"¿Todo sigue igual en ETA?"
ETA, que siempre ha intentado forzar con violencia la negociación de cuestiones políticas con todos los gobiernos, se resiste a hacerse definitivamente a un lado y sigue presentándose como garante de lo que puedan acordar los grupos afines. Así, en el párrafo final del último comunicado, afirma, sin armas en la mano, pero ocultas, por si acaso, que “no cejará en su esfuerzo y lucha por impulsar y llevar a término el proceso democrático, hasta alcanzar una verdadera situación democrática en Euskal Herria”. Una declaración de intenciones que evidencia lo previsto por ella: que aún no ha decidido su desaparición y que se reserva un papel en un hipotético nuevo proceso de paz.
Brian Currin, el mediador africano, expresa su “satisfacción” por la “respuesta positiva” de ETA propuesta por él. Dice que “cumple las condiciones” establecidas y que está consultado con los miembros del GIC (Grupo Internacional de Contacto) para organizar su primera visita al País Vasco “tan pronto como sea posible”. Desde Dublín, el líder del Sinn Fein, Gerry Adams, insta al Gobierno español a “aprovechar la oportunidad” abierta por ETA para “una paz duradera y para un nuevo comienzo en la relación entre el pueblo vasco y el español”. Y, en la prensa internacional, donde se sigue calificando a ETA de “banda separatistas vasca” y no de organización terrorista, el anuncio de alto el fuego es recogido con cierto optimismo general.
Pero en España, su declaración de alto el fuego es un simple cambio de táctica como estrategia política para poder presentarse a las próximas elecciones. Por mucho que en algunos ámbitos internacionales y desde el entorno abertzale se haya calificado la reacción de ETA de contundente y optimista de cara a un futuro sin violencia, lo cierto es que ha defraudado a los principales partidos políticos que sólo esperan de ella su disolución definitiva. La mayoría de ellos considera su comunicado de frustrante y sólo el entorno batasuno ha aplaudido su contenido. Y la mayoría de blogs españoles abogan por su desaparición definitiva. Entre ellos, destaco el de Antonio Telo, quien en “Cuaderno de notas de A. T.” dice: “ETA mantiene la arrogancia del que aún posee la fuerza suficiente para negociar y exigir que se cumplan una serie de condiciones, entre ellas ‘iniciar el proceso democrático en Euskadi’. ETA sigue sin enterarse de que dicho proceso empezó en 1977 y que entonces ella se desmarcó de él para seguir matando. ETA sigue sin comprender que no está en condiciones de exigir nada, pues la sociedad española en general y la vasca en particular hace mucho tiempo que le negaron representatividad para proyectar su futuro. El comunicado que los demócratas de este país esperan de ETA es uno que diga simplemente: ‘Ciudadanos españoles, aquí están las armas, perdón por los crímenes cometidos. Nos sometemos a la justicia del estado de derecho’. Pero, mientras tanto no lo hagan y sigan mareando la perdiz los siniestros encapuchados de turno, todo sigue igual”. (http:// cuadernodenotasdeat.blogspot.com)
No hay comentarios:
Publicar un comentario