
BEI”, señala Soraya Sáenz de Santamaría en la rueda de prensa posterior a la
reunión del Consejo de Ministros. La vicepresidenta del Gobierno asegura que el
real decreto ley aporta una “solución” a un proyecto que ha quedado suspendido por los seísmos detectados en la
zona y que fue aprobado en mayo de 2008 a través de un decreto
con varias cláusulas para las que el actual Gobierno “intentó una declaración
de lesividad” ante los tribunales. “La solución –añadió Santamaría– permite
reducir el coste para el sistema frente al coste de almacenamiento en caso de
haberse puesto en marcha las instalaciones como estaba previsto”.
Florentino, satisfecho, ya cobró
los 1.350 kilos.
Escal UGS, sociedad que obtuvo la concesión del
almacén de gas de Castor, participada en un 66,67 % por el grupo ACS de
Florentino Pérez, recibió el pasado 11 de noviembre los 1.350,7 millones de indemnización
fijados por el Gobierno por la paralización del proyecto. Según las cuentas
enviadas por ACS a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el
martes pasado fue abonada esta cantidad como compensación a la inversión
realizada en Castor y por los derechos retributivos devengados (pagos
financieros y costes de operación y mantenimiento). La llegada del dinero se ha
producido en un tiempo récord pues fue el pasado 3 de octubre cuando el Consejo
de Ministros aprobaba un real decreto-ley en el que aceptaba la renuncia a la
concesión de Castor presentada por la participada por ACS y fijaba el importe
de la compensación. Los 1.350 millones de indemnización los asumió en un primer
momento Enagás, empresa con participación pública que actúa como transportista
de gas, pero a cambio de un derecho de cobro con cargo al sistema gasista, es
decir, a los consumidores, que será quienes abonarán este coste a través de la
tarifa más un interés. El dinero ha sido adelantado por tres entidades
financieras (Bankia, Santander y Caixa Bank). Félip Puig, consejero de Empresa
de la Generalitat catalana, anunció que su gobierno ultimaba un recurso de
inconstitucionalidad contra el decreto ley por el que se abonó la indemnización
de 1.350 millones y adelantó que se basaría en tres puntos: “En la negligencia
de contrato” ya que, según el consejero, el documento contractual presenta
numerosos defectos y “repercute únicamente en beneficio de la empresa
concesionaria”; “no se han estudiado los
riesgos” que suponía implantar esta industria sobre el territorio por lo que
“estamos ante un problema de posible negligencia a la hora de hacer proyectos y
estudios sísmicos que parece que no se hicieron”; finalmente, el recurso se
basará en la “valoración que se hace de la infraestructura, que se le da un
valor del 100 % de la inversión”. “Una infraestructura que no se pone en
servicio debería tener un valor residual muy reducido”, explicó, apuntando que
la indemnización debía haberse movido entre el 0 y el 10% del coste en lugar de
lo que ha hecho el Gobierno, utilizar un “elemento jurídico dudoso” como la
hibernación para pagar el 100%. Puig lamentó “las decisiones incongruentes del
Estado español” ya que, por un lado, suspende el decreto contra la pobreza
energética y, por el otro, corre mucho para atender la indemnización por
Castor”.
El almacén de gas, situado en el subsuelo del Mediterráneo cerca
de la costa de Vinarós (Castellón) y cuya construcción se paralizó en
septiembre del año pasado al detectarse seísmos en la zona, será hibernado, lo
que significa que no habrá ninguna inyección o extracción de gas en el
subsuelo, aunque esta situación se podrá revertir en el futuro si los estudios
técnicos lo aconsejan. El dinero, adelantado por tres bancos a un interés del
4,2%, ya lo ha cobrado la empresa. Los ciudadanos lo pagarán en el recibo del
gas durante los próximos 30 años, y la cantidad total, con los intereses, será
de unos 4.000 euros. Además, también habrá que pagar unos 100 millones de euros
por el mantenimiento de las instalaciones, que no se han desmantelado. Cuando
se habla de grandes cifras económicas la ciudadanía se pierde y no alcanza a
valorar lo que significan. Sin embargo, a pesar del dicho de que las
comparaciones son odiosas, cuando se colocan juntas dos cantidades se pueden
entender mejor. Este es el caso del dinero destinado a becas en este curso –Wert confirma que el dinero para becas cayó
75 millones el curso pasado– y el que se va a llevar la constructora ACS en
concepto de indemnización tras la paralización de su almacén submarino de gas
en el denominado proyecto Castor, tras los más de 500 terremotos que originó en
la costa.
