Defensa, Semana Santa y los pensionistas.
Cospedal y su marido, con representantes del Ejército, en un iglesia.
Jueves Santo, en Málaga, la Legión desfila con el Cristo de
Mena.
Cospedal da inicio a la procesión del Cristo de la Brigada Paracaidista.
Con todo el conflicto que hay con
los pensionistas de este país, a Mariano Rajoy no se le ocurre otra cosa que
invertir casi 10.000 millones en nuevos programas de armamento para el
Ministerio de Defensa, al mismo tiempo que dice a los pensionistas que no hay
dinero para las pensiones. Y esta Semana Santa vuelve a ondear la bandera a
media asta en los centros militares, cuarteles y el propio ministerio. De esta
forma, para conmemorar la muerte de Cristo en los cuarteles militares, el
Ministerio de Defensa se suma al “duelo nacional”. Y María Dolores de Cospedal confirma que
mantendrá la decisió que ya se tomó el año pasado y que llevan más de dos
décadas desarrollando. En una nota de prensa emitida por el Ministerio, se
asegura que militares del Ejército de Tierra, la Armada y el Ejercito del Aire,
participarán este año en más de 200 actos celebrados con motivo de la Semana
Santa. Profesionales militares acompañan
de “forma voluntaria” distintas procesiones en diversas ciudades. Y la
Congregación de Mena celebra, una vez más en un acto militar-religioso, el
traslado de su imagen al trono procesional a 160 pasos por minuto, con las
letras más emblemáticas de la Semana Santa de toda España: El ‘Novio de la
muerte’, una de las sintonías clásicas de la Semana Santa de toda España.
Mientras tanto, no olvidemos que el
Ministerio de Defensa pretende comprar Fragatas F-110, blindado 8×8, sustituir
los viejos BMR, los aviones cisterna y los Drones y Submarinos S-80 (el
submarino que no flota). Además, el Ministerio de Defensa se gastará más de
cuatro millones de euros en lavar su imagen y su historia. Este nuevo plan se
aprueba días después del último ciclo inversor, un conjunto de siete programas
cuyo coste se ha estimado en 10.805 millones de euros.
El nuevo gasto se realiza sin que
Fátima Báñez, la ministra de Empleo y Seguridad Social haga el menor gesto de
desacuerdo y sin el menor reproche de la Santa Madre Iglesia. Esta, que disfruta
de un verdadero paraíso fiscal, según afirma Europa Laica en su informe
Opacidad y Financiación de la Iglesia Católica, mira para otro lado. Y se
vuelca, como cada año, en la Semana
Santa. Así, mientras aumenta la pobreza se siguen privatizando los servicios
públicos, el Estado aporta a la Iglesia, a través de subvenciones directas y
exención de tributos, una cifra que supera los trece mil millones de euros
anuales. E Iglesia y Defensa se abrazan y congratulan mutuamente, mientras los
pensionistas demuestran, una vez más, su capacidad ilimitada de resistencia.
1 comentario:
Terrible panorama.
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