La “huida” del rey emérito, Juan Carlos I, un autoexiliado de lujo.
El rey emérito, Juan
Carlos I, otro Borbón que “huye” de España.
El anterior jefe del
Estado, el rey emérito Juan Carlos I, comunicó al actual jefe del Estado, su
hijo el rey Felipe VI, su “meditada decisión” de trasladarse a vivir fuera de
España ante la “repercusión pública” de “ciertos acontecimientos pasados” de su
vida privada. La decisión, según informaba el pasado lunes la Casa Real, se
produjo tras las investigaciones judiciales abiertas en Suiza y en España a
Juan Carlos I por su patrimonio oculto. El rey emérito Juan Carlos I, cercado
por la Justicia, anunció que se marcharía de España. “Es una decisión que tomo
con profundo sentimiento, pero con gran serenidad”, explicaba en un comunicado.
Juan Carlos Iº parecía, según revelaba El Mundo, estar dispuesto a aceptar una
suerte de exilio. Dentro de Zarzuela, hubo voces como la de Pablo Iglesias,
vicepresidente segundo del Gobierno, que recomendaban que Juan Carlos I
continuase en España. El emérito aseguró “no huir”, pero todo indicaba lo
contrario. No olvidemos que se había negado a renunciar al título de rey
emérito y que continuaba siendo capitán general, en la reserva, de los tres
ejércitos. Juan Carlos Iº justificaba su decisión en “contribuir a facilitar el
ejercicio” de las funciones de su hijo como Jefe de Estado “ante la repercusión
pública que está generando ciertos acontecimientos pasados” de su vida privada.
Zarzuela informó también de que Felipe VIº había acogido esta noticia con
“sentido respeto y agradecimiento”. El anuncio llegaba después de que, durante
las últimas semanas, se hubiesen conocido numerosos detalles de los negocios
opacos del emérito durante su reinado. En concreto, Juan Carlos Iº habría
metido en España miles de euros en billetes por avión y hasta tenía una máquina
de contar dinero en la Zarzuela. Igualmente, había aparecido en la prensa el
nombre de su examiga Corinna Larsen, “a la que Juan Carlos Iº reclamaba los 65
millones de euros después de abdicar y que fuera citada a declarar por el juez
del Caso Villarejo”. Larsen habría dicho sobre el emérito que este “se muere
por el dinero”, según confesó en 2016 al comisario jubilado José Manuel
Villarejo. Sin embargo, Juan Carlos Iº había rechazado renunciar a su título de
rey emérito como pretendía Zarzuela. Se especuló que el emérito abandonaría La
Zarzuela, pero no España. Y que Felipe VIº intentó quitar a su padre el título
que todavía hoy disfruta. Ni una cosa ni otra. Y mientras el Gobierno guarda
silencio sobre si revoca o no ese tratamiento con un decreto, el rey emérito
desaparece de la Moncloa y de su reino, “huyendo” y “corriendo”, con la
intención de ubicarse en una república de otro continente.
La presión judicial y política abocó al rey emérito a irse de España
para tratar de salvar la monarquía.
Algunos periódicos
españoles apuntaron que Juan Carlos I había tomado la decisión de trasladarse
fuera de España por los “acontecimientos pasados de mi vida privada”. Y las
redes sociales fueron el medio elegido por la mayoría de los políticos para transmitir
sus primeras reacciones. El PSOE manifestó su “absoluto respeto a la decisión
tomada por el rey emérito”. “Nuestro partido –añadieron fuentes del partido–,
apoya el trabajo y compromiso del rey Felipe VI”. El portavoz de UP en el
Congreso, Pablo Echenique, sugirió que se impidiese su salida del país hasta
que concluyera la investigación de su caso. “Teniendo causas pendientes en
España y tanto dinero para viajar y protegerse, la justicia ¿va a permitir que
se marche? –afirmaba en su cuenta de Twitter el diputado morado–. ¿No podría
eso dificultar las pesquisas? Esperamos que no sea precisamente ese el motivo
de la decisión y, si es así, se le impida huir”, afirmó en su cuenta de Twitter
el diputado morado. El portavoz del partido afeó que, con la decisión del
monarca emérito, no se solucionase “nada” y apuntó que “la gente no estaba
pidiendo que Juan Carlos de Borbón se marchase de España”. “La gente pide que
se conozca la verdad sobre sus actividades presuntamente corruptas, que pague
por los delitos que haya cometido y que devuelva los impuestos evadidos”,
aseguró Echenique, refiriéndose a las actividades del Rey como “negocios
turbios”. Por el contrario, desde el PP se alabó el “papel determinante y
decisivo” durante su reinado en la llegada de la democracia al país. La
formación que lidera Pablo Casado, según Europa Press, transmitió su “más
absoluto respeto” al movimiento de Juan Carlos Iº y consideró que éste
demostraba “su lealtad a España, a la Monarquía parlamentaria y al rey Felipe
VIº. E Isabel Díaz Ayuso fue una de las primeras en salir a defender la figura
de Juan Carlos I: “Quiero subrayar el trabajo histórico de Juan Carlos I por
España, a quien debemos los mejores años de nuestra Democracia. Y la más firme
confianza en la Monarquía Parlamentaria encarnada por Felipe VI” fue el mensaje
dejado en Twitter, poco después de conocer el comunicado de la Casa del Rey.
