jueves, 30 de junio de 2011

El cáncer de azafato.



La estatal Venezolana de Televisión (VTV) difundía ayer las imágenes del presidente, Hugo Chávez, con el ex presidente cubano, Fidel Castro. Es la segunda vez que aparecen fotografías del venezolano desde que el pasado 11 de junio fuera operado de urgencia por un absceso pélvico en La Habana, donde continúa recuperándose. Las imágenes tratan de calmar los rumores, que aumentan, sobre la posible situación de gravedad de Chávez, que incluso ha llegado a que se difunda falsamente su fallecimiento. En las imágenes en movimiento, Chávez, vestido con una sudadera del chándal oficial de la selección venezolana, y Castro, también de chándal y con una gorra roja, conversan animadamente. La grabación de VTV, titulada 'Fraternal encuentro entre Fidel y Chávez', apenas dura unos minutos. Al parecer, este encuentro se produjo el martes, 17 días después de que el presidente fuera operado. Anteriormente, tanto Fidel como su hermano Raúl, actual presidente cubano, le han visitado en el hospital para conocer de primera mano su estado de salud.

Con este mismo título (“El cáncer de azafato”), Gustavo Coronel publica, en Lic. Scolaro (Argenlibre), un artículo titulado que dice así: “La tan anunciada operación de rodilla no fue tal. Fue una extirpación radical de próstata. La vanidad (hombría) de HCh los llevó a inventar lo de la rodilla. El resultado de biopsia post-op fue malo. Se planificó viaje a Cuba para hacer PET scan en el CEMIC (querían evitar traslado en Caracas a uno de los dos centros privados que tienen PET scans operativos) y determinar si había metástasis. Para distraer la atención de la enfermedad, y contra la opinión de los médicos, se programó viajes relámpago a Quito y Brasilia.

“Llegando a Cuba la subió la fiebre y lo llevaron directo a CEMIC. Al llegar detectaron una infección inguinal severa post operatoria. A los pocos días queda controlada la infección, pero los resultados del PET scan son poco alentadores al verse actividad celular anormal en los huesos. Se determina que hay que tratar con radioterapia y se fijan sesiones diarias por 25 días, descanso de 10 días y otras 25 sesiones.

“Hay mucha preocupación médica por el tema óseo y no se decide aun como tratarlo. Especialistas de Alemania, Rusia y España han visitado el CEMIC. Hay mucha discusión sobre como anunciar todo esto, pero están preparando contingencia. La caída del pelo no se puede solventar en el caso de Chávez con peluca y su estado anímico ha sido terrible; es fatalista y cree que esto se lo ‘hizo’ alguien. No recomiendan que tome sus medicinas para la depresión mientras esta en radioterapia.

“Hay posiciones encontradas sobre el secretismo: parte de la familia dice que la gente no es “pendeja” y sabe que algo está MUY mal; la otra parte de la familia considera que si se sabe que esto es mucho más grave o el presidente podría estar incapacitado por meses se desataría una guerra dentro del chavismo que ningún miembro de la familia sobrevivirá”.

miércoles, 29 de junio de 2011

De Cospedal y la marcha real.





Así se presentó María Dolores de Cospedal, en la procesión toledana del Corpus, el domingo pasado. La nueva presidenta de Castilla La Mancha vestía de riguroso negro escarabajo en su primer acto oficial y para el acto fuese redondo, hizo caso omiso de las normas legales y permitió, qué digo yo, exigió que la banda (de música) del Ejército interpretara el himno de España. El Reglamento de Honores Militares prohíbe que se toque esa melodía en actos religiosos, pero es que el momento, para la María Dolores, ahora que es presidenta, lo exigía. Y como premio a su acto de presencia y unión con la Iglesia, le llovieron vítores y aplausos. Alguien, según dice Qaesar en “El Ventano”, comentó que la indignación también ha llegado a la soldadesca y que, a partir de ahora, van a tocar el himno donde les apetezca, digan lo que digan los reglamentos. En realidad, ya se viene haciendo desde años ha.

Así de elegante y de feliz estaba la Cospedal, presidiendo la procesión del Corpus de Toledo. La gente, por lo que se vio en televisión, la debía saludar con entusiasmo y ella respondía discretamente y con gran contento. Aunque su presencia despertaba alguna duda. Porque la señora de Cospedal, que, además de presidenta Castilla La Mancha, está divorciada de su primer marido y se volvió a casar con otra persona, en tal situación, ¿puede y debe ir a misa los domingos y fiestas de guardar y puede acudir a la procesión del Corpus tanto a título privado como en su condición de autoridad? Dicen que una persona en su situación no podría acercarse a recibir la comunión porque no reúne las condiciones para ello. En cambio, ella no sólo comulgó sino creó un gravísimo problema en la archidiócesis. Porque, a partir de este domingo, todo divorciado que se vuelve a casar, si se acerca a comulgar y el sacerdote le niega la comunión siempre podrá contestarle que hace como la Cospedal, la nueva presidenta.

“Ataviada con teja y mantilla, como salida de una tonadilla de Concha Piquer, la Cospedal –según escribe Amadeu Fabregat en La Nueva España– se ha convertido en el icono de la España que empieza a amanecer. Me ha gustado mucho ese revival del nacional catolicismo que me devuelve a mi niñez de clavariesas de Santa Teresa y procesiones cortando el tráfico. Lastima que se haya pasado el primer trimestre del año, que si no me hubiera organizado los siete domingos de San José, para ponerme a tono con la que se avecina. La mantilla de María Dolores ha sido estos días más analizada y debatida que la Sábana Santa de Turín, una orgía semiótica. Como si, al clavarse la teja en el moño y calzarse esos voluptuosos tacones de aguja que hubieran vuelto loquito a Buñuel, la Cospedal, más sensual que nunca, de luto riguroso por la España agonizante de Zapatero, se hubiera transfigurado”.

A lo mejor, todo este montaje no es más que una trampa para la derecha que no tiene ninguna fórmula novedosa en contra de la crisis y ha decidido sacar las mantillas y los crucifijos, igual que en algunos pueblos sacan a las vírgenes para invocar la lluvia, a ver si cuela. “La teja de la Cospedal es como el preámbulo del programa del PP, que parece decidido a encomendar a Dios las soluciones que los hombres no han sabido arbitrar. Bien mirado, tiene su lógica: sólo un milagro puede salvar a España, y con un Gobierno de ateos no parece probable que tal evento vaya a producirse. Dios va a lo suyo, como los banqueros, y no labora para el enemigo”.

martes, 28 de junio de 2011

Los “indignados”, insultados



“De los indignados –escribía ayer Ignacio Escolar en su blog Escolar.net– se ha dicho que son sediciosos, agresivos, pulgosos y lujuriosos, ilegales, perroflautas, violentos, delincuentes, golpistas como Tejero, totalitarios, antisistema, que tienen entrenamiento en kale borroka de ETA, que son una guerrilla urbana, cuatro gatos malcontados, niñatos enrabietados, batasunos, cachorros de Rubalcaba, ratas, insalubres, delirantes… Cuesta encontrar un colectivo más insultado en menos tiempo. Y cuesta todavía más encontrar a una movilización más inmune a las calumnias. Hace un mes, cuando aparecieron en escena, las encuestas en la prensa daban un mayoritario respaldo social a este movimiento y a sus reivindicaciones. Este fin de semana, tras una durísima campaña en su contra, una nueva encuesta ha corroborado que mantienen intacto ese respaldo ciudadano; ni siquiera estas toneladas de manipulación y propaganda han bastado para sepultarlos.

“Desde la derecha –de donde salen la mayoría de estos insultos–, primero elogiaron el espontáneo movimiento. Después, aseguraron que era una operación de Rubalcaba para las municipales. Más tarde los ridiculizaron como pulgosos pacifistas y por último los tacharon de proetarras violentos. Cada tres o cuatro días, más o menos, pronostican el fin de este movimiento; siempre con el mismo acierto. Como los que protestan han sido siempre los mismos, cabe preguntarse si se puede ser a la vez pacifista, violento, etarra y esbirro de Rubalcaba. La contradicción hasta en los insultos da la medida adecuada del miedo que a algunos les provoca esta protesta”.

Paralelamente a estos insultos, comienza hoy en Las Cortes el debate del Estado de la Nación. Veremos si los principales partidos acaban aceptando algunas de las propuestas lanzadas y presentadas por los “indignados” o siguen en sus puestos lanzándose puyas para demostrar así quién es el más fuerte. Y veremos para qué sirve esta política si sigue convertida en eso. Con el objetivo de ampliar los temas de debate en el Congreso, Esquerra Republicana (ERC), IU-ICV y el Bloque Nacionalista Galego (BNG) han estudiado en los últimos días la preparación de propuestas de resolución sobre la base de algunas reivindicaciones del Movimiento 15-M. Su propósito es hacer más fuerza, presentando textos conjuntos en el debate. “No queremos que esto se interprete como una instrumentalización del 15-M –explican algunos que acompañan a la diputada de ICV, Nuria Buenaventura–, pero es cierto que estas son reivindicaciones que tanto nuestra formación como otras ONG y colectivos de la sociedad civil venimos defendiendo desde hace mucho tiempo. En cualquier caso, apreciamos que [los indignados] hayan sido capaces de poner en la agenda estas propuestas, algo que nosotros no hemos conseguido”.

“Aquí –repiten en la Asamblea Popular del barrio madrileño de Arganzuela–, a diferencia del Congreso, sí que se van a tocar los temas que ocupan y preocupan a los ciudadanos”. Los indinados del 15-M celebrarán mañana y el jueves en la Puerta del Sol un debate alternativo sobre el Estado de la Nación que transcurrirá paralelo al del Congreso de Diputados. Los temas a tratar son Economía y Derechos Sociales, Política y Ciudadanía. El movimiento plantea un “debate alternativo, crítico y constructivo, que aborde los problemas reales que afectan al conjunto de la población”. La idea surgió de la Asamblea Popular de Arganzuela. que lleva reuniéndose ininterrumpidamente desde el sábado y tiene previsto hacerlo también este martes. En la Puerta del Sol se va a montar una especie de escenografía imitando al Parlamento.

domingo, 26 de junio de 2011

Los “pobres” líderes de la política valenciana y otros desatinos.





El Boletín Oficial de las Cortes valencianas (BOC) publicaba el pasado viernes la relación completa de actividades y bienes patrimoniales de los diputados. Los líderes de la política valenciana enseñan sus cuentas, como magos magistrales, en las que se presentan más como “pobres” que como ricos hacendados. Francisco Camps, presidente de la Generalitat valenciana declara tener sólo 4.011 euros en el banco, de los que 2.796 pertenecen a una cuenta propia y 1.215 al 50 por ciento de otra, compartida. Asegura poseer sólo el 50 por ciento de una vivienda en Valencia con un valor catastral de 111.442,65 euros, un vehículo del año 1995 de 1.300 euros y un plan de pensiones en Bancaja por 8.239,11 euros. El presidente de la Generalitat declara ejercer este cago desde el 26 de junio del 2007, y ser presidente de varias fundaciones, como la Premios Rey Jaume I, ciudad de las Artes y las Ciencias, la Llum de les Imatges o Play de les Artes, responsabilidades, según él, no remuneradas. Rafael Blasco, portavoz del PP en las Cortes, declara tener cuatro viviendas en la provincia de Valencia, de las que no figura el valor catastral, y otros bienes de naturaleza no inmobiliaria --como cuentas bancarias y un Audi-- que suman 158.849 euros. En cuanto a los préstamos, son tres distintos con un valor total de 114.469 euros. Preside también el Alto Consejo Consultivo, el Consorcio Hospitalario Provincial de Castellón y el Comité Estratégico de Política Territorial de la Comunitat, y es miembro del Comité de las Regiones, y vocal de organismos como el Consorcio Casa del Mediterráneo. Por su parte, Alarte asegura poseer sólo una vivienda cuyo valor catastral asciende a 38.624,42 euros y 600 euros en una cuenta bancaria, mientras que en el apartado de pasivo aparece un préstamo hipotecario de 127.172 euros, del que resta por pagar 82.640 euros.




Rita Barberá, la alcaldesa de Valencia, no aparece como dueña de ninguna casa. Sí cuenta con valores en varias empresas como Banco de Valencia, BBVA o Telefónica, entre otras, con dos planes de pensiones y con cuentas bancarias y depósitos a plazo, que suman un total de 321.886,87 euros, además de un vehículo del que se desconoce el valor ya que tiene más de 21 años. Sonia Castedo, alcaldesa de Alicante, cuenta con el 50 por ciento de dos viviendas en Alicante con un valor catastral de 66.438 euros; 29.506 euros en bienes no inmuebles --vehículos, cuentas bancarias y plan de pensiones-- y una hipoteca de 223.759 euros. El primer edil de Castellón, Alberto Fabra, declara 255.374 euros del valor catastral de varias propiedades inmobiliarias en Benicàssim, Teruel y Castellón; así como 28.000 euros en cuentas corrientes y 15.000 euros del valor de un coche. Del mismo modo, refleja el 50 por ciento de un préstamo hipotecario por valor de 309.000 euros. Entre los diputados con mayor poder adquisitivo se encuentra el ex conseller de Infraestructuras Mario Flores, que ha declarado 259.289,57 euros en bienes inmuebles urbanos y rústicos y 1.107.187,4 euros en bienes y derechos de naturaleza no inmobiliaria.




En la declaración de Juan Cotino, presidente de las Cortes, hay una referencia a una vivienda en propiedad en Xirivella (Valencia) con un valor catastral de 8.128,93 euros y 1.888.668,31 euros en bienes de naturaleza no inmobiliaria, repartidos entre acciones, obligaciones de la Generalitat, cuentas corrientes, o empresas. Cabe recordar que Cotino, supernumerario del Opus Dei que fue elegido por el PP para presidir les Corts Valencianes, llegó al hemiciclo con su crucifijo y lo puso encima de la mesa, junto a la Biblia. También Camps llegó con el Libro bajo el brazo y, desde entonces, los diputados autonómicos juran o prometen al lado o encima de los símbolos del cristianismo. Pero ¿no estamos en Estado aconfesional en el que el poder religioso no debe estar por encima del político? Visto lo visto, parece que aún no hemos salido de él.




Los indigandos acampados junto al circuito del F 1 han montado talleres y charlas.

Mientras tanto, los indignados intentan acampar no lejos de la carrera de Fórmula 1 y protestar por el gasto de dinero público en el evento deportivo. Pero la delegación del Gobierno arguye defectos de forma en la comunicación y amenaza con sanciones. La Policía Nacional quiere evitar el comienzo de una acampada reivindicativa. La concentración está convocada por una de las asambleas del movimiento 15-M de la ciudad que reúne a los indignados del distrito de los poblados marítimos, la zona en la que estos días se celebra el evento deportivo. En la programación difundida por los indignados figuran varios actos lúdicos y reivindicativos, como charlas, conciertos o una manifestación en bici. El lugar elegido para la concentración, la plaza Lorenzo La Flor, se encuentra a poco más de un kilómetro del circuito, en uno de los lugares más degradados de Valencia. Su objetivo es destacar el contraste entre “los privilegios y el despilfarro de la Fórmula 1” y “la degradación y el abandono del Cabañal”, el barrio marinero. Los primeros en protestar se encontraron con una decena de agentes de la Policía Nacional repartidos en cuatro furgonetas, quienes les informaron que la concentración no estaba legalmente comunicada.




La otra cara del circuito de Fórmula 1

Según varios componentes de la Asociación de Vecinos del Cabanyal, solicitaron la documentación de varias personas y les comunicaron que se exponían a multas de hasta 3.000 euros. Fuentes de la Asociación explicaron que los “indignados” comunicaron su concentración por el procedimiento de urgencia, aunque “el evento se conocía desde hace meses, así que no hay motivo para solicitarlo por la vía de urgencia”. Pero la administración insiste en que “la acampada de protesta no está legalmente comunicada” e inicia un procedimiento administrativo por el que los participantes en la concentración “pueden recibir sanciones”. El equipo jurídico de la asamblea ciudadana presenta un recurso en el que asegura que no hay motivo para prohibir la concentración, puesto que la plaza no es un lugar de paso y, por tanto, “no se puede molestar a nadie”. Los indignados siguen concentrados, a la espera de noticias sobre el recorrido de este recurso. Ayer y hoy siguieron con la acampada y con el evento “La cultura toma la calle”, un encuentro cultural y educacional con el que los 'indignados' de Moratalaz quieren demostrar que se puede extender la cultura por los barrios y “sin un duro”, sólo con voluntad y colaboración vecinal mientras la Policía les vigila de lejos. Está previsto que hoy se lleve a cabo la “bicifestación” en las afueras del circuito de Fórmula 1, así como una sentada en uno de los pocos sitios desde los que se puede atisbar el circuito, el puente de los Astilleros.




El objetivo de la reivindicación es destacar el contraste entre “los privilegios y el despilfarro de la Fórmula 1” y “la degradación y el abandono del Cabañal”, el barrio marinero. Además, critican que durante tres días, y durante las semanas previas a la carrera, el espacio público del puerto y sus alrededores estén reservados a los participantes y espectadores de la carrera. La Generalitat Valenciana lleva invertidos en el gran Premio de Europa de este deporte al menos 139 millones de euro en sólo tres años. El Gobierno autonómico cuantifica en 158 los beneficios económicos del evento para la sociedad valenciana, aunque no accede a especificar los cálculos en los que se basa esta afirmación. Añade que se han creado 6.284 empleos acumulados entre la construcción y la celebración de tres ediciones de este evento deportivo, presenciadas en conjunto por casi 285.000 espectadores. Y asegura que los datos de beneficios económicos han sido estudiados por el IVIE (Instituto valenciano de Investigaciones Económicas), aunque, desde la Conselleria d'Economia, dicen que no es posible hacer público el informe con el desglose detallado de tales beneficios.




Menos de dos semanas después de la toma de posesión de Juan Carlos Izaguirre (Bildu) del Ayuntamiento de San Sebastián, ya se notan los primeros cambios de imagen criticados tanto por el PSOE como por el PP. Las fotografías muestran uno de ellos: la desaparición del cuadro del rey, Juan Carlos I.




Otros desatinos provocados por alcaldes de otros partidos son igualmente motivo de alarma. Tales como las primeras decisiones de los primeros ediles elegidos de subirse el sueldo, a veces de una manera vergonzosa. Así, el nuevo sueldo del alcalde de la localidad vallisoletana de Peñafiel. Por siete votos a favor (de los siete concejales del PP) y seis en contra (cuatro del PSOE y dos del Partido de Castilla y León-Candidatura independiente), Roberto Díez (PP) pasará a tener dedicación exclusiva como primer edil. Cobrará 40.000 euros al año, casi el doble que su antecesor en esta localidad de 5.571 habitantes. Díez explica que sus ingresos están supeditados a que tome la decisión de dejar el trabajo que hasta ahora ha desempeñado como gerente del Grupo de Acción Local denominado Duero-Esgeva, que se encarga de dinamizar económicamente la zona ribereña. Sin embargo, el regidor ha asegurado que un municipio como Peñafiel requiere estar plenamente encima de la gestión de los “muchos servicios que presta” a los ciudadanos, por lo que ve probable que, en el futuro próximo, deje su puesto y se dedique totalmente a la Alcaldía. Díez considera que la retribución del anterior alcalde era “muy baja”. Y reconoce que “en los tiempos que corren” esta medida puede resultar llamativa entre los ciudadanos, aunque apela al “realismo” de la oposición al afirmar que si tiene que dejar su puesto de trabajo no sería normal que careciera de unos ingresos por el cargo de alcalde equiparados a los que tiene como trabajador por cuenta ajena.




El alcalde de Mollet del Valles, Josep Monràs, del PSC, pasó de cobrar 59.000 euros anuales a 65.000. Y eso fue antes de rectificar, pues su aspiración era llegar a cobrar 78.000. Monràs tuvo que ser escoltado por los Mossos en su camino del Ayuntamiento a su casa. Unos 300 “indignados” le increparon por subirse el sueldo.



Josep Maria Puigibet, primero de la izquierda.




Lo mismo hace, en el primer pleno de su mandato, el alcalde de La Bisbal del Penedès, Josep Maria Puigibet (ERC) quien se sube un 33% su sueldo (de 33.000 a 44.000 euros anuales brutos). Y lo baja baja en un 90% a los concejales de la oposición (de 100 a 10 euros por asistencia a cada pleno.




La alcaldesa de Gata de Gorgos (Alicante), Ana María Soler, se ha apuntado a la lista del paro, tras conocer que los dos grupos de la oposición, PSPV y Bloc –con mayoría en el pleno–, quieren recortarle el sueldo hasta los 1.500 euros brutos, que, en neto, dejarían su salario en menos de mil euros.




Otras medidas polémicas son las provocadas por las primeras decisiones de José Ramón Bauzá, presidente del Govern de les Illes Balears, quien aumenta la retribución anual a cinco de los seis miembros de su Gabinete. Un asesor pasará de 46.300 euros anuales a 52.800 euros. Sus secretarios/as pasarán a cobrar 35.000 euros en lugar de 29.000.





Entre valores municipales y valores bancarios a veces no media mucho. Así los ve y manifiesta Erlich, el primero de los humoristas que abre esta sección en la que también presentamos el humor de Peridis, Medina, Fotdevila, Forges y El Roto.








Manel Fontdevila nos dibujó esta semana: Griegos, Ante el sistema, Su patrimonio, Matemáticas y Lo que les conviene.









Territorio Vergara nos presenta: Podría pasar, Cayo Lara, A través de nuestros representantes, De aquellos polvos y Solución definitiva.











Pep Roig: Consecuencias, Las cosas como no son, Sólo somos mercancía.






viernes, 24 de junio de 2011

Acampadasol.

Aprovecho estos días de ausencia en mi blog para recordar este documental web interactivo sobre los 25 días de acampada del movimiento 15-M en la Puerta del Sol.

#ACAMPADASOL, el documental para entender el 15M from Lainformacioncom on Vimeo.

jueves, 23 de junio de 2011

Indignadanos (y III), por Baltasar Garzón.


Es la indignación que sintieron los ciudadanos de todo el mundo cuando el 19 de junio de 1953 fueron ejecutados en la cárcel de Ossining en Nueva York, tras ser condenados sin pruebas convincentes, Julius y Ethel Rosenberg. Aquellos supuestos espías fueron víctimas de la cruel caza de brujas que encabezó el senador McCarthy. La frase que dejó escrita Ethel antes de morir está llena de indignación: "La historia nos recordará a mi esposo y a mí como las primeras víctimas del fascismo americano". Eran tiempos oscuros, pero no tan lejanos, porque, como dijera Camus, el bacilo de la peste (el fascismo) anida en cualquier madera vieja de una casa y puede revivir mucho tiempo después y acabar con una ciudad dichosa.

Indignados nos sentimos las personas de bien aquel 19 de junio de 1987, cuando ETA asesinó a 21 personas en el atentado de Hipercor en Barcelona. La sinrazón del terrorismo produce vergüenza y el rechazo a la violencia de todo tipo es la mejor expresión de esa indignación por una lacra que esperamos y deseamos se destierre para siempre.

Los acontecimientos de estas semanas nos enseñan que nada es inmutable y que muchas cosas se pueden y se deben cambiar a partir de experiencias muy distintas y de expresiones coincidentes de rebeldía y protesta, de responsabilidad y compromiso. Pero los desafíos suelen ser plurales y diversos como los esfuerzos para encontrar las respuestas. Por eso, si bien es cierto que, como dice el aforismo africano, el desierto se puede cruzar solo, es más seguro y fiable hacerlo acompañado.

miércoles, 22 de junio de 2011

Indignadanos (II) por Baltasar Garzón.



"Hoy, las calles se llenan de indignación, pero de una indignación activa, democrática y pacífica. A este movimiento que hoy ocupa las calles y avenidas están llamados todos los demócratas que tanto lucharon por recuperar una democracia secuestrada durante 40 años de dictadura y todos los que la han consolidado; están llamados quienes, a pesar de las adversidades y de quienes se aprovechan de la ruina de los justos, quieren y son capaces de cambiar el mundo día a día; y están llamados quienes, además de estar indignados, han dicho "basta" y han decidido ser protagonistas por encima de toda la caterva de mediocres y agoreros que, desde la caverna de la intolerancia, tan sólo saben moverse en el cuenco de su mano, ajenos a los cambios que se están produciendo en el mundo.

"Hoy, nuestra voz de indignadanos debe acompañar a todos/as aquellos/as que, a riesgo de sus vidas y de la pérdida de otros derechos fundamentales, se rebelaron a lo largo de la historia frente a los acontecimientos más adversos y violentos como el absolutismo o el fascismo, sea este franquista, nazi o mussoliniano; frente a las dictaduras genocidas, sean estas como las de Chile y Argentina o las modernas que masacran a miles de personas; frente al terrorismo o la violencia del Estado. Pero también quiero unirla a la de millones de ciudadanos indignados que salen a la calle, en forma pacífica, porque no están de acuerdo con lo que está sucediendo, con el modo de gestionar la cosa pública, con el modo de hacer política, con el cinismo de los que nos dirigen y gestionan la economía y que han sido los culpables de la situación en la que nos encontramos.

"Es más evidente que nunca que la democracia real no puede limitarse a la mera consulta electoral cada cuatro años.

"Hoy más que nunca ha quedado evidenciado que la participación ciudadana, la democracia real, no puede ni debe circunscribirse a la mera consulta electoral cada cuatro años. Todos debemos asumir que el mundo ha cambiado, que el siglo XXI ha revolucionado para siempre los viejos mecanismos de participación política. Lo estamos viendo en varios países y lo veremos en muchos más, en los que la fuerza de la comunicación a través de la red está siendo fundamental, otorgando una nueva dimensión a la fuerza política de los movimientos reales que no se puede obviar con el mantenimiento de mecanismos burocráticos de interposición que dificulten la relación bidireccional entre los ciudadanos y sus representantes.

"El reto como indignadanos es hacer que este diálogo sea posible y efectivo, o lo que es lo mismo, que tenga capacidad de decisión, o no habrá comunicación. Pero también resulta evidente que el camino de la contestación irracional y violenta, además de atacar a la esencia del sistema democrático, socava al propio movimiento. Tales exponentes deben ser expulsados si no aceptan las reglas de la tolerancia, la diversidad y la fuerza de la palabra como únicas vías de expresión de este movimiento y de su configuración política.

"Este 19 de junio viene cargado de indignación. Un sentimiento que no es ajeno en la historia de la humanidad y que, por azar o no, hizo que ciudadanos franceses indignados decidieran, este mismo día de 1790, desde la recién estrenada Asamblea Constituyente, la supresión de la nobleza hereditaria. Algo que puede parecer menor, pero que dio vida al más puro sentimiento republicano igualitario de una sociedad que hasta ese momento era el crisol de los privilegios y de la desigualdad y que amanecía a la realidad de un nuevo mundo más justo.

martes, 21 de junio de 2011

‘Indignadanos’, por Baltasar Garzón.

Aprovecho estos días para seguir un curso de perfeccionamiento de Trompeta en Colmenar Viejo con Enrique Rioja, profesor catedrático de Trompeta del Real Conservatorio. Durante toda esta semana de ausencia –son ocho horas diarias, escuchando teorías y haciendo prácticas de este instrumento que acapara toda mi atención–, no podré dedicarme como desearía a mi blog. Por eso, iré publicando artículos de personajes de cierta importancia que hoy comienzo con este de Baltasar Garzón, publicado el domingo en “Público”.




“Hace unos días, alguien me preguntaba por qué algunas palabras que están en el léxico popular y que definen relaciones humanas o acontecimientos no aparecen en los diccionarios, como sucede con la que titula este artículo. La razón radica en que la evolución de la sociedad suele ir por unos cauces diferentes a los de la oficialidad de las reglas que nos rigen, si bien antes o después la realidad de las cosas termina por imponerse a la formalidad de las mismas.

“El 15 de mayo surgió en España un movimiento que, con mayor o menor fuerza, se ha extendido a otros países. La indignación popular que venía fraguándose desde hacía tiempo cristalizó en este movimiento que, representándonos a todos, despedía la fragancia de lo nuevo, la convicción de la razón y el civismo de su demostración. Era un plante surgido de una sociedad que cuestionaba y cuestiona muchos de los clichés que el mundo de la política tiene establecidos.

“Los asamblearios acampados en la Puerta del Sol madrileña comenzaron pronto a ser un estorbo para la "buena y normal" ciudadanía. Habían pasado las elecciones del 22 de mayo y la presencia constante en las calles y plazas de las principales ciudades era una molestia, cuando no una provocación. El desenlace se preveía inminente, como también lo era la acción de los que habían aprovechado el movimiento para reventarlo desde dentro. Los de siempre, los mismos que unas veces actúan bajo la marca de violencia callejera, otras de los neonazis o de los "radicales antisistema", o de quién sabe qué.

“La escenificación de la actuación de unos y de otros se desarrolla en una forma perfectamente previsible y por eso demasiado sospechosa. El cebo de las concentraciones ante las instituciones de representación democrática ha sido tan evidente como burdo, y los componentes del movimiento, incluidos los verdaderos paladines, han sido cazados. Su crédito ciudadano y rebelde ha sido robado por quienes estaban esperando que la caída se produjera.

“Hoy las calles se llenan de indignación activa y pacífica; a este movimiento están llamados los demócratas

“Ahora todo vuelve a ser como antes. Hay que acabar con la revuelta; no se puede consentir que se cuestione el sistema, como si este fuera inalterable. De nuevo se elude la respuesta y el hacer frente a la situación denunciada. Pero seríamos demasiado torpes si esta situación fuera aceptada sin más condiciones. Sería muy triste que el esfuerzo y el empeño de miles de ciudadanos desaparecieran en la nostalgia y en la descalificación por la acción de unos pocos. Los indignadanos son, no los que persiguen o golpean a los políticos, sino los que exigen cuentas y explicaciones a los mismos; no los que arrojan pintura a los diputados o les agreden, sino los que denuncian la inacción de los mismos ante la crisis económica; no los que impiden que un Parlamento se reúna, sino los que hacen que los diputados no dejen el debate hasta solucionar los problemas de la sociedad a la que han jurado o prometido defender.

“Son los que hoy, 19 de junio, reaccionan y se manifiestan en las calles de múltiples ciudades españolas y europeas para denunciar la inactividad de muchos políticos más ocupados en resolver riñas y querellas particulares que en sacar a la sociedad de la miseria moral en la que la maldad y la dejadez la han puesto. Son todos aquellos que han compartido la frustración y ahora desean alcanzar la esperanza de recuperar esos derechos esenciales, y entre ellos uno trascendental, el derecho a la felicidad, y otro, social, el derecho a participar y a decidir”.
Mañana: continuará.

domingo, 19 de junio de 2011

Los infiltrados, y no los “indignados”, provocan la violencia.

Multitud de los "indignados" en las puertas de la Ciutadella, donde está la sede del Parlament catalán.



El pasado miércoles, 15 de junio, más de 4.000 “indignados” participaron en la acción de desobediencia civil colectiva planteada por el movimiento 15-M, en Barcelona. Los “indignados” pretendían protestar frente al Parlament ante el debate de la aprobación de los presupuestos. Todos ellos estaban en contra de la Ley Ómnibus, al ser aprobada como un decreto que generará una grave devaluación de la calidad de vida de los catalanes, un crecimiento de la exclusión social, desigualdades y conflictividad social. Desde el día anterior, el recinto estuvo custodiado por los “Mossos d’Escuadra” y el bloqueo estaba “enmarcado en una estrategia de desobediencia civil pacífica y colectiva ante la aprobación de leyes injustas”. En dicho bloqueo, se produjeron incidentes violentos. En un comunicado hecho público, los “indignados” aseguran que la mayoría de los que participaron “practicó una estrategia de resistencia activa no violenta”. La gente estuvo sentada o de pie ante los Mossos d'Esquadra y “gritó consignas y canciones contra los recortes, la Ley Òmnibus y la nefasta gestión de la crisis por parte de los responsables políticos”. Pero hubo también actos violentos. El movimiento 15-M reafirma que se trataron de “incidentes aislados en los que algunos diputados y diputadas que cruzaron entre el gentío fueron objeto de insultos, lanzamientos de agua y de pintura por parte de algunas personas”, aunque “los participantes en el bloqueo hicieron pasillos entre la gente para que salieran y [...] todos salieron ilesos gracias a los manifestantes que impidieron posibles agresiones físicas”. Los “indignados” catalanes resaltan que “más de 30 personas resultaron heridas durante las cargas policiales, producidas desde las 6 y media de la madrugada. Como resultado, tres personase ingresaron en el hospital y uno de ellos recibió un grave golpe en un ojo”. Y añaden que “los Mossos impidieron el acceso de los medios de comunicación en varios espacios del perímetro de la Ciutadella y confiscaron teléfonos móviles y cámaras de manifestantes para impedir que grabaran estas situaciones”.





Un momento de la tensión vivida en la protesta de los 'indignados' frente al Parlament catalán.

En la acampada de la Puerta del Sol, aseguran que, desde el principio de las protestas, los manifestantes demostraron ser “pacíficos”. “Es democrática la presión que hemos ejercido desde un principio, pero no lo es empujar, insultar…”, reconocen fuentes de la acampada. No obstante, comentan que, en Barcelona, se vio a muchos “infiltrados relacionados con los Mossos” dentro de los grupúsculos violentos que protagonizaron los actos. “Democracia Real YA”, rechaza “los actos producidos por una minoría, que no representan el espíritu con el que se había convocado el bloqueo del Parlament”. Iván Olmedo, portavoz de DRY, manifiesta que sí secundaron y apoyaron las protestas. “Cuando pensamos que una causa es justa, la apoyamos y le damos difusión, y las protestas frente al Parlament son totalmente legítimas. No así la violencia, ejercida por una minoría contrarrestada por el resto de la gente”.




Cerco a los 'indignados' que rodean el parque de la Ciutadella en donde los políticos aprobaron los presupuestos.

Desde la comisión de Comunicación de Acampada Sol, se condena de manera radical todo acto violento y en especial los que tuvieron lugar en las inmediaciones del Parlamento Catalán. Y se pide que hechos así no vuelvan a ocurrir. Los “indignados” manifiestan todo su apoyo a la Asamblea de Barcelona y a las acciones que, de forma pacifica, están promoviendo”. “Democracia Real Ya” sostiene que el camino para lograr sus objetivos pasa por actuaciones pacíficas, y en todo caso, desobediencia civil. Y se solidariza con “todos los heridos a manos de los Mossos, que han contado con el apoyo de (policías) secretas”. La comisión insiste en su comunicado en que “nos desmarcamos de manera absoluta de todo acto violento” y reitera que “en nuestras convocatorias, sólo se promueven acciones pacíficas. Esta es nuestra única manera de actuación”. Manifiesta su apoyo a la Asamblea de Barcelona y a “las acciones que de forma pacífica están promoviendo”. “Democracia Real YA” destaca en su web que los actos de Barcelona frente al Parlament no estaban convocados por esta organización, sino por Acampadabcn y Aturem el Parlament. Rechaza los actos producidos por una minoría, que no representan el espíritu con el que se había convocado el bloqueo del Parlament. Y sostiene que el camino “para lograr nuestros objetivos pasa por actuaciones pacíficas, y en todo caso, desobediencia civil”.



Felip Puig, consejero catalán de Interior.

Muy pronto, un vídeo en YouTube denuncia la infiltración de varios policías entre los manifestantes. Son, según él, mozos “revienta-indignados”, supuestos infiltrados que intentan aprovechar las manifestaciones masivas para poner en práctica sus formas violentas de protesta. Son descubiertos por los manifestantes que les acusan de comenzar con los incidentes. La polémica pasa por la presunta actuación de policías del cuerpo de los Mossos, a los que se les acusa desde la Red de provocar las cargas de los antidisturbios desde su posición de infiltrados entre el colectivo de “indignados”. Hay quien les acusa de ser los promotores de los actos violentos, haciéndose pasar por “indignados” violentos durante las protestas. Pero Felip Puig, el consejero de Interior de la Generalitat de Catalunya, quien, el pasado 27 de mayo, tras el intento de desalojo por parte de los Mossos d'Esquadra de la acampada en Plaza de Cataluña, fue duramente criticado por la oposición, asegura que el vídeo en cuestión “es falso”. Y, visiblemente molesto, se dirige en rueda de prensa a los periodistas. Intenta aclarar que es cierto que los agentes que aparecen en esas imágenes son, en su mayoría, “mossos” infiltrados. “Algunos de los que se identifican pueden ser, policías de incógnito que se arriesgan para cumplir su deber de informar... Pero, ¿cómo quieren sino que se haga su trabajo?”. Y añade, en su defensa, que “es muy fácil, desde la Red, mentir y atacar a una institución para crear una corriente de opinión contraria y criminalizar a los Mossos”.



Mozos infiltrados que aparecen en el vídeo de Internet.

Los mozos infiltrados son identificados por su físico, como por su actitud, sólo preocupados por ocultar sus rostros. E, identificados por los “indignados” que les increpan, son obligados a retirarse en un portal, como se puede ver en el vídeo, hasta que, finalmente, son escoltados y protegidos por los antidisturbios que les retiran de la zona. Miembros de la Comisión de Comunicación acusan a estos infiltrados de comenzar supuestamente con los incidentes contra los dispositivos de antidisturbios, incitando a la violencia y rompiendo la base pacífica del movimiento. Por otra parte, miembros del 15-M de Barcelona, barajan la hipótesis de que aquellos que increparon a los parlamentarios catalanes dentro del pasillo policial, deben de ser igualmente infiltrados, “personas que tuvieran permiso para entrar”, puesto que era imposible que los manifestantes traspasasen el pasillo creado por el cordón policial y cerrado desde las 6 horas y cuarto de la mañana. Lejos de aclarar sus propias contradicciones, Felip Puig denuncia en su comparecencia que los “indignados” violentos practicaron tácticas y estrategias típicas de las “guerrilla urbana”, advirtiendo que “irá a por ellos”, pues “estamos ante nuevos métodos de violencia y de guerrilla urbana, que se aprovechan de la resistencia pacífica y utilizan cada vez más mecanismos de violencia extrema, con métodos cada vez más sofisticados de organización”.



Los “indignados” valencianos muestran a Camps la tarjeta roja.

Por su parte, Francisco Camps, president de la Generalitat, alardea de demócrata en su discurso de investidura, frente a las protestas de los “indignados” que le sacan tarjetas rojas a las puertas de Les Corts. “Las elecciones –dice pletórico por la victoria recibida– las han vuelto a ganar todas las personas que viven en una comunidad en la que la pluralidad y la tolerancia refuerzan a diario nuestro sistema de autogobierno basado en la Constitución. Es una democracia moderna que rechaza la agresividad, la violencia y el extremismo de los que no creen en nada. La democracia es esto: votos y escaños”. Mientras tanto, afuera, cientos de “indignados” con la corrupción que rodea al Ejecutivo valenciano corean sus consignas contra el dirigente conservador. Y muestran sus pancartas en las que recuerdan que “Honorable president es un oxímoron” y “Violencia es no hacer nada en contra de esta infamia”. Muestran su protesta de modo pacífico así como su rechazo a las acciones violentas del día anterior en Barcelona. Y Camps propone una reforma electoral que permita a los ciudadanos elegir a los diputados por circunscripciones uninominales, partiendo del número de representantes de cada provincia. “Intentar acabar con las minorías –dice Marga Sanz, portavoz de I. U., en un intento de acallar las críticas– tiene un nombre: fascismo”. Mónica Oltra, voz de Compromis en el Parlamento regional, considera que esta propuesta no tiene cabida en la actual Constitución. Y anuncia que sus diputados harán como los 'indignados' y sacarán tarjetas rojas pero en el Pleno, durante la votación de investidura.


El viernes, las calles valencianas próximas a Les Corts están cortadas. Hay cordones policiales cada diez metros y decenas de furgones patrullan cada metro de asfalto.
Grupo de “indignados” protesta pacíficamente ante les Corts. Un helicóptero vuela a ras de los tejados y el president Camps está dispuesto, si llega el caso, a volar en él como lo hiciera el catalán Artur Mas. Sin embargo, en Valencia no hay en ese momento, manifestaciones de violencia. Nadie intenta pasarse los cordones de seguridad, ni los diputados que accedieron a la fortaleza de Les Corts por la puerta de servicio, bajo la consigna de no salir al exterior ni para tomar un café, se sienten amenazados como los de Barcelona. “Con todo preparado para la batalla –escribe Segi Tarín–, a las nueve en punto, una guarnición de policías constituye la primera línea de choque a 300 metros de la entrada principal. Los agentes esperan con expectación hordas de indignados infectados por el virus de la revuelta catalana. No es así. La primera manifestante llega sola, se acerca a la valla y muestra un cartel: ‘Honorable president es un oxímoron’. Las miradas de un par de agentes dan vueltas al mensaje, intentando descifrar su carga. ‘Esta institución está podrida’, les aclara Patricia, una de las primeras del millar de asistentes que se apostan lo más cerca posible de Les Corts para quejarse de que Francisco Camps, imputado en la Gürtel, sea investido como máxima autoridad política valenciana”.