(La duquesa de Alba durante la gala de entrega de los
Premios Jubilo 2008)
La Duquesa de Alba, la misma que recibiera, en diciembre del 2008, el Premio
Jubilo por envejecer bien, un galardón que se
concede a los personajes por su trayectoria en su madurez, fallecía el pasado
el jueves en el sevillano Palacio de Dueñas a causa de una neumonía. Cayetana
Fitz-James Stuart y Siva, duquesa de Berwick y Grande de España
hasta catorce veces, moría a los 88 años de edad. La capilla ardiente,
instalada en el Salón Colón del Ayuntamiento de Sevilla, fue visitada por más
de ochenta mil personas. El líder del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT),
Diego Cañamero fue el único personaje público que rompió la unanimidad en
los elogios a Cayetana. Frente al silencio o las declaraciones de
compromiso mantenidas por el resto de dirigentes de la izquierda social y
política, Cañamero fue claro y directo: “Siento su muerte como se siente la
muerte de cualquier ser humano, pero ha pertenecido a los terratenientes que
han sido una casta
social nefasta para Andalucía”. El secretario general del SAT
recordó que la duquesa de Alba tenía 34.000 hectáreas
de tierras “que daban menos jornales que la cooperativa de Marinaleda”. Según
los técnicos del ministerio de Hacienda (Gestha), el 90% del patrimonio de la
Casa de Alba, con valor estimado entre los 2.200 y 3.200 millones de euros,
está exento del
pago de impuestos debido a su consideración de Patrimonio Histórico
y por la cesión de obras de arte y antigüedades a la Fundación Casa de Alba. La
cantidad libre de impuestos se encuentra entre los 2.065 y los 2.875 millones
de euros, de los que tres cuartas partes corresponden a la exención de bienes
integrantes del Patrimonio Histórico español. Además, el patrimonio de la Casa
de Alba tributa en la comunidad autónoma donde tiene su residencia habitual su
titular (Madrid), por lo que sólo paga a Hacienda 6 millones de euros. El
patrimonio de Cayetana ronda los 3.000 millones entre palacios, castillos,
fincas, explotaciones ganaderas, propiedades inmobiliarias, valores bursátiles
y una gran colección de arte. Es muy probable que la cifra de su fortuna sea la
que da la revista Forbes, que la situaba entre las diez mayores fortunas
del país. Entre su patrimonio hay monumentos,
gestionados a través de la Fundación Casa de Alba, y obras de Velázquez,
Rubens, Goya o Tiziano. Entre algunas de sus posesiones, se encuentran el
madrileño Palacio de Liria, el Palacio de Dueñas en Sevilla o el Palacio
Monterrey de Salamanca.
La duquesa de Alba presumió
de ser una aristócrata que nadaba contra corriente. El estilo distendido de
vida que eligió, sus tres matrimonios y el eco que siempre tuvo en la prensa
del corazón rompieron ocho siglos y 17 generaciones de rigurosa discreción.
Cayetana de Alba fue la persona que más títulos nobiliarios atesoraba en el
mundo, según el libro Guinness de los Records. La duquesa de Alba presumió de
ser una aristócrata que nadaba contra corriente. Muchos la recuerdan cuando
tachó de “delincuentes, chorizos y locos” a quienes se oponía a que fuese
nombrada “hija predilecta” de Andalucía.. Murió en su residencia del Palacio de
Dueñas, del siglo XV, en Sevilla, y, fiel a su estilo rompedor. Sus restos fueron
incinerados. Parte de las cenizas fueron depositadas en una capilla lateral de
la iglesia del Cristo de los Gitanos de Sevilla, a cuya hermandad pertenecía la
duquesa y era ferviente devota. El resto fue colocado en el monumental panteón
de la Casa Ducal de los Alba, en la localidad madrileña de Loeches. El epitafio
elegido por ella misma para su tumba dice: “Aquí yace Cayetana, que vivió como
sintió”.
“Cuentan –escribe el dibujante
Pep Roig en el dominical de Última Hora– que el rey Felipe II y su esposa,
Isabel de Valois, presidieron desde los ventanales del Palacio Ducal de
Medinaceli (en Medinaceli, Soria) la fiesta cuyo aliciente central consistía en
colocarle unas bolas en la cornamenta a las que se les prende fuego, para
espanto del animal. Era 29 de septiembre de 1559, pero la celebración venía de
tiempos pretéritos, según historiadores, de la época en que los íberos poblaban
la zona. Desconozco, aunque juraría que no, si ante la presencia del mencionado
rey se convocaban manifestaciones en contra de la tortura festiva del bicho, al
que sucesivamente se le conoce como el ‘El toro Jubilo’ (término que proviene de
sacrificio jubilar y jubileo o indulgencia, no de júbilo). Actualmente no hay duda de los enfrentamientos
entre los que quieren, fomentan y participan en las corridas y los animalistas
que acuden para tratar de evitar el estropicio”. Y termina el artículo
comentando: “El toro tiene que sufrir, porque, si no sufre, no hay fiesta”. Así
se lo dijo alguien al periodista de una cadena de televisión que le preguntaba:
es la mejor definición de lo que se pretende, el alegre sufrimiento. Convencido
estoy de que si le hubieran preguntado al toro, de haber sabido hablar, éste habría
contestado algo así como: ‘Estoy muy contento de que este año me hayan elegido,
porque así habré culminado mi deseo de sufrir por el bien y la felicidad del
pueblo. Me encanta verles las caritas que ponen cuando prenden fuego a mis
bolas (adosadas) y a mí se me pone cara de terror’. Desde 2008 –termina Pepe
Roig comentando– mis dibujos están plantados en los ventanales del Palacio Ducal de Medinaceli
(en Medinaceli, Soria) y, como Felipe II, contemplan la fiesta. No sé yo si…”
Así muestra gráficamente Lamoscacojonera.blog
la indemnización del Castor. Así se puede leer una frase, según dónde tenga la
coma. Así vieron por última vez algunos humoristas a la Duquesa de Alba. Y así
vuela Monago en Airlines.
Erlich muestra su humor
inteligente:
Otros humoristas de la prensa
plasmaron sus obras en la prensa: Forges, M. Fontdevila, El Roto, L’ Avi, Peridis,
Ferrán, Raúl Salazar, Vergara, A. López…
Desde Mallorca, Pep Roig hace su
peculiar humor: Porquería política a flote, Esto es un atraco, Mirando hacia
otro lado. Política ficción y Desolación Nacional.
En los videos de esta semana, empezamos con el nuevo anuncio del sorteo de la Navidad. Algo extraordinario sucede en el bar de Antonio. Manuel, como algunos días después de comer, a tomarse un café, uno de los pocos 'caprichos' que aún se resiste a dejar. “¿Qué te debo?”, pregunta, disponiéndose a marchar. “Veintiún euros”, le responde Antonio. “¿Cómo que veintiún euros? ¿Por un café?”. “Es que verás, Manu... yo…, yo te había reservado un décimo como una sorpresa. No sé por qué, pero este año estaba convencido de que nos iba a tocar... Y ahora.... Mira, el décimo está aquí". Antonio coge un sobre, lo abre y muestra un décimo de lotería mientras se lo tiende a Manuel. “Pero... yo ya te dije que este año no quería ningún décimo”, le dice a su amigo del bar. “Somos amigos desde hace tiempo, Manuel. Me pareció un detalle bonito”, le responde Antonio, algo nervioso. “Sí, bueno, no... No sé... Te lo agradezco, pero... No te lo puedo pagar”. La situación se va volviendo cada vez más tensa en el bar.”Joder, Manu, no eres tú sólo el que está jodido... Que la cosa está difícil para todos”. “Pero yo no te pedí el décimo. ¿A mí qué me cuentas?”, le dice Manuel dirigiéndose a la puerta. “Qué cabrón. Si hubiera tocado seguro que perdías el culo por darme los veinte euros. ¿Y ahora quién me paga a mí este décimo? ¿Qué hago con él, me lo como?”. “¿A mí qué? Y cabrón será tu padre...”, contesta dándose la vuelta.
Antonio sale de detrás de la barra hecho una fiera, agarra a Manuel por las solapas y lo tira al suelo de un empujón. Manuel se defiende a base de golpes contra su amigo. Minutos después, ambos resoplan en el suelo con algo de sangre en los rostros mientras la tele sigue con los afortunados... Pero el video no cuenta esta versión, sino con la que le interesa. Que es ésta:
En el segundo video, el equipo de El Hormiguero 3.0 parodia el emotivo anuncio de la lotería de 2014. En el papel del desafortunado perdedor se encuentra Mariano Rajoy que, por consejo de Soraya Sáenz de Santamaría, baja para felicitar a los nuevos ganadores que no son otros que los de Podemos. Tras la barra, Pablo Iglesias, que le tiene guardada una sorpresa a Rajoy.
Casualmente, un miembro del PP se pronuncia sobre una secuencia de Polònia, el espacio de sátira de TV3. El PP acusa a Polònia, según informa Infolibre, de “banalizar el nazismo”. Y añade: El espacio ‘Polònia’ parodió una de las más célebres escenas de la película ‘El hundimiento’ sustituyendo a Hitler por Mariano Rajoy. Enric Millo, portavoz parlamentario del PP catalán, asegura que el gag hizo “apología de la violencia” con imágenes que “fomentan el odio, el menosprecio y la discriminación”.
Tras dura entrevista de Ana Pastor con Pablo Iglesias en el Objetivo de la Sexta, los compañeros del mismo hacen una divertida sátira en su plataforma audiovisual, La Tuerka, donde salen a relucir los modos que se gasta Ana Pastor en las entrevistas, con Facu Díaz asumiendo su papel. La periodista se ha tomado bien la sátira –consiguió su récord de audiencia con la entrevista del domingo– y la ha difundido también en la red.
En el último vídeo, las imágenes y declaraciones del secretario general del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), Diego Cañamero, lamenta la muerte de la Duquesa de Alba “como cualquier vida humana”, aunque apunta que pertenece a “una casta social que supone un insulto para la inteligencia del ser humano”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario