El “manco de Pontevedra’, su modo de gobernar y la telediarios del PP.
“La gran familia… basura”, titula
Javier Pérez de Albéniz en Eldescodificador.com. Un artículo que hace
referencia a la alegría que se vivió en las filas populares, con su presidente rodeado
por los más de 3.000 compromisarios en un ambiente distendido, amable, sin
corbatas, como si se tratase de la reunión de una gran familia… “Pedro Carreño
–informa Pérez de Albéniz– da paso al congreso del PP. Y quien desde allí
habla, dice aquello de ‘un congreso que está resultando distendido, amable,
como si se tratase de la reunión de una gran familia’… Se trata de Ana Rosa
Berraquero, periodista del informativo estrella, tres de la tarde, del fin de
semana de la televisión pública española. Ya sabe, esa televisión que pagamos
todos: TVE. Miembros del Gobierno del PP y periodistas de los informativos de
TVE forman una gran familia. Una familia que tiene sus gastos, como es normal.
Los habituales en congresos y redacciones, usted ya me entiende. Gastos que los
ciudadanos pagamos sin rechistar, como hemos pagado la financiación ilegal del
PP. El descaro es tan grande, la desfachatez de unos y otros tan descomunal,
que los ciudadanos parecemos desbordados. No reaccionamos. Estamos atortolados,
y vemos los telediarios, y leemos los periódicos, con los ojos como platos: ‘Rajoy
–dice la portada de un diario–: todavía puedo dar mucho más’. ¡Los empresarios
procesados confirman que el PP se financió ilegalmente’, cuentan en la página
2. ‘Trece años de cárcel para los cabecillas de la trama Gürtel, nueve para la
ex consejera de turismo del PP’, sentencia la página 3. Una gran familia…
basura”.
Rajoy ya no pondría la mano en el fuego por nadie…
“Si Rajoy se hubiera quemado la mano de verdad –escribe Christian González en Tremending, de Público– cada vez que la ha puesto metafóricamente en el fuego por alguien, le llamaríamos 'El manco de Pontevedra'. El pasado lunes, el presidente del Gobierno se abrasó, vuelta y vuelta, a cuenta del presidente de Murcia, Pedro Antonio Sánchez. El juez de la Púnica atribuía al dirigente murciano tres presuntos delitos de fraude y cohecho por, supuestamente, concertarse con empresas del conseguidor de la Púnica, Alejandro de Pedro, para amañar contratos de formación en la Consejería de Educación con el fin mejorar su reputación en Internet y redes sociales para postularse a presidente de la región. El pasado 11 de junio, tras ver el nombre de Sánchez vinculado con una empresa de la trama Púnica, Rajoy puso su mano en las brasas y le dio su apoyo de forma pública: ‘Sabes que cuentas con nuestra simpatía y con nuestro reconocimiento y, en mi caso, además, con mi apoyo total y absoluto porque te lo mereces’. Ya se empieza a percibir el olor a churrasco. A la hora de mostrar su apoyo a dirigentes del PP, el tino del presidente es tal que, en las redes sociales empieza a vérsele como un gafe. Y es que parece que un apoyo público de Rajoy es garantía de condena o, como mínimo, de problemas con la justicia a tenor de los últimos casos. ‘Te quiero, Alfonso, coño. Te quiero, coño. Tus éxitos los considero mis éxitos’. Con esta explícita y auténtica declaración de amor, Rajoy mostró su total apoyo, en 2007 a Alfonso Rus, entonces presidente de la Diputación de Valencia y alcalde de Xàtiva. Ocho años más tarde, Rus era suspendido de militancia del PP y retirado de la Presidencia del partido en Valencia tras hacerse públicas unas conversaciones en la que se le escuchaba supuestamente contando dinero del cobro de una comisión. Su frase más famosa fue: ‘Dos millones de pelas’. El 26 de enero de 2016 fue detenido en una operación contra la corrupción a nivel local y regional en la Comunidad Valenciana junto a varias decenas de personas”.
Rajoy, en el acto de entrega de la Llave de Oro a Rita Barberá.
En el acto del PP en la plaza Plaza de Toros de Valencia, en 2015, Rajoy se mostraba así de efusivo con la alcaldesa Barberá: “Rita, eres la mejor. Eres la alcaldesa que merece Valencia”… Un año después, el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, aseguraba que la exalcaldesa de Valencia, Rita Barberá “ya no es militante del Partido Popular” y y recalcaba que él, como presidente del PP, ya no tenía, por lo tanto, “ninguna autoridad sobre ella”. Cuando falleció, la senadora estaba imputada por presunto delito de blanqueo de capitales en el grupo municipal del PP, en el marco de la Operación Taula, dentro del caso Imelsa. Una vez desaparecida, se multiplicaron los actos del PP, reconociendo su plusvalía. “Rita se entregó por su ciudad –dijo Rajoy, ensalzando su figura en un acto de homenaje–, tenía un sincero cariño por Valencia y creo que hoy, que estoy convencido de que nos está oyendo, estará muy orgullosa de que aquí se la reconozca”. En un acto de homenaje, con motivo de la entrega de la Llave de Oro del Municipalismo concedida por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), Rajoy se volcó sobre ella: “Rita fue, sobre todo, una excelente persona. Una persona buena, decente, trabajadora. Intentaba resolver los problemas de la gente”. El presidente del Gobierno la reivindicó ante las tres hermanas de Barberá, presentes en el acto. “Los que tuvimos la suerte de ser sus amigos, porque fui compañero de partido muchos años, sabemos que es una de las grandes personalidades de la política desde la Transición”. Y, a través de su cuenta personal de Twitter, Rajoy afirmó que “añoraba” su “vitalidad, su solvencia y, si me lo permiten, también sus broncas”, volviendo a ensalzarla e indicado que “también se trataba de un homenaje para las víctimas el terrorismo”, como si su muerte hubiera sido provocada por los terroristas.
Rajoy a Camps: “Siempre estaré detrás, delante de ti o a un lado”.
En 2008, Mariano Rajoy mentaba a Carlos
Fabra, como “un ciudadano y político ejemplar”. Sin embargo, el entonces presidente
de la Diputación de Castellón ya había sido imputado por varios delitos contra
la Administración y la Hacienda pública. En 2013, fue condenado a cuatro años
de cárcel por defraudar 700.000 euros a Hacienda y, en 2014, ingresó en
prisión, en el centro penitenciario de Aranjuez, en Madrid. El 18 de abril de
2016, pasaba a tercer grado por disposición judicial. Al igual que en el caso
de Jaume Matasy el de Paco Camps, ex presidentes de Baleares y de la
Generalitat Valenciana, Rajoy también lo puso como “ejemplo de buena gestión y
de honradez”. A Francisco Camps le
dedicó esa frase: “Siempre estaré detrás de ti, o delante, o a un lado. Me es
igual”. La justicia le absolvió del caso de los trajes, pero la causa por el
pufo de la Fórmula 1 aún le espera. El caso está bloqueado por la falta de
medios de la justicia. Sobre Bárcenas y Galeote, Rajoy aseguró, con guiño
involuntario incluido: “Nadie podrá probar que no son inocentes”. Y acompañó al
primero con el famosos SMS “Luis sé fuerte”.
Sede
de RTVE.
A lo largo de más de seis años de Gobierno, Mariano Rajoy ha
convertido los telediarios en una extensión de su oficina de comunicación. Los
consejos de informativos de radio, televisión denunciaron en multitud de
ocasiones la manipulación, malas prácticas y sectarismos de los responsables de
los Servicios Informativos de la Corporación pública. La palma, sin embargo, se
la lleva TVE, una televisión que Rajoy dijo querer convertir en la BBC. Más de
tres meses después de que fuera investido presidente del Gobierno, comenzó en
Radiotelevisión Española una feroz criba. Su Ley de Financiación tenía
carencias que comprometían su viabilidad, su Consejo de Administración debía
ser renovado, cuatro de sus nueve miembros llevaban 50 meses en funciones; y
sus telediarios seguían estando en el ojo del huracán por la forma de abordar
determinados temas relacionados con la corrupción o con el Partido Popular. Durante
las últimas décadas fueron frecuentes los ascensos o destituciones por razones
más allá de lo estrictamente profesional. En este sentido, el Consejo de Informativos
de TVE denuncia que, desde 2012, se haya sustituido paulatinamente a los
redactores más veteranos de los Servicios Informativos por “otros más afines
(…), procedentes de medios de comunicación con un marcado sesgo
progubernamental”, como Telemadrid, 13TV o Intereconomía. Según sus cálculos,
de los 138 periodistas que formaban parte de la redacción central de los
telediarios en 2012, un total de 88
cambiaron de destino y dos de cada tres fueron movidos de su puesto, “en
muchos casos, de manera forzosa”. El pasado noviembre, seis de los ocho
periodistas de la sección de Economía del Telediario enviaron un comunicado al
director de Informativos, José Antonio Álvarez Gundín, en el que denunciaban que
sus superiores les impidan tratar los temas “sensibles para el Gobierno”. Un
total de 45 de los 47 periodistas que tenían algún grado de responsabilidad en
los telediarios de hace cinco años –editores, jefes de área y adjuntos- “fueron
depurados”, según denuncia el Consejo de Informativos. Asimismo, el 50% de los
redactores con mando en plaza en Torrespaña eran, gracias a las orientaciones
del Gobierno, “ajenos a TVE o sin
experiencia anterior en televisión”. “En estos casos, la ideología primó sobre
los méritos profesionales y el resultado son unos telediarios tendenciosos,
sesgados y desequilibrados”.