Manifestación de indignados, a las puertas de las Cortes valencianas.

Los concentrados reciben en silencio y con tarjetas rojas a los pocos diputados que acceden por la fachada principal. No hay insultos, ni enfrentamientos, ni persecuciones, ni escupitajos. Solo tarjetones rojos y alusiones al President. Pero la Policía no las tiene todas consigo. Mira con desconfianza a los “indignados”. Sobre todo, cuando un joven se acerca a las vallas con una ristra de chorizos y una baguette, mientras la multitud corea: “¡President! President!”. Una de las pancartas reza simplemente: “Sin violencia, somos más”. Ni siquiera, cuando 250 jóvenes ocupan la Bolsa y son sacados a empujones por la Policía, hay enfrentamientos. Las porras no son desenfundadas y hasta algunos agentes, ruborizados, aceptan los ramilletes de flores que un grupo de muchachas de la comisión poética reparte.




Algunas personalidades políticas y culturales se muestran afectadas por estos acontecimientos. El presidente del Congreso ya no cree que los jóvenes del 15-M sean tan “buena gente” como en un principio le parecían. Las sentadas que protagonizaron la semana pasada en la misma puerta del Congreso de los Diputados, el acoso sufrido por el alcalde de Madrid en plena calle y el comportamiento de no pocos, intentando impedir el paso a los diputados catalanes en el Parlamento, le hace cambiar de opinión. Sin estudiar detenidamente cada caso, José Bono se muestra muy duro y califica estos hechos de “inaceptables”, al tiempo que defiende sin fisuras el uso de la fuerza por la Policía “porque para eso está la fuerza pública”, para impedir que se cometan actos violentos y se infrinja la ley. Bono confiesa sentirse “absolutamente indignado” por la protesta que los simpatizantes del movimiento 15-M están protagonizando frente al Parlamento catalán. A su juicio, esto “traspasa los límites de lo razonable” que puede permitirse a los jóvenes acampados en diversas plazas de toda España, motivo por el que justifica el uso de la fuerza por parte de la policía. El presidente del Congreso muestra su “solidaridad” con el alcalde de Madrid, Alberto Ruíz Gallardón, que es increpado por un grupo de manifestantes la noche del lunes en plena calle, cuando pasea, junto con su familia, al perro.




Fernando Savater considera que los cientos de indignados que protestaron a las puertas del Parlament de Catalunya son un “hatajo de mastuerzos”. Para él, lo aceptable del movimiento 15-M era que se practicaba sin violencia, sin coacciones. Pero, a su juicio, las protestas y el hecho de que hubieran intentado impedir, sin éxito, que los diputados entraran a la cámara contradice el carácter pacifista que les definía. “Son un hatajo de mastuerzos –explota el filósofo y escritor– que quiere imponerse a los representantes de la votación popular y que, por tanto, debían ser desalojados por la Policía y nada más. El cerco al Parlament no es tolerable en ningún Estado de derecho”. Afirma que “que cuatrocientas personas en la calle parecen muchas más que 400.000 en su casa, pero esto no puede ser. Ni representan a nadie, ni tienen por qué ser escuchados más que los demás, ni tienen que ejercer esa coacción”.




El escritor Fernando Sánchez Dragó publica el viernes en “El Mundo” un largo artículo en el que, una vez más, hace de la polémica y de la provocación sus señas de identidad. Dragó llama “memo” a Stéphane Hessel, el nonagenario autor de “¡Indignaos!”, y carga con dureza contra el movimiento del 15-M. Acusa a Jessel de enriquecerse “con un par de libelos en los que sólo hay vaniloquio, azúcar y santurronería”. Además, compara su librito “¡Indignaos!” con el Mein Kampf de Hitler, El Libro Rojo de Mao o El Libro Verde de Gadafi. Llama a los “indignados” llorones malcriados. “No se arroguen esos llorones malcriados la representación de la sociedad en su conjunto, careciendo de lo que presumen”, escribe. Un poco más adelante, afirma que los indignados deben enterarse de que “la libertad es incompatible con la igualdad” y sigue con su retahíla de descalificaciones: “Lo peor de todo es la sarta de dislates que los quejicas nos proponen para arreglar las cosas”. Y arremete contra los “indignados de Sol” que “se parecen a los descamisados de Perón, pero visten, aunque muchos de ellos lo ignoren y sean sólo lo que Togliatti y otros de su colla llamaban “tontos útiles”, camisas rojas (las de Stalin), negras (las de Mussolini) pardas (las de Hitler), gris maón (las de Mao) y azul eléctrico (las de Franco)”.




Otros, como José Luis Sanpedro, no dejan de apoyar a los “indignados”. “No es verdad que el movimiento 15-M sea una generación perdida –dice el humanista y economista–. Por esto ahora estáis donde estáis. Estáis amargados, desconcertados. Hace unos meses no estabais, pero ahora estáis presentes. Y mi reacción inmediata es sumarme a lo que esto representa. Es absolutamente esencial pensar en el futuro. Que la gente se lo crea. Una prueba del error actual es esta idea” Y Sanpedro insiste en la dificultad de “conseguir un pensamiento libre” en la sociedad actual. El motivo, según él, es que “la democracia está pervertida y secuestrada”. El sistema actual está “dominado” por tres palabras mágicas: “Productividad, competitividad e innovación”, que deberían ser sustituidas, a su juicio, por “repartición, cooperación y recreación”. En cuanto a las protestas del 15-M, aconseja a los jóvenes manifestantes que no incurran en actos violentos. “No tenéis derecho a recurrir a la violencia porque tenéis la razón y el futuro. El sistema está roto y perdido. Por esto tenéis el futuro”.




“No me representen, titula en su blog Ignacio Escolar, quien escribe: “Quienes escupen a los parlamentarios, quienes los zarandean, quienes lanzan piedras o pintura contra ellos o quienes llevan la protesta contra un político hasta las puertas de su casa, donde duerme su familia, no me representan. Tampoco representan a los indignados, cuyos portavoces se han desmarcado de estos actos violentos. Aquellos políticos que quieren deslegitimar este movimiento con estos sucesos graves pero anecdóticos –en este mes que llevamos desde el 15-M, la inmensa mayoría de las protestas han sido pacíficas– están haciendo la misma equiparación injusta de los que pregonan que todos los políticos son iguales”.




“Sin embargo –continúa Escolar–, el miércoles todo el 15-M perdió fuerza por culpa de esta minoría violenta, con la que habría que poner kilómetros de distancia. Si hay alguna esperanza de que este movimiento consiga plantar cara a los abusos que está provocando la crisis no es porque 4.000 ó 40.000 personas se manifiesten frente al Parlament, sino porque una gran mayoría social (entre el 66% y el 80%, según las encuestas) simpatice con sus propuestas. Es una lástima que la violencia haya eclipsado el verdadero debate: el brutal recorte social que ayer aprobó CiU en Catalunya (con la inestimable ayuda del PP, que apoyó el plan mientras Mariano Rajoy disimulaba). Entre las víctimas de esta poda está la educación, que se queda sin gran parte de sus becas. O la sanidad, donde el tijeretazo pretende cerrar los quirófanos por las tardes o atender a 76.000 pacientes menos en urgencias (no sé cómo: tal vez los manden a casa). Esto, que no se contó en ningún programa electoral, también es violencia. Pero para responder ante este abuso sobran las pedradas o los escupitajos”.


El pasado 27 de mayo en Barcelona hubo palos para todos. Cinco mossos con porras y porrazos para cada “indignado”

Qaesar se pregunta en El Ventano:
“¿Tú, que me has echado de casa por no poder pagar una hipoteca que me vendiste con mentiras?
¿Tú, que me has dejado en el paro porque ganas unos millones menos que antes?
¿Tú, que defiendes a los corruptos de tu secta y los premias con una poltrona?
¿Tú, que solo publicas el morbo y te olvidas de lo sustancial?
¿Tú, que tienes tu fortuna en paraísos fiscales?
¿Tú, que solo obedeces a los mercados?
¿Tú, que me pagas 500 euros y siempre temo que hoy sea el último día de trabajo?
¿Tú, que adoptas medidas radicalmente distintas a tus promesas electorales?
¿Tú, que cobras tres sueldos del Estado?
¿Tú, que te atreves a opinar de los indignados sin haber visitado una acampada siquiera unas horas?
¿Tú, que utilizas el sacrosanto Parlamento para insultar y mentir?
¿Tú, que discutes lo que me concierne a puerta cerrada?
¿Tú, que no me ves cuando me miras, que no me escuchas cuando me oyes?
¿Tú, que intercambias alcaldías como si fuesen cromos?
¿Tú, que dices que todos los acampados son violentos mientras aseguras que no todos los políticos son iguales?
¿Tú, que solo te acuerdas de mí cada cuatro años? …
¿Y tú me llamas violento?
Ninguna violencia es admisible. Ninguna. Ni la física, ni la verbal, ni la psicológica, ni la social, ni la económica, ni la política...“




El 15-M prepara para hoy, domingo, el 19-J. Los “indignados” siguen protestando por la cobertura que los medios hicieron de los incidentes ante el Parlament de Catalunya. Dicen que se puso en primera plana los incidentes violentos que fueron minoritarios. Incidentes provocados por gente que no les representaba. Que sólo se publicaron imágenes impactantes pero no de la gente que intentó contener a los violentos. Y José Luis Serrano, portavoz de la Acampada Sol, asegura en El País que “no es la primera vez que estuvieron generados por infiltrados de la Policía que llevaban pinganillos, iban vestidos con prendas del esteriotipo de aquellos a los que se asocia con acciones violentas. Pero su actitud era extraña, estaban muy musculados”. Los representantes del movimiento quieren dejar de hablar de violencia. Su herramienta está clara: reivindican la desobediencia civil. “Desafiamos y nos enfrentamos con leyes injustas”. Su estrategia está clara. Y tras conseguir parar los primeros desahucios en Madrid, Parla, Valencia, Zaragoza, Barcelona y en otras ciudades, convocan para hoy, domingo en Madrid la marcha del movimiento 15-M que, partiendo desde cinco sitios distintos y bajo el lema “Europa para los ciudadanos y no para los mercados”, deberá confluir, si todo sale como está previsto, en las puertas del Congreso de los Diputados. Se espera un civilizado comportamiento de quienes quieren mostrar en la calle su indignación con un sistema que deploran. Sin violencia pero con gritos, eslóganes y pancartas contra lo que hayan decidido: gobierno u oposición, políticos o banqueros. Hoy nos demostrarán, si todo sigue como esperan, que con la “indignación” que les caracteriza, pueden conseguir mucho más que con la violencia.




Los países de la zona euro van a aprobar la próxima semana el llamado 'Pacto del Euro', una serie de medidas encaminadas a “preservar la estabilidad financiera y establecer los fundamentos de un crecimiento inteligente, sostenible, socialmente integrador y creador de empleo”, según la jerga oficial. En realidad, se trata del mayor recorte de los más elementales derechos sociales que se haya hecho en la historia del viejo continente. Un auténtico hachazo al Estado de Bienestar que tantas luchas requirió para conseguirlo. “Bajo diversos eufemismos –explica Qaesar en su blog El Ventano–, las medidas consisten en más de lo mismo, pero sin miramientos: rebajar los salarios, inutilizar la negociación colectiva, abaratar el despido, alargar la edad de jubilación, reducir el gasto público, sanear la banca con dinero público... El Pacto del Euro también habla de mejorar la Educación o incentivar la investigación, pero no dice cómo. Anuncia la necesidad de regular el sistema financiero, pero no propone ni una sola medida concreta. Y, en el colmo del cinismo, hasta aboga por reducir la pobreza. Si antes eran tijeretazos, ahora vienen los hachazos. Es lo que imponen los mercados a los gobiernos: unas medidas que encierran más violencia que todas las actuaciones protagonizadas por el 15-M. Este domingo, la calle mostrará la respuesta de la ciudadanía”.





También los humoristas pueden conseguir mucho más de lo que se imaginan. En principio, con sus trazos, nos permiten liberarnos de nuestros fantasmas. Medina, (con Los infiltrados y sus mensajes subliminales), El Roto, Peridis, Erlich o Forges son ejemplos de lo dicho.









Manel Fontdevila, lo hace con: Cuatro, En el Parlament, Renovación en la sala; Especuladores y En Valencia.






Territorio Vergara, con Indignado, La provocación, Más respeto, Triple dimisión en el Constitucional y Teléfono de la esperanza.









Y Pep Roig, con Mujer, si puedes tú con Dios hablar, No hagan olas, Soluciones recurrentes, Concejal celestial y Yo soy aquel.










El 15 de mayo empezó todo. Salimos a la calle para reclamar una democracia real. Para gritar que no somos mercancía en manos de políticos y banqueros. Ese día prendimos la llama. Y esta revolución pacífica continúa. Seguiremos hasta que nos escuchen. Junto con las acampadas de los indignados. Volveremos a tomar las calles, ahora contra el pacto del euro. Porque no queremos que hipotequen nuestro futuro ni pagar una deuda ilegítima. No más recortes en nuestra sanidad. No más recortes en educación. No más destrucción de los derechos de los trabajadores.





Fábula política difundida por Tommy Douglas, prominente activista y político, elegido en 2004 como “El canadiense más grande de todos los tiempos”. Reconocido como padre del paso del sistema de salud canadiense al modelo de Asistencia sanitaria universal