viernes, 9 de octubre de 2020

El 'Guernica' del 1-O

 

El mural de Moyà.



La localidad barcelonesa de Moyà conmemoró el tercer aniversario del 1-O con un mural inspirado en el Guernica de Pablo Ruiz Picasso pero en su versión independentista. El responsable del mural que muestra los estragos de un bombardeo es la Asamblea Nacional Catalana (ANC) de Moyà, y la obra está ejecutada por el ilustrador local Eduard Altarriba sobre una lona cuya estructura de madera mide 6, 40 de ancho por 3 de alto. En él se identifican algunas de las imágenes más icónicas de la obra de Picasso, con rostros que muestran horror. El cuadro no refleja o denuncia la matanza o la destrucción en Guernica, la localidad vizcaína durante la Guerra Civil en 1937, sino que se ve una urna, una papeleta y una estelada, amenazadas por las cargas policiales, o una mano que sangra formando las barras de la bandera catalana.

El mural de Altarriba representa el referéndum ilegal, que terminó con sus principales responsables, en prisión o huidos de España, con el barco de Piolín que alojó a los agentes de refuerzo antes, durante y después del 1 de octubre de 2017, y “el dolor del pueblo catalán en aquel día, sin olvidar el punto de humor con que conviene mirar la realidad”, explica Eduard Altarriba. Altarriba trabajó en la obra desde el pasado otoño y vincula el 1-O con el Guernica. “Enseguida pensé que un mural que tomara el Guernica como referencia podría explicar muy bien el sentimiento de los votantes durante el referéndum”.

Pocas horas después de ser expuesto, el colectivo de ultraderecha, Unión de Brigadas, confesaba a través de su cuenta de Twitter la autoría de la sustracción. “Ja tenim la pancarta al nostre poder, avui mateix serà reciclada” (“Ya tenemos la pancarta en nuestro poder. Hoy mismo será reciclada”), escribieron en las Redes Sociales. Por su parte, el autor del cuadro lamentaba: “Com era previsible, aquesta matinada algú ha trinxat el mural del Guernica de Moià. Com acostuma a passar, la gent construeix i el feixisme destrueix” (“Como era previsible, esta madrugada alguien ha roto el mural del Guernica de Moià. Y, como acostumbra a pasar, la gente construye y el fascismo destruye”).

La pieza artística duró solo cuatro días y, de hecho, Pedro Antúnez, el coordinador de l'ANC de Moià, declaraba que aún no hemos tenido tiempo de pagar los costes de impresión. “Ante la desaparición de la obra, el objetivo es volver a colocar el mural durante las próximas semanas. La obra debe continuar presidiendo la plaza del Cap para recordar los hechos del 1-O”.

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