Funcionarios de Hacienda piden investigar al rey emérito por fraude fiscal y blanqueo.
Informaciones de Europa
Press señalan que, el pasado jueves, los Técnicos del Ministerio de Hacienda
(Gestha) pidieron a la Agencia Tributaria (AEAT) investigar a Juan Carlos I por
presuntos delitos de fraude fiscal y blanqueo de capitales. En una nota de
prensa, Gestha afirmó que las declaraciones de varios implicados ante la
Fiscalía suiza conforman sospechas sólidas y suficientes para que la AEAT
ordene iniciar una investigación tributaria sobre Juan Carlos I, tal y como
haría a cualquier otro contribuyente, demostrando así que ya no existen
“escudos fiscales” ni siquiera para proteger a la familia Real.
En septiembre de 2018,
los Técnicos de Hacienda lamentaron que el informe de la Oficina Nacional de
Investigación del Fraude (ONIF) enviado al juez en torno a las declaraciones
del IRPF, Impuesto sobre el Patrimonio y Bienes en el extranjero del rey
emérito fuera tan simple como para afirmar que de la información analizada el
rey emérito no figuraba como titular de cuentas en Suiza -como se desprende del
auto de sobreseimiento provisional del Juzgado Central de Instrucción nº 6 de
la Audiencia Nacional-, y no investigara ninguna de estas presuntas propiedades
y cuentas millonarias.
Gestha remarca que el rey
emérito podría haber incurrido en “infracciones tributarias muy graves e
incluso además de un posible delito de fraude fiscal agravado”. Considera, en
este sentido, que “podría determinarse un presunto delito de blanqueo si se
acredita que, desde su supuesta cuenta en Suiza, existen reembolsos a terceros
que previamente han pagado parte de sus gastos personales e inversiones”. Y
aclara que la presunta falta de declaración de los bienes en el extranjero (los
supuestos 100 millones de la fundación panameña) “llevaría a conformar un
presunto delito fiscal en el último ejercicio no prescrito administrativamente,
es decir, el IRPF de 2015”.
Además, los técnicos de
Hacienda entienden que deberían investigarse igualmente las responsabilidades
de todas las personas que pudieran estar implicadas. Esto sería, tanto por su
posible colaboración en los supuestos delitos, como por no haber denunciado estos
hechos a pesar de haber estado al corriente de las supuestas actuaciones de
Juan Carlos I. Y señalan la conveniencia de que el resto de los miembros de la
familia real y de la familia del rey hicieran públicas sus declaraciones de
bienes en el extranjero en un ejemplo de transparencia que zanjara cualquier
especulación o implicación este caso o en el futuro. Especialmente, tras
haberse conocido en 2013 la existencia de tres cuentas en Suiza de la herencia
que Don Juan de Borbón dejó a sus tres hijos en 1993, con un saldo total de
728,75 millones de pesetas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario