domingo, 13 de diciembre de 2020

El rey emérito confiesa que ha defraudado a Hacienda y que le han pillado.

El rey Juan Carlos presenta una declaración para regularizar su situación fiscal.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, celebró el pasado domingo el aniversario de la Constitución Española, “el mayor éxito de nuestra historia colectiva”. El acontecimiento coincidió con el público reconocimiento de fraude del Emérito. Curiosamente, el día anterior, Pablo Iglesias, secretario general de Podemos y vicepresidente segundo del Gobierno, llamó a avanzar hacia una nueva república en España, en un acto en el que participaron Podemos, IU, En Comú Podem y Galicia en Común. Iglesias cree que la república será una realidad “mucho más temprano que tarde”, mediante una agenda basada en el avance en los servicios públicos y derechos sociales. “Se abre paso –advirtió una agenda de defensa de los servicios públicos, de los derechos laborales y sociales, de lo común, de la fraternidad de los pueblos del estado, de la res pública. Esa agenda es, por definición, republicana”. El mismo domingo aparecía la noticia sobre la regularización fiscal del Emérito, que ‘eclipsó’ el 42 aniversario de la Constitución. Y los líderes de los partidos políticos reaccionaron de diferente manera. Mientras el PP eludía valorar la declaración del rey emérito y no quedaba constancia de lo que pensaba el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al no aceptar preguntas sobre este tema, el PNV criticaba la “opacidad” de la Corona y Unidas Podemos daba a entender que “el rey emérito está confesando que ha defraudado a Hacienda porque le han pillado”. Pablo Echenique exclamaba: “Pues menudo día ha elegido Juan Carlos I para confesar que ha defraudado a Hacienda, menudo día, el Día de la Constitución”. El portavoz en el Congreso de Unidas Podemos afirmaba que, “cuando el rey emérito quiere regularizar su situación fiscal respecto de las tarjetas opacas, está confesando que lo hace porque le han pillado y está confesando que ha defraudado a Hacienda”. Y Gerardo Pisarello, el diputado de Unidas Podemos y secretario primero de la Mesa del Congreso, reivindicaba el “proyecto republicano” y aseguraba que, además de un proyecto “de futuro” era también “de hoy” porque “cuando se defiende lo público, se protegen las pensiones de los mayores o se invierte en Educación, ya se está haciendo republicanismo”.

Los principales líderes políticos aprovecharon este día para referirse al rey Juan Carlos y a la monarquía.

Otros representantes de la derecha alabaron la figura del rey emérito por encima de las informaciones sobre su fortuna, evitando hablar de esta última polémica. Pablo Casado, por ejemplo, líder del PP, enmarcó en la “vida privada” del monarca la regularización fiscal, y se limitó a señalar que el Poder Judicial “tendrá que dilucidar” este asunto. En la misma línea se pronunció la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, abalanzándose por ensalzar su figura y asegurando que “este país le debe mucho al rey Juan Carlos”. Por su parte, el portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, dijo al respecto: “O la Casa Real empieza a ser un poco más consciente o se puede llevar un susto a medio plazo”. Sobre la carta que un grupo de militares retirados envió al rey Felipe VI, y sobre la que tampoco se pronunciaba Zarzuela, Esteban considera que el “receptor de esta misiva, que es el Jefe del Estado, debe dar cumplida contestación, porque su silencio se puede malinterpretar”. En esta ocasión escriben en Público Pilar Araque y Alexis Romero– el mensaje, prácticamente unánime, que se ha trasladado desde los partidos, es que la Carta Magna está en ‘peligro’. “Para las formaciones conservadoras, es el Gobierno el que quiere ‘derrocar’ (esa fue la palabra que escogió la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso) el texto constitucional; para el Ejecutivo y las formaciones de izquierdas, la derecha ‘asedia’ la Constitución cuando bloquea la renovación del Poder Judicial o dice que este es ‘el peor Gobierno de la historia’, abarcando también el periodo de la dictadura franquista (una afirmación que Vox repite sin tapujos una vez más). Más allá de la Constitución, la división en torno al sistema político y las previsiones de la jornada fueron arrasadas por el último escándalo fiscal de Juan Carlos I.

El rey emérito presentó una regulación fiscal ante Hacienda.

