domingo, 1 de septiembre de 2019

Arde la Amazonia, “el pulmón verde del planeta”…


La reserva verde más grande del planeta sigue en llamas y el fuego alcanzó ya centros urbanos. La Amazonia arde porque el fuego, que se llama capitalismo, lo destruye todo. El pulmón más importante del mundo arde en llamas desde hace más de tres semanas sin que el gobierno de Jair Bolsonaro, del que depende gran parte de Amazonia, haya hecho nada para combatirlo o paralizarlo. Los siete del G-7, acordaban el pasado domingo el envío de una ayuda internacional a la mayor brevedad para paliar el desastre ecológico de Amazonia. La situación en la zona, con más de mil incendios, sigue sin control y las llamas han alcanzado ya Bolivia y Paraguay, países vecinos. Se calcula que ya se han quemado más de un millón de hectáreas y la selva amazónica se sigue consumiendo, duplicando la zona devastada en los últimos días. A la carrera, los bomberos se la juegan para evitar que alcance dimensiones incontrolables. En otros casos, es tan compleja la extinción que muchos de ellos se dan por vencidos mientras las llamas se acercan peligrosamente a las aldeas. La gente abandona sus casas con lo puesto. Situación de emergencia por la que el presidente de Bolivia se abrió a recibir ayuda internacional. En Brasil, más de mil nuevos incendios mantienen a seis estados ardiendo y se han desplegado 44.000 militares. Las calles de la capital de Bolivia y de Rio de Janeiro también se han incendiado de gentes que piden una respuesta. En Brasil los fuegos se han disparado más de un 80% por el drama de la deforestación. 200 años es la cifra que se marcan los más optimistas para recuperarse de este desastre medioambiental que fue el eje central del G-7. Francia propuso un fondo internacional cuanto antes y un plan para reforestar las zonas arrasadas. Pero las palabras de Emmanuel Macron presidente francés y de las de Jair Bolsonaro, presidente del Brasil, chocaron más que calmar los ánimos, provocando una agria polémica entre ambos y avivando las llamas en lugar de sofocarlas.

       El presidente del Brasil, Jair Bolsonaro.

Exigir disculpas para aceptar su dinero. Así se resume la nueva postura del pasado martes, cuando Bolsonaro afirmaba que Brasil sólo aceptaría la ayuda de 20 millones de dólares (18 millones de euros) ofrecida por el G-7 para combatir los incendios forestales en la Amazonia si el mandatario francés, Emmanuel Macron, se retractaba por haberlo tratado de mentiroso. La nueva postura llegaba después de que el jefe de gabinete, Onyx Lorenzoni, anunciara que el país latinoamericano rechazaría este dinero por la actitud “colonialista” de Macron por inmiscuirse en asuntos en los que Brasil tiene plena “soberanía”. Jair Bolsonaro, en declaraciones a la prensa, negaba que Brasil hubiese rechazado la ayuda económica ofrecida por los países más industrializados del mundo, pero con la condición de que Emmanuel Macron se retractase no sólo por haberlo llamado mentiroso sino también por poner en entredicho la soberanía de Brasil sobre la Amazonia. “En primer lugar dijo–, el señor Macron tiene que retirar los insultos que hizo contra mí.  Me llamó mentiroso y, después, por las informaciones que obtuve, dijo que nuestra soberanía en la Amazonia era un asunto abierto”, afirmó el líder ultraderechista. “Para conversar y aceptar cualquier cosa de Francia, que sea con las mejores intenciones posibles. Así que él tendrá que retirar esas palabras y entonces podremos conversar”, agregó. El presidente galo había afirmado tres días antes que Francia no respaldaría el acuerdo de libre comercio anunciado hace dos meses por la Unión Europea y el Mercosur debido a que Bolsonaro, supuestamente, le mintió cuando dijo que Brasil cumpliría todos sus compromisos ambientales, lo que, en su opinión, fue puesto en duda por la multiplicación de los incendios en la Amazonia.

Comentario sexista de Bolsonaro.

Toda esta confusión proviene del comentario sexista que hiciera Bolsonaro al burlarse del aspecto de Brigitte Macron por su edad. En concreto, un brasileño contestó a un internauta que pretendía comparar el aspecto físico de la esposa de Bolsonaro con la de Macron, una más joven que la otra. Bolsomaro contestó al montaje fotográfico de comparación con un “No lo humilles. Ja, ja, ja”, comentario que ha sido motivo de una crisis. Macron fue algo más elegante y simplemente arremetió contra la indignidad de Bolsonaro por sus palabras tan propias de otro tiempo: “Creo que los brasileños, que son un gran pueblo, tienen un poco de vergüenza de ver ese comportamiento y que esperan que, cuando uno es presidente, se comporte bien con los otros”. Y, como despedida, pidió a este pueblo que pronto tenga otro presidente salido de las urnas. En las últimas horas, Macron recabó apoyos internacionales y aunque esta crisis no pasará a mayores, en el ámbito diplomático está claro que marca el futuro de las relaciones entre ambas naciones, al menos en los próximos años, a la espera de un posible cambio de mandatario en ambas o en alguno de los dos países.

      Continúa el drama en la Amazonia, con más de un millón de hectáreas quemadas.

El pasado lunes, en la entrevista que concedió tras la cumbre del G7 en Biarritz, Macron dijo que en algún momento habría que discutir la posibilidad de darle un “estatus internacional” a la Amazonia para impedir su destrucción o que un gobernante de algún país amazónico adoptase medidas contrarias al bienestar mundial. La declaración fue interpretada en Brasil como una amenaza a la soberanía de los países amazónicos sobre la mayor selva tropical del mundo. Bolsonaro no descartó que Brasil pudiera recibir parte de los recursos prometidos por el G7 para ayudar a los países amazónicos a combatir los incendios y que se destinarían a financiar el envío de aviones equipados para combatir focos de fuego y programas de reforestación de la Amazonia. Después de que Macron se refiriera al posible “estatus internacional” de la Amazonia, el canciller brasileño, Ernesto Araújo, subrayó el carácter incuestionable de la soberanía de Brasil sobre la mayor parte de la región y acusó a los países del G-7, principalmente a Francia, de no haber cumplido los compromisos que asumieron en el Acuerdo de París sobre cambio climático. Según Araújo, ya están previstos varios mecanismos y fondos que permiten a los países ricos ayudar a los menos desarrollados a luchar contra la deforestación y a compensar sus esfuerzos por reducir los gases contaminantes, que hasta ahora no han sido activados. “Nadie necesita de una 'nueva iniciativa para la Amazonia' –escribió Araújo en sus redes sociales–, como sugiere el presidente Macron, cuando ya existen, en el ámbito de la Convención del Clima de Naciones Unidas, varios mecanismos para combatir la deforestación, cualquiera que sea el pretexto y cualquiera que sea el ropaje”. El Gobierno brasileño también garantizó que los incendios en la Amazonia estén bajo control y que sean comunes en esta época del año. “Ocurren todos los años y, en agosto y septiembre, suelen ser ‘críticos por la sequía que afecta a la Amazonia, pero algunos países están aprovechando la situación para justificar sus restricciones comerciales a Brasil”, agregó.  Y precisó que los registrados en 2019 tan sólo son los de mayor número en los últimos siete años y están lejos de récords registrados en la década de 2000.

El jefe de Gabinete del presidente Bolsonaro anunciaba el pasado martes que no aceptarían los 18 millones de euros que los países del G-7 acordaron destinar para combatir los incendios que asolan la Amazonia. Bolsonaro exigió a Macron que pidiera disculpas a cambio de aceptar la ayuda. El gobierno de Brasil cree que el acuerdo climático es una conspiración del marxismo globalista que domina la ONU. Onyx Lorenzoni lo confirmaba en un blog del diario digital G-1, donde insistió en que la situación de los incendios está “bajo control”. Y cargó duramente contra el presidente francés, Emmanuel Macron, anfitrión del G7 e impulsor de esta ayuda en la cumbre, no sin grandes críticas a la política medioambiental de Bolsonaro, centrada en extraer minerales y madera de sus territorios amazónicos, algo que ya desató un enfrentamiento directo entre ambos líderes. Las palabras que Lorenzoni dirigió a Macron no difirieron mucho de las empleadas días atrás por el propio Bolsonaro, cuando acusó de “imperialista” al líder francés por introducir en la agenda del G-7 los incendios en la mayor selva del mundo y pulmón del planeta y deslizar la idea de que esta zona debería tener una “estatus internacional” para evitar que los Gobiernos favorezcan su deterioro. “Agradecemos [la ayuda], pero tal vez esos recursos sean más relevantes para reforestar Europa”, dijo el jefe del gabinete de Bolsonaro. “Macron no logra siquiera evitar un previsible incendio en una iglesia que es un patrimonio de la humanidad y ¿qué pretende enseñarle a nuestro país?”, afirmó Lorenzoni en tono desafiante, sobre el incendio que calcinó la basílica de Notre Dame de París, el pasado abril. “Tiene mucho que cuidar en su casa y en las colonias francesas”, añadió, refiriéndose a los territorios franceses en Latinoamérica, como la Guayana Francesa, fronteriza con Brasil. “Brasil es una nación democrática y libre y nunca ha llevado a cabo prácticas colonialistas e imperialistas como, tal vez, sea el objetivo del francés Macron. Casualmente, con altos niveles de rechazo interno”, agregó Lorenzoni. Sin embargo, en unas declaraciones posteriores, el propio Bolsonaro niega haber rechazado este dinero, pero exige a cambio que Macron se retracte por llamarle mentiroso. “En primer lugar, el señor Macron tiene que retirar los insultos que hizo contra mí. Primero me llamó mentiroso y, después, por las informaciones que obtuve, dijo que nuestra soberanía en la Amazonia era un asunto abierto”, afirmó el líder ultraderechista. “Para conversar y aceptar cualquier cosa de Francia, que sea con las mejores intenciones posibles, él tendrá que retirar esas palabras y entonces podremos conversar”, agregó. El asunto tiene en pie de guerra a la mayoría del Gobierno brasileño contra Francia en particular y contra Europa en general, que ve con preocupación el impulso maderero y minero en la Amazonia durante el corto mandato del ultraderechista Bolsonaro. ONG locales y las propias comunidades indígenas nativas de la selva han denunciado la impunidad de empresas extractivistas en la Amazonia con apoyo a dejación del Ejecutivo, que ve en la selva un recurso económico más que natural.

      Lluís Brotons, investigador del CREAF.

Últimamente, cuando las llamas han arrasado ya más de 20.000 hectáreas en el Amazonas, ante la acuciante presión de manifestaciones y protestas dentro y fuera de Latinoamérica, y frente a las amenazas de países como Francia, Irlanda o Islandia, Bolsonaro ha movilizado al Ejército para combatir el fuego, afeando a estos países sus críticas y alegando que “hay incendios forestales en todo el mundo y que no se pueden utilizar como pretexto para decretar sanciones disciplinarias”. El biólogo Lluís Brotons advierte de que los incendios de la Amazonia no son casos aislados y achaca gran parte de la responsabilidad a la deforestación. Más allá de la cuenca amazónica, el científico alerta de la aparición de focos en zonas sin apenas registro de incendios como Groenlandia. Investigador del CSIC en el Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (CREAF) –y asociado al Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Cataluña y al Instituto Catalán de Ornitología–, Brotons alerta de que la deforestación en la Amazonia y en otras regiones del mundo es como estar echando gasolina a las llamas. “Si aceleramos la destrucción de zonas forestales como la Amazonia –pronostica Brotons– será casi imposible que cumplamos los ya difíciles compromisos del Tratado de París para intentar quedarnos en un aumento de temperaturas que solo sea del 2ºC”. Y eso no es todo. Las llamas están llegando a zonas hasta ahora inhóspitas como Groenlandia, lo que podría acelerar los procesos de cambio climático en esas regiones. “Nos vamos a tener que acostumbrar a que, en verano, tengamos, en un sitio u otro del planeta, noticias sobre incendios”, se lamenta Brotons. “Sin embargo –advierte en Público Laura Chaparro, en los últimos diez años, casi se había parado de golpe y lo que hemos tenido en 2019 es una especie de incremento. Parece claro que estos incendios son un síntoma de una aceleración en el proceso de pérdida de zonas forestales en áreas periféricas donde se está produciendo este desbroce, no en la selva amazónica virgen del interior. Seguramente, están relacionados con la transformación a zona agrícola, en algunos lugares, que se escapan del control de los agricultores o ganaderos que los producen en años menos lluviosos. Este año está siendo más seco de lo normal. Y, de hecho, no solo pasa en Brasil; sucede en otras zonas de Sudamérica, como en Bolivia, incluso en Colombia y Venezuela.

Concentración pacífica “SOS Bolivia”.

Entre el 18 y el 25 de agosto, en el bosque Chiquitano de Bolivia se quemaron más que 1.000.000 de hectáreas. Eso es más bosque del que normalmente se destruye en todo el país en tres años. Según los expertos, se necesitarán al menos dos siglos para reparar el daño ecológico causado por los incendios. Y más de 500 especies están en peligro por las llamas. “El bosque seco Chiquitano en Bolivia, o Chiquitanía escribe en Público Claire F. R. Wordley, investigador asociado, en el departamento de zoología de la Universidad de Cambridge–, era el bosque seco tropical sano más grande del mundo. Ahora no está claro si conservará ese estatus. Este singular ecosistema es el hogar de los pueblos indígenas, así como de una fauna emblemática que incluye jaguares, armadillos gigantes y tapires. Algunas especies del Chiquitano no se encuentran en ningún otro lugar de la Tierra. Fotografías y vídeos de la zona muestran que muchos animales han muerto por el fuego. La región consumida por las llamas también abarca tierras de cultivo y pueblos, con miles de personas evacuadas y muchas más afectadas por el humo. Se están enviando alimentos y agua a la región. En muchos distritos donde la contaminación del aire duplica el nivel que se considera extremo, los niños no van a la escuela. Muchas familias siguen sin tener agua potable. Mientras que los medios de comunicación se han centrado en Brasil, los bolivianos piden al mundo que también tenga en cuenta su trágica situación y que envíe ayuda para combatir las llamas. Se cree que los incendios se iniciaron deliberadamente con el objetivo de limpiar la tierra para su aprovechamiento agrícola, pero se propagaron rápidamente hasta quedar fuera de control. No se ha identificado a los autores, pero el presidente boliviano, Evo Morales, ha justificado que se causen incendios, diciendo: ‘Si las pequeñas familias no provocan incendios, ¿de qué van a vivir?’. El desastre llega justo un mes después de que Morales anunciara una nueva medida destinada a aumentar la producción de carne de vaca para exportación. El Decreto Supremo 3973, aprobado en julio, permite la quema de tierras forestales. Veintiuna organizaciones de la sociedad civil están pidiendo su derogación. Argumentan que ha contribuido a causar los incendios y viola las leyes ambientales de Bolivia”. Los miembros del gobierno sostienen que prender fuego es una actividad normal en esta época del año y no está relacionada con el decreto. Morales ha afirmado repetidamente que la ayuda internacional no era necesaria. Tres aviones enviados por la vecina Argentina permanecieron en tierra durante días porque la administración se negó a dejarlos volar. Cambió su postura el pasado domingo 25 de agosto, cuando cedió al fin a las presiones y aseguró que aceptará la ayuda internacional.

Manifestantes en Santa Cruz de la Sierra. Author provided

Muchos advierten que los incendios podrían haberse contenido mucho antes con el auxilio de otros países. Numerosos vídeos muestran a voluntarios tratando de apagarlos con ramas, con equipos inadecuados y agua limitada. Algunos han sufrido desmayos por el fuerte humo. Los bomberos trabajan a contrarreloj para sofocar las llamas. Y, mientras los bomberos y los voluntarios luchan para hacer frente a las llamas soportando temperaturas de hasta 55 ℃, los bolivianos han organizado una recaudación de fondos para hacer frente a los incendios ellos mismos. Ha habido protestas en todo el país. Los manifestantes piden a Morales que solicite ayuda internacional y que revoque los decretos y leyes que han podido contribuir a provocar los incendios. Millones de personas reclaman al gobierno la derogación del Decreto Supremo 3973 y de la Ley 741, que permite las “pequeñas quemas controladas” en tierras agrícolas. Morales se enfrenta a unas próximas elecciones y ha recibido críticas por seguir haciendo campaña mientras los incendios se propagan. “Una actividad que, según indicó el domingo, dejará de lado durante una semana. Algunos líderes indígenas piden un juicio para determinar la responsabilidad de los incendios y la estrategia de respuesta más adecuada. Alex Villca, líder y portavoz indígena, ha asegurado: ‘El grupo coordinador de los pueblos indígenas de la Amazonia, Coica’, ha firmado una carta en la que responsabiliza tanto a Bolsonaro como a Morales por el ‘genocidio ambiental y cultural’ causado por los incendios. El presidente Morales llegó al poder en Bolivia, en 2006, respaldado por una plataforma de socialismo, derechos indígenas y protección del medio ambiente. En 2010 aprobó la famosa Ley de los Derechos de la Madre Tierra, que sitúa el valor intrínseco de la naturaleza al mismo nivel que el de los seres humanos. Su retórica ambiental ha sido fuerte, pero sus políticas han sido contradictorias. Morales ha aprobado la deforestación generalizada, así como la construcción de carreteras y la extracción de gas en los parques nacionales. Mientras que los incendios en el Chiquitano copan los medios de comunicación dentro del país, millones de focos más se avivan en Bolivia, enardecidos por la reciente sequía. No está claro si la respuesta a los incendios afectará al resultado de las elecciones de octubre, pero los ánimos se están caldeando en el país”. 

Fuego en la Amazonia.

Más que la amenaza de fuego en la Amazonia, hay quienes ven en Jair Bolsonaro la verdadera amenaza y creen que su Gobierno pone en peligro la lucha contra el cambio climático. Lo advierte Heriberto Ajaújo en El País: “De ser un país estratégico para mitigar el calentamiento global, ya que controla el 60% de la mayor selva tropical, el Brasil de Bolsonaro se ha convertido en un problema, porque los millares de fuegos y el repunte exacerbado de la deforestación confirman los peores augurios: que el presidente de extrema derecha está dispuesto a acabar con el mayor depósito terrestre de CO2 del planeta. Y ello pese a que el Gobierno brasileño haya recordado que ya ha enviado a más de 43.000 efectivos militares a la zona para combatir los fuegos”.

.
Focos activos mundiales, según la imagen de la NASA.

Pero también África central arde con mayor número de focos activos que la Amazonia. La NASA señala que desde el pasado 21 de agosto se han registrado más de 7.000 incendios en Angola y 3.395 en la República Democrática del Congo. Los fuegos se han propagado en Angola, Zambia y la República Democrática del Congo, lo que provoca que haya más focos activos que en el Amazonas, según ha publicado Weather Sources. En el continente africano, el fuego se considera parte de su cultura y se utiliza, entre otros usos, para la quema de rastrojos con la intención de “quemar y cultivar los campos”. Además, ha recordado que “el 80 por ciento de la deforestación mundial se encuentra en once frentes de deforestación, y entre estas está la África subsahariana y el Amazonas”. Asimismo, expone que “la principal causa de los incendios en África es por la agricultura de subsistencia”. Greenpeace destaca que, de la misma manera que la selva amazónica está en peligro por los incendios, la selva tropical de la cuenca del Congo corre peligro de ser golpeada nuevamente por incendios incontrolados. “Estas quemas pueden afectar a la superficie forestal y al bosque tropical del Congo, donde viven varias especies de primates”, añade. Desde WWF, Miguel Ángel Soto, responsable de Bosques señala a Europa Press que uno de los mayores problemas de estos incendios es su escasa tecnología, lo que provoca una mayor desinformación de lo que ocurre. “Brasil tiene un sistema de monitoreo y una tecnología muy avanzada pero ningún país africano tiene esa capacidad para realizar un monitoreo correcto, por lo que la información es escasa”. En un comunicado, el Gobierno de Angola se ha pronunciado sobre los incendios que asolan al país y se ha mostrado molesto por las comparaciones con Brasil “que pueden llevar a una dramatización de la situación y a la desinformación de las mentes más imprudentes”. Además, añaden que “estos incendios son comunes al final de la estación seca” y reconocen que los fuegos son provocados por los agricultores durante la fase de preparación de la tierra “previa a la temporada de lluvias”.


