El 'Canto a la Libertad', de Labordeta, en la Plaza de Cibeles.

 

Los madrileños dijeron basta al 'plan de destrucción de la Atención Primaria' del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso.

La manifestación del pasado domingo en Madrid en defensa de la sanidad pública fue mucho más que una convocatoria solo para la izquierda. Familias enteras, organizaciones médicas y sindicatos, al llegar a la Plaza de Cibeles, entonaron en defensa de la sanidad pública el Canto a la Libertad, de José Antonio Labordeta. Y la Delegación del Gobierno en Madrid cifró en 200.000 el número de participantes, una cifra que los convocantes elevan a 670.000 manifestantes.

Pese a todo, el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, aseguró que fue una manifestación “en clave política” y “jaleada” por Más Madrid, que no va a condicionar el trabajo de la Consejería en sus negociaciones con los sanitarios. Y el portavoz del PP en la Asamblea de Madrid, Pedro Muñoz Abrines, consideró que la multitudinaria manifestación por la sanidad pública había sido un “fracaso” de cientos de miles de personas, argumentando que “el 99% de los madrileños” no había apoyado la movilización. En declaraciones remitidas a la prensa, Abrines espetó que Mónica García, la líder de Más Madrid a nivel regional, había dicho que “la manifestación sería un éxito, si recibía el apoyo unánime de Madrid”. “Pero hoy -añadió-, hemos visto que el 99% de los madrileños no la han apoyado”.

Ángela Hernández, la secretaria general de Amyt, sindicato de médicos, declaró que la manifestación por la sanidad pública fue “mucho mayor de lo que nos imaginábamos”, inquirió al Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso que “no la puede ignorar” y esperaba que la Atención Primaria comience a mejorar “desde los cimientos con los profesionales”. Coincidieron los demás sindicatos, desde UGT a CCOO, pasando por el de enfermería, Satse, o CSIT-Unión Profesional. Y, mientras ciudadanos, profesionales y oposición ya piensan en cómo “gestionar el éxito” de esta manifestación, el Gobierno de la Comunidad madrileña ignora la protesta.

Tras la lectura del manifiesto y las palabras de los organizadores, que reclamaron una sanidad 100% pública y de calidad, el acto terminó con un último alegato: “Madrid se levanta”. Las imágenes aéreas revelan una multitudinaria marcha que desde el mediodía recorrió las principales arterias de la ciudad en contra de un modelo sanitario, el del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, que ha vivido dos semanas de caos sin precedentes por el plan de reapertura de las urgencias de atención primaria. “Con Ayuso, hay abuso”, “Ayuso nos mata”, “El PP nos arruina la Atención Primaria” o “Que se note a la hora de votar”, rezaron muchos mensajes entre la multitud.