El hecho es que el monarca emérito, Juan Carlos I, presentó la pasada semana una declaración ante la Agencia Tributaria para regularizar su situación fiscal respecto a los fondos que percibió tras la abdicación a través del empresario mexicano Allen Sanginés-Krause, como adelantó “El País”. Con este movimiento el emérito trató de esquivar las segundas diligencias abiertas por la Fiscalía del Tribunal Supremo. Y el abono de la cuota correspondiente a los ingresos no declarados antes de recibir notificación por parte de Hacienda desactivaba el delito fiscal. El mismo domingo, 6 de diciembre, Beatriz Parera escribía para El Confidencial: “La Fiscalía cuenta con indicios de que el millonario Sanginés-Krause sufragó durante años decenas de gastos del rey Juan Carlos y otros miembros de la familia real. Ni los pagos ni el disfrute de los propios fondos fueron declarados a la Agencia Tributaria por el monarca ni el resto de sus familiares, lo que abre la puerta a un posible delito fiscal: los gastos abonados son de carácter ordinario, continuados y sostenidos en el tiempo. Entre las facturas de la familia real que fueron financiadas por Sanginés-Krause, hay desde viajes y estancias hoteleras hasta tratamientos médicos o cuentas de restaurantes. Gran parte de ellas se abonaron después de 2014, año de la abdicación, por lo que no sirve, en este caso, la dispensa de la inviolabilidad. Se comete delito fiscal cuando las cuotas, que Hacienda considera defraudadas, superan los 120.000 euros por impuesto y por ejercicio. Los abonos investigados corresponden a tres años: 2016, 2017 y 2018. Aunque depende del impuesto aplicado y el tipo impositivo, expertos fiscalistas consultados apuntan a que la AEAT considera habitualmente este tipo de ingresos IRPF por incremento no justificado de patrimonio y calcula la cuota aplicando un mínimo de un 48%. Con esa premisa, bastaría que el dinero recibido en alguno de los ejercicios superara los 250.000 euros”. 

La vía que analiza el rey se apoya en el artículo 305.4 del Código Penal, que recoge las bautizadas con el expresivo nombre de 'excusas absolutorias'. Para que pueda agarrarse al mismo, tendría que adelantarse a los propios investigadores: “Quedará exento de responsabilidad penal el que regularice su situación tributaria, en relación con las deudas a que se refiere el apartado primero de este artículo, antes de que se le haya notificado por la Administración tributaria la iniciación de actuaciones de comprobación”, establece el artículo. También apunta a que, en el caso de que las actuaciones de la Agencia Tributaria todavía no se hubieran producido, la regularización en cuestión tendría que darse “antes de que el Ministerio Fiscal, el abogado del Estado o el representante procesal de la Administración autonómica, foral o local de que se trate interponga querella o denuncia contra aquel dirigida, o cuando el Ministerio Fiscal o el juez de Instrucción realicen actuaciones que le permitan tener conocimiento formal de la iniciación de diligencias”.  Las diligencias de la Fiscalía del Supremo se centran en estos momentos en la comisión de un delito fiscal, pero fuentes jurídicas apuntan a que, conforme avancen las mismas, no se descarta que se llegue también al de blanqueo. Este segundo delito se produciría si el empresario mexicano no hubiese sufragado gastos de Juan Carlos I y sus familiares por la amistad que le une al primero y a costa de su propia fortuna, sino porque en realidad manejaba fondos ocultos del monarca y hubiese actuado como testaferro del mismo para que estos no salieran a la luz. “En el caso de confirmarse esta posibilidad – concluye Beatriz Parera–, la Fiscalía del Supremo ya no solo se centraría en las cuotas pendientes que probasen la comisión de un delito fiscal, también tendría que demostrar que el emérito incurrió en un delito previo y, posteriormente, blanqueó las ganancias que obtuvo con el mismo a través de Allen Sanginés-Krause. Una vez más, el posible blanqueo perdería fuerza si Juan Carlos I se agarrase al artículo 305.4 del Código Penal, pues este establece que ‘la exención de responsabilidad penal contemplada en el párrafo anterior [la ya comentada] alcanzará igualmente a dicho sujeto por las posibles irregularidades contables u otras falsedades instrumentales que, exclusivamente en relación a la deuda tributaria objeto de regularización, el mismo pudiera haber cometido con carácter previo a la regularización de su situación tributaria’. A esto se suma la necesidad de probar el delito que precede al blanqueo y justifica el mismo, exigencia ante la que surge una vez más la misma complicación por la que la Fiscalía se posiciona a favor del archivo por las supuestas comisiones del AVE a La Meca: Juan Carlos I es inviolable hasta su abdicación en 2014, por lo que si el primer delito se hubiera cometido antes de ese año, un posible blanqueo en 2016, 2017 y 2018 también se desmontaría”.

