La izquierda reacciona ante la debacle.
El presidente Sánchez reunió a altas horas de la noche del lunes a su núcleo de confianza del Gobierno y de Ferraz para trasladarles una decisión que buscaba un golpe de efecto contra la desmovilización de la izquierda: “Es ganar o morir”. José Enrique Monrosi lo cuenta con toda clase de detalles en ElDiaro.es: “Cuando los relojes de la Moncloa dieron las diez de la noche, el recuento electoral del 28 de mayo dejó de ser considerado un mero goteo de malas noticias. Los datos pasaron delante de los ojos de Pedro Sánchez y de su reducido núcleo de confianza. La escena del presidente del Gobierno junto a su director de Gabinete, Óscar López, y su director adjunto, Antonio Hernando, reunidos en un despacho en la Moncloa, pronto se convirtió en algo parecido a un funeral. Parte del dramatismo lo aportó el hecho de que se tratara de una debacle no prevista. Porque nadie, según todas las fuentes consultadas en el Ejecutivo y en Ferraz, supo predecir un escenario en el que el PSOE quedara despojado de la inmensa mayoría de su poder territorial tras ser arrasado por la ola azul que acabó por teñir el país en favor de la derecha. La magnitud del desastre cosechado no tardó en hacer mella. A la calle Ferraz, por donde el secretario general del partido no se pasó en la noche del domingo, llegaron mensajes explícitos de que la reacción pública debía ser contundente y tenía que dibujar desde el primer minuto la asunción de responsabilidades. Al filo de la medianoche, la portavoz de la Ejecutiva Federal, Pilar Alegría, compareció ante la prensa, diciendo: ‘Recogemos el guante, entendemos el mensaje y desde ya nos ponemos a trabajar para hacer las cosas mejor”. Según todas las fuentes consultadas al corriente de la decisión, el presidente aún no había trasladado su intención de volver a jugársela, quizás por última vez, al todo o nada… María Jesús Montero, Félix Bolaños y Santos Cerdán fueron citados bien entrada la noche en el Palacio de la Moncloa. Según las fuentes consultadas, y a pesar de que no todos los presentes vieron claro de primeras el movimiento, apenas se produjo debate. Los argumentos del equipo del presidente y del propio Pedro Sánchez, que hizo suya la decisión, sonaron contundentes. No se trataba de tirar la toalla, se explicó, sino de todo lo contrario. De hacer el último intento por evitar el naufragio. ‘Hay que ganar o morir’, resumieron en el PSOE”.
El populismo de la derecha se encuentra con una izquierda dividida que entra con facilidad en el marco de las guerras culturales fijadas desde el PP y que pierde votos decisivos en las heridas de la desunión. Y, ante la exhibición de fuerza del PP, que mejoró de forma notable sus resultados, queda por ver si estamos ante un escenario idéntico al de 2011. Así lo publica ElDiario.es en sus comentarios: “¿Está Sánchez a tiempo de dar la batalla en las elecciones generales o es inevitable el cambio de ciclo que culminará con Alberto Núñez Feijóo en la Moncloa? La situación de España nada tiene que ver con la de 2011 pero la izquierda se encuentra ante la paradoja de que los buenos datos económicos, las medidas sociales y el avance en libertades no funcionan electoralmente ni evitan el agotamiento. Y la peor noticia no es siquiera la mala salud del PSOE sino el hundimiento de los socios de gobierno, especialmente en todas las grandes ciudades. Un hundimiento de Podemos en territorios tan importantes como Madrid. La caída de Más País o el inexistente efecto movilizador de Yolanda Díaz y su proyecto han demostrado que la desunión, las cuitas y el fuego cruzado en ese espacio político ha derivado en una única realidad: todos han perdido. Es muy fácil hacer la crítica a toro pasado el día después de las elecciones y solo cabe plantearse si la situación es reconducible o el enfermo se encuentra en estado terminal. La izquierda española se enfrenta a un cierre de ciclo, pero también a la incapacidad para capitalizar los avances sociales y los datos económicos positivos entre una clase media muy precarizada. El votante ha preferido la derogación del sanchismo y sus pactos y el sonido de los ideales liberales, aunque estos en realidad tengan como objetivo favorecer los intereses económicos de una élite empresarial y rentista. El problema del PSOE es Andalucía, aunque los ojos se volvieron ayer a la Comunidad Valenciana, Aragón o La Rioja, pero lo es mucho más el hecho de que a su izquierda haya multitud de actores y no un proyecto definido. Los líderes de este espacio han conseguido que sus votantes tengan un juicio distorsionado y pesimista de los propios partidos que lo conforman. En España se tiende a votar, a derecha e izquierda, a alguien de fiar, de los de siempre, que ponga orden en el caos, aunque este caos sea inventado. El populismo de la derecha se ha encontrado con una izquierda dividida que entra con facilidad en el marco de las guerras culturales que fijan desde el PP y que pierde votos decisivos en las heridas de la desunión. Recuperar crédito en Andalucía y superar el bloqueo que impide crear una alternativa verdadera a la izquierda del PSOE son las dos cuestiones más urgentes, no ya para dar la batalla en las próximas generales, para tener un futuro desde la oposición si Núñez Feijóo llega a gobernar, lo que hoy parece mucho más posible que ayer”.
El anuncio del mismo
lunes por parte del presidente Pedro Sánchez de adelantar
las elecciones generales al 23-J conlleva, según Diariocrítico, una serie
de consecuencias para la política nacional. “Más allá de analizar si son
positivas o no para sus intereses, cabe repasar qué supone como cambios para el
país en los próximos 50 días:
Desactiva la fiesta
'popular': Aunque el PP sigue de fiesta mentalmente por ganar las elecciones
del domingo, esta maniobra obliga al partido de Feijóo a dejarse de euforias y
ponerse ya a trabajar en la siguiente campaña. Eso supone ratificar o cambiar a
los dirigentes que llevan estos asuntos electorales: elaboración de programa,
directos de campaña, organización de actos, búsqueda de candidatos por
provincia, logística... Aunque la sonrisa siga en los rostros de los miembros
del PP, toca seguir trabajando y no relajarse.
Los pactos postelectorales,
más a la vista que nunca: Por supuesto que iban a ser igualmente importantes y
seguidos los pactos que ahora los partidos tienen que alcanzar donde no hay
mayorías absolutas. Pero con una campaña por las generales activadas, toca
paralelamente trabajar en otras lides siempre algo incómodas. Sánchez, con esta
maniobra, pondrá en el foco los pactos que tienen que llegar el PP con Vox en
varias comunidades autónomas y múltiples ayuntamientos para hacerse con el
poder. Como la formación de Abascal no se lo va a poner fácil a los azules,
exigiendo carteras y concejalías, cualquier trifulca, tensión o pacto
controvertido tendrá el doble de foco informativo encima de ellos. La
izquierda, claro, hará campaña valiéndose de estos pactos.
La participación será
baja: Lo más criticado a Sánchez es que por imponer sus plazos, celebrará unas
importantes elecciones generales en pleno verano. Además, el 23 de julio es
puente por ser víspera del Día de Santiago (25-J), y a muchos españoles les
pillará esta convocatoria en la tumbona de la playa o en la casita más cómoda
de la montaña. Además de la baja participación, puede haber parte de voto de
castigo por este tipo de convocatorias tan inesperadas. Si esto no fuera poco,
tradicionalmente, los expertos en elecciones lo tienen claro: la baja
participación, como ha ocurrido este domingo en las autonómicas y municipales,
perjudica más a la izquierda.
Detiene la sangría
socialista: La realidad es que los titulares son claros respecto a la
valoración de estas elecciones del 28-M. El PSOE ha perdido varios gobiernos
regionales y ayuntamientos importantes, pero la realidad es que sólo ha perdido
3 puntos porcentuales de votos y la debacle no es tal. Adelantando Sánchez las
elecciones se espera que las perspectivas sean mejores que si esperaba unos 5 o
6 meses, cuando tocaba ir a las urnas al finalizar la legislatura.
Sin oposición interna:
Sánchez ha logrado otra cosa con este adelanto urgente, y es que frena de seco
el debate interno en el PSOE sobre las próximas generales. No hay tiempo para
debates, primarias, o alternativas. Sólo él puede ser el candidato, por mucho
que haya malestar y críticas en el seno del partido. Realmente Sánchez tiene
pocas caras que le hagan frente en el PSOE, pero con esta maniobra evita que
haya cualquier movimiento peligroso para sus intereses.
Presión a la izquierda: Si algo tiene claro el PSOE, como le ocurre al PP, es que hoy por hoy no son tiempos para mayorías absolutas en las generales. Si los 'populares' tendrían que apoyarse en Vox para gobernar, los socialistas han asumido desde hace tiempo que deben asociarse a izquierda y a los regionalistas, nacionalistas e independentistas. Con este adelanto, Sánchez obliga a que la izquierda se organice urgentemente y deje de dilatar un posible pacto entre Sumar, Izquierda Unida y Podemos, partidos que deben aclararse cuanto antes. Yolanda Díaz tenía claras sus alianzas, y sólo le quedaba la formación morada. Apenas tienen unos días para saber si irán en coalición o si se integran en una única candidatura.
Antonio Avendaño explica, en Elplural.com, cómo Pedro Sánchez se levanta de la lona. “El presidente neutraliza el batacazo del 28-M con un adelanto electoral que rebaja la euforia del PP, infunde ánimos al PSOE y fuerza a Podemos a unirse a Sumar. Isabel Díaz Ayuso debe ser la única persona importante de la dirigencia del Partido Popular a la que no ha inquietado la sorpresiva decisión de Pedro Sánchez de celebrar elecciones generales el 23 de julio, sino más bien todo lo contrario. Aunque venía pidiendo el adelanto con cansina y poco convincente reiteración, la jugada del presidente no ha debido gustarle a Alberto Núñez Feijóo, cuya justificadísima euforia por la victoria conservadora del domingo se ha visto súbitamente ensombrecida por el vuelco del calendario electoral. Si Feijóo no logra en julio que los votantes del PP y Vox lo hagan presidente, Ayuso no tardará en postularse como su relevo natural. Conocidos los vistosos resultados obtenidos por las derechas en autonomías y ayuntamientos, el domingo todo el mundo coincidía en que el Gobierno de Sánchez estaba herido de muerte y, con toda seguridad, llegaría pálido, desangrado y a rastras a las elecciones de noviembre. Pues bien: el presidente tomó buena nota de la alarmante gravedad de las heridas infligidas a su Ejecutivo y decidió él mismo rematar la faena iniciada 24 horas antes por unos cuantos millones de ciudadanos. Sánchez, mejor una vez rojo que cientas de veces amarillo, ha optado por liquidar con seis meses de anticipación la legislatura, consciente de que una mayoría no abrumadora pero sí inequívoca del pueblo español le ha dado la espalda: una mayoría formada, desde luego, por los que han votado al PP y a Vox, pero también por quienes –no menos de 700.000– en 2019 votaron socialista y este domingo no lo han hecho… La aritmética es obvia: las autonómicas y municipales las ha ganado Feijóo y las ha perdido Sánchez. Pero una lectura moral de las cifras y los porcentajes sentencia que Sánchez las ha perdido mucho más de lo que las ha ganado Feijóo. Al presidente le honra haberlo entendido y haber obrado en consecuencia adelantando el partido de vuelta. El domingo, los seguidores de Feijóo y Abascal abarrotaron las gradas porque se tomaron el encuentro del 28-M no como un partido local de Copa del Rey sino como una final de Champions; las gradas socialistas estuvieron semivacías, pero Pedro cree que puede llenarlas en el partido de vuelta y enardecer de nuevo a su afición… Para que las cosas salgan, sin embargo, medio bien el 23-J será preciso que Podemos madure y comprenda que Yolanda Díaz es especie protegida y hay que cuidarla. La vicepresidenta tercera del Gobierno es un activo electoral muy potente y Podemos debería hacer todo cuanto esté en su mano para no malograrlo. Ione Belarra, secretaria genérica más que general de Podemos, ya ha dicho que están en ello. Apenas tienen diez días para formalizar su incorporación a Sumar: no hacerlo sería suicida para Podemos, dañino para Sumar y angustioso para el PSOE.
El pasado martes, un día después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, adelantase las elecciones generales al 23-J, Yolanda Díaz, presentaba la plataforma “Movimiento Sumar”. El equipo de la vicepresidenta segunda aceleró la inscripción de la plataforma en el registro del Ministerio del Interior ante la convocatoria electoral anunciada por el presidente del Gobierno. La constitución de Sumar como entidad política representa a la “pata ciudadana” del proyecto que Díaz lanzó hace poco más de un año en la coalición de la izquierda que se configurará dentro de los próximos diez días, el plazo que marca el sistema electoral para registrar este tipo de alianzas antes de que comience la campaña. “El movimiento Sumar tiene como objetivo fundamental ser la casa grande de la democracia. Somos un movimiento europeísta, plural, con una firme voluntad de enfrentar el reto de la emergencia climática y avanzar hacia una sociedad más libre, más feminista y más igualitaria”, afirmaron fuentes de la plataforma. “Nuestro objetivo está claro: convertir a Yolanda Díaz en la primera presidenta del Gobierno de España y garantizar una mayoría progresista que nos permita defender los derechos conquistados y seguir avanzando”, añadieron esas mismas fuentes. “El movimiento Sumar tiene como objetivo fundamental ser la casa grande de la democracia. Somos un movimiento europeísta, plural, con una firme voluntad de enfrentar el reto de la emergencia climática y avanzar hacia una sociedad más libre, más feminista y más igualitaria”, afirmaron fuentes de la plataforma creada por la vicepresidenta segunda. “Nuestro objetivo está claro: convertir a Yolanda Díaz en la primera presidenta del Gobierno de España y garantizar una mayoría progresista que nos permita defender los derechos conquistados y seguir avanzando”, añadieron esas mismas fuentes. Los equipos negociadores del proyecto de la ministra de Trabajo volvieron a ponerse en marcha para articular una confluencia con el resto de partidos a los que en los últimos meses han intentado seducir, como Más Madrid y Compromís, pero también formaciones regionalistas como la Chunta Aragonesista, Batzarre o Drago, ecologistas como Alianza Verde o Verdes Equo y partidos puntales con los que Yolanda Díaz ha ido conformando su idea de plataforma: Izquierda Unida y los comuns de Ada Colau. La mesa de diálogo estará marcada por la presencia y las exigencias que exponga Podemos para entrar. El partido sufrió un descalabro histórico en las municipales y autonómicas del domingo, pero su presencia en generales supera a la exhibida en los diferentes territorios. Desde el pasado domingo, Podemos mostró públicamente su compromiso con la “unidad” poco después de que se conocieran los resultados electorales. Y Belarra lo ratificó después con una comparecencia el mismo lunes de apenas dos minutos en la que aseguró que ya estaban inmersos en esa tarea. La dirección de Izquierda Unida publicó un comunicado en el que cerraba filas con el proyecto de Yolanda Díaz como la mejor “oportunidad” para construir un nuevo proyecto político que genere ilusión y que sirva para “ganar las generales”. Partidos como Alianza Verde o Verdes Equo, que ya estuvieron en el lanzamiento de la candidatura de Díaz en el polideportivo Magariños de Madrid, también manifestaron su compromiso con las negociaciones para integrarse en Sumar. Igualmente, Joan Subirats, ministro de Universidades y cara en el Gobierno de los comuns, sostuvo que el resultado de las pasadas elecciones reforzaba la necesidad de un proyecto político articulado alrededor de la vicepresidenta segunda.
El presidente del Gobierno compareció ante los grupos parlamentarios del PSOE del Congreso y del Senado para explicar las razones del adelanto electoral.El presidente llamó a frenar la ola reaccionaria de la “derecha extrema y la extrema derecha” y explicó a los diputados y senadores del PSOE las razones del adelanto electoral: “No podía continuar como si no hubiera ocurrido nada”. José Enrique Monrosi recuerda en ElDíario.es que, en un claro cambio de tono que enfatiza aún más el choque frontal ante el bloque de las derechas, Sánchez definió al PP y a Vox como discípulos del trumpismo y alertó sobre la ola reaccionaria que podría marcar el porvenir de España en la próxima década. “¿Ortega Smith, despreciando a una mujer en silla de ruedas que había sido víctima de violencia de género representa a España? ¿Ayuso, poniendo macetas contra el cambio climático se parece a España? ¿Se parece a España Feijóo premiando a los jóvenes con mejores expedientes con una maleta para que se vayan fuera de Galicia? ¿Abascal exigiendo acabar con el derecho de las mujeres a abortar? Yo creo que España es mucho mejor que todo eso”, dijo Sánchez entre los aplausos de sus diputados y senadores. Durante toda su intervención el presidente del Gobierno equiparó el fondo y las formas del PP y Vox, a los que se refirió como “derecha extrema y extrema derecha”, y denunció las similitudes de esa forma de hacer política con las del populismo de Donald Trump o Bolsonaro. En un discurso en el que expuso las líneas estratégicas que marcaron su decisión de adelantar las elecciones y el enfoque de la campaña que está por venir, el presidente del Gobierno alertó de que el 23 de julio “se discute qué España queremos. Hay que decidir si avanzamos o retrocedemos. Nosotros nos definimos por un proyecto de progreso y la alternativa frente a eso son PP y Vox, que ha quedado claro que no hay distinción”. “Tomé una decisión pensando en vosotros y en vuestro trabajo porque ningún líder que se merezca serlo puede mirar hacia otro lado cuando los suyos han sufrido un castigo tan injusto”, dijo Sánchez, revelando que tomó la decisión con su “conciencia”. “No podía continuar como si no hubiera ocurrido nada”, añadió.
Pedro Sánchez, a por todas.Miguel Ángel describe en Vozpópuli (Aceleración y amnesia) la decisión de adelantar las elecciones generales al domingo 23 de julio, adoptada por el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE en la madrugada del lunes, día 29 de mayo, mientras se acababan de anotar los datos del escrutinio de las urnas que reflejaban la debacle registrada en los 8.129 municipios y en 13 de las 17 Comunidades Autónomas, así como en las ciudades de Ceuta y Melilla. “En las sedes de los partidos concurrentes a las elecciones, aderezadas en proporción a las expectativas, iban apareciendo a dar la cara los líderes respectivos, alborozados por los triunfos o tristes por las derrotas. Unos y otros empezaban sus breves parlamentos agradeciendo a los militantes los esfuerzos desplegados durante la campaña electoral. Convocaban a seguir en la tarea pendiente a cumplir en beneficio de todos, tanto si habían sido votantes suyos como si habían expresado otras preferencias. Seguían la máxima de Churchill: ‘En la derrota, altivez; en la guerra, resolución; en la victoria, magnanimidad; en la paz, buena voluntad’. ‘Bastaba recorrer Madrid, en la tarde del domingo 28, para comprobar que en la sede socialista de la calle Ferraz descartaban esa noche cualquier celebración de resultados, mientras que en los alrededores de la calle Génova esquina a Zurbano, sede de los populares, todo eran anticipaciones festivas, incluido el montaje del balcón de mecanotubo, adosado al chaflán, al que llegado el momento accederían los líderes para saludar desde la barandilla, arengar a los entusiastas y corresponder a sus aclamaciones. El contraste de la música y la algarabía de Génova con el oscuro silencio de Ferraz, con Pedro Sánchez ausente y sus candidatos dejados en el abandono, transmitía un mensaje contundente. Entonces, como dicen los cronistas deportivos, cuando narran las remontadas del Real Madrid en la Copa de Europa, Pedro Sánchez tiró de épica y dobló la apuesta decidiendo convocar las elecciones el domingo 23 de julio. Pensó que lo importante era cambiar de pantalla y de conversación, no dar ni un minuto a la depresión y proponer una nueva meta. Evitar que nadie tuviera tiempo para darse a la conspiración dentro de su partido, aunque al mismo tiempo tampoco quedara margen para encizañar las filas del adversario. Atender al principio de la mecánica existencial de Milan Kundera según el cual la velocidad lleva a la amnesia y el público siempre está reclamando ‘mentiras nuevas’, como señalaba la viñeta de El Roto un primero de año”.
Pedro Sánchez, en un mitin.El diario británico 'The Guardian' dedicó un editorial a Sánchez, del que comenta que “tiene reputación de arriesgarse juiciosamente y tiene reputación de arriesgarse juiciosamente”. Tras e hacer repaso a su gestión, el texto indica que “este mes de julio, los progresistas tanto dentro como fuera de España deben esperar que los instintos de juego del presidente del Gobierno vuelvan a dar sus frutos” y define el adelanto electoral como “valiente”. El diario comenta que “las elecciones de verano en España tienen ramificaciones importantes para Europa en su conjunto. Una abrumadora mayoría de españoles no desea ver a Vox cerca del poder. Pero las elecciones recientes en Italia, Suecia y Finlandia indican que los nacionalistas autoritarios, con la intención de fomentar el sentimiento antiinmigrante, librar guerras culturales y hacer retroceder los derechos de las mujeres y las minorías, se están convirtiendo en una característica, no en un problema técnico, en las políticas de Europa occidental”. Además, afirma que “antes de las elecciones al parlamento europeo del próximo año, la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, espera negociar una amplia alianza entre el centro-derecha y la derecha radical” y que “Meloni, junto con el primer ministro populista de Hungría, Viktor Orbán, se pusieron en contacto rápidamente para felicitar a Vox después de los resultados del domingo”. La elección anticipada de Sánchez ha puesto el foco de atención en Vox. A raíz de las derrotas inesperadamente graves del pasado fin de semana en España, Sánchez les ha dicho a los votantes que “tengan cuidado con lo que desean”. “Eso fue una apuesta. —termina el texto del diario inglés—. Está en el interés de Europa que valga la pena”.
Yolanda Díaz, en un acto en Cimavilla (Xixón). Foto. Luis Sevilla.Paco Álvarez pide, en Nortes.me, a las izquierdas que hagan el favor de ponerse de acuerdo. Y asegura que se necesita un frente amplio para frenar a la derecha que nunca renegó del franquismo y a la ultraderecha que presume de ser franquista. “Pedro Sánchez nos pilló con el paso cambiado en su convocatoria esprés (pero premeditada) de elecciones legislativas en pleno verano. El presidente maneja sus plazos con criterios de partido y en este caso ha decidido imponerle plazos cortos a todo el arco parlamentario. La izquierda real, todo ese conglomerado de siglas y proyectos de ámbito estatal o territorial que se posiciona a la izquierda del PSOE, está relamiéndose las heridas tras el generalizado hostiazo electoral de este domingo: perdió (perdimos, nunca renegaré de mi condición de individuo de izquierdas) escaños, concejalías y capacidad de decisión en muchos gobiernos locales y autonómicos. Esas izquierdas que forman una jaula de grillos se desahogan estos días lanzándoles puyas y culpas del fracaso a sus enemigos atávicos, que por lo general también son de izquierdas. Ese es el problema: el enemigo atávico de la izquierda está en otra izquierda, no en esa derecha perfumada del PP, que nunca condenó el franquismo, ni en la ultraderecha pestilente de Vox, que alardea de su franquismo profanando las instituciones en las que desembarca amparada por el voto en las urnas. Franquistas y urnas en la misma ecuación, manda huevos… Ahora hay que exigirles a todas esas izquierdas, que se han dedicado cada una a lo suyo, que de una puta vez se pongan en pie para montar un frente amplio y que el verano electoral no dé paso a un otoño siniestro en el que un eventual Gobierno de Alberto Núñez Feijoo y de Santiago Abascal se pasen por sus santos y patrios cojones una infinidad de libertades y de derechos económicos, sociales y sexuales conquistados por las gentes de izquierdas, por todas ellas, en los parlamentos, en las calles y en las barricadas. Que hagan el favor las izquierdas asturianas de ponerse de acuerdo para articular una candidatura que lleve al Congreso uno, dos o tres diputadas y diputados asturianos que hablen el idioma del pueblo, que asuman las inquietudes y las preocupaciones de la ciudadanía y que entonen ese mismo acento antifascista de las mujeres y hombres de esta tierra que se dejaron la piel defendiendo una palabra tan sencilla y un concepto tan grande como la libertad”.
Yolanda Díaz e Ione Belarra.Carlos Santos titula “Sumar
cuanto antes”, en LA LIBRETA COLORÁ, (A media mañana, RNE.) en la que dice: “De
los dos grandes movimientos políticos que nacieron en España en los primeros
años del siglo uno ha sido ya borrado del mapa por los votantes. Ciudadanos,
que nació, en 2005, y que, en 2019, llegó a tener 57 escaños, ante la elevada
probabilidad de no sacar ninguno, ha anunciado que no se presenta a las
elecciones. Respecto a Podemos, que nació en 2014, se está mirando las cartas.
Llegó a tener 71 escaños en 2018, pero en un año, por errores de su dirección,
cayó a 35. Sus resultados del domingo confirman los peores pronósticos que,
desde tiempo atrás, hacían las encuestas. Parece que la marca ha perdido
atractivo en un territorio electoral donde hoy solo brilla una estrella:
Yolanda Díaz, que ayer mismo registraba como partido político su propia marca, ‘Sumar’,
con intención de cerrar enseguida una coalición a la izquierda del PSOE. Cuenta
en principio con Izquierda Unida, Compromís y buena parte de los grupos
fundacionales de Podemos, pero quienes gestionan Unidas Podemos, con Ione
Belarra como secretaria general y Pablo Iglesias como referente, ofrecen mayor
resistencia al cambio. Aunque la tendencia de la izquierda fragmentada es
cocerse en su propia salsa por tiempo indefinido, como se vio en las
autonómicas andaluzas, la convocatoria anticipada de elecciones les obliga a
resolver sus cuitas en menos de diez días. No tienen mucho que debatir, porque
se conocen de antiguo, pero el debate tampoco puede reducirse a un mero reparto
de puestos en las listas. En todo caso, saben que llegar como están a las urnas
sería una tragedia, que es como Iglesias calificó esa eventualidad y de esa
tragedia ya tuvieron señales el domingo: muchos votos de la izquierda dividida
han ido directamente a la papelera. Y saben, en fin, que perpetuar la división
no sería solo una tragedia para ellos, sino también para quienes aspiran a
frenar con una coalición de izquierdas el tsunami de la derecha y la extrema
derecha. O sea, que más les vale ponerse de acuerdo y sumar lo que sea, cuanto
antes”.
Otros comentarios, imágenes, fotomontajes y fotos sorprendentes:
“Convocar elecciones en las fechas más calurosas y en el mayor éxodo vacacional de nuestro país es un hecho sin precedentes en casi medio siglo de democracia española”. Son palabras del presidente nacional del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, durante su intervención en el Cercle de Economía en Barcelona. Unas palabras por las que ha recibido duras críticas especialmente en Twitter, donde personajes reconocidos, como el periodista Isaías Lafuente y el escritor Benjamín Prado, han reaccionado, recordándole al líder conservador que operó de la misma manera que ahora lo ha hecho el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su época como dirigente autonómico. “No sé si es la mejor idea convocar elecciones en julio, pero precedentes en medio siglo de democracia sí que tiene. Él mismo convocó sus últimas elecciones en Galicia el 12 de julio de 2022”, ha recordado el primero de ellos en ElPlural.com. Por su parte, el novelista ha empleado un tono más duro para referirse a los mismos hechos. Él las convocó, en julio, en Galicia. “Más votos para él: cuánto más se ríe de la gente, mejor le va”, ha condenado Prado desde su perfil de Twitter y rescatando un titular de prensa.
“Los pescadores vascos no solo capturan ballenas, también estaban involucrados en la recolección de cuero y en la pesca del bacalao. Como resultado de las relaciones comerciales creadas durante esas actividades, los nativos crearon dos mezclas de lenguas vascas: vasco-islandés (en Islandia) y algonquino-vasco (en Canadá)”. Este es solo uno de los extractos del libro de Ciencias Sociales de la Editorial Edelvives para los alumnos de 5º de Primaria del País Vasco que ha sido cuestionado por la asociación Hablamos Español.
Macarena OlonaOlona se presentará al
Congreso por Granada y defenderá un referéndum sobre Monarquía o República. La
ex secretaria general del Grupo Parlamentario Vox califica de “muy audaz” la
convocatoria de elecciones por el presidente Pedro Sánchez: “Vamos al todo o
nada”. Macarena Olona justifica el registro de un nuevo partido con vistas a
concurrir a las próximas elecciones generales del 23 de julio.
PP y Vox votan en
Bruselas contra una ley para evitar la explotación laboral y el trabajo
infantil... porque resta COMPETITIVIDAD. Este tipo de BERRACADAS que son en sí
el verdadero Programa Político de la Derechona, por lo que sea, no sale en los
grandes medios. (Skakeo FanZine)
El oso y su osezno.
El humor en la prensa de esta semana: Forges, El Roto, Peridis, Eneko, Enrique, Manel F, Vergara, Flavita Banana, J. R. Mora, JM. Nieto, Pinto & Chinto, Riki Blanco, Malagón…
Pep Roig, desde Mallorca:
Los vídeos de esta semana:
Declaración institucional de Pedro Sánchez adelantando las elecciones
28M: debacle, claves y pistas para el futuro
Un tema alDía. Por Juanjo Sánchez. Adelanto electoral: ¿audacia o suicidio?
ELECCIONES GENERALES 23-J: Los ESPAÑOLES ya pueden
solicitar el VOTO por CORREO l RTVE Noticias
Trias, Collboni o Colau: ¿quién va a gobernar
Barcelona y qué partido tiene la llave?
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Partidos rojos, la parodia de Tacones rojos de
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