jueves, 26 de noviembre de 2009

La visita del Papa: "No con mis impuestos".

Apoyo papal de las principales empresas españolas.


“No a la visita del Papa a España en 2011 –reza un lema en la red social Facebook, como iniciativa ciudadana durante los últimos días que ha recabado numerosos apoyos–. No con mis impuestos. Rechazamos la visita del Papa porque España es un Estado aconfesional y entendemos que no debe privilegiar a ningún líder religioso ni promover o beneficiar a ninguna religión con dinero público”. Los promotores de esta protesta están en sintonía con el movimiento que llenó los balcones de Valencia cuando Benedicto XVI vino por primera vez a España, en 2006, para participar en el V Encuentro Mundial de las Familias: “No te esperamos”. Y se oponen a que la Administración Pública sufrague la mitad de los gastos (unos 55 millones de euros) de la Jornada Mundial de la Juventud.

Por el contrario, el cardenal de Madrid, Antonio María Rouco Varela, califica esta visita de “evento de escala mundial” y sigue preparándola con esmero, poniendo toda la carne en el asador para que sea un éxito más, gracias al incentivo económico. Hace pocos días el presidente del Episcopado lograba recabar el apoyo de las principales empresas españolas, las que cotizan en el Ibex-35. La reunión, auspiciada por el presidente del banco Santander, Emilio Botín, y por el de Telefónica, César Alierta, tuvo lugar en el Hotel Villa Magna de Madrid y contó con la presencia de una veintena de empresarios. La propuesta lanzada por el cardenal de Madrid, fue la de relanzar la Fundación Madrid Vivo, creada hace casi un año. Hasta la citada reunión, únicamente Telefónica, Santander y El Corte Inglés estaban dispuestos a financiar la visita del Papa. Sin embargo, la presión ejercida por Botín y Alierta ha solidarizado a empresas como Iberia, FCC, Gamesa, Banesto, Sacyr, OHL, Técnicas Reunidas o Telecinco.

En Julio de 2006, el Papa visitaba Valencia, consiguiendo sus propósitos. El acontecimiento costó 12 millones de euros por un solo un día, y estuvo apoyado económicamente por las tramas de corrupción y falsas empresas creadas por el presidente de la Generalitat, Francisco Camps y por su amigo “el bigotes”. En el 2011, el coste estará en parte subvencionado por la Administración Pública socialista que permitirá que los gastos salgan del bolsillo de los contribuyentes españoles, sean o no creyentes. Será, por decisión administrativa de unos políticos que no comulgan con la Iglesia, pero que desean estar bien con ella. De esta manera, los millones de euros que costará la visita papal, será subvencionada por todos los contribuyentes españoles, creyentes, ateos o agnósticos, metidos en el mismo saco y obligados a financiar este acto religioso. Así que, si es usted consciente de lo que van a hacer con sus impuestos, exija que vayan encaminados a otras obras más urgentes y necesarias. O adhiérase a esta protesta de Internet.