Juan Carlos I pretende regresar a España una vez que regularice su situación con Hacienda.

Antonio Rodríguez tituló en Vozpópuli que Juan Carlos I pretende regresar a España una vez que regularice su situación con Hacienda. “Rehén en el exilio de Abu Dabi, el emérito planea regresar a España en unas semanas, una vez que haya zanjado con la Agencia Tributaria su situación fiscal por el supuesto uso indebido de tarjetas opacas tras su abdicación. El padre de Felipe VI confía en que para las fiestas navideñas ya se haya zanjado con la Agencia Tributaria su situación fiscal… Hacienda está analizando el contenido del escrito y deberá responder en los próximos días si acepta la regularización, si solicita o no aclaraciones y cuál es el importe a pagar. Está declaración voluntaria de Juan Carlos I no está relacionada con sus posibles bienes en el extranjero, sino con el uso de las citadas tarjetas bancarias que le facilitó el empresario mexicano Allen Sanginés-Krause, quien está siendo investigado por la Fiscalía del Tribunal Supremo por haber puesto dinero a disposición de don Juan Carlos sin que este lo declarara a Hacienda ni tampoco mediase donación… Con su iniciativa ante Hacienda, el abogado del rey emérito intenta neutralizar la investigación abierta sobre este asunto en la Fiscalía del Supremo. Si lograra desactivar el caso de las tarjetas con el pago de una multa, daría un paso muy importante en el camino de despejar la maraña de investigaciones abiertas a su cliente en la Fiscalía del Supremo”…

El rey Juan Carlos I está de Abu Dabi “hasta los huevos”, según Carlos Herrera.

Desde la Fiscalía anticorrupción aseguraron que las pesquisas de este escenario se encontraban muy avanzadas sin ofrecer más detalles sobre si preparaban una querella para presentar al Tribunal Supremo... El periodista Carlos Herrera, próximo al rey Juan Carlos, ofreció el pasado 3 de noviembre detalles sobre su estancia en el país asiático y su intención de regresar: “Hoy hace tres meses que tuvo que marcharse el rey Juan Carlos de su casa y su país. El rey de España durante 40 años, una persona de 82 años, con problemas de movilidad, hubo de coger los trastos de su casa y marcharse”. Desde los micrófonos de la cadena Cope el periodista apuntó a las presiones sufridas para ese retiro y añadía que “hay algunos que están muy cómodos con esa distancia, pero convendría que no se acostumbrasen a que esté fuera. Según he podido saber, el emérito oye la radio, lee las noticias, hace gimnasia, ha perdido cuatro kilos, ha mejorado esa pierna que le da tantos problemas y que le hace caminar con bastón... está bien. Pero me consta que una cosa es que esté bien y otra que le olviden porque puede volver cuando quiera. El mensaje es que quiere estar en su casa por Navidad, lógicamente como todo el mundo”.  

El rey Juan Carlos I, en una imagen de archivo.

Publicado en Eldiairo.es, del que es director, Ignacio Escolar emite su blog “Un rey sin honor” en el que dice: “El arrepentimiento y la penitencia son los pasos previos al perdón de los pecados. A su manera, también pasa lo mismo con el delito fiscal. Por eso el pago de la deuda con Hacienda –más una cuantiosa multa– es suficiente para evitar la condena penal. Con una condición: hay que pagar, arrepentirse, antes de que arranque el proceso judicial. La lentitud de la Justicia española en los tres casos de presunta corrupción que afectan a Juan Carlos de Borbón y el limbo en el que están –en la Fiscalía desde hace más de un año, pero aún sin judicializar– han dado al rey emérito una oportunidad que no suelen tener otros defraudadores: la de regularizar. Lo hará solo por una de las tres causas que investiga la Fiscalía en España: la de las tarjetas opacas, que desveló elDiario.es. Juan Carlos de Borbón solo pagará por eso ante el fisco. Por algo más de medio millón de euros que no declaró entre 2016 y 2018, un dinero supuestamente ‘donado’ por un millonario mexicano; un banquero de Goldman Sachs. Pero no regularizará ante Hacienda la parte principal de esa fortuna opaca que investiga la Justicia: los 65 millones ‘donados’ por la dictadura saudí, y que nunca declaró”. Escolar dice que el rey emérito devuelve la calderilla. Pero no el gran botín que presuntamente robó –un delito fiscal consiste en eso: en robar a todos los españoles que sí pagamos impuestos–. Y se pregunta: “¿Por qué ese medio millón de las tarjetas ‘black’ sí y los otros 65 millones no? Porque el arrepentimiento del rey emérito brilla por su ausencia. Los millones saudíes no fueron declarados en los años en los que Juan Carlos de Borbón aún era inviolable, según la Constitución. El rey emérito está blindado en esta causa. Por eso solo regularizará ese medio millón, que es posterior a su abdicación. Juan Carlos de Borbón está buscando la solución menos costosa para su patrimonio y su libertad –el delito fiscal se condena con hasta seis años de prisión–. Es lo que haría cualquier presunto delincuente, y está en su derecho. Pero alguien que se comporta así no merece ningún reconocimiento por parte del Estado español”. Escolar finaliza recordando la palaba “Emérito”, según la RAE: “Que se ha jubilado y mantiene sus honores y alguna de sus funciones”. Y finaliza: “De todos los requisitos, Juan Carlos de Borbón solo cumple con el primero: se ha jubilado. Ni realiza función alguna ni es digno de ningún honor”.

El Rey emérito paga 678.000 euros a Hacienda para esquivar la investigación sobre las tarjetas opacas.

El abogado y portavoz del rey emérito emitió el pasado miércoles un comunicado en el que afirma estar dispuesto a cooperar con la Fiscalía. Juan Carlos, presentó ante la Agencia Tributaria una declaración sin requerimiento previo, de la que ha resultado una deuda, ya satisfecha, por importe de 678.393,72 euros, incluyendo intereses y recargos. La presentación de esta declaración del emérito, cuatro meses después de su salida de España, está relacionada con el uso de tarjetas bancarias de las que se habrían beneficiado tanto él como algunos de sus familiares, habiendo usado fondos opacos del empresario mexicano, Allen Sanginés-Krause. Tras pagar a Hacienda por las tarjetas opacas –las llamadas tarjetas black– el rey emérito afirma en el comunicado su ánimo de cooperar con la Fiscalía. Tarjetas opacas que también fueron utilizadas por otros miembros de la familia Real como las infantas Cristina y Elena y sus nietos Froilán y Victoria Federica. Esta línea de investigación sobre gastos realizados con efectivo y que no había sido declarado a Hacienda se une a las otras dos ya abiertas al rey emérito, la primera por posibles comisiones procedentes del AVE a la Meca y que previsiblemente será archivada por no encontrarse indicios que se puedan perseguir respecto del exjefe del Estado, que es aforado ante el Tribunal Supremo. Las diligencias abiertas partieron de una información procedente de “inteligencia financiera” de Sepblac (Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención de Blanqueo de Capitales). Se trataría de conductas realizadas en un espacio temporal aún por delimitar y que, inicialmente, podrían incardinarse en blanqueo de capitales de los que podrían derivarse delitos fiscales. Según este aviso, Juan Carlos I tendría casi 10 millones de euros en una cuenta activa en la isla de Jersey que habría intentado mover recientemente. Se investiga por ello la existencia de un trust en el que figura Juan Carlos I como beneficiario y que se nutre de fondos de otro vehículo financiero similar en las Islas del Canal constituido en la década de los años 90.

La amenaza de la imputación obliga a Juan Carlos I a reconocer su fraude.

David Bollero titula: “El rey corrupto y la monarquía podrida”, un artículo en Público en el que reconoce que Juan Carlos I es “corrupto”. “Moralmente, sabíamos que revuelve las entrañas por mucha presunción de inocencia que se mantenga, pero desde ayer el Borbón mismo se encargó de reconocer que cometió un delito fiscal y, para vergüenza de cualquier demócrata, nuestro presidente Pedro Sánchez no tuvo el coraje de señalar su comportamiento mezquino. La regularización fiscal del emérito supone el reconocimiento de que entre 2016 y 2018 robó a toda España. Cometió un delito, aunque acogiéndose al derecho que tiene cualquier contribuyente, no será juzgado por ello. Esta reflexión es a la que se aferran sus defensores, desde la derecha a la extrema-derecha y los que dicen ser de izquierdas, como el PSOE. Pero ¿merece Juan Carlos I el título de rey emérito? Son ya muchas las noticias que hemos investigado y destapado en las que se evidencia que las actividades de Juan Carlos de Borbón distan mucho de un comportamiento ejemplar. Por eso, el Gobierno tiene que retirarle ya este título honorífico que le concedió en 2014 el Ejecutivo de Rajoy. Sin embargo, el asunto tiene trampa: que Juan Carlos I haya tenido la posibilidad de regularizar su situación fiscal se debe al hecho inaudito de que la fiscalía no lo hubiera imputado pese a que la prensa ya había realizado la investigación, el trabajo que la Justicia no hace, y el delito era público. ¿Se imaginan algo parecido con un ciudadano o ciudadana de a pie?”

David Bollero prosigue: “La irritación que provocaba el modo en que el Gobierno tira balones fuera para seguir protegiendo al monarca ha pasado a la crispación, a la indignación y a la vergüenza. Desde la óptica ética y sin ni siquiera mancillar la presunción de inocencia sobre la larga lista de corruptelas que se ciernen sobre el Borbón, conocer su adulterio continuado y patológico y que él mismo admitiera su elusión de impuestos recurriendo a paraísos fiscales hacen de Juan Carlos I un personaje nauseabundo, cuya imagen no mejora con el barniz de la Transición aplicado sobre el favorito de Franco. Pedro Sánchez y, por tanto, el Gobierno continúan fieles a su hipocresía, mirando para otro lado, cobardes sin tener el cuajo de admitir que nuestra monarquía está podrida. Juan Carlos I forma parte esencial de nuestra monarquía parlamentaria, su pasado y presente como emérito así lo atesoran. A pesar de ello, Sánchez continúa con su ejercicio de cinismo, hablando de llegar hasta al final de la investigación del emérito al tiempo que en el Congreso veta cualquier intento de arrojar transparencia sobre la monarquía. En mitad de la ciénaga en que se ha convertido la Casa Real, Felipe VI calla, como siempre ha callado en cualquier tema espinoso que se le presenta, como las ansias golpistas del fascismo latente en nuestras Fuerzas Armadas. Su padre hace gala de su bajeza moral y sensación de impunidad y pretende volver a España por Navidad, lo que sin duda le deparará merecidísimo abucheo. Pedro Sánchez se aferra a la narrativa de que ‘la monarquía no está en peligro’ del mismo modo en que, por las fechas que se aproximan, el niño que crece niega que los Reyes Magos son los padres, pero lo cierto es que la voladura controlada de esta institución está teniendo lugar desde dentro y, cuanto más lo niegue, mayor descontrol tendrá esta explosión en mil pedazos”.

    
  Froilán y Victoria Federica usaron las tarjetas 'black' de Juan Carlos I para viajes en Uber y compras en El Corte Inglés.

Algunos nietos del rey utilizaron sus supuestas tarjetas 'black' en Uber, El Corte Inglés y clases de piano. Según El Confidencial, sus hijas Elena y Cristina y varios de sus nietos, como Froilán y Victoria Federica, utilizaron las black para su uso personal. Así, abundan las compras en El Corte Inglés, los desplazamientos en Uber o, incluso, la compra y mantenimiento de una yegua deportiva por parte de la infanta Elena. El dinero que circuló por estas tarjetas superaría en al menos tres ejercicios los 250.000 euros anuales. La investigación a Juan Carlos I por utilizar dinero sin declarar de un empresario mexicano afectaría también a las infantas Elena y Cristina, según este medio que cita “fuentes próximas al procedimiento”. Anteriormente, este mismo periódico digital ya había publicado que también se estaba investigando la compra de una yegua de Victoria Federica. La cascada de noticias sobre los líos económicos del rey sigue suscitando decenas de críticas y comentarios en las redes sociales. En Twitter se puede leer: “Los nietos del emérito le llamaban el VISAbuelo”. Igualmente, los memes más descacharrantes tunean las entradas del Metro de Madrid.