Joan Baldoví y Gabriel Rufián registran una solicitud para que se abra
una comisión de investigación sobre Juan Carlos I
Su reacción contrastaba
con la de Íñigo Errejón. Para el diputado de Más Madrid, “el rey emérito huye
de España sin rendir cuentas para prestar el mejor servicio a los españoles. Es
escandaloso. Al menos, que devuelva el dinero, que buena falta le hace a nuestro
país”. El diputado de Compromís y compañero de coalición de Errejón, Joan
Baldoví, se refirió a la salida de Juan Carlos I: “¿También se lo ha comunicado
a la Fiscalía del Supremo? ¿Todos los investigados pueden abandonar España o
sólo los eméritos?”, se preguntaba. En
ese mismo sentido era la reacción de ERC. Para Carolina Telechea, la portavoz
adjunta de los republicanos en el Congreso de los Diputados, Juan Carlos I huye
de la justicia española “por corrupto” en lugar de quedarse “a dar la cara con
dignidad” y a responder ante los tribunales de las presuntas irregularidades
por las que se le investiga. “El mejor servicio que podrías hacer a los
españoles es no huir de la justicia y dar la cara con dignidad”. La secretaria
general de su partido, Marta Rovira, también 'huyó' de España, como Carles
Puigdemont, algo que para ERC era distinto: “Qué diferente es el que se exilia
por defender la democracia del que huye por corrupto”. El líder de los
republicanos en el Congreso, Gabriel Rufián, ha ironizó con que se hable de que
el emérito “abandona” España en lugar de decir que “huye” del país.
Torra pide la abdicación del rey Felipe VI y abronca al Gobierno por
haber “facilitado” la “fuga” de Juan Carlos.
El portavoz adjunto de
Ciudadanos, Edmundo Bal, califica de “inadmisible” que miembros del Gobierno de
Unidas Podemos como Pablo Iglesias e Irene Montero “aprovechen” la situación
del rey emérito Juan Carlos para “tratar de confundir” las acciones de una
persona concreta con las de la institución monárquica. El president de la
Generalitat, Quim Torra, opta por criticar al Gobierno, a Juan Carlos I y a
Felipe VI y anuncia haber pedido al presidente del Parlament, Roger Torrent,
celebrar un pleno extraordinario para censurar al rey emérito y al actual monarca,
del que pidió su abdicación tras su “huida tolerada. Y exige al Gobierno que dé
explicaciones por haber “permitido, facilitado y aplaudido la huida de una
persona llena de privilegios e investigado por un caso inmenso de corrupción”.
Para Torra, la marcha de Juan Carlos I “avergüenza a cualquier demócrata, y
pone en duda el compromiso del Gobierno y de Felipe VI en la lucha contra la
corrupción y el rendimiento de cuentas”. Por ello, asegura que el régimen
borbónico está en quiebra: “Pido a Felipe VI que no alargue más la agonía
borbónica y abdique”. Por otra parte, el Bloque Nacionalista Galego demanda que
se juzgue “con todas las consecuencias penales y políticas toda la corrupción
de la Casa Real y a los Borbones” después de que el rey emérito anunciase el pasado
lunes que abandonaba el país.
Esteban (PNV) afirma que el rey emérito debe “responder de sus actos”
pese a que se vaya “a la francesa”.
Aitor Esteban, portavoz
del PNV en el Congreso de los Diputados, afirma el martes que el rey emérito,
Juan Carlos I, debe “responder de sus actos” durante el tiempo que ha sido rey
y después de dejar de serlo, pese a que ahora se vaya “a la francesa”. Además,
lamenta “la poca claridad con la que se está enfrentando esta situación en el
Estado español”. El histórico dirigente del PNV considera que “Felipe VI
debería retirar el título de rey emérito a su padre y lograr que entre en el
silencio más absoluto” a raíz de las investigaciones sobre su supuesto
enriquecimiento ilícito. “Siguiendo con la tradición familiar, Juan Carlos de
Borbón abandonó el país, pretendiendo hacer 'Borbón y cuenta nueva”, sostiene
irónicamente la formación. IU reclamó “que la Justicia actuase con diligencia y
que el Tribunal Supremo estudiase pronto y a fondo” la querella presentada por
la coalición, junto al PCE y el Foro de Abogados y Abogadas de Izquierda, en la
que pidieron reactivar la causa contra la examante del rey emérito en la
Audiencia Nacional.
Iñaki Anasagasti: “Tenemos un poder judicial monárquico y de derechas
que no va a hacer nada contra Juan Carlos I”.
En una entrevista publicada en Eldiario.es por el periodista donostiarra Iñigo Aduriz,
Anasagasti confiesa que las investigaciones abiertas contra Juan Carlos I han
acabado por darle la razón. “El mayor daño que nadie le ha podido hacer a Juan
Carlos, a parte de sus no cualidades personales, han sido todos estos
cortesanos que le han protegido. Ha sido terrible, porque no han permitido que
la democracia funcione, con la gran contradicción de que se les llena la boca
diciendo que esto es una monarquía parlamentaria pero que aquí, el Parlamento
no puede actuar en su contra, luego ¿qué monarquía parlamentaria es esta?”.
“Indudablemente –concluye Anasagasti– esa imagen impoluta de la monarquía está
muy tocada. La prueba está en que el CIS no quiere hacer preguntas que puedan
dar pábulo a ese debate. Pero la democracia es un régimen de opinión pública, y
la opinión pública actual no tiene nada que ver con la de hace diez años,
cuando estábamos todos narcotizados. Entonces era la institución más valorada.
Ahora ya no lo es. Creo que, si se plantea la pregunta sobre cuál es la
institución menos valorada, sería la monarquía. Se lo han ganado a pulso.
Felipe VI, que actuó con semejante celeridad con el tema catalán, con esto está
dejando pudrir el tema esperando cómo se van sucediendo los tempos”. El
dirigente del PNV opina que, para cambiar una monarquía tiene que ser por la
revolución o por alguna cosa exterior muy fuerte. De momento, el PSOE va a
actuar en las claves del PP y Ciudadanos en este tema y eso blinda al actual
monarca. Iñigo Aduriz le pregunta si hay algo que pueda hacer Felipe VIº para
limpiar la institución. Anasagasti contesta: “En primer lugar, debería quitarle
el título de rey emérito, porque si se lo puede dar, se lo puede quitar y no
pasa nada. En segundo lugar, tiene que lograr que su padre entre en el silencio
más absoluto, que no aparezcan fotos de él en cacerías ni en francachelas,
porque la opinión pública no se lo toleraría. El Tribunal de Cuentas no puede
inferir para nada en la Casa Real, y eso que recibe dinero público. Hay
Presupuestos Generales del Estado en los que se aprueban partidas de más de
ocho millones de euros, pero no se tiene ninguna información. En Inglaterra, se
sabe lo que gasta la reina Isabel en sombreros y en peluquería, pero aquí no se
sabe nada. Todo es opaco. Felipe tendría que dar un paso de gigante, situando a
la Casa Real como lo más transparente, dando a conocer todos los gastos. Todos
esos regalos, esos debates sobre si le habían regalado un Ferrari, son un
escándalo impropio de un país serio, democrático y con valores. Además, el
actual rey debe tener una conducta ajustada a derecho”.
Iglesias ve 'indigna' la 'huida' de Juan Carlos Iº y dice que el Gobierno no puede mirar hacia otro lado'.
La salida de España del
rey Juan Carlos fue una maniobra opaca de la que el Gobierno se niega a dar
detalles. Sánchez arguye la “confidencialidad” de sus conversaciones con Felipe
VI para evitar explicar por qué no informó a los ministros de Unidas Podemos.
Pablo Iglesias continúa afirmando que “por respeto a la ciudadanía y a la
democracia española, Juan Carlos I debería responder por sus actos en España y
ante su pueblo. La España del siglo XXI ya no tolera la corrupción ni el
privilegio. Cualquier ciudadano que cometa delitos debe dar la cara ante la
Justicia. La pretensión de impunidad por presuntos delitos graves por parte
nada menos que de un ex Jefe del Estado produce un enorme daño a la democracia.
Es un deber para quienes ocupamos cargos de gobierno velar por la ejemplaridad
y la limpieza de las instituciones. Un gobierno democrático no puede mirar
hacia otro lado ni mucho menos justificar o saludar comportamientos que socavan
la dignidad de una institución clave como es la Jefatura del Estado y que son
un fraude a la Justicia”. Iglesias admite discrepancias con Sánchez sobre la
monarquía y promete resolverlas con él. El líder de la formación morada señala
que es “normal democráticamente” que PSOE y Unidas Podemos tengan una visión
diferente sobre la corona. Iglesias muestra su “respeto” por la defensa del
jefe del Ejecutivo de la monarquía parlamentaria y recuerda que, cuando se
genera una “situación molesta” en el marco del Gobierno de coalición, las
diferencias se resuelven entre los dos líderes políticos.
El diario “ABC” desvela que el rey emérito voló a la Republica
Dominicana.
Manuel Monge escribe en
Público, bajo el título “El clandestino”: “Quiero hablar de El Clandestino que
salió de Madrid un 2 de agosto de 2020 y que, cuando escribo esta crónica de
urgencia, 72 horas después, continúa desaparecido. Unos lo sitúan en el Caribe
y otros en el entorno de Lisboa. ¡Y nadie sabe nada!... El martes, a primera
hora, se conocía la noticia de que el rey emérito, Juan Carlos I de Borbón, se
había ya exiliado, pero no en otra monarquía, sino en una república, la
República Dominicana. Lo revela el monárquico diario 'ABC', de fuentes propias…
El anterior monarca ha cruzado el Atlántico y se ha ido al Caribe. Aunque sus
abogados prometieron seguir a disposición de la Justicia, sobre todo de la
Fiscalía, que tiene abiertas diligencias sobre el rey emérito y sus negocios,
difícilmente se imagina un regreso sencillo a España desde el otro lado del
mundo”. Según 'ABC', don Juan Carlos de Borbón había viajado antes, durante el
fin de semana, a la localidad gallega de Sanxenxo, en Pontevedra. Desde allí,
donde siempre ha practicado la vela, una de sus grandes aficiones recreativas,
se desplazó a Oporto, Portugal. En el país vecino, tomó un avión, pero no para
regresar a la España monárquica, sino para viajar al aeropuerto de Santo
Domingo de República Dominicana. “Lo más probable es que el Rey padre haya
aceptado alguna de las muchas invitaciones que ha recibido por parte de sus
amigos, conocedores del amargo momento que está viviendo, como consecuencia de
las acusaciones realizadas por su ex amiga, Corinna Larsen. Y entre todos sus
amigos, destaca Pepe Fanjul, que reside en Miami y es propietario del complejo
hotelero Casa de Campo”, explica este periódico. Y, ante cualquier duda que
pudiera surgir tras la noticia, sí que existe un tratado de extradición entre
España y República Dominicana, desde 1984. En todo caso, nadie habla de que sea
una residencia definitiva para Juan Carlos de Borbón, quien podría más adelante
elegir otro lugar para vivir.
La radio francesa desmonta a Juan Carlos I: “Está humillando a los
españoles”.
Lluís Bou escribía el
pasado martes, en ElNacional.Cat: “La emisora pública
francesa France Inter ha desmontado al rey Juan Carlos I en un duro reportaje,
que no ha dudado ‘en titular “Rey y ladrón de gallinas’. El ex-rey de España ha
huido de la justicia de su país hacia un (todavía) desconocido destino, cuando
ya han pasado dos días desde que se fue. Qué humillación para 47 millones de
españoles”, ha añadido la emisora, apenas dando crédito. “El rey emérito de
España Juan Carlos se ha marchado de España. El que reinó durante casi 40 años
en la cuarta economía de la Unión Europea, hasta el 2014, puso pies en
polvorosa el domingo dejando una simple carta a su rey e hijo, Felipe VI. Ni
una carta a su pueblo, ni a la justicia de su país. Nada de eso, una carta a su
señor e hijo, el único al que de forma visible rinde cuentas. ¡Feudalismo puro
y duro a mediados del siglo XXI!”. La radio recuerda que, a diferencia de los
griegos y de los italianos, los españoles nunca han podido escoger entre
monarquía y república, y que fue una restauración decidida por el dictador
Francisco Franco. “Les puso sobre hechos consumados: la democracia, pero bajo
la forma de una monarquía constitucional. Circulen, no hay nada más que ver. Y
encima, el Rey de España tiene mucho más poder que los otros monarcas europeos.
Es, por ejemplo, el jefe del Ejército”, añade. El reportaje se muestra
estupefacto por las negociaciones entre el Gobierno del PSOE y Podemos y la
Casa Real, y que no se haya retirado el título de rey a Juan Carlos. “Al
exiliarse, después de semanas de negociaciones entre el poder elegido y la Casa
Real, Juan Carlos ha conseguido mantener el título de rey: hasta siendo un
exiliado fiscal y un fugitivo, se le tendrá que llamar Su Majestad. Qué
humillación para los españoles, cuando lo que ha hecho podría ser calificado de
alta traición”, manifiesta. France Inter recuerda la tradición de exiliarse de
los reyes borbones. “Para los españoles esta historia se ha repetido hasta la
caricatura. En dos siglos, los Borbones de España han perdido cuatro veces la
corona, entre ellos el padre de Juan Carlos, don Juan, y su abuelo Alfonso
XIII, acusado de alta traición por el Congreso”, recuerda.
José Antonio Illanes
publica en Facebook la siguiente carta:
“Una berlina barroca
tirada por ocho corceles negros abandona a buen paso el Palacio Real. Los
caballos lucen penachos negros que bailan al trote impuesto por cocheros
vestidos con libreas encarnadas de paño fino, pelucas empolvadas y recogidas en
trenza, zapatitos de charol y calzas blancas. Una caravana de cortesanos donde
abundan las cortesanas, mayormente rubias, sigue en silencio a la berlina real.
Una nube de moscas molestas como revolucionarios acosa a la comitiva. Hace
calor. Un rey de España se marcha al exilio, otro rey, otra vez, y nadie sabe a
dónde. Lo hace por el bien de España y de su hijo, también rey. Se lo dice en
una carta: ‘Guiado por el convencimiento de prestar el mejor servicio a los
españoles, a sus instituciones y a ti como rey’. En España, cuando los reyes se
exilian, siempre es mirando por el pueblo chusco, nunca por ellos. ‘Yo no quiero
resistir. Si el bien de España exige que me vaya, lo haré sin vacilaciones’,
dijo su abuelo antes de exiliarse en aquella carta escrita por el conde de
Romanones, si bien Valle-Inclán aseguró que lo echaban ‘no por rey, sino por
ladrón’. (…) Ya hay una legión de tertulianos, heraldos reales y mercaderes de
noticias –me niego ya a llamarlos periodistas–, maquillando esta última
tragedia de la España cañí en los platós y en la ‘prensa’ del IBEX: ‘Se ha
hecho el harakiri por España y por su hijo’, cantan lagrimeando emocionados,
como tonadilleras con bata de cola, peineta de carey y abanico rojigualda. Qué
gran hombre. Cuánto le deben esta buena tierra de pan llevar y estos vasallos
lenguaraces y descamisados, ingratos rufianes postulantes de repúblicas y guillotinas.
El monarca que se marcha al exilio ha escrito una carta a su hijo, cuyo reinado
ha manchado para siempre ya, pero no a los españoles por quienes tanto se ha
sacrificado. ¿No merecemos los vasallos una explicación, una despedida, unas
palabras de disculpa? ¿Siquiera un leve adiós desde la ventanilla de caoba de
la berlina real? ¿Nosotros, que con nuestro sudor hemos pagado durante décadas
sus pelucas, sus comilonas, sus cacerías y sus putas de lujo? ¿Ni siquiera un
breve sermoncillo como aquellos de Navidad? ¿Ni una esquelita, aunque sea en
papel de estraza? Yo tenía 13 años cuando proclamaron rey al monarca que se
marcha al exilio. Yo era un niño y él, entonces, un rey joven y fuerte. Hoy es
solo un viejo rico, decrépito y solitario al que su propio hijo ha echado de
palacio por ladrón. Solo me inspira tristeza y le agradezco las lecciones
aprendidas: que no cambiaría mi destino por el suyo y que, en España, las
repúblicas las traen los reyes y no los revolucionarios”.
David Torres escribe en
Público “El rey y las ovejas”, en el que nos recuerda que nadie puede negar que
uno de los grandes aciertos del juancarlismo es su servicio de prensa,
habilidad que más bien es un privilegio, consistente en tener a la prensa a su
servicio. “El penúltimo favor que acaban de hacerle es vender su escandalosa
fuga al extranjero como otro servicio hecho al pueblo español, uno más en una
larga lista de presuntos sacrificios patrióticos que incluyen el adulterio en
serie, las comisiones millonarias, el desfalco a Hacienda y el blanqueo de
capitales. La reacción de la prensa cortesana ha sido muy parecida a la de
aquel médico que se estaba follando a una oveja y cuando su esposa, junto a
unos detectives, lo sorprende en la cama de un hotel revolcándose con la oveja,
exclama: ‘No, cariño, no es lo que te piensas. Es una paciente mía que se cree
que es una oveja’. Sí, lo más grande del periodismo juancarlista es que se cree
a pies juntillas sus propios editoriales (…) Con todo, el servicio de prensa
está haciendo otro descomunal esfuerzo de genuflexión y limpiabotismo,
intentando vender a un prófugo de la justicia, blindado constitucionalmente
hasta las trancas, como un pobre hombre indefenso perseguido por una turba de
desagradecidos. Gracias a una ingente labor de desinformación mantenida a lo
largo de decenios, la opinión pública española es capaz no sólo de compadecerse
de un vividor a todo trapo sino de ver un gran monarca en don Juan Carlos de
igual modo que don Quijote transformaba en gigantes los molinos de viento.
Antes, la moda consistía en decir que uno no era monárquico, sino juancarlista,
ya que habíamos tenido la inmensa suerte de que un superhéroe viniera a
aterrizar al final de una histórica dinastía de tarados, ineptos, holgazanes,
traidores, ladrones y sátiros. Ahora, a la vista de la liebre levantada por la
fiscalía suiza –un lepórido del tamaño y porte de un elefante blanco– los
juancarlistas se han vuelto monárquicos de toda la vida… La Casa Real parece
una de esas lámparas insectívoras donde, de vez en cuando, un mosquito se
achicharra vivo. Ayer chisporroteó un elefante, algo normal en un país que
todavía cree que Corinna Larsen es una oveja”.
El Rey Juan Carlos califica
de “paréntesis” su salida de España.
En La Vanguardia del miércoles,
Mariángel Alcázar advierte del nuevo destino provisional del rey emérito. Comenta
que abandonó el domingo la Zarzuela, tras escribirle la carta a su hijo y pasar
la noche en la localidad pontevedresa de Sanxenxo, lugar frecuentado durante
los últimos años por la amistad que le une a Pedro Campos. Recuerda que el
lunes por la mañana viajó en coche hasta Oporto y, desde allí, voló rumbo a la
República Dominicana. En su trayecto mandó llamadas telefónicas o mensajes de
texto como este: “No estoy de vacaciones, ni abandono España. Esto es un
paréntesis”. Algunos conocían de antemano las intenciones del rey Juan Carlos
de pasar una temporada junto los Fanjul, en sus posesiones de Casa de Campo (La
Romana). “De hecho, allí estuvo el pasado mes de febrero hasta que la primera
semana de marzo, ya con la crisis de la pandemia llamando a la puerta, regresó
a la Zarzuela, prometiendo volver en cuanto le fuera posible.”…. El reportaje
de La Vanguardia prosigue: “De la misma manera que el anterior rey entendió que
debía abdicar para dar paso a una monarquía renovada, en esta ocasión no tuvo
más remedio que aceptar que debía abandonar la Zarzuela, aunque en un principio
se resistió a salir de España. Su peor pesadilla siempre fue el exilio y quizá
eso explica que, de un modo u otro, buscara la manera de tener un fondo
monetario para, llegado el caso, sobrevivir económicamente. El miedo de los
primeros años de reinado a verse expulsado del país se fue apaciguando, pero
nunca desapareció, ni tampoco las aportaciones, no siempre transparentes, a esa
especie de plan de pensiones. En estos últimos días, las conversaciones entre
padre e hijo, Juan Carlos y Felipe, se zanjaban con un acuerdo que, al día
siguiente, el rey Juan Carlos olvidaba. La investigación de la Fiscalía del
Tribunal Supremo y la responsabilidad del rey Juan Carlos de estar a
disposición de esa instancia judicial fue, curiosamente, el argumento dado por
el rey Juan Carlos para permanecer en España y, una vez despejadas las
incógnitas, para decidir si se iba de España un rato o para siempre. Pero la
presión sobre la Zarzuela aumentó y ni la presunción de inocencia fue capaz de
contener la avalancha que amenazaba con romper el dique y arrasar con todo.
Juan Carlos aceptó por fin salir de España, pero solo una temporada, como ha
hecho unas cuantas veces desde su abdicación. No calculó el impacto de su gesto
y la interpretación falaz de que su salida era sinónimo de exilio, de huida o
de rendición”…
¿Don Juan Carlos, en la República Dominicana?
La pactada, obligada o
voluntaria decisión del rey Juan Carlos, o una mezcla de las tres
posibilidades, de irse un tiempo de España generó un nuevo interrogante:
¿adónde? Las opciones más claras son las que coinciden con la existencia de un
entorno de lealtad y discreción que solo pueden ofrecerle amigos de probada
solvencia, económica y emocional, con Cunha Espiritu Santo o con los Fanjul o
los Brito. En Portugal o en la República Dominicana, donde su gran amigo, Pepe
Fanjul, el magnate del azúcar, le habría ofrecido apoyo. Gina Tosas escribe en La
Vangardia.com del pasado miércoles: “En estas casi tres mil hectáreas de lujo
propiedad de los Fanjul, una conocida familia cubana afincada en Miami, que
hizo fortuna gracias a las plantaciones de azúcar, se encuentra el que será por
unas semanas el nuevo hogar del que fue jefe del Estado de España durante
cuarenta años. No es la primera vez que Juan Carlos Iº se aloja en casa de los
Fanjul. Con Pepe Fanjul (1944), el segundo de los cuatro hermanos, y su mujer
Emilia, mantiene una amistad de hace décadas, pero no fue hasta su abdicación,
en junio de 2014, que empezó a frecuentar más asiduamente la isla caribeña, un
escenario ideal para su retiro, lejos del escrutinio público. La hermana de la
abuela de los empresarios del azúcar era Edelmira Sampedro, una cubana que se
casó con el Príncipe Alfonso, hijo mayor de Alfonso XIII, abuelo de Don Juan
Carlos. En las grandiosas villas de Casa de Campo se han hospedado
personalidades de las altas esferas. Los expresidentes estadounidenses Bush
padre e hijo o el matrimonio Clinton han pasado algunas vacaciones en el
recinto, que alberga campos de golf, mansiones frente al mar, playas o una
docena de piscinas, entre otros servicios”.
Don Juan Carlos, con dos de los hermanos
Fanjul.
De ascendencia española,
los cuatro hermanos Fanjul – Alfonso (Alfy), Pepe, Alexander y Andrés–
abandonaron Cuba cuando Fidel Castro llegó al poder en 1959. Los hijos
prometieron al patriarca, Alfonso Fanjul, reconstruir el imperio que había
levantado la familia durante más de un siglo y medio y que la Revolución les
había expropiado. Cumplieron su promesa adquiriendo plantaciones en el centro
de Florida y en República Dominicana, donde han ampliado su negocio al sector
inmobiliario y turístico, convirtiéndose en una de las grandes fortunas de
Estados Unidos, país donde la industria del azúcar está protegida. Y donde los
hermanos gozan de una gran influencia con presidentes y congresistas porque son
grandes contribuidores tanto de las campañas demócratas como de las
republicanas. De este modo, todos los flancos están cubiertos. Pero el manto de
poder deslumbrante, aunque discreto, del clan Fanjul esconde algunas sombras.
The New York Times recordaba, en 2003, que las cerca de 73.000 hectáreas de
cosecha que tienen en el sur de Florida envían agua contaminada a la reserva
pantanosa de los Everglades, una de las zonas más salvajes de Estados Unidos. Y
que su negocio fue catapultado por el embargo del azúcar cubano. Precisamente,
con la isla que les vio nacer guardan una relación ambivalente. Si bien en los
inicios, Alfy fue uno de los líderes del movimiento anticastrista,
recientemente ha visto la posibilidad de expandir allí su imperio. En una de
las escasas entrevistas que el magnate ha concedido a la prensa, mostraba su
interés por hacer negocios con los cubanos. “Si hay alguna manera de que la
bandera familiar pueda llevarse de nuevo a Cuba, entonces soy feliz de
hacerlo”, apuntó Fanjul en declaraciones recogidas por The Washington Post, en
febrero de 2014. P. Barrientos escribe en Vanitatis: “Pepe Fanjul (el gran
amigo del Rey emérito) es una de las voces más reconocidas en Miami por su
apoyo al exilio cubano y contrario a cualquier acercamiento al régimen
castrista, mientras su hermano mayor, Alfredo, fue partidario de reanudar las
relaciones diplomáticas con el Gobierno de la isla. Hace cinco años, los Fanjul
organizaron unas jornadas festivas para agasajar al amigo Rey en las que
participaron Blaine (cuñada de Donald Trump), el magnate Dixon Boardman, Lord
Charles Spencer-Churchill y Lady Sarah y el vizconde William Astor. Todos ellos
viajaron hasta la República Dominicana para acudir a la cena homenaje al hoy
monarca jubilado. Esta familia puede ofrecer el mejor refugio emocional para el
retiro de don Juan Carlos, cuyo padre, abuelo y bisabuelo también vivieron, por
diferentes causas, sus propios exilios”.
El entorno del rey Juan Carlos asegura que los audios de Corinna 'son
pataletas de mujer despechada.
Alfonso
Pinilla, profesor titular de Historia Contemporánea en la Universidad de
Extremadura, advierte en “Reproches para después de un exilio” publicado en
Vozpópuli, que los sistemas políticos caen, sobre todo, como consecuencia de
sus propios errores y de sus contradicciones internas. Recuerda que Juan Carlos
I ya es un rey “desterrado”. “Su inapropiada conducta en asuntos personales y
financieros, aireada ahora en los medios de comunicación, lo han llevado al
exilio. No hay condena judicial aún, pero sí mediática y social, lo cual es
suficiente en los tiempos que corren. Sin pudor, el gobierno ha presionado para
consumar la expulsión, allanando así el camino para el advenimiento de una
futura república plurinacional (Iglesias dixit). La hipocresía inunda las
páginas de la prensa patria. Allá donde antes había silencio y complacencia,
ahora hay bullicio y látigo inmisericorde contra el Borbón. Quienes ayer
miraban hacia otro lado ante los ‘negocios’ del monarca, ahora se lanzan en
tropel sobre sus despojos. Poner freno a aquellos excesos del monarca hubiera
supuesto iniciar la regeneración, en serio, de una democracia maltrecha cuyas
vías de agua aún no se percibían, gracias a la prosperidad que caracterizó
buena parte del reinado de don Juan Carlos. Aceptar tales desajustes resulta
compatible con asumir que estos últimos cuarenta años han sido los de mayor y
mejor desarrollo político, económico y social de nuestra Historia”. Una de las
muchas contradicciones de la izquierda, según Pinilla, estriba en criticar que
la monarquía es una institución impropia del siglo XXI, a la vez que impulsa y
cobija la decimonónica fiebre nacionalista, inspiradora de esa república
plurinacional por la que apuesta Iglesias. “Todo ello, contando con la
necesaria colaboración de un Gobierno, apoyado en nacionalistas y populistas,
que ha jugado con el destierro del monarca como moneda de cambio para la
aprobación de unos presupuestos que son su salvoconducto de continuidad…La
irresponsable conducta del monarca en sus asuntos personales, esa preocupante
sensación de impunidad que lo rodeó durante tantos años y la falta de valentía
en unos actores políticos que deberían haber puesto coto al desafuero,
anteponiendo los principios democráticos a cualquier otro cálculo cortoplacista
para mantenerse en el poder, han dado munición a todas las fuerzas rupturistas
que ahora cargan contra la monarquía parlamentaria, la clave de bóveda de
nuestra actual democracia”.
Nius, el nuevo medio
digital impulsado por Mediaset, que arrancaba en septiembre del año pasado,
publicaba ayer, el sábado, esta fotografía e información del rey emérito a su
llegada a Abu Dabi. “Ni Portugal ni República Dominicana. El primer destino del
rey emérito tras su salida de España ha sido Emiratos Árabes. Así lo ha podido
confirmar NIUS, que ha tenido acceso en exclusiva a una imagen de Juan Carlos I
descendiendo del avión en un aeropuerto de Abu Dabi. El rey llegó a la capital
de Emiratos el pasado lunes, momento en el que se tomó la instantánea que acompaña
esta noticia. En Abu Dabi arranca pues el exilio voluntario acordado entre Juan
Carlos I y su hijo Felipe VI”.
¿Dónde está el rey?
Fotomontajes, imágenes y fotos sorprendentes:
El rey de España se exilia. Da igual en qué siglo leas esto..
Una
diputada alemana pide una orden de detención contra Juan Carlos I.
La diputada en el
Bundestag, Zaklin Nastic (Die Linke), ha pedido que la Justicia española actúe
con imparcialidad y emita una orden europea de detención y entrega contra el
rey Juan Carlos I. “Ahora veremos si la Justicia española es democrática y
políticamente imparcial. Esperamos una euroorden de detención contra el antiguo
Rey. A fin de cuentas, también emitieron una contra Carles Puigdemont por un
referéndum, cuando era el presidente electo”, ha indicado.
Tremending Topic. 'A ver, si tu cara sale en las monedas, lo normal es que pienses que son tuyas'.
'Los españoles han echado al último Borbón, no por rey, sinó por ladrón''. Lo decía el escritor Ramón M. del Valle-Inclán el 1931 en referencia a Alfons XIII. La vieja hjistoira se repite.
Carlos Herrera un lameculos al servicio del Rey.
Campechano a la fuga.
Es el verano más raro de nuestras vidas. Y tiene cosas que jamás creíste que verías
El rey y su fortuna se van. La monarquía y la corrupción se quedan. Por Raul Salazar.
“No volverá a pasar”'. (Estropajo)
Restitución
del Museo Sadirakis.
Monarquía corrupta.
No me abandones por tus
vacaciones.
Entró
como un elefante en una cacharrería.
Cae
la tarde en Medinaceli, por Miquel Tugores.
La Guardia Real.
El dilema.
Gobierno de concentración.
Impecable hoja de servicios.
El PP se pide el gobierno por vigesimoquinta vez
Todo es un insulto para la defensa a ultranza
Salida real.
Pep Roig, desde Mallorca:
Tomando el covid, Plan, Quejas argumentadas, Tradicionando, A las bravas, Localógica…
Los vídeos de esta semana:
Sigue
siendo una incógnita dónde se encuentra el rey emérito tras anunciar que se
marchaba de España. Varios medios apuntan a que podría haber viajado a
República Dominicana, pero no hay ninguna confirmación oficial.
La
vinculación del REY emérito JUAN CARLOS I con REPÚBLICA DOMINICANA | RTVE
Don
Juan Carlos abandona España, ¿es LEGAL que se haya MARCHADO? | RTVE
“Yo,
Juan Carlos I, Rey de España”, documental que el Gobierno del PP de Mariano
Rajoy vetó su emisión, en octubre del 2016, e impidió que pudiera verse en
España, fue emitido por TV1 el pasado
jueves. Este documental fue grabado entre los años 2014 y 2015, está dirigido
por el cineasta hispano-francés Miguel Courtois y guionizado por él mismo junto
a la biógrafa del Rey emérito, Laurence Debray.
Investigan
si el REY JUAN CARLOS ocultó DINERO en SUIZA | RTVE Noticias
Baiao
de Ana. Bonet de San Pedro.
Abraçando
Jacare Trumpet |Trumpet Choro
Choro
Abraçando Jacaré. Composed by Pixinguinha. Música y Trompeta | David Pastor
No hay comentarios:
Publicar un comentario