Israel ataca a Gaza ante el silencio e indiferencia del mundo.

 Bombardeo en la franja de Gaza.

 

 Columna de humo tras un ataque aéreo al oeste de Gaza.

 

El Ejército israelí iniciaba el pasado martes la operación Margen Protector, una sangrienta operación militar contra Gaza que ayer ya había causado al menos 71 muertos (la mayoría, civiles y 15 de ellos, niños), y 520 heridos El primer ministro, Benjamin Netanyahu, defendiéndose contra el disparo de 200 proyectiles palestinos contra su territorio sin que se hayan registrado por el momento víctimas mortales, afirma que los ataques serán duros y persistentes y su Gobierno ya ha llamado a filas a 40.000 reservistas, indicando que Israel está dispuesto a machacar al pueblo en una nueva y sangrienta intifada. Gaza se ha convertido en un enorme campo de concentración en condiciones extremas de crueldad o en un “campo de prisioneros”, en las palabras más suaves de David Cameron, en 2010, pero ni él ni sus colegas europeos han movido un dedo para buscar una solución. Y el embajador de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en España, Musa Amer Odeh, critica a la comunidad internacional por no implicarse más y no actuar de manera efectiva para frenar los ataques mortales de Israel a Gaza. “A qué espera la ONU para enviar cascos azules a Palestina?”.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ordenó incrementar las acciones del Ejército, al que instó a estar preparado para una posible invasión terrestre de Gaza. “El Estado de Israel está en medio de una campaña para devolver la paz y la seguridad a nuestros ciudadanos” afirmó. “No permitiremos el lanzamiento de cohetes contra nuestras ciudades. Por tanto, he dado instrucciones para ampliar de forma significativa la operación del Ejército contra los terroristas de Hamás y contra los terroristas de otras organizaciones en Gaza. No vamos gustosos a la batalla pero la seguridad de nuestros ciudadanos y nuestros hijos está por delante de todo. Haremos todo lo que sea necesario para que la calma que hemos experimentado en los últimos años continúe. El Ejército israelí tiene como objetivo a los terroristas de Hamás y no a civiles inocentes, pero Hamás, presuntamente, se esconde detrás de civiles palestinos y por tanto es responsable cuando son atacados de forma inadvertida”. 

Por su parte, Hamás impone condiciones para restablecer la calma. Exige: “No soñéis con la calma sin responder a las siguientes demandas: el fin de la agresión en Jerusalén y Cisjordania, el fin de la agresión contra la Franja de Gaza, la liberación de los prisioneros del intercambio por (Gilad) Shalit que han vuelto a ser detenidos, y el compromiso con todos los términos del alto el fuego alcanzado en 2012, tras la operación 'Pilar de Defensa' ”. Por su parte Abú Rudeina, portavoz del presidente palestino Mahmud Abbas, exige el derecho de los palestinos a defenderse. Según él,  la nueva ofensiva israelí es “una declaración de guerra contra los palestinos e Israel soportará las consecuencias. Los palestinos tienen derecho a defenderse por todos los medios legítimos”, y califica de “masacre abierta” la ofensiva en Gaza, con lo que “la decisión de Israel destruye todas las opciones de un alto el fuego o paz”. Gaza, es “la cárcel más grande del mundo”. El Muro de la Vergüenza “separa a los palestinos de sus colegios, de sus terrenos, aísla pueblos”....

Varias ciudades de todo el mundo acogieron el miércoles una concentración en solidaridad con el pueblo palestino. En España, las principales protestas tuvieron lugar, en la plaza del Callao de Madrid y en plaça de Sant Jaume de Barcelona. Se denunció el “castigo colectivo que el régimen israelí está sometiendo a la población palestina en los territorios ocupados”. Los convocantes exigieron el fin de la impunidad israelí y el cumplimiento de la sentencia del Tribunal de La Haya. “Desde el inicio de la búsqueda de los tres colonos, el Ejército israelí ha asesinado a 13 civiles palestinos, de los cuales 2 eran menores de edad, y ha herido a 90 personas, incluyendo 16 menores y 3 periodistas”, indicó la Plataforma en un comunicado. “Ha realizado 190 incursiones en ciudades, pueblos y campos de refugiados palestinos, y ha asaltado casas, instituciones, universidades y sedes de ONG y revistas”. El embajador palestino en España hace un llamamiento para que la comunidad internacional actúe “en el terreno y no en comunicados” contra los ataques de Israel. Abás solicitará la adhesión de Palestina a la Corte Penal Internacional.