Los Reyes, en Gerona, presidieron los Premios Princesa, ante la “revuelta de los Elefantes”.

Los Reyes Felipe y Letizia, a su llegada al centro de eventos Mas Marroch, del Celler de Can Roca.

Miembros del CDR cortan la carretera en Salt, en contra de la entrega de los premios Princesa de Girona.

Los Reyes presidieron la tarde de ayer el acto de entrega de los Premios Fundación Princesa de Girona 2018, en el Centro de Eventos del Celler de Can Roca, ante el enésimo gesto de rechazo por parte de los separatistas al papel del monarca en relación al 'procés' independentista. Ningún representante de la Generalitat estuvo presente, ni la alcaldesa de la localidad, Marta Madrenas. En cambio, sí lo estuvieron fuera de las instalaciones en donde se entregaron los premios, los Comités de Defensa de la República (CDR), que protestaron contra los monarcas españoles. Como consecuencia de este plante, en contra del discurso televisado sobre Cataluña que Felipe VI pronunció el pasado 3 de octubre, no estuvo presente en la entrega de premios ningún conseller del Govern, como tampoco acudió representantes de los gobiernos locales de Girona y de Vilablareix, municipio en que se ubica este espacio de los hermanos Roca. El rey combinó, en su discurso, el catalán y castellano, y agradeció “de todo corazón” a los hermanos Roca la oportunidad de celebrar la gala en “un lugar tan emblemático” de esta tierra, después de que el Ayuntamiento de Girona denegara el uso de su auditorio.

Durante la visita de los reyes lejos del escenario de la ceremonia y entre fuertes medidas de seguridad, los denominados CDR designaron tres puntos de concentración ubicados en los municipios de Vilablareix -escenario de la ceremonia-, Salt y Aiguaviva. La gala tuvo lugar en el centro de eventos Mas Marroch, situado en medio de campos de cultivo y a una considerable distancia de los núcleos urbanos en los que se desarrollaron las manifestaciones, con exhibición de símbolos independistas y con canticos contra la monarquía que, según informan los Mossos d'Esquadra, se saldaron sin incidentes destacables. 

Diversas movilizaciones se produjeron en Girona, lejos del escenario de la ceremonia y entre fuertes medidas de seguridad. La gala tuvo lugar a una considerable distancia de los núcleos urbanos en los que se desarrollaron las manifestaciones que, según los Mossos d'Esquadra, se saldaron sin incidentes destacables. Los manifestantes se mantuvieron en los puntos de la convocatoria, exhibiendo símbolos independentistas y cánticos contra la monarquía, con algún intento aislado de romper los cordones policiales. “Todos juntos haremos posible la “revuelta de los Elefantes”, decían las consignas. “La monarquía que asesina elefantes en Botsuana también quiere suprimir ahora el derecho a la autodeterminación del pueblo catalán, dando apoyo a la represión. No nos dejaremos pisar por ningún Gobierno, ni jefe rey. ¡República o República!”. En la comunicación aconsejaban imprimir en una cartulina DIN-A4 la caricatura de un elefante que serviría como careta para llevar a la protesta. “Imprimid esta máscara de elefante para las convocatorias de ‘No Tenemos Rey”, transmitían a sus militantes. En otro de los carteles, en los que figuraba sólo el perfil de un proboscídeo pisando la Corona española, los CDR, bajo el lema ‘en los Paísos Catalans no tenemos Rey’, llamaban a las “convocatorias de rechazo a la presencia de Felipe VI en las comarcas gerundenses”.