Luis M. García, en su artículo “Messi y Cristiano no apagan fuegos en la Amazonia”, aparecido en Público el pasado 28 de agosto, dice que los miles de incendios que arrasan la Amazonia han llevado a muchos a ofrecer su ayuda, como ha hecho a nivel particular Leonardo Di Caprio. “El actor ha donado cinco millones de dólares a través de la fundación Earth Alliance, que esperemos que lleguen a la causa, porque también el G7 le ha ofrecido su ayuda a Jair Bolsonaro, veinte millones de dólares, y éste se la ha escupido a la cara en otra de esas actitudes poco medioambientales que caracterizan al presidente brasileño, inconsciente o no de que la Amazonia es patrimonio de todo el planeta, no solo de Brasil, donde se encuentra la mayor parte del pulmón de la Tierra. De Gran Bretaña parece que Bolsonaro sí va a aceptar ayuda, con condiciones, y de seguir reculando, tampoco rechazará la de otros, afortunadamente para todos. Pero los que no han donado ni un duro, seguro, ni tienen en su agenda hacerlo, y menos con aviones cargados con miles de litros de agua para acabar con los incendios, son Leo Messi y Cristiano Ronaldo. Lo confirma que no haya mención alguna por parte de ninguno de los dos y que sus círculos más próximos, agencias incluidas, desmienten u obvian la noticia falsa. Aunque no hacía falta. Porque han llegado desde Sudamérica a Facebook y otras redes varios letreros que cuentan, sin citar fuente alguna, lo generosos que son ambos futbolistas, que se plasma en que han pagado mucho dinero, no se sabe a quién, para ayudar a mitigar el desastre de la selva amazónica. ‘Qué grande eres Leo Messi. El mejor jugador del mundo una vez más demostrando que no es grande solo en las canchas. Tras las dos semanas que lleva quemándose la Amazonía decidió contratar cinco aviones de hasta 70 000 litros de capacidad para apoyar a controlar el incendio’, se dice del futbolista argentino del Barcelona.


“Mientras que del delantero luso de la Juve –termina escribiendo Luis M. García–, se afirma que es ‘Grande Cristiano Ronaldo. El astro portugués, una vez más, demostrando que no es grande solo en las canchas, tras las dos semanas que lleva quemándose la Amazonía, decidió contratar él mismo tres aviones de hasta 80 000 litros de capacidad’. Lo de ‘contratar él mismo tres aviones de hasta 80 000 litros’, que se le atribuye a CR7, a mí me hubiese encantado presenciarlo. En cualquier caso, el avión cisterna con mayor capacidad del mundo puede transportar un máximo de 74.000 litros de agua, así que los tres de Cristiano, de 80.000, tampoco vendrían a cuento. Algunas de las fotos que acompañan a las múltiples versiones de ambos bulos, además, son viejas y tampoco corresponden a la Amazonia. Van desde imágenes de la agencia EFE de un fuego en Madrid en 2009 a otras de la extinción de un incendio forestal en Crimea en 2013, obra de Suvirov Aleksey para Photo Unian. Así que si a alguien le queda alguna inquietud sobre si Leo Messi y/o Cristiano Ronaldo se han embarcado en iniciativas de estas, que no sufra. Porque, de ser cierto, el asunto estaría perfectamente orquestado y nos enteraríamos todos”.

      Sostres ve en el incendio de Amazonia una “oportunidad” para entrar “con tanques y asfaltar”

El columnista de ABC, Salvador Sostres publica una polémica columna en la que sostiene que el incendio que asola el Amazonas es una “oportunidad” para entrar “con tanques y asfaltar”. Para el escritor catalán, “esta comedia por los incendios del Amazonas es una hipocresía más de la izquierda”. Sostres sostiene qué haría él: “Lo que haría, más que apagarlos, es aprovecharlos para asfaltar avenidas en la selva y entrar con el ejército a por las tribus de caníbales y a por los curanderos”. Además, considera que “la izquierda siempre se ha sentido cómoda entre mentirosos, asesinos en taparrabos y hechiceros, pero mi gran proyecto vital es entrar en el Amazonas y detener a tanto malhechor agazapado, cuya impunidad es una amenaza y un escarnio para cualquier idea de orden y de progreso”. Sostres insiste: “Los árboles arden. ¿Y qué? La carraca ecologista –y la feminista– son restos del naufragio del comunismo y el chantaje de estos grandes carteristas de nuestra era que son las oenegés”.  Según el columnista, “en el Amazonas se esconde la mayor concentración de atraso y atrocidad de la Tierra y hay que ver este incendio como una oportunidad” además de que “hay que entrar en el Amazonas con tanques y apisonadoras, asfaltar caminos francos para que todo esto nunca más vuelva a pasarnos. Alquitrán contra la barbarie”.

       El enfado de Reverte a causa del incendio de Amazonia.