Manuel Muñiz, secretario de Estado de España Global

Antonio Rodríguez publica en Vozpópuli que el Gobierno envió el pasado lunes a un alto cargo a Emiratos en medio de las noticias sobre un posible regreso de Juan Carlos I. Se trata del secretario de Estado de la España Global, Manuel Muñiz, en visita diplomática económica a Abu Dabi y Dubai, donde se reunió con altos cargos del Ejecutivo emiratí y visitó las obras del pabellón español en el recinto de la Expo de Dubai. “El Gobierno de Pedro Sánchez envió a un alto cargo del Ministerio de Asuntos Exteriores a Emiratos Árabes Unidos (EAU) en medio de las noticias sobre un posible regreso de Juan Carlos I a España durante las vacaciones navideñas. El anterior jefe del Estado ha pasado allí de incógnito los últimos cuatro meses y, en todo este tiempo, solo consta la visita de su hija mayor, la infanta Elena, según desveló La Vanguardia. La colonia española en EAU es la más numerosa en la zona con cerca de 8.000 españoles, de los que Juan Carlos I es su miembro más significativo. En todo caso, el Rey emérito planea regresar a España una vez que regularice su situación fiscal con Hacienda. En este sentido, fuentes próximas a Juan Carlos I no descartan que el viaje se produzca durante las fiestas navideñas después de más de cuatro meses de estancia en Emiratos Árabes Unidos. El padre de Felipe VI confía en que para entonces ya se haya zanjado su situación fiscal con la Agencia Tributaria”.


1.      El emérito regulariza su situación fiscal y se disculpa.  “Pensaba que el dinero era mío porque llevaba mi cara”. Mi cara dura, ajajaja, añade Juan Carlos I. (El Jueves)

Imágenes, fotomontajes y fotos sorprendentes:




El cachondeo del  eméeeerito.



El diario ABC tituló: “Fuga de talentos: seis novilleros sevillanos emigrarán a México en busca de oportunidades”. El reportaje, publicado el pasado domingo en su edición de Sevilla, habla de una “cuadrilla de incipientes toreros” que viajará a México para participar en un certamen internacional. El titular ha circulado en las redes sociales, rodeado de comentarios acerca de los científicos que se van de nuestro país y que llaman “talento” al cruel espectáculo que puede verse cada vez que se llena una plaza de toros.

Los memes más descacharrantes, tuneando las entradas del Metro de Madrid.

La Luna, tomada en Atlantic Street, en Noruega y descrita por la BBC como la escena más hermosa de todos los tiempos.

El árbol más alto de Gales había sido dañado por una tormenta y se suponía que iba a ser cortado... pero el artista de motosierra Simón O ' Rourke encontró una mejor solución para simbolizar el último intento del árbol de llegar al cielo.


Puesta de sol en Mallorca.


El humor de esta semana en la prensa: Forges, El Roto, Peridis, Manel F., B. Vergara, Eneko, Enrique, J. R. Mora, Miliki y Duarte…

 










La culpa.

Agotador.


No puede ponerse.

El contagioso espíritu navideño.

Graciosa Majestad. Majestad graciosa.

Dos reyes. Un destino.



Las siguientes viñetas las saqué de vetustideces.blogspot.com. Un blog que dicen que sirve de contrapunto al mío, en lo que a la preferencia de las viñetas se refiere.                                                                     

Argote.

Desallegados familiares que no volverán a casa por Navidad.






SOS Sanidad pública.





Pep Roig, desde Mallorca:  Trapicheo festivo, La restringida fiesta, A las órdenes, De luces, No, Todo depende, La norma, Falacias…











Los vídeos de la semana:

Políticos reaccionan a la regularización fiscal del rey Juan Carlos I.

Juan Carlos paga a Hacienda casi 680.000 euros mientras la Justicia investiga sus ingresos. 


Breve guía del horizonte del rey emérito, por Alejandro Requeijo.

Vox i els feixistes - Polònia

Polònia - 10/12/2020

LATE MOTIV - Raúl Cimas. Mundo Cimas | #LateMotiv786

Uno de los vídeos de Youtube más vistos en España durante el 2020. 

LA RESISTENCIA - Entrevista a Miquel Montoro | Parte 1 | #LaResistencia


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