Los
miembros de los Consejos de Informativos posan con los diputados de todos los
partidos menos con los del PP.
Esta semana, los representantes de los Consejos de Informativos de
RTVE entregaron en el Congreso 2.225 firmas para exigir a los partidos un
“consenso” que sirva para reformar la radio y la televisión públicas. Y
recordaron y denunciaron la “limpia” que
realizaran en Torrespaña los actuales directivos de los informativos,
siendo depurados “el 95% de los
responsables editoriales”. Los trabajadores de la Corporación Pública, exigen
“un sistema que garantice la independencia de sus profesionales, defendiéndoles
de decisiones discrecionales que hoy siguen relegando a muchos de ellos por
criterios ideológicos, a pesar de su experiencia y saber hacer”. Asimismo, el
texto señala que “recuperar una radiotelevisión pública plural, imparcial,
defensora de los valores constitucionales es hoy más que nunca una cuestión de
higiene democrática”. 'Público' ofrecía el 15 de febrero un resumen de los
casos de manipulación, censura o malas prácticas más sonados desde 2011. Y el
pasado jueves, en el Congreso, miembros de los Consejos de Informativos del
ente público recordaron sus reivindicaciones con el objetivo de lograr que RTVE
no sea utilizada “como instrumento de propaganda partidista o gubernamental”,
algo que ocurrió en varios momentos desde la Transición. Se trata de la mayor
firma colectiva en la historia de RTVE, según
explicó el presidente del Consejo de TVE, Alejandro Caballero. Los
trabajadores estuvieron acompañados en la puerta de la Cámara Baja por
representantes de PSOE, Unidos Podemos, Ciudadanos, Compromís, PdCat, ERC y PNV
que exigieron un consenso amplio entre los partidos para la reforma de la radio
y la televisión pública. Y pidieron al PP que hiciese un esfuerzo para entrar
en el acuerdo previo que existe entre los demás partidos. “Le pedimos de
corazón que se sume porque creemos que la independencia de la Corporación RTVE
se basa en que no sea de nadie y que sea de todos al mismo tiempo. No nos vale
un frente anti-PP”, aseguró Caballero, quien señaló que la recogida de firmas
se había planteado como un “empujoncito amable” para que los políticos no se
olviden de esta cuestión.
“El PP, un mar en calma”, titula
Manuel Jabois en El País del 11 de febrero, en el que responde: ¿Qué ha pasado
para que este fin de semana tres hombres millonarios gracias al PP se vayan a
la cárcel y el partido viva su mejor momento?”. “Durante la intervención de
Mariano Rajoy en la Caja Mágica –escribe el periodista–, se proyectó detrás de
él un mar en calma que adormecía plácidamente al espectador: de eso se trata
siempre Rajoy, es como un orfidal de derechas. Al espectador podría
sorprenderle en un primer momento, como cuando la semana pasada se anunció un
fuerte oleaje en Ourense. Pero aquella maniobra era la metáfora de lo que ha
trasladado el PP este fin de semana: una ridícula cantidad de agua por la que
España navega en paz como un barco fantasma. ¿Qué ha pasado entonces para que
en el mismo fin de semana tres hombres millonarios gracias al PP se vayan trece
años a la cárcel y el partido viva su mejor momento? (…) En ese azul en calma a
la espalda de Rajoy se asoman hilillos de normalidad, la paciencia y la rutina
a la que aspira Rajoy y su equipo en el peor momento de la oposición. Una
normalidad ajena a una vida política paralela que transcurre en el juzgado y
que empieza a cuantificar los años de cárcel de los escándalos del PP. Que en
Vistalegre el interés estuviese en Iglesias y Errejón y que en el PSOE se hable
de Sánchez, Patxi y Susana es el mejor ejemplo de la fértil teoría política de
Mariano Rajoy: si quieres ganar espera a que pierdan los demás. Y como todo
congreso de un partido en el poder degenera en exaltación de figuras y culto a
los chicos populares, la Caja Mágica parecía la zona mixta del Bernabéu más que
un lugar en el que decidir un rumbo ideológico. Fue una especie de safari del
selfie en el que los compromisarios cazaban Marotos y Levys como si fuesen
pokémons. Si en 2004, en 2008 y en 2015, después de los recortes y los
impuestos, le dicen a Rajoy que nunca estaría más cómodo en el poder, no se lo
creería. Traer el mar a Madrid en el éxtasis de su imperio fue como adoptar un
tigre”.
“El PP cree que su grave problema
con la corrupción, que tanto daño electoral le ha causado y que acumula estos
días varios casos en su fase judicial final, es una rémora de unos cuantos
golfos del pasado. La secretaria general del PP, Dolores de Cospedal, intentó el
viernes, 10 de los corrientes, exorcizar en la inauguración del 18 Congreso
Nacional del partido esos fantasmas, admitiendo el fallo de tardar mucho en
reaccionar, sobre todo con el extesorero, Luis Bárcenas. ‘Nos parecía imposible
que nos estuviera ocurriendo’, concedió. El PP presumió de unidad, obvió al
PSOE y arremetió contra ‘los Pimpinela’ de Podemos”. Así lo expresa Javier
Casqueiro en otro artículo del mismo periódico. “Nadie cita el pasado del PP.
Tampoco ninguno de los nueve oradores que protagonizaron esa sesión, con todo
tipo de discursos de balance del último lustro, mencionó siquiera de pasada a
José María Aznar, el expresidente de honor y líder que llevó al PP por primera
vez a La Moncloa y bajo el que cuajó en el partido la banda que favoreció esos
escándalos. La secretaria general del PP, Dolores de Cospedal, que accedió a
ese puesto en 2008 apenas seis meses antes de que estallara Gürtel, lleva
demasiado tiempo callada sobre las consecuencias que ha supuesto la corrupción
para su gestión. Cospedal, que pasará a la historia por el crucigrama
dialéctico del despido en diferido de Bárcenas, con el que nunca congenió,
quiso este viernes reivindicarse y de paso a los dirigentes populares que se
quedaron en la sede central de Génova 13 y no se fueron a saborear los laureles
del Gobierno estos años de sufrimiento…
Francisco
Risueño, afiliado del PP que presentó la enmienda anti-Cospedal.
Francisco Risueño, militante conquense del PP y promotor de la enmienda 'anti-Cospedal' en el pasado XVIII Congreso, que no salió adelante por solo 25 votos, anunció que valoraría acudir a los tribunales para denunciar que su partido no le entregó los vídeos de la votación de la propuesta que pretendía limitar la acumulación de cargos entre las filas conservadoras. Risueño solicitó esas imágenes hace pocos días, a través de un burofax, al nuevo coordinador general, Fernando Martínez Maíllo, y a Cristina Cifuentes, como presidenta del Congreso del PP, porque los considera los “máximos responsables” de lo ocurrido. Risueño denunció que, en un plenario “lleno a rebosar”, hubiese sólo 640 votos de los 3.100 compromisarios presentes, y señaló que Martínez Maíllo dijo entonces que “a ojo de la mesa se rechaza la enmienda” para luego añadir “hasta el recuento definitivo” que, según recuerda, se anunció directamente a la prensa. Asimismo, en el burofax pide que se identifique a las personas que realizaron el recuento, lo sumaron y se lo trasladaron a los medios de comunicación, y que se dé a conocer su relación con el Partido Popular. La enmienda, según los datos oficiales, fue rechazada con 328 votos en contra frente a 303 a favor y 8 abstenciones. El texto remitido a la cúpula del PP exige que las grabaciones recogidas en el plenario de la Caja Mágica el viernes por la tarde, mientras Risueño defendía la moción y ésta se votaba, se pongan a disposición de un notario. Además, el militante conquense se ha ofrecido a pagar de su bolsillo al notario porque “en ningún caso” quiere que “esta petición le cueste un céntimo al partido”. Risueño reclama “claridad y transparencia”, y, por ello, quiere que se levante acta notarial a través de los archivos visuales. Unas imágenes que según el propio partido, no existirían.
Javier Casqueiro nos recuerda en
El País: “Cospedal asumió que, cuando aún no habían salido de la tormenta
económica que padeció el país, les cayó encima la corrupción. Fueron casos que
afectaron de forma transversal a nuestra vida pública y, dentro de ella,
también nos afectaron de lleno a nosotros. Y en algún caso tardamos en
reaccionar. Nos parecía sencillamente imposible que eso nos estuviera
ocurriendo a nosotros. Por eso en alguna ocasión no fuimos todo lo ágiles que
la sociedad demandaba”. Cospedal no
pronunció el nombre de Bárcenas, el extesorero que se convirtió en su
particular enemigo interno en los años en los que sintió obligada a convivir
con él. Pero le tuvo todo el rato en mente. Es la posición oficial que mantiene
ahora la dirección del partido con Rajoy a la cabeza: Bárcenas, Correa, Pérez y
hasta Rodrigo Rato son los exponentes de una época enfangada de su historia
pero ya relegada y olvidada”.
El portavoz del PSOE en el
Congreso, Antonio Hernando, criticaba el pasado miércoles la actuación de
Mariano Rajoy en su primera conversación con el presidente de Estados Unidos, Donald
Trump, que, según el socialista, “nos avergüenza”. Hernando preguntó a Rajoy en
la Sesión de Control al Gobierno por el contenido de la conversación que
mantuvo con Trump, que el presidente del Gobierno, según afirmó, centró en su
visión sobre la economía española, el futuro de la Unión Europea, el Brexit y
las relaciones bilaterales, la defensa de la seguridad y la lucha contra el
terrorismo. Hernando reprochó a Rajoy que no trasmitiera a Trump su desacuerdo
con sus medidas migratorias, como sí hicieron otros dirigentes europeos.
Hernando añadió que el presidente del Gobierno “debería estar preocupado por la
ofensa a los derechos humanos” y a “los valores que defendemos”. Manteniendo
silencio sobre la vulneración de derechos humanos de Trump, Rajoy se limitó a
atacar a los socialistas: “La verdad, no me preocupa en exceso su intervención
porque si ustedes estuvieran en el Gobierno habrían hecho exactamente lo
mismo”. El presidente del Gobierno reiteró que España y Estados Unidos son
socios estratégicos, amigos y aliados que comparten valores, intereses,
relaciones comerciales e inversiones, y añadió que quería mantener con Trump
“exactamente las mismas relaciones” que ha tenido con su antecesor, Barack
Obama. “Siempre –añadió Rajoy– habrá cuestiones en las que discrepar, pero en
las relaciones internacionales conviene incidir más en lo que se está de
acuerdo, máxima que practico con el presidente de Estados Unidos y con el resto
de la totalidad de presidentes de Gobierno y jefes de Estado”.
Entre las fotomontajes de esta
semana la de El Jueves, en la que Rajoy puso la mano en el fuego por alguien
del PP... y se quemó. Otras: España no es país para viejos, Aznar y González,
juntos para hablarnos de los derechos humanos en Venezuela y defender los derechos
que no defienden en su propio país, “Hola Pablo, ven a jugar con nosotras” (“@
Robotronka), Rajoy y la secretaria general, Rajoy contra Podemos, La “convincente”
declaración de la Infanta: 189 “no lo sé”, 59 “no lo recuerdo” y 58 “lo
desconozco”, Gobierno de incompetentes, La justicia es igual para todos
El humor en la prensa de esta semana: Manel Fontedevila, Peridis,
Forges, El Roto, J. R. Mora, Vergara, Pat…
Pep Roig, desde Mallorca: Tal como no son, Temporada de
rebajas, Arriba/abajo, Cada loco con su neura, Clases y Pobres insolidarios con el Gobierno.
Dani Mateo sobre los lapsus de Rajoy laSexta
Rajoy a Rus: Te quiero, coño 8 junio 2007 MALDITA HEMEROTECA
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