García Márquez, 24 años espiado por el FBI.

El FBI mantuvo una vigilancia de 24 años al colombiano, Gabriel García Márquez, autor de “Cien años de soledad”, incluso durante los años en que se consagró como escritor a nivel internacional. Así lo reconocen uno documentos desclasificados de la agencia federal, dados a conocer por el periódico The Washington Post. El diario informó que, a petición suya, la agencia federal desclasificó 137 páginas de una investigación desarrollada durante más de dos décadas en los que se revela que el galardonado escritor fue vigilado desde el año 1961, cuando se alojó durante un mes en el Hotel Webster, en Manhattan, acompañado de su esposa y su primogénito Rodrigo García.

Ocurrió cuando, en aquel entonces, García Márquez llegó a Nueva York para trabajar como empleado de Prensa Latina, la agencia de noticias cubana, y, con el tiempo, se volvió un amigo cercano del líder cubano Fidel. Los documentos desclasificados nos dan pistas de que al premio Nobel de Literatura se le abriera una investigación criminal, aunque la agencia federal mantiene aún 133 páginas clasificadas y sin ser puestas de conocimiento público.

Según se desprende de estos documentos, la orden para que se le abriera un expediente interno al colombiano habría provenido del propio director del FBI en aquellos años, Edgar J. Hoover, quien ordenó que la agencia fuera avisada de inmediato, si el escritor “entra a Estados Unidos por cualquier propósito”. En los primeros reporte sobre sus actividades, figura que el colombiano pagó una tarifa de 200 dólares mensuales por alojarse en el hotel de Nueva York, y que el FBI mantuvo contacto con “nueve informantes confidenciales” que detallaban los pasos del escritor y periodista.

“El nunca perteneció a ninguna organización política”, destaca su hijo Rodrigo García, cineasta radicado en Los Ángeles,  quien rememora que, por esos años, en más de una ocasión su padre mencionó que había descubierto que, en su camino de regreso a casa, era seguido por dos hombres que hablaban entre ellos mediante susurros. El expediente del escritor se suma a otros también relacionados a seguimientos de políticos, artistas y escritores, ordenados todos por el controvertido director de la agencia.

Conforme su prestigio en el mundo de las letras iba en aumento, García Márquez entabló amistad con dignatarios internacionales, entre ellos el francés François Mitterrand y el expresidente estadounidense Bill Clinton, quien durante sus años universitarios fue un lector de la obra del colombiano. El expediente del escritor se suma a otros también relacionados a seguimientos de políticos, artistas y escritores, ordenados todos por el controvertido director de la agencia, Edgar J. Hoover.

Gabriel García Márquez falleció el 17 de abril de 2014, en su residencia de Ciudad de México, a la edad de 87 años.