La situación en la Amazonia estalla contra la inacción de Jair Bolsonaro que, pese a sus reticencias, ha admitido el problema y ha destinado a cerca de 44.000 soldados a luchar contra las llamas. La cumbre del G-7 también ha sido un momento propicio para poner el foco en lo que está sucediendo, dejando al presidente de Brasil en mal lugar y pidiendo a todos los organismos competentes que actúen sin espera contra los focos que arrasan con el pulmón del planeta. La noticia ha salido publicada en todas las grandes cabeceras, preocupadas por la situación y analizando cómo avanza el fuego en la zona. Arturo Pérez Reverte, sin embargo, se ha fijado en otro detalle: “En España y en la mayor parte de los países de habla hispana, excepto en dos o tres americanos, siempre se dijo Amazonia. Desde hace unas semanas nos ha dado de pronto la fiebre por Amazonía y todo cristo la acentúa así. Empiezo a creer que en España nos echan algo en el agua”.

Fotomontajes, imágenes y frases sorprendentes de esta última semana:




Amazonas




Del Humor Sindical


Alguien te lo tenía que decir. De Miguel Lázaro.
Del Humor Sindical.




Publicación de Ponete feliz.

 Mediterrúneo

Bella como Beirut. Triste como Iraq.
Exausta como Siria.
Destruida como Yemen.
Herida como Libia.
Olvidada como Palestina.
Nasir Karim


Publicado por  Miguel Lázaro.


 La sonrisa es una lengua universal


“Nuestra hija Xana ha fallecido esta tarde a la edad de nueve años después de luchar durante cinco intensos meses contra un osteosarcoma”, publicaba el pasado jueves el exseleccionador, Luis Enrique, en Twitter. Xana, la hija de 9 años de Luis. El técnico, quien entrenó entre 2018 y 2019 a la selección española, renunció a su puesto como seleccionador el pasado junio para dedicarse a su hija y acompañar al resto de la familia.


El humor en la prensa de esta semana: Peridis, Eneko, B. Vergara, Pat, J. R. Mora, Manel F., Javirroyo, Atxe…






 ManTrump se fue a la guerra.




 Pufos de Diaz 


 Juego de manos, juego de ciudadanos.

 El de las amargadas y fracasadas

Cómete toda la comida o...

Las mentiras, por J. R. Mora

Mora muestra en su humor de esta semana las dos mentiras descubiertas esta semana. “En la primera -dice en su web- Cayetana Álvarez de Toledo, diputada del PP y periodista, llevó al Congreso una proposición no de ley basándose en una noticia falsa que hablaba de que varias empresas de paquetería habían dejado de repartir en determinadas zonas de Barcelona por la inseguridad y aprovechó para pedir más policías. Todas las empresas lo negaron. Finalmente, el PP modificó su iniciativa y retiró la mención a las empresas de reparto”.


“La otra mentira de esta semana fue la de Carmen Calvo con su ya célebre ‘permiso para rescatar’, ‘que la vicepresidenta del Gobierno asegura que el Open Arms no tiene y que por esto se plantea meterles un paquete en forma de multón de cientos de miles de euros. Eso sí, se le olvidó indicar el número de ventanilla y en qué ministerio se solicita dicho permiso. Aquí, Calvo se corona como una ridícula constructora de mentiras que, por mucho que se cacareen, no tienen mucho recorrido. Olvida que hasta el informe del fiscal de Agrigento puntualiza que el barco estaba obligado a socorrer a los inmigrantes y los países implicados a cooperar en el rescate. Como también olvida todas las leyes, convenios y tratados que Salvini se pasó por donde mismo se pasaba el Coloso de Rodas los barcos”.

 Entender las cosas.
 Bulos.
Great again


 El hundimiento
 Lo increible.



Pep Roig y sus imágenes desde Mallorca:  Entre todos lo matamos y…, Lógica constante,  Política bufa, La conjura de los necios, Santa Rita, Santa Rita…






Los vídeos de esta semana:

La NASA muestra mapa de los incendios en la Amazonia

Sigue avanzando sin control el incendio en la Amazonía

DiCaprio hace una donación para salvar el Amazonas | El Comercio

¿QUE CONSECUENCIAS TRAERÁ AL PLANETA EL INCENDIO DEL AMAZONAS?

Urgente ! INCENDIOS en AMAZONIA || Presidente Bolsonaro Dice

No hay comentarios: